Universidad Santa María

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Comunicación Social

Cátedra: Derecho de los Derechos Humanos

MISIÓN Y DETERMINACIÓN
DE HECHOS SOBRE
VENEZUELA
(NACIONES UNIDAS)

Profesor: Estudiantes:

Joel García. Ledezma, Ildemar. C.I: 27.671.815.

Royero, Camila. C.I: 28.476.164.

Yépez, Débora. C.I: 27.488.619.

Caracas, febrero de 2023.

Índice
Introducción
Presuntas persecuciones, detenciones y torturas de
opositores políticos

La tortura es un delito que se basa en tratos crueles e inhumanos, en

Venezuela, personas en el ejercicio de funciones públicas constantemente
infringen las leyes, cometiendo este delito en conjunto a persecuciones y
detenciones arbitrarias, en este caso, a opositores políticos. En
consecuencia, en el transcurso del año 2022, la oficina del Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) siguió
recibiendo denuncias de crímenes, maltratos e incomunicación de personas
detenidas.

De acuerdo a fuentes oficiales consultadas por el ACNUDH, El Ministerio

Público registró 235 denuncias de violaciones de derechos humanos que
implicaron privación de la libertad, entre mayo de 2021 y abril de 2022.

La Misión y Determinación de Hechos sobre Venezuela de las Naciones

Unidas describe al gobierno de Nicolás Maduro como representante y líder
de estos crímenes de lesa humanidad, siendo ellos los que ordenan reprimir
a opositores del gobierno.

Presuntas ejecuciones extrajudiciales

En el año 2017, Nicolás Maduro ordenó la creación de un comando el

cual supuestamente tendría la misión de proteger al pueblo contra el crimen,
es la Fuerza de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional
Bolivariana de Venezuela. Sin embargo, ésta ha sido sinónimo de terror y
represión, puesto que con otras unidades policiales y militares, en zonas
populares han amedrentado, torturado y asesinado.

Las zonas en las cuales sus habitantes poseen menos recursos, son
habitualmente las más castigadas por hechos punibles. Es en ellas donde la
FAES trata de permanecer. A pesar de que la oficina del Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos informó una reducción
considerable de homicidios durante el año 2022, la FAES fue responsable de
centenares de muertes. Miles de personas mueren cada año en Venezuela
en incidentes que se registran como casos de “resistencia a la autoridad”, las
pruebas señalan que muchos fueron ejecuciones extrajudiciales.

De tal manera que, la población ha catalogado al comando FAES como

“grupos de exterminio” o “escuadrones de la muerte”. El informe del
ACNUDH, indica que el gobierno venezolano podría estar usando a la FAES
(caracterizándolos con una indumentaria siniestra de negro) y otras fuerzas
de seguridad para introducir con afán miedo a la población y mantener el
control social.

Grupos Armados

En Venezuela existen ejércitos irregulares (con el supuesto propósito de

la lucha de territorios en zonas fronterizas) conformados por el Ejército de
Liberación Nacional (ELN), las Fuerzas Patrióticas de Liberación Nacional
(FPLN) y grupos disidentes que se formaron tras la desmovilización de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). En el año 2022,
sucedieron enfrentamientos entre el Comando Conjunto de Oriente (una de
las coaliciones de disidentes de las FARC) y guerrillas del ELN por el control
de territorios en el departamento colombiano de Arauca y el estado Apure
(Venezuela).

Dichos ejércitos cometieron abusos, entre los cuales se encuentran,

desplazamiento y reclutamiento forzado incluso a niños y niñas, y hasta
asesinatos.

En este sentido, el subsecretario adjunto de la Oficina Estatal de

Operaciones de Conflictos y Estabilización del Departamento de Estado de
los Estados Unidos Matthew Steinhelfer, advirtió durante la Séptima
Conferencia Anual de Seguridad Hemisférica el 11 de mayo de 2022 en
Miami, que “estos grupos aumentan su poder con el apoyo del régimen de
Maduro; seguirán creciendo y se expandirán a países vecinos”. Asimismo,
Steinhelfer afirmó que el 60 por ciento de los grupos armados cuentan con
algún tipo de respaldo del régimen venezolano.

Del mismo modo, las acciones de los militares venezolanos con el ELN
fueron corroboradas por Juan García, coordinador de la Organización no
gubernamental Fundares en Apure, quien declaró que el propósito
fundamental del régimen es desplazar a las disidencias de las FARC y
adueñarse de las rutas para los comercios iegales. Lo que significa, que
agentes de las fuerzas de seguridad venezolana han sido cómplices y
participes en los abusos con combatientes de la guerrilla.

Independencia judicial e impunidad de los abusos

Durante años, el sistema judicial venezolano ha desempeñado su rol

violando derechos humanos, alejándose de cumplir a cabalidad con las leyes
y de lo que en realidad es la justicia. En el 2021, la Organización de
Naciones Unidas denunció presiones gubernamentales para que los jueces
nieguen garantías a los opositores, también, obstáculos a los abogados para
ejercer la defensa y hasta amenazas que han llevado a varios magistrados al
exilio.

Muchas irregularidades registra la Misión y Determinación de los Hechos,

entre las cuales se posicionan: el uso de la prisión preventiva como una
medida rutinaria, cuando debería ser excepcional, a su vez, el hecho de que
magistrados emitan órdenes de arresto con carácter retroactivo para ocultar
anteriores detenciones ilegales, gran parte, acompañadas de torturas.

El miembro chileno de la Misión, Francisco Cox, manifestó que el sistema

de justicia de Venezuela necesita una reforma urgente para librarlo de
influencias políticas indebidas, por los motivos razonables de que políticos de
alto nivel han interferido significativamente en el poder judicial del país.
Indica que se necesita garantizar y proteger los derechos de todos los
venezolanos en acuerdo con el derecho interno y las obligaciones
internacionales.

Derechos indígenas y minería

La comunidad indígena merece el mismo respeto a sus derechos que el

resto de los civiles que conforman a la población, El estado venezolano debe
garantizarle sus derechos consagrados en la Constitución, tratados, pactos,
convenios internacionales, así como normas de aceptación universal. No
obstante, en 2016 las autoridades del gobierno crearon una zona de minería
comprendida en 14 territorios indígenas.

Desembocando ese hecho enfermedades como la malaria, debido a que

la minería es uno de los principales factores que propicia la deforestación y la
contaminación del agua. En este sentido, SOS Orinoco y el medio Correo del
Caroní señalaron que habitantes de las comunidades indígenas estuvieron
experimentando envenenamiento por el mercurio que se usa para separar el
oro de las impurezas, muchas comunidades se vieron obligadas a
trasladarse forzosamente a un lugar seguro.

Evidentemente en lugar de proteger, las autoridades le han ocasionado

graves e irremediables daños a la población indígena. La Organización de
Derechos Humanos ha documentado abusos aberrantes, que incluyen
violencia, agresiones armadas, trabajo forzado, explotación sexual,
amputaciones y asesinatos perpetrados por grupos que controlan las minas
ilegales de oro en el sur de Venezuela, y que operan con el apoyo del
gobierno.