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Primera edición: mayo de 2005

D.R. © Suprema Corte de Justicia de la Nación


Av. José María Pino Suárez, Núm. 2
C.P. 06065, México D.F.

ISBN 970-712-452-0

Impreso en México
Printed in Mexico

La edición de esta obra estuvo al cuidado de la Dirección


General de la Coordinación de Compilación y Sistematización
de Tesis de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS
DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

LA JURISPRUDENCIA SOBRE
INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD
PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

SERIE
DECISIONES RELEVANTES
DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN

MÉXICO 2005
SUPREMA COR TE DE JUSTICIA DE LA NA
CORTE CIÓN
NACIÓN

Ministro Mariano Azuela Güitrón


Presidente

Primera Sala
Ministra Olga María Sánchez Cordero de García Villegas
Presidenta
Ministro José Ramón Cossío Díaz
Ministro José de Jesús Gudiño Pelayo
Ministro Juan N. Silva Meza
Ministro Sergio A. Valls Hernández

Segunda Sala
Ministro Juan Díaz Romero
Presidente
Ministro Sergio Salvador Aguirre Anguiano
Ministro Genaro David Góngora Pimentel
Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos
Ministro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia
Comité de PPublicaciones
ublicaciones y PPromoción
romoción Educativa
Ministro Mariano Azuela Güitrón
Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos
Ministra Olga María Sánchez Cordero de García Villegas

Comité Editorial
Dr. Armando de Luna Ávila
Secretario Ejecutivo de Administración

Dr. Eduardo Ferrer Mac-Gregor Poisot


Secretario Ejecutivo Jurídico Administrativo

Mtra. Cielito Bolívar Galindo


Directora General de la Coordinación
de Compilación y Sistematización de Tesis

Lic. Laura Verónica Camacho Squivias


Directora General de Difusión

Dr. Lucio Cabrera Acevedo


Director de Estudios Históricos
INSTITUTO DE INVESTIGA
INSTITUTO CIONES JURÍDICAS DE LA
INVESTIGACIONES
AD NA
UNIVERSIDAD
UNIVERSID CIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
NACIONAL

Dr. Diego Valadés Ríos


Director

Dr. José María Serna de la Garza


Secretario Académico

C.P. María Luisa Mendoza Tello


Secretaria Administrativa

Dr. Daniel Márquez Gómez


Investigador
PRESENTACIÓN

L a Suprema Corte de Justicia de la Nación, como máxima


instancia jurisdiccional, último intérprete de la Constitución
de la República, ha desempeñado un papel de suma impor-
tancia resolviendo los asuntos sometidos a su consideración,
con las consecuentes repercusiones jurídicas, sociales, econó-
micas y políticas. Sus resoluciones no sólo tienen efectos sobre
las partes que intervienen en los asuntos de su conocimiento,
sino además son de especial interés para la sociedad por la
relevancia jurídica de estos fallos y los criterios que en ellos
se sustentan.

Sin embargo, estas resoluciones no siempre son conoci-


das, ni los criterios que en ellas se sustentan son bien com-
prendidos. Esto se debe en parte al discurso altamente técnico
en que las ejecutorias son formuladas y que su difusión se
realiza a través de obras sumamente especializadas. Por ello,
este Alto Tribunal ha decidido que los criterios más relevantes

9
10 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

sean difundidos a través de publicaciones redactadas en


forma simple y llana.

Es así como se presenta la serie Decisiones Relevantes de


la Suprema Corte de Justicia de la Nación, integrada por
diversos folletos sobre temas varios, abordados en las ejecu-
torias pronunciadas por este Máximo Tribunal, de interés para
el público en general.

En el marco del Convenio de Colaboración General que


tiene celebrado la Suprema Corte con la Universidad Nacio-
nal Autónoma de México para la organización y desarrollo
de actividades conjuntas de investigación, acciones científicas
y culturales de interés para las partes y del Convenio Especí-
fico de Colaboración para el Intercambio de Publicaciones
suscrito por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el
Instituto de Investigaciones Jurídicas, este último participará
en la elaboración de estos folletos con los comentarios de
sus investigadores.

Con esta serie de publicaciones, esperamos cumplir con


el objetivo de que el público no especializado conozca el tra-
bajo de este Máximo Tribunal.

Comité de Publicaciones y Promoción Educativa


de la Suprema Corte de Justicia de la Nación

Ministro Mariano Azuela Güitrón


Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos
Ministra Olga María Sánchez Cordero de García Villegas
INTRODUCCIÓN

L a función jurisdiccional que realizan la Suprema Corte de


Justicia de la Nación —en Pleno y Salas—, y los Tribunales
Colegiados de Circuito, se ve reflejada en las sentencias que
emiten al resolver los asuntos puestos a su consideración. Tal
función se resalta aún más con los criterios que emanan de
las mismas resoluciones, publicados en el Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta.

Al interpretar la norma, estos criterios definen el alcance


que tiene y, en el caso de tesis de jurisprudencia, hacen obli-
gatoria su aplicación por los distintos órganos jurisdiccionales
señalados en la Ley de Amparo.

Sin embargo, del estudio y resolución de las diversas


controversias resueltas por Tribunales Colegiados de Circuito,
surgen criterios contradictorios en torno al tema de la obliga-

11
12 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

toriedad de la jurisprudencia para las autoridades adminis-


trativas, lo que origina que la Segunda Sala de este Alto Tribu-
nal tenga que definir el criterio que debe prevalecer.

Por la relevancia de este tema se elaboró la presente pu-


blicación, en la cual se incorpora, a manera de introducción,
la información relativa a los antecedentes legislativos de la
jurisprudencia, las diversas reformas legales en torno a ella en
la Ley de Amparo y en nuestra Norma Fundamental, así como
los correspondientes textos vigentes en ambos ordenamientos.

Asimismo, se adiciona un análisis sobre la función y


obligatoriedad de esa importante fuente del derecho, su dife-
rencia con la ley, en qué consiste el principio de relatividad
de las sentencias y el principio de legalidad; este último rela-
cionado con el acto jurisdiccional y el acto administrativo.

En relación con el tema de fondo, se hace el estudio de


la contradicción de tesis 40/2001, derivada de los criterios
discrepantes entre el Primer Tribunal Colegiado del Décimo
Cuarto Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Admi-
nistrativa del Sexto Circuito, en la cual se analiza si una auto-
ridad administrativa está obligada a aplicar la jurisprudencia
en caso de que se haya declarado la inconstitucionalidad de
una ley.

Por otro lado, se presenta un estudio de la contradicción


de tesis 27/2004, sustentada entre el Segundo Tribunal Cole-
giado en Materia Administrativa del Primer Circuito y el Tercer
Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Segundo
Circuito, donde el punto en contradicción consiste en deter-
minar si una Sala del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y
INTRODUCCIÓN 13

Administrativa debe aplicar la jurisprudencia, en virtud de


los efectos que ésta tendría sobre la autoridad administrativa.

Por último, se incorpora el comentario del Instituto de


Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma
de México en torno al tema, en el marco de la colaboración
convenida entre este Alto Tribunal y dicho Instituto.
I. ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA
JURISPRUDENCIA EN MÉXICO1
1. ANTECEDENTES HISPANOS

E n España se ubican los llamados fueros, antecedentes


lejanos de la jurisprudencia, surgidos durante la larga
etapa de la reconquista, periodo histórico en el que los hispa-
nocristianos lucharon denodadamente por recuperar el territorio
peninsular que estaba en posesión de los musulmanes. Dicha
etapa se extiende del siglo XII al XV, aproximadamente, cuando
a cada ciudad o pueblo reconquistado el vencedor le otor-
gaba un instrumento jurídico particular que reconocía los
privilegios de sus habitantes, su organización política y el
derecho en general; a esa forma legislativa se le conoció
como fuero.

Una de las compilaciones forales más conocidas es el


Fuero Juzgo, aplicado en España a falta de disposición expre-

1
Para la redacción de este capítulo se resumió la información contenida en el libro
La Jurisprudencia en México, publicado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el
año 2002.

15
16 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

sa en los fueros locales, como también podía aplicarse la


costumbre o el arbitrio judicial, el cual se establecía en las
fazañas o sentencias que se tomaban como normas para
casos futuros, ya que eran consideradas fuente importante
del derecho.

La jurisprudencia de ese entonces, plasmada en las men-


cionadas sentencias judiciales conocidas como fazañas, se
encontraba en la base del sistema jurídico y sólo se aplicaba
cuando no existía disposición legislativa concreta y referida
al caso específico.

Otro antecedente remoto de la jurisprudencia lo encon-


tramos en las Leyes de Estilo o Declaración de las Leyes del
Fuero, de finales del siglo XIII, que definían o aclaraban las
disposiciones jurídicas de diversos ordenamientos mediante
la interpretación que de ellos hacían el monarca o los tribu-
nales, y eran citadas de manera tan reiterada por los litigantes
que llegaron a adquirir la misma fuerza que las leyes ema-
nadas del monarca.

También encontramos Las Pragmáticas, ordenamientos


dictados por el rey sin la intervención de las Cortes. En el
Código de Justiniano equivalían a una ley, pero en la España
del siglo XII correspondieron a la glosa o interpretación de
las leyes que no estaban contenidas en ninguna recopilación.

Otro antecedente son las Ordenanzas de la Judicatura


Superior de 1846, en las cuales se concedían facultades a
los Jueces para interpretar las normas de la época y aplicar
esa interpretación en casos posteriores.
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 17

2. ANTECEDENTES EN EL DERECHO INDIANO

El derecho español peninsular, vigente al momento de la con-


quista del nuevo mundo, no podía ser aplicado en las colonias
por lo que los reyes españoles redactaron una serie de disposi-
ciones para ser aplicadas únicamente en los nuevos territorios
y a las cuales se les conoce como derecho indiano.

El derecho indiano fue el sistema jurídico que rigió en la


Nueva España durante los siglos XVI, XVII y XVIII, y se carac-
terizó por dos tendencias:

a) Dejar el precepto legal potencialmente susceptible de


ser cambiado por las autoridades coloniales, si al apli-
carse se encontraba que era distinta la realidad a la cual
iba dirigido, y

b) Respetar la costumbre de los pueblos.

Para resolver los conflictos que se presentaban, las autori-


dades interpretaban el derecho indiano e integraban la norma
a la costumbre indígena, que consistía en dictaminar más de
dos o tres actos continuados sin interrupción, ni orden en con-
trario. Ese proceso era materialmente jurisprudencia.

Esta forma de interpretación dependía directamente de


la persona que detentaba el poder, que podía ser el virrey, el
oidor, el corregidor o cualquier otra autoridad indiana que
tuviera facultades para legislar y juzgar, ya que interpretaba
y aplicaba discrecionalmente la disposición jurídica.
18 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

3. DE LA INDEPENDENCIA AL PORFIRIATO

Aún en el periodo del México independiente las instituciones


jurídicas novohispanas conservaron su vigencia y eficacia, y
no fue sino hasta la promulgación de la Constitución de 1824
que un documento jurídico político propio tuvo íntegra vigen-
cia en el país. Es a partir de entonces que se inicia una etapa
relevante para la jurisprudencia, pues se crearon los órganos
de justicia federal y estatal.

Hacia 1835 el Congreso ordinario, transformado en


Constituyente por acuerdo de sus propios miembros y con
el consenso del Ejecutivo, puso fin al sistema federal mexicano
para dar paso a un régimen centralista con la emisión del
documento denominado Bases para la Nueva Constitución,
antecedente de las Siete Leyes de 1836.

El 12 de junio de 1843 entró en vigor una nueva Constitu-


ción de tipo centralista llamada Bases Orgánicas. Bajo ésta,
la organización y funcionamiento de los tribunales federales
se mantuvo sin cambios, situación que continuó hasta agosto
de 1846, cuando se restauró la vigencia de la Constitución de
1824 y se advirtió la necesidad de reformar el sistema judicial.

De esa inquietud surge el Acta Constitutiva y de Reformas


del 22 de abril de 1847, la cual prevé como novedad el
juicio de amparo, bajo la fórmula Otero.

Por su parte, la Constitución de 1857 incluyó la figura


del juicio de amparo con los rasgos que Rejón y Otero le
imprimieron. Aun cuando no se hace mención expresa de
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 19

la jurisprudencia, su tratamiento se dejaría a los proyectos


de ley que en torno al amparo comenzarían a aparecer en
los siguientes años.

La primera Ley de Amparo data de 1861 y en ella no se


señala de manera explícita la existencia de la jurisprudencia,
y menos aún su función como fuente de derecho, por lo que
su corta vida demostró sus muchos defectos y, consecuen-
temente, se procedió a elaborar un nuevo proyecto de Ley de
Amparo destinado a sustituirla.

Le sucedió la Ley Orgánica Constitucional sobre el Recurso


de Amparo, aprobada el 19 de enero de 1869, la cual con-
servó el principio de la Ley de Amparo de 1861 al establecer,
en su artículo 28, que los tribunales para fijar el derecho
público debían ajustarse a lo dispuesto en la Constitución,
las leyes federales emanadas de ésta y los tratados interna-
cionales celebrados con naciones extranjeras.

Las decisiones de los tribunales federales, aunque no eran


jurisprudencia en sentido estricto, daban luz a los casos en
que la ley fuera omisa o de dudosa aplicación. Sin embargo,
para su integración no existían reglas y muchas veces los
criterios variaban notablemente de un tribunal a otro.

Esta ley de 1869 fue la tercera en publicarse desde la


entrada en vigor de la Constitución Federal de 1857, y propor-
cionó al juicio de amparo un elevado rigor técnico, haciendo
posible que cobrara mayor arraigo en la cultura jurídica
nacional.
20 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Más adelante, la ley de 1882 aportó como innovación


importante la obligatoriedad de la jurisprudencia, cuando el
criterio del caso fuese pronunciado en cinco ejecutorias en
el mismo sentido. De esta forma se instauró la creación juris-
prudencial por reiteración,, modalidad que ha perdurado en
nuestro sistema jurídico a través del tiempo.

Por otro lado, en el artículo 47 se estableció que las sen-


tencias de los Jueces de Distrito, las ejecutorias de la Suprema
Corte y los votos de minoría, serían publicados en el Periódico
Oficial del Poder Judicial Federal; que los tribunales, para
poder fijar el derecho público, tendrían como regla supre-
ma de conducta la Constitución Federal, las ejecutorias que
la interpretaran, las leyes emanadas de ella y los tratados
internacionales.

También se previeron sanciones para el juez que conce-


diera el amparo o lo denegara, en contravención al texto
expreso de la Constitución, o en contra de la interpretación
que hubiere fijado la Suprema Corte en por lo menos cinco
ejecutorias reiteradas.

Al inicio del régimen porfirista estuvo vigente esta obli-


gatoriedad, a pesar de que no existió disposición expresa o
criterio claro de la forma en que la Corte podía, a través de
una resolución, adoptar una nueva postura.

No obstante los avances logrados hasta esa fecha en


materia jurisprudencial, la última década del siglo XIX en México
estuvo caracterizada por la influencia jurídica francesa, en
especial, la escuela de la exégesis, que dio lugar a la interpre-
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 21

tación literal de la ley; fue una influencia que desacreditó al


derecho estadounidense, que en principio tuvo gran influjo
sobre la institución mexicana de la jurisprudencia a través de
la figura norteamericana del common law.

Lo anterior, aunado a razones principalmente políticas,


propició que se suprimiera la institución de la jurisprudencia
al derogarse la ley de 1869 por el artículo sexto transitorio
del Código de Procedimientos Federales de 1897.

El Código Federal de Procedimientos Civiles, promulgado


el 26 de diciembre de 1908 por Porfirio Díaz, reguló tanto el
procedimiento civil como el juicio de amparo, y a partir de
entonces la jurisprudencia ha sido parte integrante de nuestro
sistema jurídico.

