“CONSECUENCIAS DE LA II GUERRA MUNDIAL:

Impacto político y territorial a corto y largo plazo. Pacificación.

Impacto económico, social y demográfico.
Cambios en el papel y el estatus de las mujeres.”

Repercusiones políticas. Impacto económico, social y demográfico de la segunda

guerra mundial
CONTEXTUALIZACIÓN
El diseño del nuevo orden mundial Los tratados de paz
Tras la capitulación sin condiciones del 7 y 8 de mayo y la ocupación de su
territorio Alemania sufrió duramente las consecuencias de la guerra de
destrucción iniciada por Hitler: fuertes pérdidas territoriales, pago de
indemnizaciones... Sin embargo, como veremos más adelante, el estallido de
la guerra fría llevó a unos resultados no previstos por los Aliados vencedores.
La partición del país en dos estados, la RFA y la RDA, enfrentados y alineados
con las dos superpotencias enfrentadas tras la segunda guerra mundial impidió
la firma de un tratado de paz entre los vencedores y Alemania. Habrá que esperar
a la firma ¡el 12 de septiembre de 1990! del llamado Tratado 4+2 entre las cuatro
potencias vencedoras (URSS, EE.UU., Gran Bretaña y Francia) y la República
Federal y la República Democrática de Alemania. El tratado que otorgó la plena
independencia a una Alemania reunificado fue firmado 45 años después de la
derrota.

FUENTE A: ¿Qué cambios políticos y territoriales se produjeron de la Segunda

Guerra Mundial?
Conferencias de paz y acuerdos

Mike wells (2011). Causes, practices and effects of wars. Series editor: Allan Todd.
Cambridge University Press.

Durante la Primera Guerra Mundial hubo pocas conferencias políticas, y una gran
conferencia de paz y se acordó un acuerdo después de la guerra. Aunque las potencias
Aliadas de la Segunda Guerra Mundial, sí lo hicieron, y en gran medida habían dado forma
a la Europa de la posguerra antes de que el conflicto terminara.
Las principales conferencias tuvieron lugar en Yalta y Potsdam en 1945. Alemania estuvo
dividida durante más de 40 años y los cambios territoriales en el Este han permanecido.
Los aliados crearon cuatro "zonas de ocupación" para Francia, Gran Bretaña, EE.UU. y la
URSS, con Berlín l-en la zona soviética- aún más dividida. Este complicado acuerdo fue
peor que el Corredor Polaco de antes de la guerra, pero duró más tiempo.
A medida que las relaciones entre las potencias vencedoras empeoraban, las divisiones se
hacían más claras. En 1949, Alemania Occidental (la República Federal Alemana) surgió
como un país separado de las zonas francesa, británica y estadounidense, e incorporó a
Berlín Occidental, aunque estaba situada en lo más profundo de lo que se convirtió en
Alemania Oriental (la República Popular Alemana). Así, la derrota de 1945 tuvo un efecto
más drástico y duradero en Alemania que la de 1918 en términos de divisiones territoriales.
También Austria quedó dividida, pero Rusia se retiró en 1955 y recuperó su independencia.
No se intentó repetir la construcción nacional que había caracterizado el Tratado de
Versalles.
Los ejércitos rusos ocuparon Europa del Este y los países se convirtieron en populares", lo
que significó la dominación de la URSS y de los estados comunistas de partido único.
Letonia, Lituania y Estonia siguieron siendo repúblicas rusas. Rusia ganó parte de Prusia
Oriental. Las fronteras polacas se desplazaron hacia el oeste, pero Polonia, al igual que
Rumanía, Bulgaria, Hungría y, a partir de 1948, Checoslovaquia, pasaron a formar parte de
un imperio soviético. Albania y Yugoslavia, aunque comunistas, no cayeron directamente
bajo control ruso. Finlandia y Grecia escaparon.
Japón perdió sus ganancias territoriales de preguerra y de guerra y fue ocupado por las
tropas de EE.UU.
Al emperador se le permitió permanecer como jefe de estado, pero fue declarado que era
humano y no divino. Corea obtuvo su independencia, aunque dividida entre
un Norte comunista y un Sur no comunista. Manchuria volvió a China después de que una
invasión rusa la despojara de sus recursos. La URSS aceptó las reparaciones de sus
enemigos conquistados; Occidente no lo hizo y, de hecho, por razones humanitarias y
políticas inyectó dinero y suministros a Alemania y Japón.
No hubo ninguna conferencia de paz formal prolongada después de la guerra, ya que la
Segunda Guerra Mundial se convirtió rápidamente en la Guerra Fría.
El fin de la guerra en China significó que tanto los comunistas como los nacionalistas, unidos
para derrotar a Japón, pudieron reanudar la guerra civil china que había estado en marcha
desde 1927 (véase el capítulo 5).

