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Ovejas obedientes

Predicas Biblicas junio 10, 2019 Bosquejos Biblicos Deje un comentario 2,984 Vistas

Bosquejos Biblicos
Bosquejo Bíblico – Base Bíblica: Hebreos 13:17
Introducción
En la iglesia es común que en cada congregación exista un cuerpo pastoral encargado de
acompañar a los creyentes en su transitar hacia la madurez espiritual.
Los pastores, son las personas colocadas en esta tierra con la finalidad de servir de guía, de
mentor, de ayuda, y de compañía en el caminar de los creyentes en el trayecto que Dios ha
diseñado para ellos.
En algunos casos puede existir un único pastor, en otros hay una pareja pastoral, en otros hay
un cuerpo de pastores o ancianos, pero lo cierto es que la gran mayoría de las congregaciones
cristianas constan de alguien que ejerce las funciones de un pastor.
El asunto es que en muchos casos, al creyente le cuesta sujetarse a una persona. Algunos son
capaces de aferrarse a versículos fuera de contexto para justificar la idea de la inexistente
necesidad de un pastor para los creyentes. Otras personas, aunque si entienden la función e
importancia de los pastores, no hacen lo necesario para seguir los consejos y principios que
enseñan sus pastores.
Este bosquejo bíblico se titula “Ovejas obedientes”, y es un mensaje basado en Hebreos 13:17,
donde podemos extraer una de las claves más preponderantes en la relación pastor-oveja,
como lo es la obediencia.
Desarrollo
En Hebreos 13 encontramos un título llamado: deberes cristianos. Son algunos deberes que
nosotros, como creyentes en Dios, debemos poner en práctica para poder verdaderamente
agradar a nuestro Señor; pero queremos enfocarnos específicamente, en la base bíblica de
este bosquejo bíblico, porque hace referencia a los pastores.
Como pastor, puedo dar fe de que si hay algo con lo cual luchamos constantemente es con la
obediencia de las ovejas. Generalmente, a las personas adultas no les agrada que se les diga
o aconseje qué hacer en determinadas situaciones, pero lamentablemente después llegan a
donde están los pastores, para ver si estos pueden arreglar esa situación donde ya no saben
qué hacer.
Debido a esto, en este bosquejo bíblico espero explicar las razones por las cuales deberíamos
obedecer a nuestros pastores, y de esa forma desarrollar una mejor relación con ellos,
entendiendo que Dios los colocó en esta tierra con el fin de ayudarnos y guiarnos en Su
Camino.
1. Los pastores velan por nuestras almas
El primer punto de este bosquejo bíblico se refiere al hecho de que deberíamos obedecer a
nuestros pastores porque ellos tienen la tarea de velar por nuestras almas. Ellos son las
personas que Dios designó para cuidarnos, vigilarnos y protegernos; pero muchas veces
nosotros no le hacemos esa tarea fácil.
Sería bueno pensar que los pastores son como unos guardaespaldas. ¿Qué función tiene un
guardaespalda? Proteger la vida de la persona que le contrató.
Pensando en esto: si nosotros contratamos a un guardaespalda para que nos proteja,
¿seríamos nosotros tan poco sabios para hacer lo que el guardaespalda nos dice que puede
poner en peligro nuestra seguridad?
¿Por qué nosotros deberíamos obstaculizar a alguien que nos está cuidando, y quiere lo mejor
para nosotros como lo son nuestros pastores?
Cuando entendemos que los pastores fueron escogidos por Dios para cuidar nuestras almas,
entonces considero que es mucho más fácil seguir sus enseñanzas, sus consejos, y sus
exhortaciones.
2. Los pastores darán cuenta sobre nuestras vidas
El segundo punto de este bosquejo bíblico indica que los pastores darán cuenta a Dios por
nuestras vidas. Cuando alguien acepta el llamado de pastor de una congregación, debe
entender no solo las bendiciones que trae ese ministerio, sino también el compromiso que se
asume.
Un pastor de ovejas debe alimentar a las ovejas, debe buscar un lugar para protegerlas del
clima, y debe cuidarla cuando existan depredadores cerca.
De igual forma, el pastor de la congregación debe alimentar espiritualmente a sus ovejas con la
Palabra de Dios (Mateo 4:4), debe estar pendiente de ella en sus diversas etapas (tanto en las
buenas como en las malas) , y debe velar por sus ovejas cuando el enemigo esté cerca ( 1
Pedro 5:8).
Un análisis muy simplista, y errado, sería justificar nuestra mal proceder por el escaso, o mal
cuidado de nuestros pastores. Recordemos que servimos a un Dios justo, y que así como los
pastores darán cuenta a Dios por nuestras vidas, nosotros también daremos cuenta por
nuestras propias acciones.
3. Los pastores deben ser felices de ser pastores
El tercer y último punto de este bosquejo bíblico es que los pastores deben estar alegres al
cumplir con su función. Los pastores deberían ser felices al velar por nuestras almas, al hacer
su trabajo de la mejor manera y tener presente que rendirán cuenta delante de Dios más
adelante.
El problema es que las ovejas no colaboran con el pastor. ¿Existirán pastores alegres si hay
ovejas desobedientes? ¿Veremos pastores alegres si las ovejas hacen lo contrario a los que 
se les enseña el domingo? ¿Cómo podrán estar alegres los pastores si las iglesias están llenas
de murmuración y chisme?
Con todas estas situaciones con las que tienen que lidiar los pastores, podemos entender que
no sea algo tan divertido ser pastor. Podemos entender que en ocasiones, no hagan las cosas
con alegría aunque esa sea su deber.
Hay encuestas en Estados Unidos que dicen que el pastorado es uno de los oficios y
profesiones más estresantes que existe, junto al de controlador de tráfico aéreo. No es correcto
que el ser pastor de personas creyentes en Dios, sea tan estresante como el controlar el tráfico
de un aeropuerto donde un error puede causar un gran accidente.
Es por ello que nosotros podemos hacer que los pastores puedan disfrutar de su labor al
transformarnos en ovejas obedientes. Si hay algo que da satisfacción a un pastor es ver que
una persona alcanzó el propósito de Dios para su vida al seguir alguno de sus consejos.
Está en nuestras manos hacer que nuestros pastores se conviertan en pastores felices, y no se
quejen delante de Dios por el pueblo que les toco pastorear.
Conclusión
No es para nada provechoso que un pastor se sienta mal al cumplir la misión que Dios le
delegó. No es provechoso ni para él, ni para las personas que pastorea.
"LA SUJECIÓN Y LA OBEDIENCIA"
Texto: hebreos. 13:17