Este código disponía que la jurisprudencia debía inte-


grarse con cinco ejecutorias ininterrumpidas en el mismo sen-
tido, cuando se tratara de resoluciones de amparo dictadas
por la Suprema Corte de Justicia, a través de las cuales se
interpretara algún precepto de la Constitución Federal, y fuera
aceptada por nueve o más Ministros.

La jurisprudencia emitida de acuerdo a esos requisitos


era obligatoria para la propia Corte y para los Jueces de
Distrito, además, otorgaba al órgano emisor la facultad
de contrariarla para desvirtuarla.

Cuando las partes en el juicio de amparo invocaban la


jurisprudencia de la Corte debían hacerlo por escrito, expresar
el sentido de aquélla y señalar con precisión las ejecutorias
que la hubieran formado. En este caso la Corte se ocupaba
22 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

de su estudio, y en la sentencia que dictaba se mencionaban


los motivos o razones para admitirla o rechazarla.

4. LA CONSTITUCIÓN DE 1917

La Constitución de 1917 no hizo referencia alguna sobre la


jurisprudencia, aun cuando sí estableció en sus artículos 103
y 107 la competencia de los tribunales federales y las bases
del juicio de amparo.

La promulgación de esta Constitución ocasionó la pérdida


de vigencia de la jurisprudencia existente hasta esa fecha, la
cual fue compilada en las cuatro primeras épocas del Sema-
nario Judicial de la Federación, corpus al que actualmente se
le conoce como jurisprudencia histórica. A su vez dio inicio
a la Quinta Época, que hoy constituye el primer periodo de
la jurisprudencia vigente en nuestro país.

La Ley de Amparo de 18 de octubre de 1919, denominada


Ley Reglamentaria de los Artículos 103 y 104 de la Consti-
tución Federal, sustituyó al Código Federal de Procedimientos
Civiles de 1908 en cuanto a la reglamentación del juicio de
amparo, y en su capítulo II, título II, artículos 147, 148 y
149, expresaba:

ARTÍCULO 147.- La jurisprudencia que se establezca por


la Suprema Corte de Justicia en sus ejecutorias de amparo
y de súplica, sólo podrá referirse a la Constitución y demás
leyes federales.

ARTÍCULO 148.- Las ejecutorias de la Suprema Corte de


Justicia, votadas por mayoría de siete o más de sus miem-
bros, constituyen jurisprudencia, siempre que lo resuelto
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 23

se encuentre en cinco ejecutorias no interrumpidas por otra


en contrario.

ARTÍCULO 149.- La jurisprudencia de la Corte en los juicios


de amparo y en los que se susciten sobre aplicación de
leyes federales o tratados celebrados con las potencias
extranjeras, es obligatoria para los Magistrados de Circuito,
Jueces de Distrito y Tribunales de los Estados, Distrito Fede-
ral y Territorios.

La misma Suprema Corte respetará sus propias ejecutorias.


Podrá, sin embargo, contrariar la jurisprudencia estable-
cida; pero expresando siempre, en este caso, las razones
para resolverlo así. Estas razones deberán referirse a las
que se tuvieren presentes para establecer la jurispruden-
cia que se contraría.

En general era similar al Código Federal de Procedimien-


tos Civiles de 1908, sin embargo, existieron tres diferencias
respecto a la obligatoriedad de la jurisprudencia:

a) El número de votos necesario en el Pleno para la obli-


gatoriedad de la jurisprudencia se reduce de nueve a siete.

b) La jurisprudencia se consideró obligatoria también para


las autoridades jurisdiccionales de las entidades fede-
rativas, del Distrito y Territorios Federales.

c) Sólo era posible sentar jurisprudencia cuando se tratara


de ejecutorias derivadas de juicios de amparo o del re-
curso de súplica.

Más tarde, la Ley de Amparo denominada Ley Orgánica


de los Artículos 103 y 107 de la Constitución Federal, publi-
24 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

cada el 10 de enero de 1936, abrogó la ley de 1919 y en los


artículos 192, 193 y 194, indicó:

ARTÍCULO 192.- La jurisprudencia que establezca la Su-


prema Corte de Justicia en sus ejecutorias de amparo, sólo
podrá referirse a la Constitución y demás leyes federales.

ARTÍCULO 193.- Las ejecutorias de las Salas de la Suprema


Corte de Justicia constituyen jurisprudencia siempre que
lo resuelto en aquéllas se encuentre en cinco ejecutorias,
no interrumpidas por otra en contrario, y que hayan sido
aprobadas por lo menos por cuatro Ministros.

Las ejecutorias que dicte la misma Suprema Corte en Acuer-


do Pleno, también formarán jurisprudencia cuando se reú-
nan las condiciones que acaban de indicarse para las que
pronuncien las Salas, pero que hayan sido aprobadas por
lo menos por once Ministros.

ARTÍCULO 194.- La jurisprudencia de la Suprema Corte,


en los juicios de amparo y en los que se susciten sobre
aplicación de leyes federales o tratados celebrados con
las potencias extranjeras, es obligatoria para los Magis-
trados de Circuito, Jueces de Distrito, Tribunales de los
Estados, Distrito y Territorios Federales y Juntas de Concilia-
ción y Arbitraje.

Así, este ordenamiento:

a) Eliminó el recurso de súplica y la posibilidad de que


sus ejecutorias constituyeran jurisprudencia;

b) Estableció la obligatoriedad de la jurisprudencia para


las Juntas de Conciliación y Arbitraje, y
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 25

c) Especificó los requisitos para la configuración o elimi-


nación de la jurisprudencia.

5. REFORMAS CONSTITUCIONALES
EN TORNO A LA JURISPRUDENCIA

Es a partir de la reforma a la Norma Máxima, publicada en


el Diario Oficial de la Federación el 19 de febrero de 1951,
cuando se eleva a rango constitucional la figura de la juris-
prudencia, incorporada en el artículo 107, fracción XIII; el
cual menciona que la ley secundaria establecerá los térmi-
nos y casos en que deba ser obligatoria la jurisprudencia de
los tribunales del Poder Judicial de la Federación, así como los
requisitos para permitir su modificación. Sin embargo, esta
obligatoriedad solamente se refería a los tribunales federales
y a los juicios de amparo, lo que justificó su inclusión en el
precepto 107 de la Carta Magna que preveía las bases de
dicho juicio constitucional.

En ese entonces, el artículo 107, fracción XIII de la Ley


Fundamental, señalaba:

ARTÍCULO 107.- Todas las controversias de que habla el


artículo 103 se sujetarán a los procedimientos y formas
del orden jurídico que determine la ley, de acuerdo con
las bases siguientes:

...

XIII.- La ley determinará los términos y casos en que sea


obligatoria la jurisprudencia de los Tribunales del Poder
Judicial de la Federación, así como los requisitos para su
modificación.
26 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Si los Tribunales Colegiados de Circuito sustentan tesis con-


tradictorias en los juicios de amparo materia de su compe-
tencia, los Ministros de la Suprema Corte de Justicia, el
procurador general de la República o aquellos tribuna-
les, podrán denunciar la contradicción ante la Sala que
corresponda, a fin de que decida cuál es la tesis que debe
prevalecer.

Cuando las Salas de la Suprema Corte de Justicia sustenten


tesis contradictorias en los juicios de amparo materia de
su competencia, cualquiera de esas Salas o el procurador
general de la República, podrán denunciar la contradicción
ante la misma Suprema Corte de Justicia, quien decidirá,
funcionando en Pleno, qué tesis debe observarse. Tanto en
este caso como en el previsto en el párrafo anterior, la reso-
lución que se dicte será sólo para el efecto de la fijación
de la jurisprudencia y no afectará las situaciones jurídicas
concretas derivadas de las sentencias contradictorias en
el juicio en que fueron pronunciadas;

De la lectura de la exposición de motivos de dicha reforma


constitucional se advierte que las finalidades buscadas por
el Constituyente fueron las siguientes:

a) Incluir la institución de la jurisprudencia en la Norma


Fundamental para conferirle obligatoriedad, por ser fuen-
te del derecho, al igual que la ley.

b) La jurisprudencia debía ser acatada "...tanto por la


Suprema Corte de Justicia, como por las Salas de ésta y
los otros tribunales de aquel poder", en clara referencia
a los órganos jurisdiccionales integrantes del Poder Judi-
cial de la Federación.
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 27

c) La remisión a la ley ordinaria para determinar los tér-


minos y casos en que fuera obligatoria la jurisprudencia
de los Tribunales del Poder Judicial de la Federación, así
como los requisitos para su modificación.

Posteriormente, con la reforma constitucional publicada


el 25 de octubre de 1967, en el texto relativo a los términos
y casos de obligatoriedad de la jurisprudencia, que serían
determinados por la ley ordinaria, se trasladó del artículo
107 al 94 de la Norma Fundamental.

En la exposición de motivos de esta reforma se indicó, en


la parte conducente:

La disposición contenida en el primer párrafo de la fracción


XIII del artículo 107, según la cual la ley determinará los
casos en que sea obligatoria la jurisprudencia de los tribu-
nales del Poder Judicial Federal, así como los requisitos para
su modificación, se ha considerado que debe pasar al ar-
tículo 94, que es de carácter general, y no mantenerse
en el 107 que de manera especial consigna las bases que
rigen el procedimiento del juicio de amparo, porque la juris-
prudencia de dichos tribunales puede constituirse en pro-
cedimientos distintos de ese juicio que son también de su
competencia.

Esta reforma fue trascendente porque amplió la obliga-


toriedad de la jurisprudencia a todos los asuntos de compe-
tencia de los tribunales federales, y no exclusivamente a los
juicios de amparo; además, porque el artículo 94 permitió
la interpretación jurisprudencial de leyes y reglamentos locales,
interrumpiendo así la larguísima tradición de que la jurispru-
dencia federal sólo podía versar sobre la interpretación de la
Constitución y leyes federales.
28 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

El artículo 94 de la Constitución mexicana quedó así:

ARTÍCULO 94.- Se deposita el ejercicio del Poder Judicial


de la Federación en una Suprema Corte de Justicia, en
Tribunales de Circuito, Colegiados en materia de amparo
y Unitarios en materia de apelación, y en Juzgados de
Distrito.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación se compondrá


de veintiún Ministros numerarios y cinco supernume-
rarios, y funcionará en Pleno o en Salas. Los Ministros su-
pernumerarios formarán parte del Pleno cuando suplan a
los numerarios.

En los términos que la ley disponga, las sesiones del Pleno


y de las Salas serán públicas, y por excepción secretas en
los casos en que así lo exijan la moral o el interés público.

La competencia de la Suprema Corte, los periodos de sesio-


nes, el funcionamiento del Pleno y de las Salas, las atribu-
ciones de los Ministros, el número y competencia de los
Tribunales de Circuito y de los Jueces de Distrito y las res-
ponsabilidades en que incurran los funcionarios y emplea-
dos del Poder Judicial de la Federación, se regirán por
esta Constitución y lo que dispongan las leyes.

La ley fijará los términos en que sea obligatoria la juris-


prudencia que establezcan los Tribunales del Poder Judicial
de la Federación sobre interpretación de la Constitución,
leyes y reglamentos federales o locales y tratados interna-
cionales celebrados por el Estado Mexicano, así como los
requisitos para su interrupción y modificación.

La remuneración que perciban por sus servicios los Minis-


tros de la Suprema Corte, los Magistrados de Circuito y
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 29

los Jueces de Distrito no podrá ser disminuida durante su


encargo.

Los Ministros de la Suprema Corte de Justicia sólo podrán


ser privados de sus puestos cuando observen mala conduc-
ta, de acuerdo con el procedimiento señalado en la parte
final del artículo 111 de esta Constitución o previo el juicio
de responsabilidad.

6. REFORMAS A LOS ARTÍCULOS 192, 193


Y 193 BIS DE LA LEY DE AMPARO

Al mismo tiempo que se llevaron a cabo reformas constitu-


cionales, se hicieron modificaciones a los artículos 193 y 193
bis de la Ley de Amparo; así, por ejemplo, la reforma legal
de 1951 distinguió la obligatoriedad de la jurisprudencia del
Tribunal en Pleno y de las Salas:

ARTÍCULO 193.- La jurisprudencia que establezca la Su-


prema Corte de Justicia funcionando en Pleno sobre inter-
pretación de la Constitución y leyes federales o tratados
celebrados con las potencias extranjeras, es obligatoria
tanto para ella como para las Salas que la componen, los
Tribunales Colegiados de Circuito, Tribunales Unitarios de
Circuito, Jueces de Distrito, Tribunales de los Estados, Dis-
trito y Territorios Federales y Juntas de Conciliación y
Arbitraje.

Las ejecutorias de la Suprema Corte de Justicia funcionando


en Pleno constituyen jurisprudencia, siempre que lo resuel-
to en ellas se encuentre en cinco ejecutorias no interrumpi-
das por otra en contrario, y que hayan sido aprobadas
por lo menos por catorce Ministros.
30 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

ARTÍCULO 193 bis.- La jurisprudencia que establezcan las


Salas de la Suprema Corte de Justicia sobre interpretación
de la Constitución, leyes federales o tratados celebrados
con las potencias extranjeras, es obligatoria para las mis-
mas Salas y para los Tribunales Colegiados de Circuito,
Tribunales Unitarios de Circuito, Jueces de Distrito, Tribu-
nales de los Estados, Distrito y Territorios Federales y Juntas
de Conciliación y Arbitraje.

Las ejecutorias de las Salas de la Suprema Corte de Justicia


constituyen jurisprudencia, siempre que lo resuelto en ellas
se encuentre en cinco ejecutorias no interrumpidas por
otra en contrario, y que hayan sido aprobadas por lo menos
por cuatro Ministros.

En la reforma de 1967, que entró en vigor el 3 de enero


de 1968, los artículos arriba transcritos sufrieron otra modi-
ficación que permitió regular más ampliamente la jurispru-
dencia, distinguiendo entre la establecida por el Pleno, por
las Salas y por los Tribunales Colegiados de Circuito, así como
su obligatoriedad para los órganos inferiores siguiendo
el orden jerárquico dentro del Poder Judicial Federal, con la
novedad de incluir a los tribunales militares y administrativos
como órganos jurisdiccionales obligados a acatar esta
disposición.

ARTÍCULO 192.- La jurisprudencia que establezca la Su-


prema Corte de Justicia funcionando en Pleno sobre inter-
pretación de la Constitución, leyes y reglamentos federales
o locales y tratados internacionales celebrados por el Esta-
do Mexicano, es obligatoria tanto para ella como para las
Salas que la componen, los Tribunales Unitarios y Colegia-
dos de Circuito, Juzgados de Distrito, Tribunales Militares
y Judiciales del orden común de los Estados, Distrito y Terri-
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 31

torios Federales y Tribunales Administrativos y del Trabajo,


locales o federales.

Las ejecutorias de la Suprema Corte de Justicia funcionando


en Pleno constituyen jurisprudencia, siempre que lo re-
suelto en ellas se sustente en cinco ejecutorias no interrum-
pidas por otra en contrario y que hayan sido aprobadas
por lo menos por catorce Ministros.

ARTÍCULO 193.- La jurisprudencia que establezcan las Salas


de la Suprema Corte de Justicia sobre interpretación de la
Constitución, leyes federales o locales y tratados internacio-
nales celebrados por el Estado Mexicano, es obligatoria
para las mismas Salas y para los Tribunales Unitarios y
Colegiados de Circuito; Juzgados de Distrito; Tribunales
Militares y Judiciales del orden común de los Estados, Dis-
trito y Territorios Federales y Tribunales Administrativos y
del Trabajo, locales o federales.

Las ejecutorias de las Salas de la Suprema Corte de Justicia


constituyen jurisprudencia, siempre que lo resuelto en ellas
se sustente en cinco ejecutorias no interrumpidas por
otra en contrario y que hayan sido aprobadas por lo menos
por cuatro Ministros.

