- La coagulación se lleva a cabo generalmente con la adición de sales
de hierro y aluminio. Este proceso es resultado de dos fenómenos: el primero, esencialmente químico, consiste en las reacciones del coagulante con el agua y la formación de especies hidrolizadas con carga positiva. Este proceso depende de la concentración del coagulante y el pH final de la mezcla. El segundo, fundamentalmente físico, consiste en el transporte de la hidrolizadas para que hagan contacto con las impurezas del agua. La dosis de coagulante es un parámetro crítico dado que, si se adiciona por debajo de la cantidad requerida, no se neutralizan totalmente las cargas de las partículas, la formación de flóculos disminuye y la turbiedad del agua tratada es elevada. Por otro lado, si se adiciona exceso de coagulante, se produce la inversión de las cargas de las partículas y la formación de gran cantidad de flóculos con tamaños muy pequeños y velocidades de sedimentación muy bajas y la turbiedad del agua tratada es elevada. 2-. ¿Cuánto de sulfato de aluminio se le aplica al agua como coagulante?
- La dosis de sulfato de aluminio usada para aguas superficiales varia
normalmente de 5 a 50mg/L (9,17). - A cada unos de los vasos se le agrega una dosis con una concentración de coagulante que puede variar 0.5mg/L entre vaso y vaso, posterior a esto se agitan las muestras a una velocidad de 70 rpm durante un minuto generalmente, para simular la mezcla rápida. Pasado este tiempo, se procede a simular la mezcla lenta, donde se disminuye la velocidad a un rango de 30 rpm por un lapso de 15 minutos, luego se deja sedimentar durante un tiempo de 20 minutos.