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Filosofía

Profesora Diana Rivas

DIALOGAMOS SOBRE LA EXISTENCIA A PARTIR


DEL SHOW DE TRUMAN

OBJETIVOS:
-Analizar El mundo en que vivimos desde el diálogo entre ciencia y fe.
-Valorar la historia personal dentro del entorno en donde nos ha tocado vivir.

ARGUMENTO O SINOPSIS:
Truman Burbank es la cara más famosa de América,
pero él no lo sabe: se ha convertido en el protagonista
involuntario de un programa de televisión que lo filma
continuamente las 24 horas del día desde un estudio que para
él es su ciudad.
Pero todo empieza a cambiar cuando Truman quiere hacer
unas vacaciones para ver a una chica que le ha causado
mucha impresión y vive en Fidji. Aquí empieza la auténtica
aventura de este personaje.

CUESTIONARIO PARA RECORDAR LA PELÍCULA:


1. ¿Cómo vive Truman el valor de la amistad?
2. ¿Estarías de acuerdo en que se grabe la vida de las personas sin que éstas lo sepan? ¿Tiene
sentido vivir tu vida sabiendo que está observada por un espectador?
3. ¿Será Dios un “director” en la historia de nuestra vida? Razona la repuesta.

ALGUNA PRECISIÓN:
Todo el film gira en torno a la idea de cómo la televisión puede captar al espectador. Es interesante
ayudarnos en la película para ver el tema de la publicidad, de cómo se puede manipular a las personas
y cómo se pueden vivir sentimientos ficticios. También podemos analizar el tema de la relación entre la
ciencia y la fe a través de la creación, es decir, ¿podemos ver en la vida de Truman la vida del
género humano? ¿Tiene sentido vivir cara al espectador? ¿Será Dios un “director” en la historia
de nuestra vida? ¿Qué mensaje científico sacas de la película? ¿Qué lectura religiosa podemos
destacar?

¿Qué temas nos quiere transmitir la película?


En grupos, lean atentamente cada uno de los temas presentados. Luego deberán seleccionar uno de los
siguientes temas y crear un afiche que represente su opinión. El afiche deberá incluir diferentes
perspectivas sobre su opinión y representaciones gráficas de partes de la película.

¿Vivimos en un mundo real?


Truman es un hombre sencillo e ingenuo cuya vida está siendo filmada y emitida como “el reality show
más ambicioso de la historia”. El tema central plantea la existencia dos mundos y de que vivimos en el
mundo artificial, reflexionando sobre: la falsedad del mundo. El primero en plantearla fue probablemente
Platón a través del mito de la caverna. Como las personas que viven maniatadas dentro de la caverna
platónica, Truman vive en una ciudad “en la que nunca pasa nada”, sin ser consciente durante mucho
tiempo de que su vida cotidiana, lo que ve (las “sombras” a las que aludía Platón), no es más que una
representación distorsionada de la realidad.
El poder y la ignorancia
La potente carga filosófica que esconde el guion de “El show de Truman” permite plantear su análisis
también en términos de lucha de clases. La aceptación de la existencia de dos mundos implica la
aceptación de la existencia de dos tipos de personas: las que saben la verdad y las que viven en la
ignorancia. Tiene que haber una clase dominante y una dominada para que se mantenga el engaño del
mundo falso, teniendo la segunda gran parte de culpa al mostrarse incapaz de cuestionar el sistema
establecido y alcanzar la verdad. En el caso de Truman, tras treinta años viviendo en la ignorancia, la
caída de uno de los focos que simulan el firmamento será la primera de una perturbadora serie de
circunstancias que hará que el mundo perfecto de dominadores y dominados comience a tambalearse.

De la caverna al mundo real


Tras la caída del foco, Truman entra en un proceso de cuestionamiento de la realidad y, a partir de ese
momento, es un claro reflejo de los planteamientos platónicos según los cuales para salir de la caverna
hace falta fuerza física y fuerza mental. Truman consigue burlar los controles, se embarca a través del
mar falso para huir de la ciudad y ni siquiera la tormenta artificial creada desde el control del programa
evita que llegue al borde de la cúpula que cubre Seahaven, el famoso muro azul celeste. Cuando
Truman está a punto de atravesar la puerta de salida, una potente voz se filtra entre las nubes y se
presenta como “el Creador del programa de televisión que llena de esperanza y felicidad a millones de
personas”, en una de las escenas de mayor carga simbólica y filosófica de la película.

La muerte del padre


Christoph se presenta ante nuestro protagonista como “el Creador” y, en efecto, lo es en un doble
sentido. En primer lugar, es el padre de Truman, que siempre había creído que éste había muerto
ahogado. Cuando Truman comienza a cuestionar toda su realidad, Christof “resucita” al padre en un
intento desesperado por tranquilizar a su “hijo”. Pero el verdadero padre adoptivo de Truman es Christof,
que afirma: “Te conozco mejor que tú mismo, llevo observándote toda tu vida. No puedes irte, Truman, tu
sitio está aquí conmigo”. En ese instante Christof se convierte en la figura de autoridad que Truman tiene
que destruir, esto es, siguiendo las teorías freudianas tiene que matar simbólicamente a su padre para
desarrollar su autonomía y su libertad. La respuesta de Truman es clave: ¿Y quién soy yo?

“Dios ha muerto”
Y, en segundo lugar, Christof, como productor ejecutivo de “El show de Truman”, es también el Creador,
el único padre-Dios de ese mundo artificial llamado Seahaven. Truman, inmerso ya en un proceso
imparable de búsqueda de sí mismo, da la espalda a un Creador que hasta entonces había sido
omnipotente, renunciando así al destino que le tenía reservado y llevando a cabo otra muerte simbólica
que, en esta ocasión, le pone en relación directa con la filosofía de Nietzsche: la del Dios patriarcal.
Christof-Dios ha muerto porque ya no puede ejercer influencia sobre Truman, una situación adelantada
en la escena de la tormenta artificial, a la que Christof se ve obligado a renunciar a la vista de la voluntad
inquebrantable de Tuman, que ha combinado magistralmente fuerza física y fuerza mental y ha llegado a
la salida de la caverna.

La fuerza del Eros1


El amor es el elemento catalizador de la experiencia vital de Truman en su particular caverna. El primer
acto de rebeldía del protagonista, ejercido de manera completamente inconsciente, es su
enamoramiento de Silvia, un hecho que Christof no había planificado y que le obliga a retirar
precipitadamente a la joven de la serie. Pero a pesar de su siguiente relación -ésta sí, controlada por el
productor ejecutivo hasta el último detalle-, Truman nunca olvida realmente a Silvia y serán sus
sentimientos hacia ella, el deseo de reencontrarse con su único amor verdadero (que está esperándole
en el mundo “real”) lo que guiará su salida de la caverna. Un hecho que no hace sino evidenciar lo que
muchos especialistas en el pensamiento de Platón sostienen: que es el Eros lo que realmente libera al
esclavo de la caverna.

1
Eros (Cupido entre los romanos), que simboliza el deseo sensual, es el dios griego responsable de la atracción sexual, el amor
y el sexo, venerado también como un dios de la fertilidad.

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