ARTÍCULO 193 bis.- La jurisprudencia que establezcan los


Tribunales Colegiados de Circuito en materia de su competen-
cia exclusiva, es obligatoria para los mismos tribunales, así
como para los Juzgados de Distrito, Tribunales Judiciales
del fuero común, Tribunales Administrativos y del Trabajo
que funcionen dentro de su jurisdicción territorial.

Las ejecutorias de los Tribunales Colegiados de Circuito


constituyen jurisprudencia, siempre que lo resuelto en ellas
se sustente en cinco ejecutorias no interrumpidas por
32 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

otra en contrario y que hayan sido aprobadas por unani-


midad de votos de los Magistrados que los integran.

Posteriormente, por decreto de 16 de enero de 1984, se


reformaron nuevamente los artículos 192 y 193 de la Ley de
Amparo, para incluir en el primero de ellos la obligatoriedad
de la jurisprudencia dictada por la Suprema Corte de Justi-
cia de la Nación, funcionando tanto en Pleno como en Salas
y, en el segundo, la obligatoriedad de la jurisprudencia de
los Tribunales Colegiados de Circuito, tanto para los órganos
del Poder Judicial de la Federación, como para los demás órga-
nos jurisdiccionales federales o estatales, de naturaleza judi-
cial, laboral o administrativa.

7. TEXTO ACTUAL DE LOS ARTÍCULOS 192 Y 193


DE LA LEY DE AMPARO

La Ley de Amparo, en su texto actual, señala:

ARTÍCULO 192.- La jurisprudencia que establezca la Supre-


ma Corte de Justicia, funcionando en Pleno o en Salas, es
obligatoria para éstas en tratándose de la que decrete el
Pleno, y además para los Tribunales Unitarios y Colegiados
de Circuito, los Juzgados de Distrito, los Tribunales Militares
y Judiciales del orden común de los Estados y del Distrito
Federal, y Tribunales Administrativos y del Trabajo, locales
o federales.

Las resoluciones constituirán jurisprudencia, siempre que


lo resuelto en ellas se sustente en cinco sentencias ejecuto-
rias ininterrumpidas por otra en contrario, que hayan sido
aprobadas por lo menos por ocho Ministros si se tratara
de jurisprudencia del Pleno, o por cuatro Ministros, en los
casos de jurisprudencia de las Salas.
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 33

También constituyen jurisprudencia las resoluciones que


diluciden las contradicciones de tesis de Salas y de Tribu-
nales Colegiados.

ARTÍCULO 193.- La jurisprudencia que establezca cada


uno de los Tribunales Colegiados de Circuito es obligatoria
para los Tribunales Unitarios, los Juzgados de Distrito, los
Tribunales Militares y Judiciales del fuero común de los Esta-
dos y del Distrito Federal, y los Tribunales Administrativos
y del Trabajo, locales o federales.

Las resoluciones de los Tribunales Colegiados de Circuito


constituyen jurisprudencia siempre que lo resuelto en ellas
se sustente en cinco sentencias no interrumpidas por otra en
contrario, y que hayan sido aprobadas por unanimidad
de votos de los Magistrados que integran cada Tribunal
Colegiado.

8. LA JURISPRUDENCIA DEL TRIBUNAL ELECTORAL


DEL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN

El artículo 186 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la


Federación concede al Tribunal Electoral competencia para:

...

IV.- Fijar jurisprudencia en los términos de los artículos 232


al 235 de esta ley.

Los artículos a que hace referencia esta fracción regulan


los requisitos que deben cumplirse para que las decisiones
de las Salas del Tribunal establezcan jurisprudencia; también
indican la forma de interrumpirla y señalan a las autoridades
para las cuales es obligatoria.
34 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

ARTÍCULO 232.- La jurisprudencia del Tribunal Electoral


será establecida en los casos y de conformidad con las
reglas siguientes:

I.- Cuando la Sala Superior, en tres sentencias no interrum-


pidas por otra en contrario, sostenga el mismo criterio de
aplicación, interpretación o integración de una norma;

II.- Cuando las Salas Regionales, en cinco sentencias no


interrumpidas por otra en contrario, sostengan el mismo
criterio de aplicación, interpretación o integración de una
norma y la Sala Superior lo ratifique, y

III.- Cuando la Sala Superior resuelva en contradicción de


criterios sostenidos entre dos o más Salas Regionales o entre
éstas y la propia Sala Superior.

En el supuesto de la fracción II, la Sala Regional respectiva


a través del área que sea competente en la materia, comu-
nicará a la Sala Superior las cinco sentencias que contengan
el criterio que se pretende sea declarado obligatorio, así
como el rubro y el texto de la tesis correspondiente, a
fin de que la Sala Superior determine si procede fijar
jurisprudencia.

En el supuesto de la fracción III, la contradicción de crite-


rios podrá ser planteada en cualquier momento por una
Sala, por un Magistrado electoral de cualquier Sala o por
las partes, y el criterio que prevalezca será obligatorio a
partir de que se haga la declaración respectiva, sin que pue-
dan modificarse los efectos de las sentencias dictadas con
anterioridad.

En todos los supuestos a que se refiere el presente artículo,


para que el criterio de jurisprudencia resulte obligatorio,
ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA JURISPRUDENCIA EN MÉXICO 35

se requerirá de la declaración formal de la Sala Superior.


Hecha la declaración, la jurisprudencia se notificará de
inmediato a las Salas Regionales, al Instituto Federal Elec-
toral y, en su caso, a las autoridades electorales locales y
las publicará en el órgano de difusión del tribunal.

ARTÍCULO 233.- La jurisprudencia del Tribunal Electoral


será obligatoria en todos los casos para las Salas y el Insti-
tuto Federal Electoral. Asimismo, lo será para las autori-
dades electorales locales, cuando se declare jurisprudencia
en asuntos relativos a derechos político-electorales de los
ciudadanos o en aquéllos en que se hayan impugnado
actos o resoluciones de estas autoridades, en los términos
previstos por la Constitución Política de los Estados Uni-
dos Mexicanos y las leyes respectivas.

ARTÍCULO 234.- La jurisprudencia del Tribunal Electoral


se interrumpirá y dejará de tener carácter obligatorio, siem-
pre y cuando haya un pronunciamiento en contrario por
mayoría de cinco votos de los miembros de la Sala Superior.
En la resolución respectiva se expresarán las razones en
que se funde el cambio de criterio, el cual constituirá juris-
prudencia cuando se den los supuestos previstos en las
fracciones I y III del artículo 232 de esta ley.

ARTÍCULO 235.- La jurisprudencia del Pleno de la Suprema


Corte de Justicia de la Nación será obligatoria para el
Tribunal Electoral, cuando se refiera a la interpretación
directa de un precepto de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, y en los casos en que resulte
exactamente aplicable.
II. CONCEPTO DE JURISPRUDENCIA

E l Tribunal en Pleno ha sostenido que la jurisprudencia es


"la obligatoria interpretación y determinación del sentido
de la ley", tal como puede corroborarse de la lectura de las
siguientes tesis:

INTERPRET
INTERPRETA ACIÓN Y JURISPRUDENCIA.—
JURISPRUDENCIA.—Interpretar la ley
es desentrañar su sentido y por ello la jurisprudencia es
una forma de interpretación judicial, la de mayor impor-
tancia, que tiene fuerza obligatoria según lo determinan
los artículos 193 y 193 bis de la Ley de Amparo reformada
en vigor, según se trate de jurisprudencia establecida por
la Suprema Corte de Justicia funcionando en Pleno o a
través de sus Salas. En síntesis: la jurisprudencia es la obli-
gatoria interpretación y determinación del sentido de la
ley, debiendo acatarse, la que se encuentra vigente en
el momento de aplicar aquella a los casos concretos, resulta
absurdo pretender que en el periodo de validez de una
cierta jurisprudencia se juzguen algunos casos con interpre-

37
38 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

taciones ya superados y modificados por ella que es la


única aplicable (Semanario Judicial de la Federación, Sexta
Época, Tomo XLIX, Segunda Parte, Primera Sala, página 58).

JURISPRUDENCIA, NA TURALEZA. —La jurisprudencia, en


NATURALEZA.
el fondo, consiste en la interpretación correcta y válida de la
ley que necesariamente se tiene que hacer al aplicar ésta
(Semanario Judicial de la Federación, Sexta Época, Tomo
XLIV, Segunda Parte, Primera Sala, página 86).
III. ÓRGANOS FACULTADOS
PARA EMITIR JURISPRUDENCIA

D e conformidad con lo señalado por las normas precedentes,


los órganos jurisdiccionales del Poder Judicial de la Fede-
ración que cuentan con atribuciones para sustentar tesis que
sienten jurisprudencia son:

1. El Tribunal en Pleno de la Suprema Corte de Justicia


de la Nación;
2. Las Salas de este Alto Tribunal;
3. Los Tribunales Colegiados de Circuito; y
4. Las Salas del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la
Federación.

39
IV. OBLIGATORIEDAD
DE LA JURISPRUDENCIA

E n el artículo 192 de la Ley de Amparo se establece que


las resoluciones de las instancias ahí señaladas constituyen
jurisprudencia, siempre que lo resuelto en ellas se sustente
en cinco sentencias no interrumpidas por otra en contrario, y
que hayan sido aprobadas por lo menos por ocho Ministros,
si se trata de jurisprudencia del Pleno, como se desprende del
artículo decimoquinto transitorio del decreto que reforma a la
Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, publicado
en el Diario Oficial de la Federación el 7 de noviembre de 1996.

También el citado artículo prevé que las resoluciones de


las Salas establecen jurisprudencia si, además de satisfacer
el requisito de la reiteración de su sentido sin interrupción
por alguna en contrario, son aprobadas por cuatro Ministros.
Por su parte, el artículo 193 de la Ley de Amparo dispone
que las resoluciones de los Tribunales Colegiados de Circuito
constituyen jurisprudencia con iguales requisitos, siempre que

41
42 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

sean aprobadas por unanimidad de votos de los Magistrados


que integren cada uno de ellos.

Otra forma de establecer jurisprudencia es a través de


las sentencias emanadas de las acciones de inconstituciona-
lidad, las controversias constitucionales y las contradicciones
de tesis.

A la acción de inconstitucionalidad, se le puede conceptua-


lizar como "El procedimiento abstracto de control que el 33%
de los integrantes de las Cámaras legislativas federales y locales
y de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, así como
los partidos políticos y el procurador general de la República
demandan ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación
para que ésta resuelva sobre la posible contradicción de una
norma general o un tratado internacional y la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos en su integridad y,
en su caso, declare la invalidez total o parcial de aquellos,
a fin de garantizar la regularidad constitucional y la certeza
del orden jurídico nacional".2

Por su parte, la controversia constitucional es el "juicio


de única instancia que, ante la Suprema Corte de Justicia de
la Nación, plantean la Federación, un Estado, el Distrito Fede-
ral o un Municipio, para demandar la reparación de un agravio
producido por una norma general o un acto que, en ejercicio
excesivo de sus atribuciones constitucionales, fue responsabi-
lidad de alguno de los órganos de gobierno citados, lo que
conculca el federalismo, transgrede el reparto de competen-

2
Poder Judicial de la Federación, Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¿Qué son las
Acciones de Inconstitucionalidad?, México, 2001, p. 22.
OBLIGATORIEDAD DE LA JURISPRUDENCIA 43

cias consagrado en la Constitución y daña la soberanía


popular".3

Otra forma o sistema de integración de jurisprudencia es


la contradicción de tesis, dirigida a resolver la discrepancia
de criterios entre órganos terminales del Poder Judicial de
la Federación, a fin de definir con certeza y seguridad jurídica,
tanto para los gobernados como para los encargados de aplicar
el derecho, los criterios de interpretación que deben sostenerse
respecto de normas generales o constitucionales.4

Sobre la obligatoriedad de las sentencias en los supuestos


arriba mencionados, se ha precisado lo siguiente:

Cabe agregar que en la tesis jurisprudencial 2/2004 se


ha asentado, que según lo establecido en el artículo 177 de
la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y los
artículos 43 y 73 de la Ley Reglamentaria, las razones con-
tenidas en los considerandos que funden los resolutivos
de las sentencias aprobadas por ocho votos, cuando me-
nos, tienen el carácter de jurisprudencia, de ahí que sean
obligatorias para las Salas de la Corte, los Tribunales de
Circuito, Juzgados de Distrito, Tribunales Militares, Agrarios
y Judiciales del orden común de los Estados y del Distrito
Federal, y administrativos y del trabajo, sean éstos federales
o locales. Por tanto, los Tribunales Colegiados de Circuito
son competentes para conocer de asuntos en los que se
haya establecido criterio obligatorio con el carácter de juris-
prudencia en controversias constitucionales y acciones de

3
Poder Judicial de la Federación, Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¿Qué son las
acciones de Inconstitucionalidad?, México, 2001, p. 24.
4
Diccionario Jurídico de Amparo, citado en el CD-ROM titulado Ley de Amparo y su
interpretación por el Poder Judicial de la Federación, Suprema Corte de Justicia de la Nación,
México, 2003.
44 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

inconstitucionalidad, de conformidad con el inciso d), frac-


ción I, del punto quinto del Acuerdo General 5/2001. 5

Con la reglamentación de las diferentes formas de integrar


jurisprudencia que se han señalado se cumple lo establecido
por el artículo 94 constitucional:

La ley fijará los términos en que sea obligatoria la juris-


prudencia que establezcan los tribunales del Poder Judicial
de la Federación sobre interpretación de la Constitución,
leyes y reglamentos federales o locales y tratados interna-
cionales celebrados por el Estado Mexicano, así como los
requisitos para su interrupción y modificación.

5
¿Qué son las Acciones ...?, op. cit. p. 46.
V. LA DOCTRINA Y LA JURISPRUDENCIA6

L a jurisprudencia en su sentido etimológico, quiere decir:


"sabiduría del derecho"; esto puede entenderse como el
conocimiento pleno del derecho —dominio de sus conceptos
y de sus técnicas—, utilizado de manera prudente para resol-
ver en forma eficaz una cuestión o problema determinado.

En el pensamiento de diversos pueblos de la antigüedad


encontramos nociones de justicia y reflexiones acerca de pro-
blemas jurídicos, es en Roma donde se considera que tiene
su origen la actual ciencia jurídica y desde entonces se desa-
rrolló la institución de la jurisprudencia, que pasó por momentos
de importancia y en los que adquirió diferentes características
hasta llegar a la edad moderna.

6
Para la redacción de este capítulo, se resumió la información contenida en el libro:
La Jurisprudencia en México, publicado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el
año 2002.

45
46 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

A partir del siglo XVIII y hasta nuestros días, la noción de


jurisprudencia fue sustancialmente influida y determinada por
la codificación, la división de poderes y el constitucionalis-
mo; los dos primeros son legado de la Revolución Francesa, y
el último de la Magna Carta inglesa de 1215 y la Constitución
de los Estados Unidos de América de 1787.

La forma de gobierno constitucional, progresivamente


adoptada en el mundo, viene a confirmar la importancia de
la jurisprudencia, al reconocerla como el instrumento idóneo
para unificar los criterios jurídicos de un país, posición asu-
mida por las diferentes naciones de tradición jurídica romano-
germánica.

Es así que pueden identificarse diversas etapas en la


evolución de la noción de jurisprudencia: de phrónesis como
virtud; de iurisprudentia, entendida como sabiduría pruden-
cial, a su acepción de ciencia del derecho; posteriormente
comprendida como sentencias que establecen la manera de
juzgar de los tribunales, para llegar a su actual noción, como
interpretación correcta de la ley establecida por un órga-
no de carácter constitucional.

