Contaminación atmosférica: Dióxido de azufre (SO2) y monóxido de Carbono

(CO) y sus efectos perjudiciales en la salud de las personas y el medio

ambiente en un contexto local.

Luis Gabriel Sáenz Contreras

Carlos Emiliano Céspedes del Ángel
José Ricardo Cavazos Hernández
Jesús Eduardo González Leal

Resumen
Los principales municipios del Área Metropolitana de Monterrey (AMM), entre ellos,
reportan altos niveles de contaminación atmosférica. En este trabajo los autores
hacen un análisis documental del problema, describen la problemática de la
contaminación atmosférica en San Nicolás de los Garza con base en los datos
aportados por el Sistema Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA), en donde se
encontraron altos niveles de concentración de emisiones de dióxido de azufre (SO2)
y monóxido de carbono (CO), durante el día. Se describen efectos en seres vivos y
ambiente en general, con posibles soluciones viables.

Palabras clave: contaminación atmosférica, bióxido de azufre, monóxido de

carbono, salud, medio ambiente.
Introducción
Cada vez es más difícil ignorar la contaminación atmosférica, es un problema que
afecta por igual a países desarrollados y en vías de desarrollo. Actualmente, en
México las zonas que más contaminantes atmosféricos emiten son las zonas
metropolitanas de Valle de México, Guadalajara y Monterrey.
En el año de 1992, en el Área Metropolitana de Monterrey (AMM) comenzó
a operar el Sistema Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA) en nueve municipios
del Estado de Nuevo León; para medir y evaluar el impacto de la contaminación
atmosférica en la población y los recursos naturales, y desde entonces, conocemos
que tenemos problemas de contaminación atmosférica a nivel local, por lo que los
especialistas advierten que la contaminación atmosférica es un riesgo grave a la
salud de los seres vivos y su medio ambiente.
Con base en el análisis documental, el inventario de emisiones difundido por
el SIMA e investigadores; los tipos de contaminantes atmosféricos que afectan la
salud y el ambiente en general en el AMM se encuentra constituida por una variada
cantidad de sustancias que provienen de fuentes fijas como dióxido de azufre (SO2)
entre 97% y 99%; de igual manera las partículas menores a 2.5 micras (PM2.5) 63%
y 67%; las menores a 10 micras (PM10), aportan 63% y 42% y los óxidos de
nitrógeno (NOx) aportan el 38% del total de las emisiones. Con respecto a las
fuentes móviles, estas son el monóxido de carbono (CO) 93% y 96%,
respectivamente y los compuestos orgánicos volátiles (COV) generan entre 22% y
23% y las reacciones químicas de estos productos vertidos a la atmósfera se deben
a mecanismos de acción complejos que dañan o molestan a las personas, las
plantas y los animales que se encuentran expuestos a dichos contaminantes
atmosféricos.
Entre los efectos en los seres vivos y el medio ambiente, los contaminantes
atmosféricos causan, enfermedades de vías respiratorias, afecciones
cardiovasculares y cerebro vasculares y producen la contaminación del aire. Por tal
motivo, es necesario implementar estrategias viables.
En primer lugar, un proyecto que incluya un programa educativo de
contaminación ambiental dirigido a la comunidad estudiantil apoyado con el uso de

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las redes sociales para la difusión de información confiable. Luego, en segundo
lugar, un plan de movilidad (Carpool) y por último, en tercer lugar establecer
convenios con otras instituciones educativas para compartir el proyecto.
Para finalizar, la revisión documental de la literatura científica devela que en
el AMM los contaminantes atmosféricos vertidos al aire en niveles altos son el
dióxido de azufre (SO2) 99% y monóxido de carbono (CO) 96% de las emisiones
totales que afectan diversos municipios incluyendo el Municipio de San Nicolás de
los Garza los cuales son objeto de nuestro análisis documental.