FUENTE B:

Balances de la guerra
Delgado de Cantú, M. (2010). Historia Universal. México: Pearson.

Pérdidas humanas
Las pérdidas humanas provocadas por la Segunda Guerra Mundial cuatro veces mayor que el
ocasionado por la guerra de 1914-1918. Esta diferencia se explica por la considerable extensión del
teatro de operaciones bélicas y por la implicación directa de toda la población en la guerra como
efecto de los bombardeos aéreos. Todo ello agravado porque algunos países, Japón y la URSS
principalmente, no respetaron la Convención de Ginebra de 1864 sobre prisioneros de guerra, y por
las políticas racistas de exterminio sistemático llevadas a cabo por el nazismo. A estas cifras se
deben añadir 35 millones de heridos y tres millones de desaparecidos, así como las víctimas de la
subalimentación, que sufrieron enfermedades como la tuberculosis y el raquitismo. Además, esa
hecatombe demográfica tendría consecuencias a largo plazo; en las pirámides de edades
correspondientes a países como la Unión Soviética, Polonia, Yugoslavia y Alemania, se puede
observar un desequilibrio en los indicadores de edad y sexo que representa un notable descenso
de la población activa, esto afectó de manera inmediata la reconstrucción de esos países y años
después impactaría sobre el comportamiento del índice de natalidad. Al final de la guerra, en Europa
se planteó, además, el problema de las personas desplazadas por causa de las vicisitudes del
conflicto. Millones de hombres y mujeres vagaban de un punto a otro del continente: ex prisioneros
de los campos de concentración nazis que trataban de volver a sus respectivos países, ex
colaboracionistas que esperaban escapar a las represalias y los castigos y, sobre todo, millones de
personas que abandonaban los territorios incorporados por los vencedores. Unos 10 millones de
alemanes sin recursos expulsados de Polonia, Checoslovaquia y Hungría fueron transportados a
una Alemania que había perdido 25% de su territorio, mientras que cerca de dos millones de checos
y eslovacos ocupaban los territorios abandonados por los alemanes. Prácticamente, sólo en Austria
fueron dejados en sus hogares los descendientes de colonos alemanes. En la región del Báltico la
suerte más cruel la sufrieron los letones, estonios y lituanos quienes, deportados a campos de
trabajo alemanes durante la guerra, al terminar ésta fueron llevados a Rusia al tiempo que su
territorio era ocupado por colonos rusos. Siglos de lentos procesos demográficos fueron barridos
en pocos meses. El mapa etnográfico de Europa Central y Oriental, fijado desde la Edad Media, fue
radicalmente remodelado.

Pérdidas materiales y financieras.