Dependiendo de las diferentes corrientes iusfilosóficas que


en materia de jurisprudencia han existido, se le percibe como:
interpretación de la ley, aplicación de la ley, sentencias o
fallos, enseñanza, costumbre judicial y norma; por ello los
doctrinarios le han otorgado diferentes contenidos a la natu-
raleza jurídica de la jurisprudencia, entre ellos los siguientes:

• Como fuente de derecho. El trabajo jurisprudencial que


realizan los tribunales federales, así como otros tribuna-
LA DOCTRINA Y LA JURISPRUDENCIA 47

les no pertenecientes al Poder Judicial de la Federación


es creación de derecho; pero a diferencia de la que lleva
a cabo el Poder Legislativo, aquélla no procede de simples
consideraciones de oportunidad, es decir, no es creación
libre, sino que se encuentra vinculada a los casos concre-
tos, donde los tribunales establecen la regla de solución
para cada uno.

• Como norma jurídica. En la doctrina mexicana se sostie-


ne que la jurisprudencia, aunque formalmente no es una
norma jurídica, materialmente sí lo es, ya que reproduce,
dentro de la esfera y los límites que le son propios, las
características de obligatoriedad, generalidad y abstrac-
ción, aunque con diferentes alcances.

• Como resultado de un acto jurisdiccional colegiado.


Porque al emitirla intervienen varias voluntades que inte-
gran el consenso del órgano jurisdiccional.

• Como interpretación del derecho positivo. Porque al inter-


pretar las disposiciones legales, se desentraña el sentido
verdadero de la legislación aplicable, con motivo de los
casos concretos que se someten a consideración del juz-
gador, quien se auxilia tanto de la ciencia jurídica como
de las demás disciplinas científicas o tecnológicas que
tengan relación con las normas que se interpretan.

• Como complemento del ordenamiento jurídico. Ya que


la jurisprudencia completa el ordenamiento jurídico a tra-
vés de la interpretación e integración que lleva a cabo el
órgano jurisdiccional, al momento de aplicar una regla
de derecho a una situación concreta.
48 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

• Como unificación de la interpretación del derecho. Por-


que, independientemente de la forma en que se manifieste
la interpretación por el órgano jurisdiccional correspon-
diente, sirve para unificar los contenidos del derecho, toda
vez que evita que exista arbitrariedad por parte de las
autoridades jurisdiccionales obligadas a seguirlos.

• Como actualización de la legislación vigente. Es innega-


ble que la jurisprudencia actualiza la ley, ya sea cuando
colma lagunas legislativas, o bien cuando precisa sus
alcances, con lo que finalmente logra el progreso del dere-
cho escrito.

• Como instrumento orientador en el proceso de enseñan-


za-aprendizaje. En este proceso la jurisprudencia juega
un papel análogo al que desempeña la doctrina, porque
muestra a las normas jurídicas en su aplicación.
VI. MARCO JURÍDICO EN MÉXICO
DE LA JURISPRUDENCIA
COMO FUENTE DEL DERECHO

N uestro derecho, a pesar de considerar a la ley como su


principal fuente, admite complementarla cuando es
insuficiente.

Lo anterior puede observarse con toda claridad a través


del artículo 18 del Código Civil Federal que establece:
"El silencio, obscuridad o insuficiencia de la ley no autori-
zan a los Jueces o tribunales para dejar de resolver una
controversia."

Nuestra Constitución, en su artículo 14, advierte que en


materia penal la única fuente del derecho es la ley, mientras
que en materia civil el juzgador puede hacer uso de la inter-
pretación jurídica de ésta y de los principios generales del
derecho.

49
50 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

De la revisión de otros ordenamientos, como el Código


de Comercio o la Ley Federal del Trabajo, se puede concluir
que para el derecho positivo mexicano son fuentes del dere-
cho, entre otras: la ley, su interpretación, los principios genera-
les del derecho, los usos y la costumbre.

Ahora bien, en cuanto a la jurisprudencia como fuente


del derecho, ésta se encuentra expresamente reconocida por
el artículo 94, párrafo octavo de la Constitución, que a la
letra dice:

La ley fijará los términos en que sea obligatoria la juris-


prudencia que establezcan los tribunales del Poder Judicial
de la Federación sobre interpretación de la Constitución,
leyes y reglamentos federales o locales y tratados interna-
cionales celebrados por el Estado Mexicano, así como los
requisitos para su interrupción o modificación.

En términos generales, se puede decir que la jurispruden-


cia del Poder Judicial de la Federación es la interpretación
que realizan la Suprema Corte de Justicia en Pleno o Salas,
los Tribunales Colegiados de Circuito y el Tribunal Electoral,
respecto de las normas jurídicas enumeradas en el artículo
94 de la Constitución, a través de sus resoluciones.

A pesar de que ninguno de los ordenamientos de nuestro


sistema jurídico dedica un apartado específico a la regulación
de las fuentes del derecho en general, y tampoco manifiesta
expresamente esta característica de la jurisprudencia en par-
ticular, es fácilmente deducible, del análisis de sus normas, que
la jurisprudencia es fuente del derecho al lado de los princi-
pios generales del derecho, la costumbre y los usos, con-
clusión que es compartida por la doctrina mexicana.
MARCO JURÍDICO EN MÉXICO DE LA JURISPRUDENCIA COMO FUENTE DEL DERECHO 51

La variación que existe entre los doctrinarios es en cuanto


a su clasificación dentro de las fuentes del derecho, ya que
hay quienes la identifican como fuente formal, mientras otros
la consideran fuente material; o bien, aquellos que estiman
que es fuente directa del derecho, en tanto que otros argumen-
tan que se trata de una fuente indirecta.
VII. DIFERENCIAS ENTRE
JURISPRUDENCIA Y LEY

P ara estar en posibilidad de determinar si la jurisprudencia


puede ser equiparable a la ley, se considera importante
hacer algunas reflexiones respecto de esta última.

El vocablo ley deriva de la voz latina lex, la cual a su vez,


según la opinión más generalizada, tiene su origen en la
palabra legere, por referencia al precepto o regla que se
lee. En este sentido, la lex representaba para los romanos el
ius scriptum o derecho escrito, en oposición al derecho
consuetudinario o no escrito.

Desde el punto de vista jurídico se habla de ley en un


doble sentido: uno amplio, para designar a toda norma jurí-
dica instituida en determinado tiempo y lugar; y otro estricto,
para denominar a las normas jurídicas elaboradas por
órganos estatales con potestad legislativa.

53
54 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

De conformidad con el artículo 40 constitucional, hay en


México leyes federales y leyes locales: las primeras para toda
la República y las segundas para cada uno de los Estados
federados, esto bajo el concepto de que para la formulación
de las últimas, la respectiva Constitución particular de cada
entidad federativa fija el proceso legislativo correspondiente;
y para las leyes federales y del Distrito Federal lo hace la
Constitución Federal en su artículo 73, fracción VI.

Las características que los tratadistas atribuyen a la ley


son las siguientes:

1. Generalidad. Es una característica esencial de la norma


jurídica, equivale a su aplicabilidad a cuantas personas
se encuentren en un supuesto determinado. La ley no mira
al individuo particular sino a la comunidad en general.
No se da para individuos determinados. El objeto de la
ley, como norma de conducta humana, es regirla pero
no considerándola como una actividad aislada sino en
conexión con otras, para señalar de modo general la
esfera de lo lícito y de lo ilícito.

2. Obligatoriedad. Implica que la ley necesariamente


debe cumplirse. La ley, una vez publicada, se pone del
conocimiento general y obliga a todos. El incumplimiento
de la ley es dañoso a la normalidad del orden jurídico y
encuentra el correctivo adecuado en la realización del
derecho por vía del proceso. El carácter obligatorio de la
ley deriva del interés social que existe en su acatamiento.

3. Impersonalidad. La ley además de referirse a un núme-


ro indeterminado e indeterminable de casos, también va
DIFERENCIAS ENTRE JURISPRUDENCIA Y LEY 55

dirigida a una pluralidad de personas indeterminadas e


indeterminables.

Como corolario de todo lo anterior, se pueden establecer


las siguientes diferencias entre jurisprudencia y ley:

a) La jurisprudencia que emite el Poder Judicial de la


Federación se encuentra limitada por la propia ley, y
su integración debe ser coherente con la misma.

b) La jurisprudencia no es una norma general, toda vez


que en cuanto a su contenido, forma de creación y
aplicación se encuentra limitada por la ley, y sólo la
podrán aplicar los órganos jurisdiccionales a casos
concretos y de manera excepcional.

c) La jurisprudencia es obra de los órganos jurisdic-


cionales y la ley de los órganos legislativos, según
corresponda.

d) La jurisprudencia no es una norma general, ya que


sólo se aplica a los casos particulares mediante la
vía del proceso.

e) La obligatoriedad de la jurisprudencia es limitada,


toda vez que sólo deben acatarla los órganos jurisdic-
cionales a quienes corresponde aplicarla.

f) La jurisprudencia deriva de la interpretación que los


tribunales hacen de la ley.

g) La ley es estática, requiere para su modificación o


derogación de un proceso legislativo. La jurispruden-
56 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

cia es dinámica, ya que puede cambiar la interpre-


tación respecto de una misma ley con determinados
requisitos, pero sin las formalidades que la propia
ley requiere.

h) La jurisprudencia encuentra sustento en decisiones


jurisdiccionales que han sido dictadas en casos espe-
cíficos anteriores; la ley no, ya que es única y rige
para el futuro.

i) La interpretación e integración que realiza el Juez tiene


su apoyo en la propia ley (artículo 14 constitucional,
último párrafo).

j) La creación de normas individuales para colmar las


lagunas de la ley mediante principios generales de
derecho, es un caso de excepción previsto en el refe-
rido artículo 14 constitucional y, por tanto, la labor del
órgano jurisdiccional se encuentra constreñida, en la
mayoría de los casos, al derecho positivo.

k) Las leyes disponen para el porvenir; son irretroactivas.

En efecto, la jurisprudencia no es ley en sentido formal,


ya que no nace del órgano legislativo.

La integración de la ley se encuentra limitada por la norma


constitucional, por tanto, la jurisprudencia en cuanto a su con-
tenido, forma de creación y aplicación, también se encuentra
restringida por la propia ley.
DIFERENCIAS ENTRE JURISPRUDENCIA Y LEY 57

La jurisprudencia no constituye legislación, sigue a la legisla-


ción, fija en la mayoría de los casos el contenido de una ley
y, en casos excepcionales, la integra; y esta integración tiene
que ser conforme a la voluntad del legislador.
VIII. EL PRINCIPIO DE RELATIVIDAD
DE LAS SENTENCIAS DE AMPARO
O FÓRMULA OTERO

T oda jurisprudencia está en íntima relación con el principio


de relatividad de las sentencias, llamado también "fórmula
Otero".

El artículo 107, fracción II constitucional, señala:

ARTÍCULO 107. Todas las controversias de que habla el


artículo 103 se sujetarán a los procedimientos y formas
del orden jurídico que determine la ley, de acuerdo a las
bases siguientes:

...

II.- La sentencia será siempre tal, que sólo se ocupe de


individuos particulares, limitándose a ampararlos y prote-
gerlos en el caso especial sobre el que verse la queja, sin
hacer una declaración general respecto de la ley o acto
que la motivare.

59
60 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

En el juicio de amparo deberá suplirse la deficiencia de la


queja de acuerdo con lo que disponga la Ley Reglamentaria
de los Artículos 103 y 107 de esta Constitución.

Cuando se reclamen actos que tengan o puedan tener co-


mo consecuencia privar de la propiedad o de la posesión
y disfrute de sus tierras, aguas, pastos y montes a los ejidos
o a los núcleos de población que de hecho o por derecho
guarden el estado comunal, o a los ejidatarios o comune-
ros, deberán recabarse de oficio todas aquellas pruebas
que puedan beneficiar a las entidades o individuos mencio-
nados y acordarse las diligencias que se estimen necesarias
para precisar sus derechos agrarios, así como la naturaleza
y efectos de los actos reclamados.

En los juicios a que se refiere el párrafo anterior no pro-


cederán, en perjuicio de los núcleos ejidales o comunales,
o de los ejidatarios o comuneros, el sobreseimiento por
inactividad procesal ni la caducidad de la instancia, pero
uno y otra sí podrán decretarse en su beneficio. Cuando
se reclamen actos que afecten los derechos colectivos del
núcleo tampoco procederán el desistimiento ni el consen-
timiento expreso de los propios actos, salvo que el primero
sea acordado por la Asamblea General o el segundo ema-
ne de ésta...

Por su parte, el artículo 76 de la Ley de Amparo dispone:

ARTÍCULO 76. Las sentencias que se pronuncien en los


juicios de amparo sólo se ocuparán de los individuos par-
ticulares o de las personas morales, privadas u oficiales
que lo hubiesen solicitado, limitándose a ampararlos y pro-
tegerlos, si procediere, en el caso especial sobre el que
verse la demanda, sin hacer una declaración general res-
pecto de la ley o acto que la motivare.
EL PRINCIPIO DE RELATIVIDAD DE LAS SENTENCIAS DE AMPARO O FÓRMULA OTERO 61

El principio que se examina constriñe el efecto de la sen-


tencia que conceda el amparo solamente en beneficio del
quejoso, de ahí que quien no haya sido expresamente am-
parado no puede beneficiarse con la protección de la justicia
federal.

De ello deriva otra diferencia de la jurisprudencia con


respecto a la ley; la jurisprudencia solamente beneficiará a
aquella persona que la invoque a su favor y dentro de un
proceso jurisdiccional, pero nunca fuera de él, dado el prin-
cipio de relatividad analizado.
IX. LA GARANTÍA DE LEGALIDAD

E sta garantía, consagrada en el artículo 16 de nuestra


Constitución Política Federal, establece como uno de los
elementos esenciales del régimen jurídico de un Estado de
derecho, el que todo acto de molestia dirigido a los gober-
nados esté fundado y motivado.

Así, toda ley, todo procedimiento o resolución jurisdic-


cional o administrativa, como todo acto de autoridad, debe
ser expresión del derecho y ser elaborado, emitido o ejecutado
por el órgano o los órganos competentes, dentro de la esfera
de sus respectivas atribuciones.

La exigencia de fundamentar dichas competencias en la


ley, tiene como propósito que el gobernado tenga la posibili-
dad de atacar actos o hechos que no fueron correctos, o
bien que no fueron acordes con la motivación citada; en otras
palabras, tiende a evitar la emisión de actos arbitrarios.

63
64 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

La garantía de legalidad que contempla el artículo 16 cons-


titucional establece un principio general que tiene aplicación
en materia civil, penal, administrativa y laboral, abarcando
tanto a los actos administrativos como a los jurisdiccionales.

1. FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN
DE LOS ACTOS DE AUTORIDAD

El imperativo constitucional de fundar y motivar todo acto de


autoridad se cumple con los siguientes requisitos:

a) La fundamentación, al expresar con precisión el precep-


to legal aplicable al caso.

b) La motivación, al señalar con precisión las circunstan-


cias especiales, razones particulares o causas inmediatas
que se hayan tenido en consideración para la emisión
del acto.

c) La relación entre la fundamentación y la motivación,


con la consonancia entre los motivos aducidos y las nor-
mas aplicables.

2. LA GARANTÍA DE LEGALIDAD EN EL ACTO


JURISDICCIONAL Y EN EL ACTO ADMINISTRATIVO

La naturaleza jurídica de los actos administrativos y de los


actos jurisdiccionales es diversa, por lo que el cumplimiento
de la garantía de legalidad se verifica de manera distinta en
cada uno de ellos.

En los actos administrativos se afectan de manera uni-


lateral los intereses de un gobernado, por lo que al emitirlos
LA GARANTÍA DE LEGALIDAD 65

debe cumplirse una formalidad mayor; esto es, invocar de


manera precisa los fundamentos legales: numeral, fracción,
inciso y hasta subinciso, a efecto de que el gobernado esté
en posibilidad de conocer el sustento jurídico del acto de
molestia.