Justificación
De acuerdo con Mayora (2019) el aire limpio es esencial para la salud y el bienestar
general, pero su contaminación sigue siendo la mayor amenaza para este derecho
humano en todo el mundo.
En la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se establece el
derecho de todos los ciudadanos a la salud, en el Artículo 4 se contempla ese
derecho de la población y el derecho de disfrutar de un ambiente saludable:
Toda persona tiene derecho a un medio ambiente sano para su
desarrollo y bienestar. El Estado garantizará el respeto a este derecho.
El daño y deterioro ambiental generará responsabilidad para quien lo
provoque en términos de lo dispuesto por la ley (Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos [Const]. Art.4 de mayo de 2021,
p.10).
De igual importancia, para evaluar el cumplimiento de calidad del aire para la
protección de la salud, existen Normas Oficiales Mexicanas (NOM), las cuales
definen límites máximos permisibles (LMP) para diferentes tipos de contaminantes
de la atmósfera (Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales [SEMARNAT],
2016).
A nivel estatal, la Ley Ambiental del Estado de Nuevo León en su Artículo 8
establece que la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SEDESU) tiene la facultad
de llevar a cabo campañas y programas educativos permanentes, protección
ambiental, fomento de una cultura ecológica e integra y coordina el Sistema Estatal

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de Información Ambiental y Recursos Naturales. También SEDESU promueve la
participación de la sociedad en materia ambiental (SEMARNAT, 2016).
Para terminar, a nivel local, el Municipio de San Nicolás de los Garza en
Nuevo León, existe el Reglamento de Protección al Medio Ambiente, este articula
un proceso de desarrollo general, orientado a la protección de los ecosistemas y
tiene como centro de atención al ser humano, según niveles de prioridades
determinados por investigaciones científicas, apoyadas por la tecnología, y
sustentados en principios de responsabilidad social (Secretaría Técnica, 2022).

Desarrollo
A. Origen de los contaminantes
En términos generales, la contaminación atmosférica es la presencia en el aire de
contaminantes emitidos en concentraciones altas que perjudican la salud de los
seres vivos y contaminan el medio ambiente (Ministerio del Medio Ambiente [MMA],
2018).
Así pues, la emisión contaminantes atmosféricos en el Área Metropolitana de
Monterrey (AMM), se debe a la modificación del entorno físico natural como el
entorno construido; es decir, ya sea por la disminución de áreas verdes, la
deforestación, cambios en usos de suelo, modificación de los cauces de ríos y
arroyos, instalación de industrias y al aumento del parque vehicular. Todos estos
factores aumentan los contaminantes en el aire (Mayora, 2019; Galán, Martínez,
Chapa, Ramírez y Hutchinson, 2021).
Según, Amable et al. (2017) se le da el nombre de contaminación atmosférica
a la presencia de sustancias en el aire en cantidades que causan una molestia o
riesgo para la salud de los seres humanos, animales o el medio ambiente, así como
pueden atacar a diversos materiales.
Esta contaminación se encuentra constituida por una variada cantidad
de sustancias como monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono
(CO2), ozono (O3), dióxido de azufre (SO2) , dióxido de nitrógeno
(NO2), compuestos orgánicos volátiles y material particulado (PM), una
fina mezcla de productos líquidos y sólidos, clasificados según su

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 diámetro en menor de 10 micras (PM10), menor de 2,5 micras
(PM2.5), menor de una micra (PM1) e inclusive en PM extrafino menor
de 0.1 micras (Amable, et al., 2017, p. 1165).
En consecuencia, la contaminación atmosférica se origina debido a los
procesos industriales que implican la combustión, tanto en industrias como en
automóviles y calefacciones residenciales, que generan dióxido de azufre (SO2) y
monóxido de carbono (CO), óxidos de nitrógeno (NxOy) y azufre (S), entre otros
contaminantes. De igual manera, algunas industrias emiten gases nocivos en sus
procesos productivos, como cloro (Cl) o hidrocarburos que no han realizado
combustión completa.

B. Tipo de contaminación
La contaminación atmosférica puede ser de fuentes de origen natural o
antropogénicas (actividades realizadas por los seres humanos), y según la
naturaleza de la fuente emisora pueden ser clasificados en contaminantes de origen
primario (emitidos directamente por la fuente) o contaminantes de origen secundario
(producto de una reacción química de los primarios con otras sustancias presentes
en la atmósfera) (MMA, 2018).
En el año 1970, inició el sistema manual de monitoreo atmosférico para el
Área Metropolitana de Monterrey (AMM) y se mantuvo hasta 1992, año en que el
Gobierno del Estado de Nuevo León la sustituye con una red automática de
monitoreo atmosférico para cinco estaciones (Obispado, San Bernabé, San Nicolás,
Santa Catarina y La Pastora) operadas por la Dirección de Planeación de la
Subsecretaría de Ecología y hoy en día, por el Sistema Integral de Monitoreo
Ambiental, que forma parte de la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Estado
de Nuevo León (SEMARNAT, 2016).
En un estudio realizado por Barrera, Barradas y Gómez (2021) sobre la
calidad del aire en el AMM menciona las catorce estaciones del actual Sistema
Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA) del AMM en nueve municipios.
Hoy en día, se encuentran en función las catorce estaciones de monitoreo
ambiental en: Monterrey (Obispado, San Bernabé y Pueblo Serena), San Nicolás

