ACREDITACION DE Módulo 1:

AGENTES DE SEGUROS La Historia del seguro

HISTORIA DEL SEGURO

La institución del seguro es tan antigua como la
civilización misma. El hombre, desde la
antigüedad, buscó hacer frente a las desgracias
a las que se encontraban expuestos
constantemente, organizándose de forma
comunitaria para proteger sus intereses
personales y aquellos comunes a los de la
sociedad en que se encuentran.

En sus inicios, existían formas de seguros no

monetarias sin bases técnicas ni jurídicas,
fundamentadas en un sentimiento de solidaridad
ante el infortunio y como mecanismo de
distribución de riesgos. Un ejemplo de esta forma
de responder a los infortunios la encontramos en
la civilización de los asirios donde la reedificación
de los templos destruidos por incendios, eran de
cargo de toda la ciudad en que ellos estaban
situados.

Este principio de fraternidad en el que se

apoyaban mutuamente constituye uno de los
primeros vestigios del seguro.

En Mesopotamia hacia fines del milenio IV A.C.

se encuentran otras de las primeras señales
históricas del seguro. Los comerciantes
babilónicos pactaban entre sí recibir una
indemnización por el robo o pérdida de animales
o mercadería que transportaban por desiertos y
parajes peligrosos.

Así mismo, en esta época ya comienza la

presencia de esquemas para la protección a la
vida. De hecho, en el imperio babilónico con el rey
Hammurabi (1810 –1750 A.C.), y la creación del
código de Hammurabi se preveía indemnizar a las
esposas y descendientes, en caso de la muerte
del cónyuge.

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En la antigua Grecia, también encontramos el

concepto de seguro, asociado a acuerdos para
atenuar el efecto de determinados perjuicios. Allí
se practicó un sistema en virtud del cual los
propietarios de esclavos convenían con
banqueros el pago de indemnizaciones para los
casos de fuga.

También, se encuentran las asociaciones

llamadas eranoi o erandi que tenía como fin
socorrer y dar asistencia a sus socios desvalidos
mediante una cotización de todos sus asociados.

Asimismo, “la Ley de Rodas” para el comercio

marítimo, regula el echazón o avería gruesa; esta
implicaba que, cuando se lanzaba por la borda
parte de la carga a fin de aligerar la nave cuando
se encuentra en peligro de hundirse, la pérdida
debe repartirse proporcionalmente entre todos
los comerciantes interesados en el embarque.

También en la sociedad romana, varias instituciones muestran lo que sería posteriormente el seguro.
Por ejemplo, el caso de Roma Collegia Funeraticia, que eran asociaciones privadas de ahorro, que
reunían a cientos de hombres y mujeres, libres y esclavos, que, a través de cuotas mensuales, su
objetivo era asegurar una sepultura decente. Por otra parte, existía también la constituci ón de
asociaciones de legionarios que se encargaban de costear los gastos de viaje de los legionarios y de
su familia a otras guarniciones
.
Más adelante, durante la Edad Media y hasta mediados del siglo XIV encontramos las llamadas
“Guildas”, que eran mutualidades de personas que se unían para indemnizarse solidariamente por las
pérdidas que pudieran sufrir en sus propiedades o bien para indemnizar a sus asociaciones de los
muchos riesgos que surgían cotidianamente, entre ellos, gastos funerarios, perju icios por robos,
incendios, entre otros.

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Es en este mismo periodo donde surge el primer sistema de aseguramiento moderno, el cual
modificaba el préstamo a la gruesa sustituyéndose el pago de los intereses por una prima y
aplazándose el pago de la indemnización hasta cuando el daño ocurriese. En este contexto, el primer
contrato de seguro conocido fue un seguro marítimo, suscrito por un notario en Génova en el año
1347. Este contrato cubría los posibles accidentes, naufragios o asaltos piratas en el viaje entre
Génova y Mallorca del buque llamado Santa Clara.

Otro tema importante es la regulación de la actividad aseguradora, la cual tiene sus inicios en España,
ya que fue una de las primeras naciones en reglamentar el seguro marítimo. A fines del siglo XV los
reyes católicos concibieron y dictaron la “ordenanza de Bilbao”, uno de los documentos más relevantes
de la historia del seguro en los países de habla española: su capítulo 22 se ocupa especialmente de
los seguros, las pólizas y las formas en que estas deben efectuarse. Respecto de esta regul ación, se
concibió un seguro marítimo que permitía arrojar la carga por tormenta o peligro en la nave, siendo
asumido el costo por la corona española.

La aparición de las primeras pólizas fue en 1574. El comerciante inglés Richard Chandler obtuvo la
concesión para emitir en su país toda clase de pólizas, estableciendo la Cámara de seguros de
Londres, institución que emitió la primera póliza de seguro de vida, a nombre del londinense, William
Gibbons en el año 1583. Gibbons murió dentro del mismo año. Solamente había pagado 32 libras de
prima; sin embargo, sus herederos recibieron el capital asegurado de 400 libras.

Pero ¿cuándo comienza la consolidación del seguro? Es en los siglos XVII y XVIII, que el seguro toma
definitivamente las formas con que hoy se le conoce. El asegurador empezó siendo una persona
individual, pero pronto surgen la agrupación de personas y las sociedades anónimas.

A continuación, veamos algunos hitos generales asociados a los contratos de seguros que conocemos
hasta el día de hoy:

• El Seguro contra incendio nace como consecuencia de un gran incendio en Londres que en 4
días devastó gran parte de la ciudad en el año 1666. El doctor Nicholas Barbon fue el primer
empresario de Inglaterra en tener éxito con los seguros de incen dio. A través de su compañía
“Fire office for houses”, incorporó al mercado más de 5.000 seguros de incendio para
propietarios de inmuebles en Londres.

• En el año 1688 Edward Lloyd´s inauguró su café de Tower Street. Por tan solo un penique, los
armadores y los capitanes mercantes disfrutaban de una taza de café, un asiento junto al fuego,
y del derecho a consultar el boletín noticioso.

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A partir de dicho boletín noticioso, que se

fijaba en la pared varias veces por semana,
los armadores y negociantes, convenían
transportes, seguros y otras transacciones.
En este lugar se elaboraron el primer código
de señalización de auxilio, el primer servicio
de botes salvavidas y muchos otros.

El Lloyd´s no nació como una sociedad o una

compañía aseguradora, sino que es un
mercado, una bolsa reglamentada en que se
transan masivamente operaciones de
seguros y reaseguros. Tal como ocurre hasta
el día de hoy.

A partir de la consolidación del seguro en Inglaterra y la formación del Lloyd´s, el seguro se expandió
por todo el mundo, lo que contribuyó también a la formación del reaseguro.

Hacia el año 1800 y a partir de los trabajados desarrollados sobre el cálculo de probabilidades por
Pascal y Fermat, estudios sobre mortalidad y formulaciones tales como la ley de los grandes
números de Halley, se asentaron las bases científicas de la actividad aseguradora.

Durante el siglo XVIII surgen en España, Inglaterra, Alemania y Francia compañías de seguros con
una estructura muy similar a las actuales.

En el siglo XIX la actividad aseguradora se desarrolla de forma paralela a la vida económica,

adaptándose a sus nuevas exigencias y favoreciendo a su vez el desarrollo industrial que cuenta
con el seguro como garantía ante la creciente industria.

Hoy en día, la actividad aseguradora es uno de los tres pilares de los mercados financieros, junto
con la actividad bancaria y el mercado de valores.