Fecha de la segunda consulta: Primero de noviembre de 2018

Al acudir a la segunda consulta, lo primero que hice fue recordarle a Julia el motivo
de su primera consulta-cuando refirió a que se sentía con muchísima ansiedad, por
momentos preocupada y enojada, peleandose con su hija con quien convive.
Le pregunté cómo se sentía luego de tomar las flores tomando en cuenta el “antes” de
empezar a tomarlas.
Me contestó que los primeros cuatro o cinco días tomó las flores cuatro veces al día,
luego sintió la necesidad de agregar dos o tres veces más la frecuencia de toma. Que
se le habían acabado hacía dos días previos a esta nueva consulta. Que las tenía
siempre con ella, tanto cuando estaba en su casa, como cuando salía a hacer cosas
fuera de su casa.
Primeras impresiones del aspecto, comportamiento del cliente: Julia durante su
primer entrevista se mostró inquieta, ansiosa, en momentos muy locuaz y no paraba
de cruzar y descruzar las piernas. En esta segunda entrevista observé que podia
mantener el contacto visual conmigo por mas tiempo en comparación con la vez
anterior Que se la notaba menos inquieta, descruzaba sus piernas esporádicamente;
pero sin embargo la primera impresion de su rostro es que se la veía un poquito más
distendida no tan tensa.

-Describa la consulta: le pregunte como había estado estos días pasados. Me relató
dos episodios que me hizo recordar el porqué elegimos -en la entrevista pasada-
Cherry Plum: Julia estaba en la carnicería haciendo la cola para ser atendida y una
señora trata de “colarse”-ahi me di cuenta que estaba mejor- me dijo textualmente. En
otro momento la hubiera increpado, sin pensarlo, gritandole. Pero esta vez, algo hizo
que me quedara como en suspenso por unos segundos, y para mi sorpresa no hice ni
dije nada, sentí que no valía la pena hacerme “mala sangre” por eso. Siendo otra
señora la que la increpó porque había querido colarse en la fila. Por suerte antes de
salir a hacer las compras habia tomado las gotas, me dijo.
El otro episodio fue con su hija quien invitó a almorzar a su novio. Julia quería
preparar la comida ella, pero su hija no estaba de acuerdo. Quería que su novio
preparara pollo a la parrilla. Lo novedoso en su comportamiento fue que pudieron
hablar, sin sobresaltos, sin gritos, mas tranquilamente-textual de Julia. Poniendose de
acuerdo a que la suegra hiciera las ensaladas y el yerno el pollo. Julia refirió que ya
no “explota” tanto como antes de tomar las flores. le pregunte como era su actitud
en una conversación, cuanto hablaba y cuanto escuchaba, a lo que me respondio
que ahora escucha un poco mas, pero que cree seguir hablando, quizas mas de lo que
deberia acotó sonriendose.
Tomando el cuenta las otras dos flores que estuvo tomando, le pregunte como se
relacionó estos días con su hija y con su nieto. Me dijo que en algunos momentos
de la convivencia en estos días se “corrió” y dejo que fuera su hija quien tomara las
riendas de las actividades y cuidado del nieto. Que capaz que eso les hacia bien a
todos , en algun momento ella no iba a estar y el niño necesita que sea la madre quien
lo críe. Le pregunte como se sintio el correrse, el dejar el lugar para otro.
Contestandome que no se sintió tan mal, un poco incomoda, pero dentro de todo bien.
Que su hija estaba de mejor humor que otras veces y eso la ponia muy bien. De todos
modos empezo a sentir que el soltar el cuidado del nieto podia no terminar muy bien.
Empezo a tener esos pensamientos recurrentes de que le podia pasar algo malo al
nieto al cruzar el camino centenario en bicicleta, todos los dias en el que su hija lo
llevaba al colegio. Le pregunte en qué otras situaciones tiene esos pensamientos
de que algo malo va a suceder, a lo que me contestó que le pasaba solo con el nieto
porque pienso en dos cosas que le puede pasrr algo en el Camino Centenario, y
también me esta pasando con mi hija que creo que en algun momento la paran en la
calle y le roban la bicicleta, por el tema de la inseguridad que vivimos. “me empiezo
a dar manija y no paro de pensar que le va a pasar algo” me dijo, preguntandome si
habrá alguna flor para eso, a lo que le respondí que si, sintiendose alviada por eso.
Respecto a la tercera flor Heather, le pregunté como habian sido los dialogos que
tenia con las personas ultimamente, como era su escucha para con los demas.
Respondiendome que cree que un par de sintió estar un poco mas atenta a lo que los
demas le dicen, no estuvo pensando en que decir, como siempre lo hizo, sino
pensando en lo que le estan diciendo. Recuerda que eso le pasó muy claramente con
el novio de su hija cuando estaban cenando. Sintiendose sorprendida frente a su
actitud.

Flores elegidas en un principio: Luego de escuchar el relato de Julia y de como fue

su comportamiento y sentir, y de hablar con ella consideramos que siguiera
tomando las mismas flores que elegimos en la primera entrevista y agregar una
cuarta, Red Chestnut.

--Red Chestnut:
...”Empezo a tener esos pensamientos recurrentes de que le podia pasar algo malo al
nieto al cruzar el camino centenario en bicicleta, todos los dias en el que su hija lo
llevaba al colegio.”
... “Le pregunte en qué otras situaciones tiene esos pensamientos de que algo
malo va a suceder, a lo que me contenesto que le pasaba solo con el nieto porque
pienso en dos cosas que le puede pasrr algo en el Camino Centenario, y también me
esta pasando con mi hija que creo que en algun momento la paran en la calle y le
roban la bicicleta, por el tema de la inseguridad que vivimos. “me empiezo a dar
manija y no paro de pensar que le va a pasar algo” me dijo, preguntandome si habrá
alguna flor para eso, a lo que le respondí que si, sintiendose alviada por eso. “

Flores elegidas para componer el preparado: cuando comenzamos a hablar sobre el

nuevo gotero a preparar, sobre las flores que lo compondrian, Julia me pidio que no le
sacara ninguna de las tres flores que venía tomando, que sentía que les habia hecho
muy bien, y que las queria seguir tomando, que ya no estaba tan ansiosa y enojada
como antes. A lo que asenti, y le hable de una cuarta flor, Red Chestnut, que otorga
pensamientos positivos de cuidado e interes por seres queridos, en su caso su nieto,
con serenidad, con compasion, con tranquilidad,dejando que el otro nos pida ayuda, y
ayudando cuando se nos pida.Muy entusiasmada la consultante me dice :-que bueno,
voy a dejar de torturarme” .
Finalmente preparamos el gotero con las cuatro flores para Julia recordandole sobre
la toma, .4 gotas con una frecuencia de -como mínimo - 4 veces al día. Al verter las
gotas en la boca que trate de no tocar la lengua ni los dientes, porque así se
contaminaría el agua del frasco, estropeándose. Quedamos de acuerdo en que
volvería a llamarme días antes de que se le acabara las gotas.