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de los Garza (San Nicolás y Universidad), Apodaca (Apodaca), General Escobedo
(Escobedo), García (García), Cadereyta (Cadereyta), Juárez (Juárez), Guadalupe
(La Pastora), San Pedro Garza García (San Pedro), Santa Catarina (Santa Catarina)
y Pesquería (Pesquería) para mantener informada a la población del AMM todos los
días del año sobre la calidad del aire en cada uno de los municipios.
El monitoreo de la contaminación atmosférica es un factor elemental
para la gestión de la calidad del aire, ya que permite a las autoridades
correspondientes tomar las medidas necesarias para mantenerla en
un estado que no represente un riesgo significativo a la salud de la
población y a los ecosistemas (Barrera, et al., 2021, p.105).
Cada estación está configurada para la medición de emisiones de dióxido de
azufre (SO2), óxidos de nitrógeno (NxOy), monóxido de carbono (CO), ozono (O3) ,
partículas suspendidas finas (PM2.5) y meteorología (SEMARNAT,2016) durante
las 24 horas del día, los siete días de la semana durante los 365 días del año.
Cabe mencionar, la medición se lleva a cabo durante los horarios entre 7 a.m.
y las 12 p.m. donde las emisiones de gases tienen mayor concentración. En este
horario se registran los datos de las estaciones: Obispado, Escobedo, San Pedro,
La Pastora, San Nicolás, Apodaca, Universidad y Pueblo Serena. En las estaciones
de San Bernabé, Cadereyta, Juárez, Santa Catarina, García y Pesquería, hace la
medición entre las 7 a.m. y 9 a.m. es el horario de mayor concentración de
contaminantes. Durante, los meses entre octubre y febrero en la Zona Metropolitana
de Monterrey (ZMM) se reportan los niveles más altos de concentración de
contaminantes en el aire en todas las estaciones de medición (Galán, et al., 2021;
SIMA, 2022).
Entonces, los resultados del sistema de monitoreo atmosférico permite
dimensionar que en el Municipio de San Nicolás de los Garza se presenta
contaminación atmosférica durante ciertas horas del día.

C. Tipos de contaminantes
Un reciente estudio realizado por Galán et al. (2021) sobre la contaminación de la
atmósfera en el Área Metropolitana de Monterrey (AMM), divide las emisiones para

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su análisis. En primer lugar, fuentes fijas o puntuales (establecimientos industriales),
fuentes móviles en carreteras y no carreteras (transporte vehicular que circulan por
carretera e incluye aquellos vehículos utilizados en las actividades de la
construcción, agrícolas, red aérea, red ferroviaria, marítima y recreativa), en
segundo lugar fuentes de área (habitacional, comercial y de servicios) y en tercer
lugar fuentes naturales (emisiones de fuentes biogénicas y erosivas).
Así, pues, las fuentes fijas son las principales emisoras de dióxido de azufre
(SO2), generan un 99% del total de las emisiones vertidas en la atmosfera; de
manera similar ocurre con las partículas menores a 2.5 micras (PM2.5) y las
menores a 10 micras (PM10) emitidas por la industria de petróleo y petroquímica,
así como la generación de energía eléctrica. Finalmente, se muestran que aportan
38% de los óxidos de nitrógeno (NOx), la cual proviene, en gran medida, de la
industria de la metalurgia (Mayora, 2019; Galán, et al., 2021).
Por otro lado, las fuentes de área (habitacional, comercial y de servicios)
contribuyen con 95% del amoniaco (NH3) generado por la actividad ganadera; los
compuestos orgánicos volátiles (COV) representan un 70%, por el uso de solventes
y las partículas PM10 y PM2.5 que aportan 54% y 31%, respectivamente, debido a
los caminos no pavimentados y la extracción de minerales no metálicos (Galán, et
al., 2021).
Por su parte, las fuentes móviles, son el principal emisor de monóxido de
carbono (CO), ya que representan un 93%, los óxidos de nitrógeno (NOx) un 54% y
los compuestos orgánicos volátiles (COV) representan el 22%, respectivamente,
estos contaminantes provienen del uso de combustibles fósiles en los vehículos
(Galán, et al., 2021).
Entonces, según Mayora (2019) y Galán et al. (2021) los contaminantes
atmosféricos vertidos al aire en niveles altos que contaminan el AMM son el dióxido
de azufre (SO2) 99% y monóxido de carbono (CO) 96% de las emisiones totales
que afectan a diversos municipios incluyendo el Municipio de San Nicolás de los
Garza, Nuevo León (Galán, et al., 2021).
Con respecto a los valores normados permisibles para el ser humano de
contaminantes en el ambiente están publicados en el Diario Oficial de la Federación

