Morfeo no es tan feo Sucedió que esa noche tuve ganas de ir al baño, por lo
Por: Macario
Siempre me hago la misma promesa y siempre la
incumplo: cuando cabeceo en mis clases de Aritmética
de las 7 de la madrugada, mientras veo bailar y
desaparecer los números en el tablero, un golpe de lápiz
en la cabeza de mi compañero Tato, me despierta de
golpe y me repito a mí mismo:
- “esta noche no voy a trasnocharme para tener energía
para el otro día”… “no voy a ver televisión hasta la 1:am
para estar atento en clase”… “no voy a quedarme
mirando mi celular en la cama por dos horas, vigilando
las redes sociales de mi ex, para saber si aún me
extraña”… ¿Por qué las mejores películas empiezan
cuando ya te vas a ir a dormir? ¿Por qué estoy tan
despierto cuando me tengo que ir a acostar y tan
dormido cuando me tengo que levantar? ¿Por qué te
dejas engañar de las redes sociales si sabes que allí
todo es una farsa llena de apariencias y mentira?
Todavía hoy, no he podido cumplir mi promesa un solo
día … pero eso no es lo que vine a contarles… quería
decirles que lo que me sucedió anoche es de lo más
extraño que me ha pasado alguna vez.
Era demasiado tarde y no lograba dormirme. No sé si mi
imaginación me jugó una mala pasada o si fue un sueño
muy real, pero me llené de espanto y angustia:
Morfeo no es tan feo
Por: Macario
Siempre me hago la misma promesa y siempre la
incumplo: cuando cabeceo en mis clases de Aritmética
de las 7 de la madrugada, mientras veo bailar y
desaparecer los números en el tablero, un golpe de lápiz
en la cabeza de mi compañero Tato, me despierta de
golpe y me repito a mí mismo:
- “esta noche no voy a trasnocharme para tener energía
para el otro día”… “no voy a ver televisión hasta la 1:am
para estar atento en clase”… “no voy a quedarme
mirando mi celular en la cama por dos horas, vigilando
las redes sociales de mi ex, para saber si aún me
extraña”… ¿Por qué las mejores películas empiezan
cuando ya te vas a ir a dormir? ¿Por qué estoy tan
despierto cuando me tengo que ir a acostar y tan
dormido cuando me tengo que levantar? ¿Por qué te
dejas engañar de las redes sociales si sabes que allí
todo es una farsa llena de apariencias y mentira?
Todavía hoy, no he podido cumplir mi promesa un solo
día … pero eso no es lo que vine a contarles… quería
decirles que lo que me sucedió anoche es de lo más
extraño que me ha pasado alguna vez.
Era demasiado tarde y no lograba dormirme. No sé si mi
imaginación me jugó una mala pasada o si fue un sueño
muy real, pero me llené de espanto y angustia:
que me levanté y caminé directo a donde yo sabía que
estaba el interruptor de la luz, es decir, directamente
frente a mí. Avancé y avancé, y por una extraña razón
no logré encontrar el interruptor. Pensé que por estar en
penumbras y adormilado me había confundido por lo
que busqué a un lado, y luego a otro, y atrás y adelante,
y al sentirme perdido en mi propio cuarto me comenzó a
dar miedo. Me parecía que mi habitación estaba más
oscura de lo normal y no entendía por qué estaba tan
confundido.
Decidí regresar a mi cama, pero ya no la encontraba.
Sentí que tropezaba con distintas cosas por el suelo,
pero no la podía hallar. Por alguna extraña razón me era
imposible hablar pidiendo ayuda, y tampoco nadie se dio
cuenta que andaba yo trastabillando en la oscuridad.
Sentí que había pasado una hora desde que me levanté
hasta que por fin logré encontrar mi cama.
En ese momento debí haberme relajado, pero
lo que vi allí acostado me angustió aún
más… Sobre la cama, tirado, apacible
y profundamente dormido, estaba
yo mismo.
Sucedió que esa noche tuve ganas de ir al baño, por lo
que me levanté y caminé directo a donde yo sabía que
estaba el interruptor de la luz, es decir, directamente
frente a mí. Avancé y avancé, y por una extraña razón
no logré encontrar el interruptor. Pensé que por estar en
penumbras y adormilado me había confundido por lo
que busqué a un lado, y luego a otro, y atrás y adelante,
y al sentirme perdido en mi propio cuarto me comenzó a
dar miedo. Me parecía que mi habitación estaba más
oscura de lo normal y no entendía por qué estaba tan
confundido.
Decidí regresar a mi cama, pero ya no la encontraba.
Sentí que tropezaba con distintas cosas por el suelo,
pero no la podía hallar. Por alguna extraña razón me era
imposible hablar pidiendo ayuda, y tampoco nadie se dio
cuenta que andaba yo trastabillando en la oscuridad.
Sentí que había pasado una hora desde que me levanté
hasta que por fin logré encontrar mi cama.
En ese momento debí haberme relajado, pero lo que vi
allí acostado me angustió aún más… Sobre la
cama, tirado, apacible y profundamente
dormido, estaba yo mismo.