El cuento realista se caracteriza por intentar reflejar la realidad. Intenta reflejarla, porque sabemos que, como se trata de un cuento, es ficción. El realismo surge como movimiento literario en la segunda mitad del siglo XIX, para representar la sociedad y transmitir una crítica o exponer algún problema. Estos cuentos se rigen por el criterio de verosimilitud, que quiere decir que ese relato va a ser creíble, independientemente de que sea o no real aquello que se cuenta, o de que haya sucedido o sea enteramente producto de la imaginación del autor. a) Las historias representan momentos, situaciones, sucesos de la vida común. b) Los personajes no son superhéroes, son individuos normales, que podrían ser semejantes a cualquier persona del mundo real. c) Los espacios o escenarios en los que transcurre la acción son comunes, conocidos por los lectores, incluso, se trata de lugares reales y concretos (como edificios, monumentos, direcciones reales). d) El tiempo también es identificable, a veces, porque se relatan con fechas concretas, a veces porque se pueden ubicar en períodos o épocas reconocibles, al contrario de cuentos no realistas, que pueden comenzar con frases como “Había una vez…”. c) El lenguaje que se utiliza para dar forma a los cuentos realistas es común.