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(DOF) para cada uno de los contaminantes atmosféricos los cuales son objeto de
nuestro análisis documental.
Se tienen niveles establecidos de concentración y tiempos de
exposición de los contaminantes donde el ciudadano promedio
puede desenvolverse sin que se afecte de forma significativa su
salud. Estos niveles son establecidos por las Normas Oficiales
Mexicanas para la Calidad del Aire. Los niveles de la norma
ambiental para cada contaminante son diferentes, ya que la
vulnerabilidad del ser humano es diferente ante cada tipo de
contaminante (SIMA, 2022, párr., 1)
Por otro lado, la Norma Oficial Mexicana NOM-022-SSAI-2019 publicada en
el DOF (2019) establece la concentración máxima permisible para el dióxido de
azufre (SO2) en el aire: el valor límite de 1 hora es de 0.075 ppm (196.5 µg/m³) y de
24 horas es de 0.04 ppm (104.8 µg/m³) como medida de protección a la salud de la
población (Tabla 1).

Tabla 1
Valor máximo de las concentraciones dióxido de azufre (SO2)

Exposición Concentración
SO2 (ppm) SO2 (µg/m³)
Valor límite de 0.075 196.5
1 hora
Valor límite 0.04 104.8
de 24 horas
Símbolos y términos abreviados.
µg/m3 Microgramo por metro cúbico
ppm Partes por millón
Fuente: Elaboración propio, basado en la NOM-022-SSAI-2019 (DOF, 2019).

Por ejemplo, en la Figura 1 se muestra el valor máximo de dióxido de azufre

(SO2) de los días del mes de octubre en 2021. Se registra en color rojo los días que
sobrepasaron la norma NOM-022-SSAI-2019 y en el mes de febrero reporto
valores normales de acuerdo con la NOM (SIMA, 2022, p. 39).

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Figura 1. Promedio diario de dióxido de azufre (SO2) en el mes de octubre 2021.

En la Norma Oficial Mexicana NOM-021-SSAI-2021 publicada en el DOF

(2021) estable los valores máximos permisibles para el monóxido de carbono (CO)
en el aire: el valor de 1 hora permitido de las concentraciones horarias de monóxido
de carbono (CO) sea menor o igual a 26.0 ppm (30000µg/m³) y 8 horas el valor
máximo permitido de monóxido de carbono sea menor o igual a 9.0 (10000µg/m³)
ppm como medida de protección a la salud de la población (Tabla 2).

Tabla 2
Valores límites permitidos monóxido de carbono (CO)

Exposición Concentración
CO (ppm) CO µg/m³

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 Valor límite de 26.0 30000
1 hora

Valor límite 9.0 10000

de 8 horas

Símbolos y términos abreviados.

µg/m3 Microgramo por metro cúbico
ppm Partes por millón
Fuente: Elaboración propia, basado en la NOM-021-SSAI-2021 (DOF, 2021).

En la Figura 2 se muestra el valor máximo de monóxido de carbono (CO) de

los días del mes de febrero en 2021. Se registra en color rojo los días que
sobrepasaron la norma NOM-021-SSAI-2021 y en el mes de octubre reporto
valores normales de acuerdo con la NOM (SIMA, 2022, p. 45).

Figura 2. Promedio diario de monóxido de carbono (CO) en el mes de febrero 2021.