En la mayoría de los casos, tratándose de actos adminis-


trativos, no son las partes las que les dan origen, quienes
invocan el derecho, sino la propia autoridad administrativa
la que emite actos o resoluciones que se dirigen a los gober-
nados. Este hecho hace que la falta de cita de los preceptos
legales aplicados genere un estado de incertidumbre en el
gobernado, que lo puede afectar de tal modo que le impida
producir su defensa en forma oportuna, adecuada y eficaz,
al no saber con precisión cuál fue la ley aplicada y los pre-
ceptos concretos que sirvieron de sustento a la autoridad para
emitir sus actos. Eso lo limita para hacer valer, dentro de los
plazos establecidos, los recursos o medios de defensa necesa-
rios para impugnarlos, así como para expresar los razo-
namientos sobre la inaplicabilidad o falta de actualización de
la hipótesis que se presentan respecto de la norma que debió
ser aplicada. Esto significa que para que los particulares puedan
defenderse y aportar pruebas contra el acto de autoridad,
deben dársele a conocer expresamente los motivos y funda-
mentos legales que lo sustentan; de ahí que se justifique la
exigencia de que en aquéllos se cite expresamente la normati-
vidad que se aplica.

En los actos jurisdiccionales, en cambio, hay una litis, un


debate, por lo que el fundamento y el motivo del acto juris-
diccional radican en el análisis exhaustivo de los puntos que
integran la litis.
66 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

La fundamentación de una resolución jurisdiccional se


encuentra en el análisis exhaustivo de los puntos que integran
la litis, es decir, en el estudio de las acciones y excepciones
del debate, lo cual no requiere necesariamente de la forma-
lidad que debe prevalecer en los actos administrativos.

Este tipo de resoluciones presuponen el debido proceso


legal en que se plantea un conflicto o litis entre las partes,
en donde el actor establece sus pretensiones apoyándose en un
derecho y el demandado las objeta mediante defensas y
excepciones. Al juzgador le corresponde analizar esas cuestio-
nes jurídicas y resolver si se ha probado la acción, si ésta no
existe o bien si se han demostrado las excepciones.

Por tanto, tratándose de resoluciones jurisdiccionales, la


garantía de legalidad tiene como objeto que el juzgador no
las dicte en forma arbitraria sino ajustadas al ordenamiento
legal, a efecto de que el gobernado pueda establecer si se
respetaron de manera cabal las normas que dicho juzgador
consideró para resolver el debate. Sin embargo, aquí no se
requiere necesariamente de la cita del precepto, pues dentro
del examen exhaustivo de la litis se dan razonamientos que
involucran propiamente aquellas disposiciones en que se funda
la resolución, es decir, se expresa la aplicación de la norma
aun sin citarla.7

De todo lo anterior es dable concluir que:

La garantía de legalidad se encuentra prevista en el artícu-


lo 16 constitucional, y consiste en la obligación que tiene la

7
Ver la tesis número P. CXVI/2000, consultable en la página 143 del Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, Tomo XII, agosto de 2000.
LA GARANTÍA DE LEGALIDAD 67

autoridad de fundar y motivar un acto de molestia, citando


los preceptos jurídícos y relacionarlos con los hechos concre-
tos que le permiten a la autoridad expedir el acto de molestia
hacia un gobernado.

Esta garantía se cumple de manera diversa, si se trata de


un acto administrativo o de un acto jurisdiccional.

En el acto administrativo se exige citar los fundamentos


jurídicos con mayor rigor, es decir, invocar el numeral, frac-
ción, inciso y subinciso para que el gobernado esté en posibi-
lidad de conocerlo y de defenderse.

En cambio, en el acto jurisdiccional no se requiere necesa-


riamente de la cita del precepto, pues dentro de la litis se dan
razonamientos que lo expresan aun sin citarlo.

Los capítulos precedentes han sido de utilidad para com-


prender el significativo papel que desempeña la jurisprudencia
en nuestro sistema jurídico, pero pueden suscitarse dudas en
la interpretación de la propia jurisprudencia, que conducen a la
necesidad de analizar con detenimiento si la institución es
aplicable en ciertos supuestos. Asimismo, las explicaciones
vertidas en las páginas anteriores coadyuvan a comprender
cabalmente los casos que se comentan a continuación y que
concluyen con un estudio realizado por el Instituto de Investi-
gaciones Jurídicas de la UNAM.
X. CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001
1. ANTECEDENTES

P or oficio número 8920/2001, el secretario de Acuerdos


del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa
del Sexto Circuito, en cumplimiento de una ejecutoria de ese
tribunal, remitió a la Suprema Corte de Justicia copia certifi-
cada de la resolución dictada en el juicio de amparo directo
304/2001, para denunciar la contradicción de tesis sostenida
con el criterio del Primer Tribunal Colegiado del Décimo Cuar-
to Circuito.

El Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación


ordenó solicitar al presidente del Primer Tribunal Colegiado
del Décimo Cuarto Circuito, el envío de la ejecutoria cuya posi-
ble contradicción se denunciaba, y después de los trámites
previstos, remitió el asunto a la Segunda Sala, donde fue
radicado.

69
70 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

2. EXISTENCIA DE LA CONTRADICCIÓN DE TESIS

De las tesis sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado


del Décimo Cuarto Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado en
Materia Administrativa del Sexto Circuito, la Segunda Sala
se avocó, en primer lugar, a determinar la existencia o no de
dicha contradicción denunciada.

El Alto Tribunal coligió que sí existía contradicción, ya que


los tribunales contendientes, en las consideraciones de sus
ejecutorias, analizaron la misma cuestión jurídica relativa
a la actuación de las autoridades administrativas, al fundar y
motivar sus actos de acatar o no la jurisprudencia, aunque
uno de los criterios proviniera de una revisión fiscal que resol-
vió la legalidad de un juicio de nulidad, y el otro procediera
de una sentencia de amparo directo, que determinó la consti-
tucionalidad del acto reclamado, consistente en una sentencia
del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, toda
vez que en ambas resoluciones el tema de análisis y motivo
del criterio contradictorio se refiere a la obligación de las auto-
ridades administrativas de acatar o no la jurisprudencia, cuan-
do cumplen con el imperativo legal de fundar y motivar la
emisión de sus actos de autoridad.

Por otra parte, la Segunda Sala argumentó que el pro-


cedimiento de contradicción de tesis sí era aplicable entre un
criterio sostenido en una ejecutoria de amparo y en una re-
solución de un recurso de revisión fiscal si, como acontecía
en este caso, se tomaba en cuenta la íntima conexión que se
daba en los temas jurídicos analizados, tanto en el recurso
de revisión fiscal como en el juicio de garantías.
CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001 71

La Segunda Sala también consideró que existe contradic-


ción de tesis, aun cuando uno de los criterios divergentes conste
solamente en la ejecutoria y al respecto no se haya elaborado
la correspondiente tesis. La contradicción de tesis es un sis-
tema de integración de jurisprudencia, en el cual por tesis se
entiende el criterio jurídico sustentado por un órgano juris-
diccional al examinar un punto concreto de derecho, cuya
hipótesis, con características de generalidad y abstrac-
ción, puede actualizarse en otros asuntos. Ese criterio, en los
términos de lo establecido en el artículo 195 de la Ley de
Amparo, debe redactarse de manera sintética, controlarse y
difundirse, formalidad que de no cumplirse, no le priva del
carácter de tesis. Esa investidura la adquiere por el solo hecho
de reunir los requisitos inicialmente enunciados de genera-
lidad y abstracción. Por consiguiente, puede afirmarse que
no existe tesis sin ejecutoria, pero que ya existiendo ésta, hay
tesis a pesar de que no se haya redactado en la forma esta-
blecida ni publicado y, en tales condiciones, es susceptible
de formar parte de la contradicción que establecen los pre-
ceptos citados.

Con los anteriores razonamientos, la Segunda Sala con-


cluyó que en el caso analizado sí existía contradicción de tesis,
ya que los tribunales contendientes, en las consideraciones
de sus ejecutorias, analizaron la misma cuestión jurídica y
adoptaron criterios jurídicos discrepantes, provenientes del
examen de los mismos elementos, es decir, de la interpretación
de los artículos 16, primer párrafo, y 94, octavo párrafo, de
la Constitución Federal, con relación a los numerales 192 y
193 de la Ley de Amparo.
72 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

3. TESIS DEL PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO


DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO

El Primer Tribunal Colegiado del Décimo Cuarto Circuito, al


resolver la revisión fiscal 27/98, promovida por el administra-
dor local jurídico de ingresos de Mérida, en sesión de 1o. de
octubre de 1998, por unanimidad de votos, sostuvo la tesis
número XIV.1o.8 K que aparece publicada en la página 1061
del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo
VIII, diciembre de 1998, que a la letra dice:

JURISPRUDENCIA. ES OBLIGA OBLIGAT TORIA PPARA


ARA LAS A UT
AUT ORI-
UTORI-
DADES ADMINISTRA
ADMINISTRATIV TIV AS
TIVAS EN A CA
ACA TAMIENT
CATAMIENTO O AL PRIN-
CIPIO DE LEGALID
LEGALIDAD AD QUE DIMANA DEL AR TÍCUL
ARTÍCUL
TÍCULOO 16
CONSTITUCIONAL
CONSTITUCIONAL.— .—
.—Si bien los artículos 192 y 193 de
la Ley de Amparo que determinan la obligatoriedad de la
jurisprudencia que establezca la Suprema Corte de Justicia
funcionando en Pleno o en Salas y cada uno de los Tribu-
nales Colegiados de Circuito, se refieren de manera gené-
rica a órganos jurisdiccionales sin hacer mención a las
autoridades administrativas, éstas también quedan obli-
gadas a observarla y aplicarla, lo cual se deduce del enlace
armónico con que se debe entender el texto del artículo
16, primer párrafo, de la Constitución Federal y el séptimo
párrafo del artículo 94 de la misma Codificación Suprema;
ello porque, por un lado, la jurisprudencia no es otra cosa
sino la interpretación reiterada y obligatoria de la ley, es
decir, se trata de la norma misma definida en sus alcan-
ces a través de un procedimiento que desentraña su razón
y finalidad; y por el otro, que de conformidad con el princi-
pio de legalidad que consagra la primera de las dispo-
siciones constitucionales citadas, las autoridades están
obligadas a fundar y motivar en mandamiento escrito todo
acto de molestia, o sea que deberán expresar con precisión
CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001 73

el precepto legal aplicable al caso, así como las circunstan-


cias especiales, razones particulares o causas inmediatas
que se hayan tenido en consideración para la emisión del
mismo. Por tanto, conjugando ambos enunciados, obvio
es que para cumplir cabalmente con esta obligación consti-
tucional, toda autoridad deberá no solamente aplicar la
ley al caso concreto, sino hacerlo del modo que ésta ha
sido interpretada con fuerza obligatoria por los órganos
constitucional y legalmente facultados para ello. En conclu-
sión, todas las autoridades, incluyendo las administrativas,
para cumplir cabalmente con el principio de legalidad ema-
nado del artículo 16 constitucional, han de regir sus actos
con base en la norma, observando necesariamente el sen-
tido que en la interpretación de la misma ha sido fijado
por la jurisprudencia.

La tesis anterior deriva de las siguientes consideraciones:

a) La autoridad administrativa se encuentra obligada a


acatar la jurisprudencia porque a pesar de que los artículos
192 y 193 de la Ley de Amparo se refieren, en lo general, a
tribunales y no a las autoridades que conforman la admi-
nistración pública, éstas deben quedar incluidas, conclusión
que se alcanza a través del enlace armónico con que deben
entenderse los artículos 16, primer párrafo, y 94, séptimo
párrafo de la Constitución Federal.

b) La jurisprudencia es la interpretación reiterada y obliga-


toria de la ley, es decir, la norma misma definida por sus
alcances a través de un procedimiento que busca desentrañar
su sentido y finalidad.

c) De conformidad con el artículo 16, primer párrafo de


la Norma Fundamental, las autoridades están obligadas a
74 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

fundar y motivar todo acto de molestia y para cumplir cabal-


mente con esa obligación constitucional, deberán aplicar la
ley tal cual ha sido interpretada por los órganos facultados
para ello, por tanto, la autoridad administrativa debe acatar
la jurisprudencia obligatoria por mandamiento constitucional.

4. CRITERIO DEL TERCER TRIBUNAL COLEGIADO


EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL SEXTO CIRCUITO

El Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del


Sexto Circuito, al fallar el amparo directo 304/2001, en sesión
de 25 de octubre de 2001, por mayoría de votos, sostuvo en
la parte conducente lo siguiente:

a) El párrafo octavo del artículo 94 de la Constitución


Federal cuando establece que: "La ley fijará los términos en
que sea obligatoria la jurisprudencia", se refiere a la ley ordi-
naria que, en este caso es la Ley de Amparo y no la propia ley
constitucional; por tanto, no puede sostenerse la obligatorie-
dad de las autoridades administrativas de fundar sus actos
en la jurisprudencia, con base en una interpretación armónica
de lo que dicen los numerales 16, primer párrafo y 94, octavo
párrafo del ordenamiento constitucional.

b) La obligación que tienen las autoridades administrativas


de fundar y motivar sus actos, consiste en citar de manera espe-
cífica la ley exacta aplicable al caso, así como en expresar
las circunstancias especiales, razones particulares o causas
inmediatas que se hayan tenido en consideración para la emi-
sión del acto, y no en citar también la jurisprudencia respectiva.

c) La garantía de legalidad no llega al extremo de exigir


que las autoridades administrativas, al actuar, deban también
CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001 75

apoyarse en la jurisprudencia emitida por los órganos compe-


tentes del Poder Judicial de la Federación, dado que no existe
disposición legal que así lo establezca y, por el contrario, los
preceptos 192 y 193 de la Ley de Amparo sí establecen con
precisión a quiénes obliga la jurisprudencia, sin comprender
a tales autoridades, por lo que sostener lo contrario implica
ir más allá de lo establecido en la ley.

d) La jurisprudencia tiene notables diferencias con la ley


y no puede ser equiparable a ésta, por ello, carece de sustento
legal que los actos de las autoridades administrativas sean
violatorios del artículo 16 constitucional por no apoyarse en
la jurisprudencia que sobre el caso exista.

5. PUNTO DE CONTRADICCIÓN

El punto de contradicción estriba en determinar si la garantía


de legalidad prevista en el primer párrafo del artículo 16 cons-
titucional, que obliga a las autoridades administrativas a
fundar y motivar sus actos, interpretado en relación con el
diverso párrafo octavo del numeral 94 del citado ordenamien-
to, constriñe a aquéllas a acatar la jurisprudencia, a pesar
de que los artículos 192 y 193 de la Ley de Amparo sólo con-
templan a los órganos jurisdiccionales y no a éstas.

6. CRITERIO QUE DEBE PREVALECER

La Segunda Sala determinó que, como lo sostuvo el Tercer Tri-


bunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Circuito,
en el amparo directo 304/2001, no puede sostenerse la obliga-
ción de las autoridades administrativas de fundar sus actos en
76 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

la jurisprudencia, con base en una interpretación armónica de


los numerales 16, primer párrafo, y 94, octavo párrafo del
ordenamiento constitucional, en razón de que la obligación
de las autoridades administrativas, de fundar y motivar sus
actos, consiste en citar de manera específica la ley exactamente
aplicable al caso, así como en expresar las circunstancias
especiales, razones particulares o causas inmediatas que se
hayan tenido en consideración y la adecuación entre los moti-
vos aducidos y las normas aplicables; y no en citar también
la jurisprudencia respectiva, ya que la garantía de legalidad
no llega al extremo de exigir que dichas autoridades, al actuar,
deban también apoyarse en esa fuente del derecho emitida
por los órganos competentes del Poder Judicial de la Fede-
ración. Esto es, la obligación de fundar los actos en la ley, no
implica hacerlo en el mismo sentido en que ésta fue inter-
pretada por los órganos competentes, dado que la ley y la
jurisprudencia tienen grandes diferencias, desde la fuente del
derecho que las produce hasta la dimensión de sus efectos,
mientras la primera es una norma general, la segunda sólo
se aplica a casos particulares, por lo que carece de sustento
legal que los actos administrativos que no se apoyen en la
jurisprudencia aplicable al caso incumplan con el principio
de legalidad.