El panorama de las destrucciones materiales era también desolador, pues numerosas viviendas y
otras construcciones fueron destruidas. Las comunicaciones —puertos, ferrocarriles, puentes y
viaductos— y las grandes ciudades sufrieron los daños mayores. Alemania perdió 20% de sus
viviendas y Gran Bretaña 9% a causa de los bombardeos que afectaron también numerosas
fábricas. En Francia, Italia y Alemania, aparte de ciertos sectores como el de la siderurgia, las
instalaciones industriales sufrieron menores daños; en las naciones de tradición industrial, lo que
impidió la recuperación fue la falta de materias primas y recursos financieros. Pero fue en Europa
Oriental donde las destrucciones alcanzaron mayor magnitud: en la Unión Soviética, 17 000
ciudades y 70 000 pueblos fueron arrasados y, en conjunto, este país perdió más de 20% de su
potencial industrial y lamentó daños incalculables en la agricultura y la ganadería. Polonia quedó
arruinada, casi no quedó edificio en pie, perdió más de un tercio de su capacidad de producción y
se encontró al borde de la hambruna. En Yugoslavia, pueblos y campos quedaron destruidos y el
país perdió aproximadamente 38% de su capacidad productiva.
En el aspecto financiero, los gastos de guerra y las muy pesadas exacciones monetarias
impuestas por los alemanes en los países ocupados, particularmente en Francia, agravaron el déficit
presupuestario y desencadenaron la inflación. Además, al finalizar la guerra, apareció una gran
masa de billetes atesorados durante el conflicto, cuya puesta en circulación constituyó otro factor
inflacionario. Todo esto hacía inevitables las devaluaciones de las monedas, sobre todo en los
países menos desarrollados como Hungría y Grecia. La Segunda Guerra Mundial tuvo en algunos
países, junto a los efectos catastróficos, algunas consecuencias de carácter favorable. La Unión
Soviética es el mejor ejemplo: aunque sufrió pérdidas humanas y materiales en mayor medida que
los demás países europeos, al final pudo ampliar notablemente su territorio. Además, ante la
invasión alemana, el traslado de las fábricas soviéticas de la zona europea a las regiones situadas
al este de los montes Urales sentó la primera piedra del desarrollo industrial del Asia soviética.
Asimismo, la ocupación militar y el traslado de fábricas de Alemania y de otros países después de
1945, significaron para la URSS una oportunidad única de establecer un control político y económico
sobre Europa Oriental y sudoriental, mismo que constituyó la base de su política hegemónica frente
a Occidente. Otros países que salieron fortalecidos económicamente de la guerra fueron Estados
Unidos y los que pudieron mantener su neutralidad, como Suecia y Suiza.
(Delgado, 2010, pag.44)

FUENTE C:
Consecuencias de la Guerra
Charles Messenger,(2012) La segunda guerra mundial. Los conflictos del siglo xx.

La Segunda Guerra Mundial revelo, mucho más que la Primera, los hombres de la Guerra Total
y los civiles se vieron una y otra vez en primera línea de la batalla, dejo a Europa y a muchas
otras partes del mundo, material y económicamente agotadas y mal equipadas para hacer frente
a los problemas del mundo de postguerra. El costo humano fue catastrófico y los sobrevivientes
– Entre ellos millones de refugiados y familias despedazadas – se vieron ante el problema de la
reconstrucción en medio del caos económico, escasez de alimentos, mercados negros y
ciudades en ruinas. Se necesitaban nuevos ordenamientos políticos para restablecer el orden en
los países derrotados y en los antes ocupados. Al mismo tiempo, los antiguos imperios coloniales
se habían debilitado fatalmente, y la confrontación entre los Estados Unidos y la Unión Soviética
encerraba la amenaza de futuras pesadillas. En 1945 las esperanzas de que el mundo pudiera
resolver sus problemas actuales y futuros sin recurrir a la guerra se centraban en las Naciones
Unidas.
Durante los seis años de la Segunda Guerra Mundial, perdieron la vida no menos de 50 millones
de personas. En términos de vidas humanas, fue la guerra más costosa de la historia. Y, sin
embargo, de esa cifra total solo 10 millones era combatientes, casi el mismo número de la primera
guerra mundial. La Unión Soviética sufrió las mayores bajas, con 20 millones de muertos, pero
Polonia, que fue donde empezó la guerra, fue la más duramente castigada, pues el 22% de su
población fue destruida. La elevada proporción de las bajas civiles significaba que la guerra era
realmente total, y hubo pocas partes del mundo donde no se sintieran sus efectos [...]
El horror de la guerra se reflejó en ricos y pobres, echando abajo las barreras clasistas en las
democracias de Europa Occidental. Esto se vio en la elección de gobiernos socialistas
inmediatamente después del conflicto.
Los Estados Unidos no sufrieron ataques directos. Su población civil no sufrió lo mismo que otros
países. Siendo autosuficientes en producción de alimentes, ni los canadienses ni los
norteamericanos se vieron sometidos a tan rígidos racionamientos como tuvieron que sufrir los
pueblos de Europa.
(Messenger, Pp,44-45)

Cambios en el papel y el estatus de las mujeres

FUENTE D:
Las Mujeres en la Guerra
Fiorani, F. (2016). Segunda Guerra Mundial. Madrid: Lexus.

