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HONORABLES MIEMBROS QUE INTEGRAN EL JURADO CALIFICADOR,

DISTINGUIDOS MAESTROS COMPAÑEROS PARTICIPANTES, PUBLICO


QUE ME ESCUCHA.

MI NOMBRE ES: YESICA RUIZ HERNÁNDEZ

REPRESENTO A LA ESCUELA TELESECUNDARIA.PROFR.JUAN LOPEZ


PROA

Z.E.021

MI TEMA A DESARROLLAR ES:

“ARTICULO 3º CONSTITUCIONAL Y EL LAISISMO EN MEXICO”

Deben ser muy excelsas las virtudes de los hombres, que se perpetuán
en la vida de un pueblo atreves de los tiempos. Pero más grandiosas
deben ser las cualidades de aquellos hombres que se agigantan por el
devenir de nuestra historia.

Tal es el caso del gran historiador de nuestra patria que desde pequeño
demostró su gran humanismo, que como luchador social llego a dirigir nuestra
nación.

Me refiero si señores, publico que me escucha a don Benito Juárez García,


indio zapoteca nacido en san pablo Guelatao el día 21 de marzo de 1806,
huérfano desde niño, tuvo que enfrentar solo la dura situación de su época.

Juárez es un caso extraordinario en la historia, ya que nacido en el seno de


una etnia monolingüe y aislada de la sierra de Oaxaca y de humildes orígenes,
fue capaz de forjarse una solida y ascendente carrera que lo llevaría hasta el
primer puesto de la república. .

Para entender el pensamiento de Juárez y sus ideas progresistas en el ámbito


educativo, debemos remontarnos a su propia experiencia un acercamiento a
los sucesos que delinearon sus propios años de vida no solo señala las
vicisitudes que este personaje tuvo que afrontar, sino también muestra un
reflejo del México de la primera mitad del siglo xlx. De hecho, la enseñanza
formal que predominaba en este periodo de la historia en México se basaba
precisamente en la memorización de textos del alfabeto y la tabla de aritmética.

. Don Benito había sufrido la transformación de identidad que produce la


verdadera educación y sin abandonar el compromiso con los problemas de los
desposeídos y de su etnia de origen, era un oaxaqueño liberal, cuyas
preocupaciones habían transpuesto los horizontes locales y se identificaba con
la de los liberales del mundo de su tiempo.
La más entrañable ambición de don Benito era multiplicar escuelas y modificar
el programa de enseñanza para formar los ciudadanos leales y progresistas
que la nación necesitaba. Un requisito esencial para que la instrucción fuera
laica, debía borrar las huellas de toda tradición retardataria, por eso, poco
después de su retorno a la ciudad de México, nombro una comisión que
estudiara este problema.

La comisión fue presidida por el positivista Gabino barreda y de sus trabajos


surgió una ley, el 1 de diciembre de 1867 esta ley orgánica de instrucción
pública que regiría la labor educativa del gobierno federal, estaba destinada a
difundir la ilustración en el pueblo como el medio más seguro y eficaz de
moralizarlo y establecer de una manera solida la libertad y el respeto a la
constitución y las leyes. En 1867, Juárez se propuso convertir a la educación
en una función pública, como lo había expresado el 7 de julio de 1859, estando
radicado el gobierno en Veracruz.

Por tal motivo reconozcamos en Juárez al mexicano patriota, que nos


enseño a defender la integridad de la nación. ¡Hoy debemos respetar al
Juárez que llevamos dentro! Debemos adoptar caracteres y formas de
este personaje: la forma de pensar, de trabajar, de lucha por un futuro
mejor, luchar contra todo, contra el tiempo, contra la pobreza, la
insuficiencia calidad de nuestra vida, hace falta democracia, sentimiento
jurista, luchar por nuestra patria como lo hizo Juárez.

Si así lo hacemos. Honraremos a Juárez a México y a Tamaulipas

¡Viva Juárez! ¡Viva Juárez! GRACIAS

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