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MI VIDA ESPIRITUAL

Base Bíblica (Hb. 10.25)

La Biblia muestra que el crecimiento espiritual es el resultado natural de una


vida dedicada a Jesús. El crecimiento espiritual es madurar en la fe. Todo creyente
necesita crecer espiritualmente.

¿Qué es el crecimiento espiritual?


Crecimiento espiritual es el proceso de maduración que ocurre a lo largo de
la vida con Jesús. Con el tiempo, cada creyente va profundizando su relación con
Jesús y su vida va cambiando.

El crecimiento espiritual no es como nuestro crecimiento físico que llega un


tiempo en que paramos de crecer.

Entonces, ¿Como es el crecimiento espiritual?


El crecimiento espiritual es como un árbol: continúa toda la vida.

Comienza con una Semilla - cuando la palabra de Dios entra en el corazón y


salva, la persona nace para una vida nueva;

Es Frágil de Inicio - los primeros desafíos son difíciles y hay mucho que aprender.
Nuevos creyentes necesitan mucho apoyo;

Gana Raíces - con el tiempo, el creyente va conociendo más de la Biblia firmando


más su relación con Jesús;

Enfrenta las Tempestades - incluso los cristianos maduros enfrentan grandes


dificultades que desafían su fe, pero Dios ayuda a superarlas;

Se Siente Fuerte - al conocimiento de la Biblia se añade la experiencia de vida, que


da más fuerza y confianza;

Da Frutos - los resultados del crecimiento espiritual son visibles en la vida del
creyente, el cristiano maduro refleja más la vida de Cristo.

Cuando no hay crecimiento espiritual, hay un problema. La Biblia dice que no


podemos actuar siempre como niños recién nacidos (Heb 5:13-14). No debemos
contentarnos sólo con lo básico de la fe. Dios tiene mucho más para darnos pero
muchas de las bendiciones exigen madurez.
El árbol que no crece y madura está enfermo o muerto.

¿Cómo crecer espiritualmente?


El crecimiento espiritual depende de dos cosas: Su voluntad y el Espíritu
Santo. Es Dios quien hace crecer pero usted necesita permitir que Él trabaje en su
vida. Muchas veces eso va a doler pero vale la pena.

Para crecer espiritualmente:

Se somete a Dios: Pida a Dios que le revele las áreas de su vida que necesitan ser
cambiadas y, cuando usted sabe cuáles son, obedezca a Dios. Escoge hacer la
voluntad de Dios siempre. (Mt 6:10).

Estudie la Biblia: Dios habla a través de la Biblia. Estudiando la Biblia, aprenderás


muchas cosas y descubrir cómo crecer (2 Tim 3:16-17). Comience poco a poco y
trate de mejorar su estudio de la Biblia con el tiempo.

Ore: Orar es acercarse a Dios para conversar con Él. La oración aumenta la
intimidad con Dios, la fuente de vida que nos hace crecer. Busque nuevas formas de
orar, llegando a él en todas las situaciones de la vida (1 Tes 5:17).

Vaya a la Iglesia: Solo no vas a crecer mucho. En la iglesia encontrarás a otras


personas que pueden ayudarte a crecer. La iglesia sirve para aprender juntos a
crecer en Jesús (Ef 4:15-16).

Asuma Responsabilidades: La responsabilidad trae bendiciones y ayuda a crecer


espiritualmente. Dios usa hasta las responsabilidades más pequeñas para enseñar
verdades profundas (1 Cor 12:5-7). Procure ayudar a sus hermanos.

De acuerdo con Gálatas 5:22-23, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz,
paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y dominio propio. Estos son
los resultados de una vida guiada por el Espíritu Santo.

Cuando alguien acepta a Jesús como su salvador, el Espíritu Santo pasa a


vivir dentro de él. Esto transforma su vida. El fruto del Espíritu es el resultado de la
acción del Espíritu Santo en la vida del creyente.

La lista en Gálatas es un resumen de los resultados principales de una vida con


Cristo:

Amor - Dios es amor y quien está con Dios tiene amor (1 Jn 4:16); este amor es
fruto del amor de Dios y se expresa en la forma en que tratamos a las otras
personas.

Alegría - en Jesús tenemos verdadera alegría porque tenemos esperanza y


sabemos que somos salvos; con Dios la tristeza es sólo una fase, la alegría vuelve
siempre (Sl 30:5).
Paz - el amor de Dios acaba con el miedo y la ansiedad; la paz de Dios no depende
de las circunstancias.

Paciencia - sabemos que en todo, Dios tiene un plan bueno para nosotros (Rom
8:28); podemos esperar con paciencia, confiando que Él va a actuar.

Amabilidad - la forma en que tratamos a la gente cambia, porque vemos el valor


que tienen para Dios.

Bondad - así como Dios es bondadoso con nosotros, podemos ser bondadosos con
otras personas, mostrando gracia.