Conforme a lo anterior las autoridades administrativas,


en aquellos casos en que sus actos sean impugnados a través
de las vías legales conducentes y anulados por las resolucio-
nes de los órganos jurisdiccionales que hayan aplicado algún
criterio jurisprudencial, deben cumplimentar la nueva resolu-
ción conforme a los lineamientos dictados por el órgano reso-
lutor, en acatamiento del Estado de derecho que rige en nuestro
país y cuyo incumplimiento trae aparejadas las sanciones que
CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001 77

establecen las leyes de la materia, lo que implica que en este


supuesto, propiamente no están acatando la jurisprudencia
sino la sentencia en que se aplicó.

En atención a lo expuesto, la Segunda Sala determinó


que el criterio que debe regir con carácter jurisprudencial
el tema controvertido que se dilucida, en términos de lo
dispuesto en el artículo 195 de la Ley de Amparo, es la tesis
2a./J. 38/2002 publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Tomo XV, mayo de 2002, página
175, establecida bajo el siguiente rubro y texto:

JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALID


INCONSTITUCIONALIDAD AD DE
LEYES.. LAS A
LEYES UT
AUT ORID
UTORID ADES ADMINISTRA
ORIDADES TIV
ADMINISTRATIV AS NO ESTÁN
TIVAS
OBLIGAD
OBLIGADAS AS A APLICARLA AL CUMPLIR CON LA GARANTÍA
DE FUND
FUNDARAR Y MO TIV
MOTIV AR SUS A
TIVAR CT
ACT OS
CTOS .—
OS.—
.—La obligación de
las autoridades administrativas de fundar y motivar sus
actos consiste en citar de manera específica la ley exacta-
mente aplicable al caso, así como en expresar las circunstan-
cias especiales, razones particulares o causas inmediatas
que se hayan tenido en consideración para la emisión del
acto y la adecuación entre los motivos aducidos y las nor-
mas aplicables y no, en citar también la jurisprudencia
respectiva, esto es, la obligación de fundar los actos en la
ley, no implica hacerlo en la forma en que haya sido inter-
pretada por los órganos competentes del Poder Judicial
de la Federación, dado que la jurisprudencia tiene notables
diferencias con la ley y no puede ser equiparable a ésta,
principalmente porque la jurisprudencia es obra de los órga-
nos jurisdiccionales y la ley del órgano legislativo, es
decir, la jurisprudencia no es una norma general y sólo
se aplica a casos particulares, conforme al principio de rela-
tividad de las sentencias que rige al juicio de garantías,
por lo que resulta erróneo sostener que los actos de las
78 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

autoridades administrativas sean violatorios del artículo


16 constitucional por no apoyarse en la jurisprudencia que
declare la inconstitucionalidad de una ley, habida cuenta
que por remisión del octavo párrafo del artículo 94 de la
Constitución Federal, los preceptos 192 y 193 de la Ley
de Amparo, establecen con precisión que la jurisprudencia
obliga solamente a los órganos jurisdiccionales.
XI. CONTRADICCIÓN DE TESIS
27/2004-SS

E l 19 de enero de 2004, el representante de la oficina del


administrador de lo Contencioso de Grandes Contribu-
yentes, encargada de la defensa de la Secretaría de Hacienda
y Crédito Público, denunció por escrito la posible contradic-
ción de tesis entre el criterio sustentado por el Segundo Tribu-
nal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, al
resolver la revisión fiscal 165/2002, y el sostenido en sentido
contrario por el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Adminis-
trativa del Segundo Circuito al resolver el amparo directo
323/2003.

Recibida la denuncia, el Presidente de la Suprema Corte


de Justicia de la Nación ordenó formar, registrar y remitir
el expediente a la Segunda Sala para los efectos legales
conducentes.

79
80 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

El presidente de la Segunda Sala requirió a los presidentes


del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del
Primer Circuito y del Tercer Tribunal Colegiado de la materia
referida del Segundo Circuito, para que remitieran copia certi-
ficada de las resoluciones pronunciadas en sus respectivos
expedientes, donde sostuvieron los criterios que generaron
la posible contradicción. Una vez recibidas las copias, ordenó
dar vista al procurador general de la República que respondió
en el sentido de que debía prevalecer el criterio sustentado por
el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del
Segundo Circuito.

La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la


Nación acordó su resolución el día 23 de junio de 2004.

1. CRITERIO SUSTENTADO POR EL SEGUNDO


TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA
ADMINISTRATIVA DEL PRIMER CIRCUITO

a) Antecedentes

El 5 de enero de 2000, Tubacero, Sociedad Anónima de Capi-


tal Variable, solicitó a la Secretaría de Hacienda la devolución
del saldo a su favor del impuesto al activo correspondiente
al ejercicio fiscal de 1996. La autoridad hacendaria le negó la
solicitud porque el contribuyente, al determinar la base del
impuesto, consideró el promedio de las deudas con diversas
instituciones de crédito que conforman el sistema financiero,
el cual no era deducible, conforme al artículo 5o., segundo
párrafo de la Ley del Impuesto al Activo.

Inconforme con la resolución de la autoridad, el contribu-


yente promovió juicio de nulidad ante la Cuarta Sala Regional
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 81

Metropolitana del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Adminis-


trativa (TFJFA), la cual consideró que la resolución impugnada
carecía de fundamentación y motivación, ya que el párrafo
segundo del artículo 5o. de la citada ley, viola el principio de
equidad tributaria, conforme al criterio sostenido por el Máxi-
mo Tribunal del país en la tesis P/LXXXI/98, y por ser obligatoria
para el tribunal fiscal declaró la nulidad de la resolución, no
obstante que la autoridad demandada argumentó que el con-
tribuyente no justificó que se encontraba en el primer acto de
aplicación, por tanto era un acto consentido; además, el juicio
de nulidad no era el medio idóneo para combatir la constitu-
cionalidad de una ley. La Sala consideró irrelevantes estos
argumentos en virtud de que se pronunció con base en la vali-
dez de un razonamiento específico, sustentado en una tesis de
jurisprudencia exactamente aplicable a la hipótesis planteada.

b) Revisión fiscal 165/2002

Las autoridades demandadas interpusieron recurso de revisión


fiscal ante el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Admi-
nistrativa del Primer Circuito, quien consideró que las auto-
ridades administrativas no estaban obligadas a aplicar
la jurisprudencia cuando emiten sus actos; no obstante, la
Sala Fiscal sí estaba obligada a aplicarla en su resolución,
ya que conforme al artículo 192 de la Ley de Amparo, no
existe condicionante o restricción alguna para la aplicación
de la jurisprudencia emitida por el Poder Judicial de la
Federación.

En este sentido, el Tribunal Colegiado consideró ineficaces


los agravios hechos valer por la recurrente y, en consecuencia,
tuvo por correcta la sentencia de la Sala que declaró la nuli-
dad del acto.
82 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

2. CRITERIO SUSTENTADO POR EL TERCER TRIBUNAL


COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA
DEL SEGUNDO CIRCUITO

a) Antecedentes

La empresa Frugosa, Sociedad Anónima de Capital Variable,


en su calidad de contribuyente, solicitó a la Administra-
ción de Grandes Contribuyentes de Naucalpan la devolución
del impuesto sobre tenencia o uso de vehículos que había
pagado en los ejercicios fiscales que comprenden de 1997 a
2001, más la actualización y los intereses que se llegaran
a generar.

La autoridad no respondió a dicha solicitud, lo que con-


figuró la negativa ficta, es decir, ante la ausencia de contesta-
ción por el transcurso de un tiempo determinado, se consideró
negada la devolución solicitada.

Ante esta situación, el contribuyente promovió el juicio


de nulidad de la negativa en la Tercera Sala Regional Hidalgo-
México del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa.

La autoridad argumentó que la contribuyente había pa-


gado el impuesto conforme a la Ley del Impuesto sobre Tenencia
y Uso de Vehículos sin acreditar que fuera un pago indebido.
Es más, respecto a la inconstitucionalidad del artículo 158
de la ley en comento, señaló que no tenía facultades para
resolver la cuestión planteada; asimismo, que la contribuyente
no se ubicaba en los supuestos de exención como para que
le fuera devuelto el impuesto pagado. Aunado a lo anterior, la
autoridad señaló que la promovente consintió la aplicación
de la mencionada ley, ya que no interpuso medio de defensa
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 83

alguno respecto a los ejercicios fiscales de 1997 a 1999, y


en relación con los ejercicios de 2000 a 2001, no manifestó
razones para solicitar la devolución.

Por su parte, la promovente señaló que los pagos reali-


zados por concepto del impuesto sobre tenencia y uso de
vehículos se efectuaron en forma indebida, en virtud de que
los artículos 15-B, vigente de 1997 a 1999 y 8o., fracción III
de la ley en comento, fueron declarados inconstituciona-
les por la Primera y Segunda Sala del Máximo Tribunal del
país en las jurisprudencias 1a. /J 11/2001 y 2a. /J 103/2000,
respectivamente.

La Sala del Tribunal consideró que las jurisprudencias cita-


das no eran aplicables al caso concreto por existir circuns-
tancias injustificadas, pues la actora no demostró posteriores
actos de aplicación de los artículos 8o., fracción III y 15-B
declarados inconstitucionales.

Adicionalmente, la Sala determinó que no puede solici-


tarse la devolución de un impuesto pagado con anterioridad
a la formación de la jurisprudencia que le sirve de funda-
mento, ya que ésta no puede tener efectos retroactivos sobre
actos consentidos. Respecto al impuesto enterado en 2001,
la contribuyente debió impugnarlo vía juicio de amparo, y al
no hacerlo consintió la ley.

Por lo anterior, al no acreditar la contribuyente la existencia


de actos posteriores a la emisión de la jurisprudencia y no
ejercitar los medios de defensa establecidos en las leyes, la
Sala del TFJFA consideró que no era posible aplicar la jurispru-
dencia y, en tal caso, confirmó la resolución impugnada.
84 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

b) Amparo directo 323/2003

Inconforme con la sentencia dictada por la Sala Fiscal, la con-


tribuyente promovió juicio de amparo ante el Tribunal Cole-
giado, quien señaló que el artículo 16 de la Carta Magna no
establece la obligación de las autoridades administrativas
de fundar y motivar sus actos según la forma en que el Poder
Judicial de la Federación haya interpretado la ley, al ser la juris-
prudencia aplicable sólo a casos particulares; por tanto, no
se considera una norma general. Además, la jurisprudencia
solamente obliga a los órganos jurisdiccionales, conforme a
los artículos 192 y 193 de la Ley de Amparo.

En este sentido, el tribunal consideró que obligar a la Sala


Fiscal a aplicar la jurisprudencia sería como obligar a la auto-
ridad administrativa a aplicarla, en contravención de lo esta-
blecido en los artículos relativos de la Ley de Amparo.

Por tanto, confirmó la resolución de la Sala Fiscal y negó


el amparo solicitado por la quejosa.

3. MATERIA DE LA CONTRADICCIÓN DE TESIS

La Segunda Sala del Máximo Tribunal observó que en la reso-


lución de la revisión fiscal emitida por el Segundo Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito se
estableció que, si bien las autoridades administrativas no esta-
ban obligadas a aplicar la jurisprudencia que declara la incons-
titucionalidad de un precepto legal, la Sala Fiscal sí estaba
obligada, sin excepción alguna, conforme al artículo 192 de
la Ley de Amparo.
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 85

Por otra parte, el Tercer Tribunal Colegiado en Materia


Administrativa del Segundo Circuito, al resolver un amparo
directo, consideró que de aplicar la Sala Fiscal la jurispruden-
cia que pretendía la quejosa, equivaldría a obligar a la autori-
dad administrativa a someterse a ella; por tanto, resolvió que
era inaplicable la jurisprudencia al haber consentido la quejo-
sa los actos de aplicación de la ley y, puesto que la jurispru-
dencia se aplica sólo a casos particulares, no se contraviene
al artículo 192 de la Ley de Amparo.

Por lo anterior, la Segunda Sala determinó que sí existía


la contradicción de tesis denunciada, ya que los Tribunales
Colegiados examinaron cuestiones jurídicas esencialmente
iguales, esto es, la obligación de las autoridades administra-
tivas y del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa
de aplicar la jurisprudencia que declare la inconstitucionali-
dad de una ley.

Ambos tribunales coincidieron en que las autoridades


administrativas no están obligadas a observar la jurispru-
dencia, pero discreparon respecto a si el Tribunal Federal de
Justicia Fiscal y Administrativa, obligado a aplicarla conforme
al artículo 192 de la Ley de Amparo, puede declarar la nulidad
de las resoluciones administrativas y obligarlas a someterse
a la jurisprudencia, y si existe alguna condicionante para que
dicho tribunal la aplique.

En consecuencia, la Segunda Sala procedió a determinar


si el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, obli-
gado a aplicar la jurisprudencia referida, puede declarar la
nulidad de una resolución administrativa y exigir a las autori-
dades que la emitieron a someterse a dicha jurisprudencia; y
86 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

si existe alguna condicionante o restricción para aplicar la


jurisprudencia en cuestión, tratándose de actos considerados
consentidos.

4. CRITERIO DE LA SEGUNDA SALA


DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN

La Segunda Sala señaló en la resolución emitida el día 23 de


junio de 2004 que, conforme a su propio criterio contenido
en la jurisprudencia 2a./J 38/2002, citada en el capítulo
anterior de esta obra, las autoridades administrativas no están
obligadas a fundar y motivar sus actos aplicando la jurispru-
dencia que declara la inconstitucionalidad de una ley, porque
no ha sido voluntad del legislador obligar a las autoridades
distintas de las jurisdiccionales a acatar la jurisprudencia
emitida por los órganos competentes del Poder Judicial de la
Federación.

Sin embargo, estimó que cuando un acto sea impugnado


y anulado por los órganos jurisdiccionales, cuya sentencia
implique algún criterio jurisprudencial, las autoridades admi-
nistrativas deben cumplir la resolución y los lineamientos estable-
cidos en ella; y que, por tanto, las autoridades administrativas
no acatan la jurisprudencia, sino la sentencia en que se aplicó.

En este sentido, la Sala consideró que el Tribunal Federal


de Justicia Fiscal y Administrativa está obligado a acatar la
jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
conforme al artículo 192 de la Ley de Amparo, sin distinguir
si se establece en materia de legalidad o determina la incons-
titucionalidad de una ley, limitándo su actuación a determinar
si en el caso concreto es aplicable el criterio obligatorio.
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 87

En consecuencia, la aplicación de una jurisprudencia que


declara la inconstitucionalidad de un precepto legal no signi-
fica que se realizará un análisis de la constitucionalidad de la
ley, puesto que ya fue decidido por el Máximo Tribunal, sino
la expresión de una cuestión de legalidad, como es determinar
si el acto administrativo impugnado se fundó debidamente.

Así, al aplicar una jurisprudencia el Tribunal Federal de


Justicia Fiscal y Administrativa no hace un estudio de constitu-
cionalidad sino de legalidad, y debe anular el acto impugnado
que se funda en una ley declarada inconstitucional por la
Suprema Corte, al contener un vicio de legalidad contrario
al artículo 16 de la Constitución Federal. De esta manera se
cumple con la obligación señalada en el artículo 192 de la
Ley de Amparo.

Con base en lo anterior, al emitir sus actos las autoridades


administrativas no están obligadas a acatar la jurisprudencia
que declara la inconstitucionalidad de una ley, pues cuando
cumplen una resolución jurisdiccional que involucra una juris-
prudencia ejecutan un nuevo acto de autoridad en acatamien-
to a la sentencia, y no de la jurisprudencia.