Las mujeres siempre han estado implicadas en las guerras, aunque habitualmente en la sombre.
Sólo desde el siglo XX, en los conflictos que han golpeado a la población civil y han alterado. La
valoración sobre el impacto en el proceso de emancipación femenina y la promoción de la igualdad
de sexos está en el centro de un vivo debate historiográfico. Aunque sólo se consideran dos
aspectos, el trabajo y la participación directa en las operaciones bélicas, la atención se dirige a los
dos países en los que la movilización femenina fue más amplia: la Unión Soviética y Gran Bretaña.
En el primero, en 1942, se establece que todas las mujeres entre 16 y 45 años pueden ser
reclutadas para servicios bélicos, pudiendo ser empleados en los servicios más diversos. Su
participación se produce en condiciones de igualdad con los hombres, y, en ciertos casos, se
extiende a las operaciones de guerra en el campo de batalla, llevando aviones y carros de combate,
o también en los buques de guerra. En Rusia prestaron servicio militar 800.000 mujeres. En cuanto
al servicio civil, en la última fase de la guerra, la fuerza de trabajo femenino representa el 55% de
la totalidad empleada. En Gran Bretaña, 1941, las mujeres solteras entre 20 y 30 años están sujetas
al reclutamiento, tanto como auxiliares en las fuerzas militares (enfermeras, empleadas,
conductoras, etc.) como en la industria. 1942 y 1945 se reclutan 125.000, mientras al mismo tiempo
se amplía la franja de edad para la movilización de sectores productivos, empleando también a
madres de familia. En 1939, la Women´s Auxiliary Aier Force (180.000 miembros en 1843) ayuda a
la aviación inglesa, sobre todo en servicio de tierra (torres de control, servicio meteorológico,
preparación del material, etc.) Una formación femenina análoga, la Women´n Royal Navy Service
(70. 000 miembros en 1944) presta ayuda a la marina. En la defensa área, las mujeres dirigen
puestos de radar en las costas inglesas. 1943, más de un millón participa en el servicio voluntario
de defensa civil ( Women´s Voluntary Services For Civil Defense). Las mujeres destacan en la
guerra secreta y en las actividades de Departamento de inteligencia, ya sea en grupos de
codificación o como agentes especiales. En Estados Unidos, superando prejuicios y recelos, las
mujeres desarrollan una labor importante en las fuerzas armadas y en la industria. Cuerpos
auxiliares sirven al ejército o la marina. La experiencia adquirida en los años de la guerra será una
de las bases para la evolución del papel femenino en la sociedad norteamericana, modelo para
muchas mujeres de otros países occidentales. En Alemania, la ideología, que impone a la mujer un
papel familiar, limita su presencia en determinados sectores. El reclutamiento de las mujeres entre
17 y 45 años para la producción bélica (1943) no se hace de forma sistemática. Sin embargo, ya en
1939, la fuerza de trabajo femenino es de un 37% y, a finales de 1943, casi se ha duplicado en la
industria pesada. En Japón, el general Tojo, jefe del gobierno, niega a introducir el servicio militar
femenino, para no poner en peligro el sistema familiar vigente. Un papel a veces más amplio es el
que desarrollan las mujeres, de todas las edades, en el ámbito de los movimientos de resistencia al
fascismo y nazismo. Aquí las mujeres llevan a cabo labores que aseguran la eficacia de los distintos
movimientos, no sólo la construcción y mantenimiento de redes de apoyo, información y asistencia
a los refugiados y a las unidades partisanas, sino también en primera línea, con tareas específicas
militares. (p.197)

FUENTE E: El trabajo femenino en tiempos de Guerra

Carlota Coronado Ruiz (2013). Mujeres en guerra: la imagen de la mujer italiana en los
noticiarios Luce durante la Segunda Guerra Mundial (1940-1945)

Las mujeres, además de trabajar en sectores en los que ya estaban presentes antes de la guerra,
como la industria o la agricultura, tienen que desempeñar trabajos tradicionalmente masculinos,
como cartero, conductor de tranvía o revisor ferroviario. En el noticiario Luce se reflejan estos dos
tipos de trabajo: por un lado, hay una serie de noticias sobre industria o agricultura en tiempos de
guerra, y por otro, noticias sobre los nuevos trabajos de las italianas. En el primer grupo de noticias
la intención es exaltar la labor de las distintas industrias bélicas, desde la armamentística hasta la
textil: en tiempo de guerra todas ponen su grano de arena. Los obreros, hombres y mujeres, son
también fundamentales, y así lo señala el narrador de Luce:
A la espalda de nuestros combatientes hay otro ejército, silencioso, trabajador, desconocido para la
mayor parte del público, que trabaja para preparar todo lo que se necesita para que un ejército esté
modernamente equipado (Giornale Luce C0058).

