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Un recorrido por el amor de algunos outsiders

A fines prácticos, un gps es un dispositivo utilitario, nos permite llegar a un destino a través
del trazado de un recorrido. Nos presenta diferentes rutas que, al recorrerlas, nos puede
generar diferentes sensaciones. Personalmente, los caminos desconocidos, aquellos que
transito por primera vez, en algunas ocasiones me generan vértigo, incertidumbre, ansiedad;
en otras, curiosidad, intriga. En ambos casos, continúo las indicaciones que dicta la voz del
dispositivo, nunca desisto de seguir el camino. Siempre uso gps, incluso cuando me dirijo a
destinos conocidos. ¿Por qué? Seguramente por costumbre, porque está vinculado el celular
al estéreo del auto, por metódico, y así un sinfín de posibilidades. Sin embargo, prefiero y
me gusta pensar que siempre hay distintas vías de acceso a un mismo lugar y que cada una
nos brinda una experiencia distinta. Con los textos literarios me pasa algo similar, muchas
veces me acerco a diferentes obras desconocidas para mí por sugerencias, porque me las
prestan y me dicen: “tendrías que leer esto” o “esto te puede interesar”. Otras veces, vuelvo
a encontrarme con textos que ya leí, pero la vía de acceso es otra; entonces, ahí emerge otro
significado de la experiencia de lectura. Ahí, creo yo, se trazan diferentes recorridos que
desembocan en distintos textos; ahí subyace un modo de leer literatura.

En esta compilación me propongo, entonces, recopilar textos que leí y/o releí durante este
año, a los que llegué a través de distintas voces que funcionaron como gps: profesores/as,
compañeros/as, alumnos/as. Estos textos son “destinos” a los que arribé, más de una vez,
acompañado. Son rutas recorridas de manera colectiva e impregnadas de sensaciones.
Leídas y debatidas en conjuntos. Por eso, esta selección es, sobre todo, sentida y está
motivada por una serie de experiencias de lectura enmarcadas en la vorágine de las clases
en la escuela y la universidad. Evito la transcripción y opto por el escaneo, ya que de algún
modo vislumbran pequeñas intervenciones en los textos.

Una ruta de acceso. La selección comienza con un fragmento de Historia de la literatura


gay en Argentina, de Adrián Melo, porque propone un modo de leer la literatura en clave
gay y política. Las voces de la disidencia sexual pueden ser rastreadas a lo largo de la
literatura y no exclusivamente en determinados sectores literarios: escritorxs gays que
producen “literatura gay”. En este gps emergen distintos narradores y yo poéticos que se
afianzan en una zona, no necesariamente geográfica, sino más bien estructural: la
marginalidad. Putos, faloperos, prostitutos: seres sufrientes que escapan a una realidad
hostil a través de las drogas y el sexo. En algunos casos, los personajes que se configuran
en las obras encuentra el amor, el mal amor.

Una narrativa. La novela Bajar es lo peor, de Mariana Enríquez. La Argentina, La Plata,


los 90´. Homosexualidad, drogas, prostitución, vínculos tormentosos. Un personaje que,
cuando tiene la certeza de que está enamorado, prefiere morir por una sobredosis de heroína
inyectada por su enamorado. El amor no puede habitar en ese cuerpo o ese cuerpo no puede
soportar el amor.

Amores outsiders. Poemas de Ioshua y Sbarra. Yo poéticos que se encuentran en los


márgenes: por homosexuales, por pobres, por zonas geográficas. Amores intensos con
finales trágicos. Amores no correspondidos o efímeros. Emergen voces disidentes que, a
través de un lenguaje sencillo, expresan la pérdida amorosa. Los fantasmas de la oralidad
están de duelo.

El duelo. La novela Yo te quiero como amigo, de Dani Umpi. El personaje principal se


separa de su pareja. Debe reencontrarse a sí mismo, pero para eso, primero, tiene que
reconocer que algo de él se fue en esa relación. La narración es un recorrido por ese
proceso. Spoiler: no tiene final feliz. Se da cuenta de que, contrariamente a lo que se dicta
el sentido común, no debe “rehacer” su vida, simplemente tiene que continuarla.
Historia de la literatura gay en Argentina (2011), Adrián Melo
Bajar es lo peor (1995), de Mariana Enríquez
Selección de poemas de Ioshua
Selección de poemas de El mal amor (2017), de Sbarra
Sólo te quiero como amigo (2011), de Dani Umpi

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