También señala la Segunda Sala que, conforme al prin-


cipio de relatividad de la sentencia, la jurisprudencia que
declara la inconstitucionalidad de una ley sólo podrá ser
aplicada a casos concretos planteados ante los órganos juris-
diccionales, ya que no tiene efectos erga omnes, es decir, para
todas las personas, sino que los genera sólo para aquellas
que invoquen su beneficio dentro de un proceso jurisdiccional.
Por ello, este principio no exceptúa a los tribunales de legali-
88 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

dad que no conforman al Poder Judicial de la Federación de


la obligación que señala el artículo 192 de la Ley de Amparo.

Por otra parte, Segunda la Sala sostuvo que los órganos


jurisdiccionales están obligados a fundar y motivar sus resolucio-
nes, por lo que deben asentar las consideraciones que demues-
tren la aplicabilidad de la jurisprudencia al caso concreto y
determinar si procesalmente puede aplicarse; de lo contrario,
no significa que la jurisprudencia no sea obligatoria, sino
que, por las características del caso, no procede su aplicación.

Ahora bien, en los juicios tramitados ante tribunales


comunes como el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Adminis-
trativa, previo análisis del acto impugnado y aplicación de la
jurisprudencia obligatoria, debe determinarse que el juicio
de nulidad sea procedente, esto es, que no se actualice alguno
de los supuestos de improcedencia señalados en el artículo
202 del Código Fiscal de la Federación, entre los cuales se
encuentra la causal por actos consentidos. Al respecto, se en-
tiende que son consentidos los actos contra los cuales no se
promovió algún medio de defensa en los términos y plazos
señalados por la ley.

Por tanto, la Segunda Sala señaló que si son considerados


consentidos los actos impugnados dentro del juicio de nulidad,
no podrá aplicarse la jurisprudencia por improcedencia del
juicio. Sin embargo, esto no impide que el actor impugne actos
posteriores y, de ser procedente el juicio, dichos actos se
declaren nulos al aplicarse la jurisprudencia, puesto que las
sentencias en los juicios de nulidad, como en los de amparo,
sólo tienen efectos contra la resolución impugnada, no contra
la ley que le sirve de fundamento.
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 89

5. TESIS DERIVADAS DE LA RESOLUCIÓN

De la contradicción de tesis 27/2004, derivaron las tesis


de jurisprudencia 2a./J 89/2004 y 2a./J 90/2004, publicadas
en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo
XX, julio de 2004, páginas 281 y 282, respectivamente, que
a la letra dicen:

JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALID


INCONSTITUCIONALIDAD AD DE
LEYES
LEYES.. A UNQUE LAS A
AUNQUE UT
AUT ORID
UTORID ADES ADMINISTRA
ORIDADES ADMINISTRATI-TI-
VAS NO ESTÁN OBLIGAD
OBLIGADAS AS A APLICARLA AL EMITIR SUS
ACT OS,, SÍ DEBEN CUMPLIR LAS SENTENCIAS EN LAS
OS
CTOS
QUE
QUE,, CON BASE EN A QUÉLLA, EL TRIBUNAL FEDERAL
AQUÉLLA,
DE JUSTICIA FISCAL Y ADMINISTRA
ADMINISTRATIV TIV
TIVAA DECLARE SU
NULID
NULIDAD AD
AD.. —El Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Admi-
nistrativa al estar obligado, en términos del artículo 192
de la Ley de Amparo, a aplicar la jurisprudencia, aun la
que declara la inconstitucionalidad de una ley, debe, con
base en aquélla, decretar la nulidad de las resoluciones
administrativas que se hayan fundado en una ley declarada
inconstitucional, por constituir un vicio de legalidad contra-
rio al artículo 16 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos. En ese caso, las autoridades administra-
tivas deberán cumplimentar la sentencia dictada por el tri-
bunal conforme a los lineamientos ahí establecidos, pues
si bien es cierto que dichas autoridades al emitir sus actos,
no están obligadas a acatar la jurisprudencia que haya
declarado la inconstitucionalidad de una ley, por no preverlo
así los artículos 192 y 193 de la Ley de Amparo, también
lo es que al dictar la resolución de cumplimiento no están
acatando propiamente la jurisprudencia, ni se les está obli-
gando a someterse a ella, sino a la sentencia del mencio-
nado tribunal en que se aplicó.
90 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Contradicción de tesis 27/2004-SS. Entre las sustentadas


por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Adminis-
trativa del Primer Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado
en Materia Administrativa del Segundo Circuito. 23 de junio
de 2004. Cinco votos. Ponente: Genaro David Góngora
Pimentel. Secretaria: Blanca Lobo Domínguez.

Tesis de jurisprudencia 89/2004. Aprobada por la Segunda


Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del dos de
julio de dos mil cuatro.

JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALID


INCONSTITUCIONALIDAD AD DE
LEYES.. EL TRIBUNAL FEDERAL DE JUSTICIA FISCAL Y ADMI-
LEYES
NISTRA
NISTRATIVTIV
TIVAA NO DEBE APLICARLA SI EL JUICIO DE NU NU--
LID AD ES IMPROCEDENTE
LIDAD IMPROCEDENTE.. —La aplicación que debe
realizar el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa
de la jurisprudencia que declara la inconstitucionalidad de
una ley, en términos del artículo 192 de la Ley de Amparo
no es irrestricta, sino que está condicionada a que el juicio
de nulidad sea procedente, lo que no sucede cuando los
actos fueron consentidos por el actor; lo anterior, no impe-
dirá la aplicación de la citada jurisprudencia en juicios ulte-
riores que sean procedentes, pues al igual que en el juicio
de amparo directo, la sentencia dictada en los juicios de
nulidad produce efectos únicamente contra la resolución
impugnada, mas no contra la ley que sirve de fundamento.

Contradicción de tesis 27/2004-SS. Entre las sustentadas


por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administra-
tiva del Primer Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado en
Materia Administrativa del Segundo Circuito. 23 de junio
de 2004. Cinco votos. Ponente: Genaro David Góngora
Pimentel. Secretaria: Blanca Lobo Domínguez.
CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS 91

Tesis de jurisprudencia 90/2004. Aprobada por la Segunda


Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del dos de
julio de dos mil cuatro.
XII. CONCLUSIONES

1. De los antecedentes históricos y legislativos expuestos debe


concluirse lo siguiente:

a) La jurisprudencia, como institución jurídica, no se con-


templó en la Constitución original de 1917, sino en las
Leyes de Amparo de 1919 y 1936.

b) Por reforma constitucional de 1951 se eleva a rango


constitucional la institución de la jurisprudencia para per-
mitir que la ley secundaria estableciera los términos y casos
en que debía ser obligatoria, pero limitada a los tribunales
federales y a los juicios de amparo.

c) En la reforma constitucional de 1967, la obligatoriedad


de la jurisprudencia se extiende a todos los asuntos donde
son competentes los tribunales federales, y no sólo a los
juicios de amparo; además, la interpretación se hace

93
94 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

extensiva a todo el sistema jurídico mexicano, es decir, a


la Constitución, las leyes federales, los tratados internacio-
nales y las leyes y reglamentos locales.

d) A partir de la reforma a la Ley de Amparo de 1968, los


órganos obligados a acatar la jurisprudencia son de natu-
raleza jurisdiccional, federales o estatales; judiciales, mili-
tares, laborales y administrativos.

e) Desde la reforma de 1984 a la Ley de Amparo, se dife-


rencia la obligatoriedad de la jurisprudencia atendiendo
a los órganos que la emiten: el Pleno de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación, las Salas de ésta y los Tribunales
Colegiados de Circuito, pero siguen obligados a acatarla
solamente los órganos jurisdiccionales.

f) De las exposiciones de motivos de las reformas constitu-


cionales no se aprecia que haya sido voluntad del legislador
obligar a otras autoridades, distintas de las jurisdiccio-
nales, a acatar la jurisprudencia que emitan los órganos
competentes del Poder Judicial de la Federación.

2. Del análisis histórico y legislativo de las disposiciones


relativas a la obligatoriedad de la jurisprudencia, su diferen-
ciación con la ley, así como del estudio relativo a la garantía
de legalidad en los criterios sustentados por el Tribunal en
Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se llega
a las siguientes conclusiones:

a) Las entidades obligadas a acatar la jurisprudencia emi-


tida por los órganos competentes del Poder Judicial de la
Federación son los órganos jurisdiccionales, federales o
CONCLUSIONES 95

estatales, de índole judicial, militar, laboral o administra-


tiva, por disposición del artículo 94, octavo párrafo, de
la Constitución Federal, que remite a la ley ordinaria,
que en el caso es la Ley de Amparo, la cual en sus artículos
192 y 193 establece la obligatoriedad indicada, sin que
de las exposiciones de motivos de las reformas constitu-
cionales se aprecie que haya sido voluntad del legislador
obligar a otras autoridades, distintas de las jurisdicciona-
les, a acatar la jurisprudencia que emitan los órganos
competentes del Poder Judicial de la Federación.

b) La jurisprudencia y la ley presentan las siguientes dife-


rencias:

La jurisprudencia es obra de los órganos jurisdiccio-


nales; la ley del órgano legislativo.

La jurisprudencia no es una norma general, ya que


sólo se aplica a los casos particulares, mediante la
vía del proceso.

La jurisprudencia es la interpretación que los tribunales


hacen de la ley, por tanto, la jurisprudencia no es ley,
sino interpretación de la ley.

La ley es estática, requiere de su modificación o dero-


gación mediante el proceso legislativo. La jurispruden-
cia es dinámica, ya que puede cambiar la interpretación
respecto de una misma ley con determinados requi-
sitos, pero sin las formalidades que la propia ley
requiere.
96 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

c) La garantía de legalidad prevista en el primer párrafo


del artículo 16 de la Carta Magna consiste en la obli-
gación que tiene la autoridad de fundar y motivar un acto
de molestia, y tal fundamentación consiste en citar los pre-
ceptos jurídicos que permiten a la autoridad expedir el
acto de molestia.

d) Un acto jurisdiccional es de naturaleza diversa a uno


administrativo, razón por la cual el cumplimiento de la
garantía de legalidad se verifica de manera distinta en
ambos casos. Cabe este discernimiento porque en el acto
administrativo deben invocar de manera precisa sus fun-
damentos legales, a efecto de que el gobernado esté en
posibilidad de conocer el sustento jurídico del acto que
le afecta y tenga posibilidad de defenderse, y por tanto
no quedar desprotegido. Mientras que en el acto jurisdic-
cional la garantía de legalidad tiene como objeto que el
juzgador no dicte las resoluciones en forma arbitraria,
sino ajustadas al ordenamiento legal, lo cual no requiere
necesariamente de la cita del precepto, pues dentro del
examen exhaustivo de la litis se implican razonamientos
que fundamentan propiamente las disposiciones conte-
nidas en la resolución.

e) Las autoridades administrativas no están obligadas a


aplicar la jurisprudencia sobre inconstitucionalidad de
leyes, al fundar y motivar sus actos, ya que aquélla sólo
obliga a los órganos jurisdiccionales.

3. Cuando un acto es impugnado y anulado por los órga-


nos jurisdiccionales, en cuya sentencia se aplique algún cri-
terio jurisprudencial, las autoridades administrativas afectadas
CONCLUSIONES 97

por el fallo deben cumplir con la resolución y los lineamientos


establecidos en ésta; así, lo que se acata es la sentencia y no
la jurisprudencia en ella aplicada, pues ésta no obliga por sí
misma a la autoridad administrativa.

4. El Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, al


aplicar una jurisprudencia, no hace un estudio de constitucio-
nalidad sino de legalidad y debe anular el acto impugnado,
el cual al fundarse en una ley declarada inconstitucional por
jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
contiene un vicio de legalidad contrario al artículo 16 de la
Constitución Federal.

5. En los asuntos tramitados ante tribunales comunes,


como el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa,
no debe aplicarse la jurisprudencia sobre inconstitucionalidad
de leyes si el juicio de nulidad es improcedente por haber
sido consentidos los actos impugnados; sin embargo, esto
no impide que el actor impugne actos posteriores, puesto
que las sentencias de los juicios de nulidad, como en los de
amparo, sólo producen efectos contra la resolución impug-
nada y no contra la ley que le sirve de fundamento.
XIII. COMENTARIO DEL INSTITUTO DE
INVESTIGACIONES JURÍDICAS
Doctor Daniel Márquez Gómez*

1. INTRODUCCIÓN

E l fenómeno jurídico es de gran complejidad. Lo anterior se


pone de manifiesto al estudiar las llamadas "fuentes del
derecho". Por éstas se entiende el modo de producción de
normas jurídicas, o las formas mediante las cuales en una
sociedad organizada se manifiesta o exterioriza la norma jurí-
dica. Entre dichas fuentes se encuentran las materiales, o
sea, todos los factores o elementos de la vida social que con-
tribuyen a fijar el contenido de las normas jurídicas; las fuentes
materiales son ilimitadas y su número depende del momento
histórico. Por su parte, las fuentes formales se refieren en
primer lugar al órgano creador de la norma jurídica, esto es,
a los órganos sociales a los que el ordenamiento jurídico atri-
buye la facultad de dictar normas jurídicas; en segundo lugar,
desde la forma de manifestarse o externarse el fenómeno

* Investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional


Autónoma de México.

99
100 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

jurídico, aluden a la ley, la costumbre, la jurisprudencia y la


doctrina.

Como fuente del derecho la jurisprudencia tiene raigam-


bre antigua, baste recordar las fazañas y pragmáticas hispáni-
cas, y la institución anglosajona del stare decisis. Héctor
Gerardo Zertuche García considera a la jurisprudencia como:

…el conjunto de criterios jurídicos y doctrinales contenidos


en las ejecutorias de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación sea en Pleno o en Salas, así como por los Tribunales
Colegiados de Circuito en materia de su competencia
exclusiva que sea elaborada por reiteración o bien median-
te el procedimiento de denuncia de contradicción de tesis
con los requisitos que la ley determine, lo cual le da el ca-
rácter de obligatoria para los tribunales que jerárqui-
camente se encuentran subordinados a ello.1

Criterio que plasma lo que el autor llama un concepto


técnico de jurisprudencia y que, desde nuestro punto de vista,
sólo se refiere a la reiteración de sus notas legales. Para Ignacio
Burgoa: "... La jurisprudencia tiene, cuando menos, dos finali-
dades esenciales, a saber: la de interpretar el derecho legis-
lado y la de crear o construir el derecho con ocasión de los
casos concretos que se sometan al conocimiento de los tribu-
nales".2 Complementando lo anterior, entendemos la juris-
prudencia como aquel criterio plasmado por el juzgador en
la parte considerativa de una sentencia, en la que según
Ignacio Burgoa:

1
Zertuche García, Héctor Gerardo, La jurisprudencia en el sistema jurídico mexicano, 2ª
ed., Ed. Porrúa, México, 1992, p. 89.
2
Burgoa O., Ignacio, El juicio de amparo, 29ª ed., Porrúa, México, 1992, p. 819.
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 101

...Se presume la aplicación concreta de los conocimientos


jurídicos generales que hace la autoridad jurisdiccional
encargada de dictarla, está formulada en un sentido uni-
forme e ininterrumpido en varios casos especiales y particu-
lares, interpretando una disposición legal determinada o
haciendo una estimación lógica concreta respecto de cierto
punto de derecho... 3

Desde este punto de vista, la jurisprudencia es una fuente


jurídica muy importante en nuestro derecho; cualquier
deficiencia en su interpretación y, sobre todo, en la determi-
nación de los sujetos obligados, causa perjuicio al orden nor-
mativo puesto que vulnera uno de los bienes más preciados
de todo Estado de derecho: la seguridad jurídica, traducida
en la legalidad de la decisión que se adopte. Así, para Héctor
Fix-Zamudio:

De acuerdo con mi criterio personal, existe un error de


apreciación cuando se considera que la jurisprudencia se
limita a interpretar las normas existentes (…) La jurispru-
dencia tiene carácter creativo e integrador del ordenamien-
to jurídico, y no sólo en los supuestos no previstos por la
ley, sino inclusive en los supuestos en los que no existen
vacío o incertidumbre legislativa, pues las normas que sur-
gen de la propia jurisprudencia no asumen carácter legis-
lativo, sino judicial… 4

La jurisprudencia, como objeto de nuestro estudio, será abor-


dada desde el punto de vista contenido en las decisiones emi-
tidas en las contradicciones de tesis 40/2001 y 27/2004-SS
resueltas por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia

3
Ibid., p. 818.
4
Magallón Ibarra, Jorge Mario, Los sonidos y el silencio de la jurisprudencia mexicana,
Introducción de Héctor Fix-Zamudio, IIJ-UNAM, México, 2004, p. XXVIII.
102 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

de la Nación, pues si bien se tiene cierto consenso sobre los


efectos interpretativos de la norma, en algunas ocasiones se
confunde quiénes son los sujetos obligados a acatarla.