Introducción:
A veces se piensa que la palabra sujeción y obediencia son iguales, pero cada una de
ella tiene su definición y su aplicación de manera diferente.

OBEDECER: El término obediencia (del Lat. ob audire = el que escucha), al igual que
la acción de obedecer, indica el proceso que conduce de la escucha atenta a la
acción, que puede ser puramente pasiva o exterior o, por el contrario, puede provocar
una profunda actitud interna de respuesta. En resumen, obedecer es acatar una orden
dada y realizarla.

SUJECIÓN A LA AUTORIDAD: Es el reconocimiento de la autoridad espiritual que


tienen los que están por encima de nosotros, en este caso el Pastor.

I. PUEDE HABER OBEDIENCIA SIN SUJECIÓN.


Algunas personas pueden acatar una orden dada por un superior, refunfuñando en su
interior y renegando de esa autoridad que le dio la orden. Aunque exteriormente hay
una obediencia, interiormente hay falta de sujeción. Lo contrario a esto, el que es
sujeto es obediente, puesto que el sujeto acepta en su corazón la autoridad del que le
manda.

II. LA SUJECIÓN RECONOCE LA AUTORIDAD.


En el plano espiritual no hay distintivos que muestren los niveles de autoridad que se
tiene, no es como los militares, que tienen insignias que los diferencia los unos de los
otros. En lo espiritual es el reconocimiento y aceptación de la unción de autoridad que
fue depositada en dicha persona que fue colocada en ese cargo. Si Dios lo colocó, lo
aceptamos.

III. LA AUTORIDAD NO DEPENDE DEL TIPO DE PERSONALIDAD.


"Ninguno Tenga en Poco tu Juventud" (1 Timoteo. 4:12)
Por el hecho de que mi jefe inmediato es extrovertido y juguetón, voy a irrespetarlo.
Aunque su forma de ser sea de esa manera, entiendo y reconozco la unción de
autoridad que reposa sobre él, y me sujeto sin vacilar.

Es posible que alguien sea menospreciado en su autoridad por la edad, por el


temperamento, por ser mujer o por su nivel de estudio, aquí el problema no es para el
que es despreciado, en este caso el mal se lo hace el que menosprecia a su jefe
inmediato.
David, Salomón, Timoteo, Josías y José fueron utilizados siendo muy jóvenes, y los de
su época reconocieron la autoridad que había en ellos. De pronto su apariencia no era
tan importante como la obediencia y la sujeción al Señor.

 La obediencia manifiesta nuestro amor al Señor (Juan 14:15)


 La obediencia demuestra nuestra fe y confianza en la palabra de Dios (Romanos
1.5)
 La obediencia significa reconocer el señorío de Cristo sobre nuestra vida (Lucas
6:46)

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