1.

Inspección visual: Realizar una inspección visual del patín hidráulico para detectar
cualquier tipo de daño o desgaste en las piezas, como la carga, la plataforma, el cilindro, la
manguera y comprobar que los neumáticos estén en buen estado También es importante
asegurarse de que todas las tuercas y pernos estén apretados y que no haya fugas de aceite.

2. Lubricación: Lubricar todas las partes móviles, como las ruedas y las bisagras, para
asegurar un funcionamiento suave y evitar el desgaste prematuro de las piezas.

3. Comprobar los niveles de líquido hidráulico: verificar el nivel de líquido hidráulico en el depósito
y, si es necesario, rellenar o cambiar el líquido para garantizar un funcionamiento adecuado.

4. Inspeccionar el sistema hidráulico: revisar el sistema hidráulico para detectar fugas, daños en las
mangueras o tuberías y cualquier otra anomalía que pueda afectar su funcionamiento. Asegurarse
de que todas las conexiones estén seguras y apretadas.

4.1. Reparar o reemplazar las piezas dañadas: si se detectan piezas dañadas o desgastadas,
repararlas o reemplazarlas según sea necesario.

5. Verificación de los frenos: asegurarse de que los frenos del patín hidráulico estén funcionando
correctamente y que no haya signos de desgaste o daño en las pastillas de freno.

6. Pruebas de carga: realizar pruebas de carga en el patín hidráulico para asegurarse de que pueda
soportar el peso máximo de carga que se indica en la placa de identificación.

7. Mantener un registro: mantener un registro detallado de todos los trabajos realizados en el

patín hidráulico, incluyendo la fecha del mantenimiento, las tareas realizadas y cualquier problema
detectado durante la inspección.

Siguiendo estos pasos de mantenimiento preventivo, se puede garantizar que el patín hidráulico
funcione de manera segura y eficiente, reduciendo el riesgo de fallos o accidentes en el lugar de
trabajo.