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D. Reacciones químicas
El dióxido de azufre (SO2) es producto de las partículas provenientes de
la combustión de combustibles fósiles (DOF, 2019) y el monóxido de carbono (CO)
es producto de la combustión incompleta de material que contiene carbono (DOF,
2021) son los principales componentes de la contaminación atmosférica.
El término combustión se refiere a un proceso de oxidación rápido de ciertos
elementos combustibles, o sea, constituidos principalmente por hidrógeno (H),
carbono (C) y a veces azufre (S) y requiere necesariamente de la presencia de
oxígeno (O) es un tipo de reacción química exotérmica, es decir,
involucra materia en estado gaseoso o en estado heterogéneo (líquido-gaseoso o
sólido-gaseoso) la cual genera energía lumínica (luz) y energía térmica (calor) y en
la mayoría de los casos se produce de forma rápida (Ondarse, 2021).
Como resultado, en el caso de la combustión, el agente oxidante (oxígeno)
obtiene electrones del agente reductor (combustible), o lo que es lo mismo, el
comburente (oxígeno), obtiene electrones del combustible (Ondarse, 2021). Según
la siguiente fórmula:
Compuesto combustible + O2 → CO2 + H2O + Otro Compuesto + Energía
Sin embargo, los compuestos combustibles pueden variar en cada reacción
de combustión, según sea su naturaleza y en los niveles de energía generada. Pero
el dióxido de carbono (CO2) y el agua H2O se producen de alguna manera en todas
las combustiones (Ondarse, 2021).

Dióxido de azufre (SO2)

Es un gas incoloro de un olor fuerte e irritante, soluble en agua, se puede oxidar
para formar trióxido de azufre (SO3) e iones sulfato (SO4²-), sales inorgánicas y
ácidos, componentes importantes de las partículas secundarias (DOF, 2019).
El dióxido de azufre (SO2) se genera durante la combustión de fósiles
(carbón, madera y petróleo); la fundición de minerales que contienen azufre (S) y
de la actividad volcánica natural. Además, es la principal una fuente antropogénica
que proviene de la quema de combustibles fósiles que contienen azufre (S)
empleados para la generación de electricidad y en los vehículos de motor a diésel

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e involucra los principales episodios de emisiones que causan la contaminación
atmosférica (SEMARNAT, 2016; Torres, 2022).
A continuación, se presenta la representación de la ecuación química durante
el proceso de combustión para obtener dióxido de azufre (SO2) se forma en el
proceso de combustión del azufre (S) y del sulfuro de hidrógeno (H₂S):
S8+ 8 O2 → 8 SO2
2 H2S + 3 O2 → 2 H2O + 2 SO2

Monóxido de carbono (CO)

Es un gas más liviano que el aire, incoloro, no irritante, sin olor o sabor; de ahí su
peligrosidad, ante la carencia de características organolépticas para ser detectado
por los sentidos (Di Biasi, 2019). Se le encuentra tanto adentro de espacios cerrados
como al aire libre.
El monóxido de carbono (CO) es el producto que se obtiene de la combustión
incompleta de material que contiene carbono, como gasolina, gas natural, petróleo,
carbón, tabaco y otros materiales orgánicos (DOF,2021). La fuente humana más
importante de monóxido de carbono (CO) son las emisiones de gases del tubo de
escape de automóviles (Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de
Enfermedades [ATSDR], 2012; DOF, 2019).
En cuanto a las combustiones Ondarse (2021) menciona que son una
reacción química de reducción-oxidación, en otras palabras, esto significa que en
ellas un reactivo se oxida (pierde electrones), mientras que el otro se reduce (gana
electrones).
Concretamente, en el caso de la combustión, el agente oxidante (oxígeno)
obtiene electrones del agente reductor (combustible), o lo que es lo mismo, el
comburente (oxígeno), obtiene electrones del combustible. Esto se da generalmente
según la siguiente fórmula:
La combustión completa de un hidrocarburo (material combustible rico en
carbono como el gas, petróleo, carbón, kerosén, nafta, madera, plásticos) necesita
oxígeno para quemarse, es decir, cuando la cantidad de oxígeno es suficiente se
genera, dióxido de carbono (CO2) más vapor de agua (Di Biasi, 2019).