Fidelidad - el creyente cumple su palabra y se esfuerza para ser una persona de


confianza.

Mansedumbre - (Se refiere a la docilidad, suavidad o benignidad en el carácter o en


el trato), con la ayuda de Dios, podemos evitar el odio y la violencia.

Dominio propio - Dios nos ayuda a tener control sobre nuestras vidas y en todo lo
que hacemos; no somos más esclavos del pecado (Rom 12:2).

LOS DONES Y TALENTOS

Talentos y dones espirituales forman parte de la capacitación de Dios para


que usted realice todas las tareas que le sean asignadas con excelencia. Dios no ha
puesto calidades en usted para ser utilizadas de manera mediocre, sino para ser
herramientas poderosas en el cumplimiento de su propósito para su vida.

Usted puede haber preguntado: "¿Cuál es la diferencia?

Todo lo que usted sabe hacer muy bien hecho, que le rinde elogios por todos,
es un talento, un regalo dado por Dios a usted. Todos los hombres y las mujeres
recibieron talentos de Dios, independientemente de aceptar a Jesús como Señor y
Salvador de sus vidas.

La pregunta para usted en este momento es: "¿Cuál es su talento?"

Debemos ser cautelosos al usar nuestros talentos o dones espirituales, para


que podamos servir a nuestros semejantes de una manera que glorifique a nuestro
Padre. Dios da talentos para todos nosotros cuando nacemos, pero los dones sólo
se conceden a los que nacen de nuevo.
Los Dones
Los dones del Espíritu Santo son capacidades que el Espíritu Santo da a las
personas creyentes para la edificación de la iglesia. Los dones son dados de
acuerdo con la voluntad del Espíritu Santo.

En 1 Corintios 12:8-10; 1 Corintios 12:28-30, Romanos 12:6-8 y Efesios 4:11-


13 La Biblia enumera varios dones del Espíritu:

Palabra de Sabiduría - la verdadera sabiduría viene de Dios; el don de la sabiduría


es una sabiduría espiritual que va más allá de la experiencia y el sentido común;

Palabra de Conocimiento - el Espíritu Santo ayuda a comprender y explicar los


asuntos espirituales;

Fe - todos los que aceptaron a Jesús como su salvador tienen ese don, pero
algunas personas tienen una fe especialmente fuerte;

Cura - Dios da el poder para curar enfermos milagrosamente;

Milagros - el Espíritu Santo permite hacer señales y maravillas;

Profecía - profetizar es transmitir un mensaje por inspiración de Dio;

Discernimiento de espíritus - discernir espíritus es entender si un mensaje viene


de Dios o no, el discernimiento es muy importante para impedir que la iglesia caiga
en el error;

Variedad de Lenguas - se llama don de lenguas a una facultad milagrosa


concedida por el Espíritu Santo a una persona, y que corresponde a la capacidad de
hablar múltiples idiomas que dicha persona desconoce;

Interpretación de Lenguas - entender y transmitir el mensaje de alguien que está


hablando en lenguas, por la revelación del Espíritu Santo;

Servir / Ayudar - quien tiene el don de servir es sensible a las necesidades de los
demás y de la iglesia, sabe cuándo ayudar;

Enseñar - la capacidad para explicar bien la Palabra de Dios, ayudando a las


personas a crecer espiritualmente;

Dar ánimo - alentar a otras personas en el momento oportuno con las palabras
correctas, por la inspiración del Espíritu Santo;
Contribuir - Dios da a algunas personas muchos recursos y generosidad para
poder contribuir a la comunidad y la iglesia;

Liderazgo - por la gracia del Espíritu Santo, los pastores, maestros y otros líderes
tienen la sabiduría y autoridad para guiar a otros creyentes;

Misericordia - tener compasión de otras personas, comprendiendo su dolor;

Administración - el poder para organizar diversos grupos y actividades de la iglesia


de forma eficiente, manteniendo el orden, la disciplina y el buen testimonio;

Evangelizar - la capacidad para transmitir el mensaje de la salvación y traer


personas a Dios;

Algunas personas interpretan 1 Corintios 13:8-10 como una señal que, los
dones como profecía y hablar en lenguas no suceden más. Pero el pasaje también
dice que el conocimiento pasará (lo que aún no sucedió).

En realidad, está hablando sobre el fin de los tiempos, cuando todo lo que es
imperfecto va a desaparecer. La Biblia dice que no debemos prohibir estos dones,
sino analizarlos con cuidado (1 Tes 5:19-21).

Los dones del Espíritu Santo deben ser usados de forma respetuosa y
ordenada, dando buen testimonio. El que tiene un don no forma parte de una elite
religiosa pero tiene el deber de usar ese don para ayudar a otras personas (1 Cor
14:39-40; 1 Cor 14:12).

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