A lo largo de la historia, la preocupación por el desarrollo económico ha sido

una constante para los economistas y la sociedad en general, pero, no es hasta el final de
la Segunda Guerra Mundial cuando surge la teoría del desarrollo como tal. La
influencia más significativa sobre la economía del desarrollo procede, sin
duda, de la teoría del crecimiento económico, aunque se debe reconocer
que el crecimiento económico es un elemento necesario, pero no suficiente
del proceso de desarrollo debido a que éste es un proceso multidisciplinar,
que traspasa la esfera económica, integrando las dimensiones sociales, cultural
ambiental y política, entre otras. En este orden de ideas, las teorías de dependencia
económica y términos como desarrollo, subdesarrollo, crecimiento y progreso son
comunes en la jerga económica y son la esencia del entramado financiero y económico
de cada nación que se desarrollará en el presente escrito.
La Dependencia económica plantea que existe un grupo de países que
representan el eje central de la actividad financiera que sustentan los monopolios
comerciales, el papel de productores-exportadores de materia prima y la participación
directa en acuerdos económicos y financieros internacionales que se traducen en
aumentos salariales y de precios en detrimento de los países no desarrollados en los que
disminuyen los precios y sus importaciones tienden a aumentar más rápidamente que
sus exportaciones.
Por otra parte, hablar de crecimiento económico no es necesariamente sinónimo
de progreso. Para alcanzar el progreso social verdadero, la sociedad debe evolucionar
hacia escenarios ideales que repercutan positivamente en el bienestar de los miembros o
ciudadanos de cada grupo social. El progreso solo podemos observarlo cuando este se
integra a distintos elementos vinculados con el estilo de vida. La nutrición, la
formación, el acceso a la vivienda, la seguridad, la meta ecológica de la sostenibilidad,
asistencia médica, inclusión, tolerancia y disponer de un entorno para incrementar los
niveles de felicidad y bienestar de los protagonistas.
En las teorías de dependencia, el crecimiento económico esta supeditado a las
políticas generadas por los países desarrollados. El origen de esta creencia se remonta a
los años 60´s cuando se intentaba reducir la brecha de las desigualdades entre los países
desarrollados y subdesarrollados y en definitiva perdió terreno frente al ingreso del
capital extranjero y la dependencia de los países latinoamericanos a estos capitales cada
vez más grandes. En los años 90´s plantearon nuevos enfoques como una manera de
independizarse de las políticas financieras de los países desarrollados. Así fue como
empezó a tomar fuerza la regionalización de la economía entre los países del sur y la
puesta en marcha de acuerdos comerciales entre sus naciones, marcándose una
diferencia enorme entre las teorías de dependencia de los años 60,70 y 80 versus los
años 90 en adelante.
En definitiva, el crecimiento económico planteado través de las teorías de
dependencia nos revela como los países subdesarrollados dependían de las políticas
económicas de los países desarrollados y sus enormes capitales de inversión creando
una suerte de vinculo que tendría como resultado el fortalecimiento de los monopolios
comerciales de estos segundos en detrimento del progreso social de las naciones
subdesarrolladas.
Bibliografia

1) Beteta H., y Moreno C., El Desarrollo de las Ideas de la Cepal . Economía

UNAM,Vol., 9 N° 27, Sep/Dic., 2012. https:/ www.scierlo.org.mx.