Aunque el narrador no lo señale, este “ejército silencioso” está formado en su mayoría por mujeres,
y así lo muestran las imágenes. Así pues, aunque no haya una mención explícita por parte del
narrador, en los planos que captan los operadores de Luce se pone de manifiesto que la mayor
parte de la mano de obra de las fábricas eran mujeres. En ninguna de estas noticias se resalta la
aportación de las trabajadoras a la guerra. En realidad, como se dijo, estas mujeres realizaban tales
trabajos mucho antes de la guerra: en la industria textil, más de 50% de la mano de obra era
femenina. Si antes de la guerra hacían vestidos, ahora hacen uniformes para soldados o
paracaídas. Antes trabajaban para la autarquía y contra las inicuas sanciones, y ahora “para
nuestras fuerzas armadas”
(Coronado, 2013, Pp. 188 -189)

FUENTE F:
Las mujeres después de la segunda guerra mundial
Wells, M. (2011). Causes, Practices And Effects Of Wars. Reino Unido: Cambridge.

Había una tensión entre la mayor independencia de que la guerra ofrece a muchas mujeres y el
deseo, después de 1945, para volver a lo 'normal'. La guerra había visto más mujeres en el lugar
de trabajo que nunca. El servicio doméstico había disminuido y la gama de trabajos realizados por
mujeres aumentó. Las mujeres viajaban más - tanto para el trabajo y como parte del esfuerzo de
guerra. Eran económicamente más independientes, más confianza en la visualización de una serie
de habilidades, y más libre de las exigencias de su casa. El crecimiento del movimiento feminista
post-guerra y las campañas por la igualdad salarial y los derechos fueron influenciados por la
experiencia del tiempo de guerra. Sin embargo, para algunos la guerra se limitó a añadir a la carga
de cuidar a su familia. El apoyo dado en términos de cuidado de niños y comidas baratas no suelen
sobrevivir a la guerra. El 'baby boom' de la década de 1950 causó más presión para cuidar de los
niños,
La mística de la feminidad a menudo es vista como el detonante de un movimiento feminista en los
EE.UU., y posteriormente en Gran Bretaña y Europa Occidental, de una mayor conciencia de la
necesidad de la igualdad social, económica, política y sexual. Ha sido comparado con movimientos
paralelos para los derechos civiles.
En los países destrozados por la guerra y hacer frente a los efectos de la gran pérdida de vidas, las
mujeres se han visto afectados con problemas de supervivencia pura en lugar de ser 'liberado' por
los nuevos retos. Hay un monumento en movimiento en Berlín a las mujeres 'escombros', que
eliminaron millones de toneladas de residuos. La mayor independencia de las mujeres
estadounidenses no era compartida por muchos afroamericanos, que se continúe de baja
remuneración o doméstico empleo. En Occidente, la prosperidad de la posguerra evidente en la
década de 1950 tendió a glorificar la vida familiar, a expensas de la independencia femenina, y no
fue hasta la década de 1960 de que una.
El movimiento de las mujeres surgido como reacción a esto, y vuelto a descubrir los logros de las
mujeres en tiempos de la guerra.
En los estados totalitarios, hubo más igualdad oficial de la recompensa y el estado. Esto fue en
parte ideológica - con la creencia de que opresión de las mujeres era equivalente a la opresión de
las clases sociales - y en parte práctica. Así que muchos hombres que habían muerto, las mujeres
eran necesarias para cumplir con los planes económicos a gran escala. A nivel local, sin embargo,
no era a menudo más de una brecha entre los objetivos declarados de la igualdad sexual y siglos
de dominación masculina arraigado. El fin de la dominación fascista nazi y, lo que llevó a las mujeres
en la vida política y de la comunidad, puede haber sido un paso hacia atrás, como el capitalismo de
consumo liberal se basaba en cierta medida de las mujeres que juegan el papel más dependiente
como esposas, madres y consumidores.