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LAS HABICUELAS MÁGICAS

Cierta vez, un niño llamado Jack, va al mercado a instancias de su madre, con el fin de
vender una vaca. Cuando el niño llega al mercado, un extraño hombre le propone
entregarle cinco frijoles mágicos a cambio del vacuno. Jack acepta y vuelve a casa con los
granos en el bolsillo.
No obstante, su madre se enfurece porque considera que la clara instrucción de vender la
vaca ha sido ignorada. Fuera de sí, arrebata las habichuelas de las manos del niño y las
arroja por la ventana, que caen en la tierra, al lado de su casa.
Mientras Jack duerme, los granos germinan y dan origen a gigantes plantas de frijol que se
pierden en el cielo.
Al despertar, el niño descubre estas enormes plantas y decide escalarlas; así, al sobrepasar
el nivel de las nubes y perderse en las alturas, encuentra un castillo, lugar habitado por un
gigante que se alimenta de seres humanos.
Protegido por la esposa del gran hombre, Jack consigue huir, después de lograr robar una
bolsa de monedas de oro. No conforme, vuelve al día siguiente para robar la gallina de los
huevos de oro del gigante y de nuevo sale ileso.
En el tercer día, escala el castillo de nuevo y trata de robar un arpa de oro. Esta vez, el
gigante persigue a Jack. Jack escapaba a toda prisa hacia la planta de habichuelas. Como
al ogro le costó trabajo entender lo que sucedía, le dio alguna ventaja al jovencito en la
carrera. Jack bajó, bajó y bajó, pero, de pronto, la planta de habichuelas comenzó a
sacudirse terriblemente.
Antes de llegar a su jardín, Jack le gritó a su madre que trajera un hacha y, apenas tocó el
piso, se puso a cortar con ella el tallo. El ogro seguía bajando y ya se lo podía ver, aterrado
y enfurecido, descolgándose de entre las nubes.
En ese momento, el tallo se partió en dos y la planta mágica se quebró. El ogro, grande
como era, cayó en la tierra y se hundió mientras dejaba un hoyo inmenso y sin fondo.
Nadie supo nunca nada de él, el gigante. En cuanto a Jack, se divirtió con su nueva arpa y,
gracias a los huevos de oro, él y su madre no tuvieron más necesidades.

El cuento de las habichuelas mágicas tiene como idea principal la pobreza de una mujer viuda y su hijo.

La idea secundaria, la cual detalla el proceso que cumple el hijo de la viuda para salvarse de la pobreza y la
ruina.

La moraleja del cuento habla sobre la maldad que es castigada y el robo indiscriminado que cometió un niño
por necesidad; se describen los antivalores que pueden originarse en las familias y la falta de administración
económica, la cual tiene consecuencias como la pobreza y la ruina.

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