¿Cómo puedo tener una relación más estrecha con Dios? a.

a. "Si me amáis, guardad mis mandamientos" (Juan 14:15).

Desarrollar una relación más estrecha con Dios es una meta admirable
y refleja un corazón verdaderamente renacido, porque sólo aquellos
que están en Cristo desean una relación más cercana con Dios.
También debemos entender que en esta vida nunca seremos tan cerca
de Dios como deberíamos ser o deseamos de ser. La razón de esto es el
pecado persistente en nuestras vidas. Esto no es una deficiencia de
parte de Dios, sino de nosotros; nuestro pecado sigue siendo un
obstáculo para la comunión plena y completa con Dios, que se
realizará una vez que estamos en la gloria.
deseemos una relación más cercana con Dios como el Pablo
(Fil 3:8-9).
Hay cinco cosas básicas para tener una relación más estrecha con Dios.
primero: hacer un hábito de confesar nuestros pecados a Él. 1 Jn
1:9
a. La confesión implica arrepentimiento sincero.
b. Debe hacerse con humildad y quebrantamiento de corazón. Luc
18:13; Sal 51:17.
segundo.
a. Escuchar cuando Dios habla.
b. No es buscar experiencias sobrenaturales sino atentos a la palabra
de Dios (2 Pedro 1:19).
b. El resultado de la obediencia. (Santiago 4:7-8).
c. Obediencia es nuestro "sacrificio vivo" (Rom 12:1).
d. Toda obediencia es nuestra respuesta a la gracia de Dios.
e. No ganamos la salvación a través de nuestra obediencia; por el
contrario, es la manera por la que mostramos nuestro amor y
gratitud hacia Dios.
Así que, a través de la confesión, el estudio bíblico, la oración, la
asistencia regular a la iglesia y la obediencia, podemos desarrollar
una relación más estrecha con Dios.
Parece bastante simple, si no es simplista. Pero considera esto: ¿Cómo
podemos desarrollar una relación más estrecha con otros seres
humanos? Pasamos tiempo con ellos en conversación, abriendo
nuestros corazones a ellos y escuchándolos al mismo tiempo.
Reconocemos cuando hemos hecho mal y buscamos el perdón.
Buscamos tratarlos bien y sacrificamos nuestras propias necesidades
para suplir las suyas. No es realmente tan diferente en nuestra relación
con nuestro Padre Celestial.

tercero. Hablar con Él mediante la oración.

a. Jesús siempre apartó tiempo para hablar con el Padre.
b. La oración es mucho más que simplemente una manera de pedirle
a Dios. Debe ser peticiones, adoración, agradecimiento etc.
c. Para fortalecer nuestras oraciones podemos leer salmos son
verdaderos clamores a Dios.

Lo cuarto. Encontrar un cuerpo de creyentes con quienes podemos

adorar regularmente.
a. Este es un componente tan vital del crecimiento espiritual.
b. Necesitamos preparar nuestras mente y corazones para adorar.
c. Los Salmos también nos apoya para adorar. Sal. 95:1 – 2.

Quinto. Una vida de obediencia.