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 En presencia del oxígeno (O) suficiente, se necesitan dos átomos de oxígeno
(O2) por cada átomo de carbono (C), para formar una molécula de dióxido de
carbono (CO2). Usando símbolos químicos, la ecuación se representa a
continuación:
CO2 O=C=C
Como se ha mencionado, el monóxido de carbono (CO) se produce de la
combustión incompleta del carbón durante todos los procesos de combustión del
carbono y sus compuestos cuando no hay saturación de oxígeno.
Sin embargo, cuando la cantidad de oxígeno es insuficiente, la combustión
es incompleta y se forma monóxido de carbono (CO). Una molécula de monóxido
de carbono (CO) tiene un átomo de carbono y uno de oxígeno. Usando símbolos
químicos, la ecuación química se representa a continuación:
CO C=O
A continuación, se presenta la representación de la ecuación química durante
el proceso de combustión incompleta del octano (gasolina) para obtener monóxido
de carbono (Avella, 2012):
2 C8H18 + 17 O2 → 16 CO + 18 H2O

E. Efectos en seres vivos y ambiente en general

Los efectos de la exposición a contaminantes atmosféricos en los seres vivos se
presentan solamente cuando se entran en contacto con la sustancia al inhalar,
comer o beber, o por contacto con la piel (ATSDR, 2012).
Los efectos sobre la salud de la exposición a cualquier sustancia
peligrosa van a depender de la dosis, la duración y el tipo de
exposición, la presencia de otras sustancias químicas, así como de las
características y los hábitos de la persona (ATSDR, 2012, párr. 1).
A continuación, se describen los efectos producidos por dióxido de azufre
(SO2) y el monóxido de carbono (CO) en los seres vivos y el ambiente:
La exposición a altos niveles de aire contaminado con dióxido de azufre (SO2)
causa en seres humanos son la irritación e inflamación del sistema respiratorio
(Torres, 2022) sobre todo en personas con asma y enfermedad pulmonar

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obstructiva crónica (DOF, 2019). Los síntomas más frecuentes son tos, secreción
mucosa, y complica cuadros clínicos de asma y bronquitis crónica. También, la
exposición a altos niveles de SO2 se aumenta los ingresos hospitalarios por
cardiopatías elevando el índice de la mortalidad en la población.
Además, causa la irritación de la piel y las membranas mucosas de los ojos,
la nariz, la garganta y los pulmones (Albert, 2004 citado en SEMARNAT, 2016;
Torres, 2022), daña directamente a la flora por la deposición ácida contaminando la
calidad del suelo y el agua (Amable, et al., 2017; Torres, 2022) y en animales
disminuye la función pulmonar.
Por otro lado, sobre los efectos negativos el monóxido de carbono (CO),
Quispicuro (2015) describe que afecta en particular el sistema nervioso central
(SNC). Por su parte, Castañeda et al. (2008) citado en Quispicuro (2015) argumenta
que el monóxido de carbono (CO) es un gas producido por la combustión incompleta
de la materia orgánica, se une a la hemoglobina, dificultando el transporte de
oxígeno a los tejidos y a la citocromo-oxidasa, generando disfunción multiorgánica.
Esto provoca en las personas los siguientes síntomas: dolor de cabeza persistente,
cansancio, reducción de la percepción visual, la destreza manual, pérdida de
memoria, de la concentración, atención y las capacidades para conducir, insomnio,
irritabilidad y con menos frecuencia deterioro demencial y la aparición de un cuadro
neurológico similar a la enfermedad del Parkinson (Rodríguez et al., 2006 citado en
Quispicuro (2015).
Por último, en el ambiente el monóxido de carbono, es considerado uno de
los mayores contaminantes de la atmósfera terrestre (Téllez, et al., 2006 citado en
Quispicuro, 2015).

F. Posibles soluciones
Derivado del análisis documental de literatura científica, se plantean
estrategias viables para disminuir la contaminación atmosférica, en nuestra
localidad:
En primer lugar, el diseño, elaboración e implementación de un programa de
educación ambiental que incluya cursos, talleres y campañas sobre temas

