Comunicación

vegetal
Clasificación de las plantas
Comunicación
vegetal
La comunicación vegetal se refiere al intercambio
de información entre plantas, que puede ser
realizado mediante señales químicas, eléctricas
y mecánicas. A través de estas señales, las
plantas pueden comunicarse entre sí y
responder a su entorno.

Una forma común de comunicación vegetal es la

emisión de sustancias químicas llamadas
feromonas, que pueden atraer o repeler a
otros organismos. Por ejemplo, algunas
plantas emiten feromonas para atraer a
polinizadores o para repeler a insectos que
puedan dañarlas.

Otra forma de comunicación vegetal es a través de

señales eléctricas que viajan a través de las
células de la planta. Se ha descubierto que las
plantas pueden detectar estímulos como la luz
y el sonido, y que pueden responder a estos
estímulos mediante cambios en la actividad
eléctrica de sus células.
Plasmodesmos
Los plasmodesmos son estructuras celulares que se encuentran en
las paredes celulares de las plantas y algunas algas. Estas
estructuras permiten la comunicación directa y el intercambio de
material entre células adyacentes, lo que es fundamental para el
correcto funcionamiento y desarrollo de los tejidos vegetales.

Los plasmodesmos consisten en canales estrechos que atraviesan

las paredes celulares y conectan el citoplasma de células
adyacentes. Estos canales están formados por extensiones de la
membrana celular y del retículo endoplásmico de las células que
se conectan. El tamaño de los plasmodesmos puede variar, desde
unos pocos nanómetros hasta varios micrómetros, lo que permite
la transferencia de diferentes tipos de moléculas y partículas.

Los plasmodesmos son esenciales para la comunicación y el

transporte de nutrientes y señales entre células adyacentes, lo
que permite que las células de una planta funcionen como una
unidad coordinada. Además, los plasmodesmos también permiten
la movilidad de proteínas, ARN y otras moléculas, lo que es
fundamental para la regulación de los procesos celulares y el
desarrollo de los tejidos vegetales.
Clasificacion de las
plantas
• Las plantas se dividen en dos grandes grupos: las
vasculares y las no vasculares.

• Las plantas vasculares se subdividen en dos grupos: las

plantas con semillas y las plantas sin semillas.

• Las plantas con semillas se dividen en dos grupos: las

gimnospermas y las angiospermas.

• Las plantas sin semillas se dividen en dos grupos: los

musgos y los helechos.

• Las gimnospermas no producen flores verdaderas ni

frutos, pero sí producen semillas desnudas.

• Las angiospermas producen flores verdaderas y frutos.

• Los musgos y los helechos no tienen flores ni semillas, se

reproducen por esporas.
 Las plantas briofitas
Las plantas briofitas son un grupo
de plantas no vasculares que
incluye musgos, hepáticas y
antoceros. Son plantas pequeñas
que se encuentran en ambientes
húmedos y sombreados, y suelen
crecer en colonias.
Las briofitas absorben agua y
nutrientes directamente de su
entorno a través de sus células.
Las briofitas tienen una estructura
simple, compuesta por un tallo,
hojas y raíces simples. No tienen
flores ni semillas, se reproducen
por esporas que se desarrollan en
estructuras reproductoras
especiales llamadas cápsulas.
Las hepáticas
Las plantas hepáticas son un grupo de
plantas no vasculares que pertenecen al
grupo de las briofitas, junto con los musgos y
los antoceros. Se caracterizan por tener un
cuerpo vegetativo aplanado y lobulado, que se
asemeja a un hígado, de ahí su nombre.
Las plantas hepáticas son importantes en los
ecosistemas porque retienen agua y
nutrientes, proporcionan alimento y refugio
para la fauna, y son indicadoras de la
calidad del aire y el agua. Algunas especies de
plantas hepáticas se utilizan en la medicina
tradicional para tratar diversos trastornos.
Las plantas
traqueofitas
• Las plantas traqueofitas son un grupo de
plantas vasculares que tienen un sistema de
transporte de agua y nutrientes a través
de los tejidos de conducción llamados
xilema y floema. Este sistema de transporte
les permite crecer más grandes y complejas
que las plantas no vasculares como los
musgos o hepáticas.
• Las plantas traqueofitas se dividen en dos
grupos principales: las plantas sin semillas y
las plantas con semillas.
 Plantas vasculares
sin semilla
• Las plantas vasculares sin semilla son un grupo de plantas que
pertenecen a las traqueofitas, es decir, tienen un sistema de
conducción interno de agua y nutrientes. Sin embargo, a
diferencia de las plantas con semilla, no producen semillas como
medio de reproducción, sino que se reproducen por medio de
esporas.
• Entre las plantas vasculares sin semilla se encuentran los
helechos, las equisetáceas y las licopodias. Estas plantas no
producen flores ni frutos y sus esporas se producen en
estructuras especializadas llamadas soros.

• Las plantas vasculares sin semilla son importantes en los

ecosistemas porque proporcionan alimento y refugio para la
fauna, regulan el clima y son fuente de medicamentos y otros
productos útiles para los seres humanos.
Las plantas vasculares
con semilla

• Las plantas vasculares con semilla

son un grupo diverso de plantas que
pertenecen al clado de las
traqueofitas, que se caracterizan
por tener un sistema de transporte
interno de agua y nutrientes. A
diferencia de las plantas vasculares
sin semilla, estas plantas producen
semillas como medio de
reproducción, lo que les da una
ventaja evolutiva significativa.
• Las plantas vasculares con semilla
se dividen en dos grandes grupos:
las gimnospermas y las
angiospermas.
Las plantas
gimnospermas
• Las gimnospermas son
plantas vasculares que
producen semillas
desnudas, sin una
protección completa como
los frutos. Algunos ejemplos
de gimnospermas son los
pinos, los cedros, las
secuoyas y las ginkgos.
Estas plantas son
importantes en la industria
de la madera y también se
utilizan en la medicina.
 Las plantas
angiospermas
• Las angiospermas, por otro lado, son
plantas vasculares que producen semillas
encerradas en un fruto. Las
angiospermas son el grupo de plantas
más diverso y abundante, que incluye
árboles, arbustos, hierbas, flores y
plantas acuáticas. Son importantes en los
ecosistemas porque proporcionan
alimento y refugio para la fauna, regulan
el clima y son una fuente de materiales
útiles para los seres humanos, como
alimentos, fibras, medicinas y productos
químicos.