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relacionados con la contaminación del medio ambiente y el impacto en los seres
humanos, animales y plantas para ser incluidos en la comunidad estudiantil a la que
pertenecemos para trabajar en horarios extracurriculares y ponerlo en práctica en
nuestra comunidad, apoyada con el uso de las redes sociales a través de las redes
sociales institucionales como Facebook, Twitter e Instagram para la difusión y
comunicación de información confiable y oportuna, elaborada con la participación
de estudiantes y docentes especializados expertos en la materia.
Después, en segundo lugar, implementar un plan de movilidad conocido
como Carpool (término anglosajón que se refiere a la práctica de compartir el
automóvil con otras personas, para trasladarse a un lugar en común) en nuestra
institución educativa con la participación de padres de familia, estudiantes y
personal docente con la iniciativa: Viaje compartido. Con la finalidad de disminuir
las emisiones de contaminantes atmosféricos, el ahorro de combustible, el ahorro
en los tiempos de traslado y apoyar a personal docente, administrativo y estudiantes
que no dispongan de automóvil propio en los horarios de entrada y salida de la
institución educativa.
Por último, en tercer lugar, diseñar un instrumento que permita establecer las
bases de convenios con otras instituciones educativas para compartir nuestras
experiencias académicas relacionadas con el proyecto ambiental con el apoyo de
las autoridades representativas de la institución educativa para formalizar
actividades, investigación, difusión y extensión del conocimiento relacionado con el
proyecto ambiental.
Todas estas propuestas requieren de la participación activa de la población
estudiantil para lograr su éxito, y en este aspecto, el rol que juega la educación es
relevante, por medio del involucramiento como un actor social capaz de actuar con
responsabilidad de forma individual y/o colectiva para disminuir a corto, mediano y
largo plazo la contaminación atmosférica.

Conclusiones
Podemos concluir, a partir del análisis documental de la literatura científica, que
la contaminación atmosférica es una las principales amenazas ambientales para la

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salud y bienestar en general en todos los municipios en Área Metropolitana de
Monterrey (AMM) incluyendo el municipio de San Nicolás de los Garza.
Porque, los datos de la contaminación ambiental del aire tratados en este
trabajo de análisis documental de literatura científica reflejan altas concentraciones
de contaminantes atmosféricos y hemos estado expuestos mucho tiempo a un aire
contaminado con sustancias de alto riesgo para la salud.
En consecuencia, es relevante cuidar nuestra región y/o localidad, es una
necesidad prioritaria e inmediata ante la cantidad de problemas ambientales que
provoca la contaminación del aire que respiramos, y que amenaza con la calidad de
vida de las personas, animales y plantas el dióxido de carbono.
Por último, los aprendizajes adquiridos sobre el análisis documental de la
contaminación atmosférica fue precisar el origen, los tipos de contaminantes, las
reacciones químicas y los daños que provocan en la salud y el medio ambiente que
generan las emisiones de dióxido de carbono (SO2) y el monóxido de carbono (CO)
en el AMM en un contexto local.
Al mismo tiempo, es relevante el aprendizaje que resulta de este trabajo
colaborativo, no se limita a la realización de un documento para presentar un tema
en particular; fue nuestro primer acercamiento para adquirir conocimientos de cómo
se genera un artículo de divulgación con base en la evidencia de la literatura
científica y el respeto a un conjunto de lineamientos de estilo (Normas American
Psychological Association [APA], por sus siglas en inglés) para su organización y
presentación de la información en la comunidad académica y científica.

Recomendaciones
Nuestro aporte como ciudadanos puede impactar en la disminución de la
contaminación atmosférica al modificar nuestras actividades diarias.
1.- Implementar un programa de educación ambiental que contribuye a la
disminución de la contaminación ambiental en nuestra localidad con la participación
de los estudiantes y el personal docente de la institución educativa.
2.- Implementar un plan de movilidad (Carpool) en nuestra institución
educativa con la iniciativa: Viaje compartido.

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 3.- Establecer convenios con otras instituciones educativas a través de los
departamentos institucionales correspondientes para compartir nuestras
experiencias relacionadas con el proyecto ambiental con otras comunidades
estudiantiles.
Para finalizar, nos alegraría contar con la disposición de la comunidad
estudiantil y del personal docente en general, para llevar a cabo dichas actividades
educativas dentro del salón de clases y para que cada integrante de la comunidad
estudiantil ponga en prácticas las acciones aprendidas en el aula en beneficio de la
comunidad en general.

Agradecimientos
Finalmente, agradecemos a quienes hacen posible este tipo de convocatorias como
parte de nuestro proceso formativo, fue un reto académico, pero al final la creación
y construcción de un texto de divulgación científica aclara la comprensión de cómo
se estructura un proceso investigativo y permite compartir con nuestros
compañeros(as) en clase y profesores nuestra experiencia en esta nueva área de
conocimiento. “ALERE FLAMMAM VERITATIS”

17
Referencias
Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR). (2012).
Resúmenes de Salud Pública - Monóxido de Carbono (Carbon Monoxide).
Recuperado de: https://www.atsdr.cdc.gov/es/phs/es_phs201.html#:~:text=E
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