2. ARTÍCULOS 94, PÁRRAFO OCTAVO; Y 107,


FRACCIÓN XIII, DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA
DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

El artículo 94, párrafo octavo, de la Constitución, señala que:

La Ley fijará los términos en que sea obligatoria la juris-


prudencia que establezcan los tribunales del Poder Judicial
de la Federación sobre interpretación de la Constitución,
leyes y reglamentos federales o locales, y tratados interna-
cionales celebrados por el Estado Mexicano, así como los
requisitos para su interrupción.

En lo que se refiere al artículo 107, la Constitución Política


de los Estados Unidos Mexicanos, aprobada en la ciudad de
Querétaro el 5 de febrero de 1917, reprodujo el artículo 107
del proyecto carrancista de 1916; ese precepto se reformó
el 19 de febrero de 1951, incorporando la fracción XIII con
el texto siguiente:

107. Todas las controversias de que habla el artículo 103


se sujetarán a los procedimientos y formas del orden jurí-
dico que determine la ley, de acuerdo a las bases siguientes:

XIII. Cuando los Tribunales Colegiados de Circuito susten-


tan tesis contradictorias en los juicios de amparo de su
competencia, los Ministros de la Suprema Corte de Justicia,
el Procurador General de la República, los mencionados
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 103

Tribunales o las partes que intervinieron en los juicios en


que dichas tesis fueron sustentadas, podrán denunciar la
contradicción ante la Suprema Corte de Justicia, a fin de
que el Pleno o la Sala respectiva, según corresponda, deci-
dan la tesis que deba prevalecer como jurisprudencia.

Cuando las Salas de la Suprema Corte de Justicia sustenten


tesis contradictorias en los juicios de amparo materia de
su competencia, cualquiera de esas Salas, el Procurador
General de la República o las partes que intervinieron
en los juicios, en que tales hubieren sido sustentadas po-
drán denunciar la contradicción ante la Suprema Corte de
Justicia, que funcionando en Pleno decidirá cuál tesis debe
prevalecer.

La resolución que pronuncien las Salas o el Pleno de la


Suprema Corte en los casos a que se refieren los dos párra-
fos anteriores, sólo tendrá el efecto de fijar la jurisprudencia
y no afectará las situaciones jurídicas concretas derivadas
de las sentencias dictadas en los juicios en que hubiere
ocurrido la contradicción.

Como lo establece la exposición de motivos, la reforma de


1951 tenía como propósito encontrar una solución al tema
de las contradicciones de tesis, así, se afirmaba: "La necesi-
dad de unificar estas tesis contradictorias es manifiesta, y la
oportunidad, además, para que se establezca jurisprudencia
que sea obligatoria tanto para las Salas de la Corte como
para los Tribunales Colegiados de Circuito".5 Más adelante
se asentaba que el propósito de la adición era fijar: "... Sólo

5
Derechos del pueblo mexicano, México a través de sus Constituciones, Tomo X, artículos
95-110, Comité de Asuntos Editoriales de la Cámara de Diputados, México 1994, p. 591
(el subrayado es nuestro).
104 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

el procedimiento a seguir para la adecuada institución de la


jurisprudencia". 6

De la primera de las normas constitucionales menciona-


das se desprende: a) el carácter obligatorio de la jurispruden-
cia, b) su naturaleza accesoria de una norma principal, ya
sea constitucional, legal o reglamentaria, c) su naturaleza
interpretativa, y d) el ámbito material de aplicación que puede
ser local o federal. En la segunda norma constitucional nom-
brada se plasma la denuncia de contradicción de tesis, los
sujetos facultados para interponerla y los efectos de las de-
cisiones de la Suprema Corte de Justicia en esas materias.

Sin embargo, a pesar de la mención al carácter obliga-


torio de la jurisprudencia, de la lectura de las normas que
nos ocupan no se desprende ninguna mención a la obligación
de acatar los criterios judiciales y tampoco se dice quiénes
son los sujetos obligados a cumplirlos.

3. EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LOS ARTÍCULOS


192 Y 193 DE LA LEY DE AMPARO

Estos preceptos cuentan con una evolución en el derecho


mexicano que no puede soslayarse. Así, en la Ley de Amparo
de 1861, conocida como "Ley Juárez", publicada en el Dia-
rio Oficial de la Federación el 26 de noviembre de 1861, se
eliminó la jurisprudencia y el valor del precedente; en su artículo
30 enunció que la jurisprudencia sólo beneficiaría a los
que litigaron, y nunca podría alegarse por otros para dejar
de cumplir la ley.

6
Idem.
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 105

Por otra parte, en la Ley de Amparo de 1869, aprobada


el 19 de enero de 1869, que deroga a la Ley de 1861 en lo
que se refiere a la obligatoriedad de la jurisprudencia, en
su artículo 26 mantiene la misma regulación que la ley a la
que sustituyó.

En la Ley de Amparo del 14 de diciembre de 1882, se esta-


blece el carácter obligatorio de la jurisprudencia en su artículo
70, en los términos siguientes: "La concesión o denegación
del amparo contra texto expreso de la Constitución o contra
la interpretación fijada por la Suprema Corte, por lo menos
en cinco ejemplares uniformes, se castigará con la pérdida
de empleo, y con prisión de seis meses a tres años..." Con lo
que impone la obligación de apegarse a la interpretación que
de la ley hagan los Tribunales Superiores; además asienta
la sanción para el supuesto de la inobservancia de dicha
obligación.

El Código de Procedimientos Federales de 1897, suscrito


el 6 de octubre de 1897, constituye un retroceso en lo que se
refiere a la obligación de acatar la jurisprudencia, puesto
que deroga los artículos 70 y 47 de la Ley de 1882; su artículo
826 copia textualmente el contenido del artículo 30 de la Ley
de Amparo de 1861, con lo que niega valor al precedente y
señala que las sentencias dictadas en el juicio de garantías
únicamente beneficiarían a las partes contendientes y que
no podrían alegarse por otros como ejecutorias.

Por su parte, el Código Federal de Procedimientos Civiles


de 1908, que entró en vigor el 5 de febrero de 1909, resta-
blece a la jurisprudencia en sus preceptos del 785 al 788; en
el artículo 787 señala la obligación de acatar la jurispru-
106 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

dencia, y que los Jueces deben expresar las razones por las
que la aplicaron en sus sentencias.

En la Ley de Amparo de 1919, se regula la jurisprudencia


en su Capítulo II "De la Jurisprudencia", en los artículos del
147 a 150. Para nuestro estudio es relevante el contenido
del artículo 149, el cual establece quiénes son las autoridades
obligadas a acatar la jurisprudencia, esto es: los Magistra-
dos de Circuito, Jueces de Distrito y Tribunales de los Estados,
Distrito Federal y Territorios. Con lo anterior se advierte una
evolución en materia de regulación jurisprudencial, al señalar
a los sujetos obligados a respetarla y al pretender una unifor-
midad de criterios en la resolución de controversias, puesto
que de su lectura se desprende que la jurisprudencia se impo-
nía a los órganos jurisdiccionales federales y locales.

En otra etapa, la Ley de Amparo de 1935, que vino a


sustituir a la Ley de 1919, entró en vigor el 10 de enero de
1936. En relación con el tema de la jurisprudencia, en su Título
Cuarto sigue el mismo sistema que la de 1919, por lo que
valgan, mutatis mutandis, los comentarios vertidos respecto
a la mencionada ley.

4. LOS ARTÍCULOS 192 Y 193


DE LA LEY REGLAMENTARIA DE LOS ARTÍCULOS
103 Y 107 CONSTITUCIONALES, VIGENTES

Estos preceptos sufrieron cambios en 1968, 1976, 1984, 1986,


1988 y 2000. La reforma de 1951, a la par que modificó
normas constitucionales, reformó los artículos 193 y 193-Bis
de la Ley de Amparo. Entre los sujetos que deben aplicar la
jurisprudencia sólo incluyó a las Salas de la Suprema Corte,
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 107

a los Tribunales Colegiados de Circuito, a los Tribunales Unita-


rios de Circuito, a los Jueces de Distrito, a los Tribunales de los
Estados, Distrito y Territorios Federales y a las Juntas de Conci-
liación y Arbitraje; sin embargo, no se incluía en esta enumera-
ción a los tribunales administrativos.

En relación con el debate sobre si los tribunales adminis-


trativos estaban obligados o no a aplicar la jurisprudencia,
en una tesis de 1955, se resolvió:

JURISPRUDENCIA DE LA SUPREMA CORTE. ES OBLIGA-


TORIA PARA EL TRIBUNAL FISCAL.—La jurisprudencia esta-
blecida por la Suprema Corte es obligatoria para el Tribunal
Fiscal de la Federación. La naturaleza eminentemente juris-
diccional de las funciones que realiza dicho tribunal adminis-
trativo, el régimen de derecho que debe presidir al ejercicio
de sus atribuciones y el pronunciamiento de sus sentencias,
así como la subordinación jerárquica en que ha quedado
colocado respecto a esta Suprema Corte mediante la ins-
titución de un recurso de revisión de sus mencionadas
sentencias, implica la obligatoriedad de la jurisprudencia
emanada del Tribunal Supremo. Si el Tribunal Fiscal se
apartara de la interpretación establecida por la Corte, que-
brantaría un principio de economía procesal y determinaría
dilaciones del procedimiento nocivas para los intereses de
las partes y un recargo indebido de las labores de la Supre-
ma Corte de Justicia de la Nación. Por lo demás, el mismo
Código Fiscal reconoce tácitamente el carácter obligato-
rio de la jurisprudencia de la Corte, cuando autoriza a la
Procuraduría Fiscal o a sus agentes para formular pedi-
mento en el sentido de que se pronuncie sentencia favo-
rable al actor cuando se invoque una jurisprudencia de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación instituida en cues-
tiones idénticas a las que se controviertan. Sólo existe agra-
108 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

vio cuando alguna de las partes sufre un perjuicio en sus


intereses jurídicos con motivo de la violación de la ley; más
la sujeción de un tribunal inferior a la jurisprudencia de la
Suprema Corte implica cabalmente el cumplimiento de
la ley, a menos que la hipótesis contemplada concreta-
mente en el juicio rebasara el ámbito de la jurispruden-
cia. Si bien es cierto que el artículo 193 bis de la ley
reglamentaria del juicio de ampara, declara obligatoria la
jurisprudencia para tribunales judiciales federales y de los
Estados y juntas de conciliación y arbitraje, dado el carácter
orgánicamente administrativos inherentes a estas últimas,
es aplicable, por evidente analogía, al caso del Tribunal
Fiscal de la Federación.

Revisión fiscal 304/54.—Arroniz Castro Manuel.—25 de


agosto de 1955.—Unanimidad de 5 votos. T. CXXV, pág.
1685.

Con la reforma de 1967 se intentó resolver el grave proble-


ma del rezago de asuntos en la Suprema Corte de Justicia, y
no es hasta 1968, con la reforma del 30 de abril de este
año, cuando se incluye en la Ley de Amparo la obligación de
que los tribunales administrativos acaten la jurisprudencia. Así,
en una tesis de 1972, ya se reconoce que:

JURISPRUDENCIA, OBLIGATORIEDAD DE LA.—El artículo


192 de la Ley de Amparo dispone que la jurisprudencia
que establezca la Suprema Corte de Justicia funcionando
en Pleno, sobre interpretación de la Constitución, leyes y
reglamentos federales o locales y tratados internacionales
celebrados por el Estado mexicano, es obligatoria tanto
para ella, como para las Salas que la componen, los Tribu-
nales Unitarios y Colegiados de Circuito, Juzgados de
Distrito, Tribunales Militares y Judiciales del orden común
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 109

de los Estados, Distritos y Territorios Federales y Tribunales


Administrativos y del Trabajo, locales o federales. El artículo
193 del mismo ordenamiento legal tiene idéntico contenido
que el anterior solamente que se refiere a las Salas de este
Alto Tribunal: de ahí que únicamente en el caso de que la
Suprema Corte de Justicia de la Nación haya emitido juris-
prudencia estableciendo que una ley ordinaria es contraria
a la Constitución, los tribunales del orden común deben
dejar de aplicarla en acatamiento a dicha jurisprudencia.

Amparo en revisión 2230/70.—Marcelino de la Garza


Quintanilla y Antonio Quintanilla de la Garza. —8 de junio
de 1972. —Unanimidad de 4 votos. Ponente: Mariano
Ramírez Vázquez. Volumen XLII, p. 77.

Precedentes: Quinta Época. Tomo XLV, p. 2042. Tomo XLVI,


p. 947.

Lo anterior perfila con claridad el carácter obligatorio de


la jurisprudencia para determinados órganos jurisdiccionales,
sin embargo, la enumeración de esos órganos es evidente-
mente casuística.

El artículo 192 está contenido en la Ley Reglamentaria


de los Artículos 103 y 107 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, y a la letra dice:

La jurisprudencia que establezca la Suprema Corte de


Justicia, funcionando en Pleno o en Salas, es obligatoria
para éstas en tratándose de la que decrete el Pleno, y ade-
más para los Tribunales Unitarios y Colegiados de Circuito,
los Juzgados de Distrito, los Tribunales Militares y Judiciales
del orden común de los Estados y del Distrito Federal y
Tribunales Administrativos y del Trabajo, locales o federales.
110 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Las resoluciones constituirán jurisprudencia, siempre que lo


resuelto en ellas se sustente en cinco sentencias no interrum-
pidas por otra en contrario, y que hayan sido aprobadas
por lo menos por catorce Ministros, si se trata de jurispru-
dencia del Pleno, o por cuatro Ministros en los casos de
jurisprudencia de las Salas.

También constituyen jurisprudencia las resoluciones que


diluciden las contradicciones de tesis de Salas y de Tribu-
nales Colegiados.

En este precepto se contienen varias cuestiones relaciona-


das con la jurisprudencia: a) Su carácter taxativo, en el sentido
de que es limitativa del actuar de los órganos jurisdiccionales
obligados a acatarla; b) Los sujetos que deben aplicarla, entre
los que se encuentran diversos órganos jurisdiccionales desde
el punto de vista formal y material, y sólo material; c) Su in-
tegración, a través de los cinco criterios no interrumpidos
por uno en contrario, y d) La naturaleza de jurisprudencia de
las resoluciones de contradicción de tesis.

Así, en acatamiento al imperativo constitucional, el párrafo


primero del artículo 192 de la Ley de Amparo señala: "La juris-
prudencia que establezca la Suprema Corte de Justicia (...)
es obligatoria..." En la segunda parte del precepto en estudio
señala a los sujetos obligados a su acatamiento, y que son:
las Salas de la Suprema Corte; los Tribunales Unitarios y Cole-
giados de Circuito, los Juzgados de Distrito, los Tribunales Mili-
tares y Judiciales del orden común de los Estados y del Distrito
Federal, y los Tribunales Administrativos y del Trabajo, locales
o federales; coincide con este criterio el constitucionalista Ignacio
Burgoa Orihuela.7 El jurista Arturo González Cosío, asienta:

7 Cfr. Burgoa O., Ignacio, op. cit., p. 827.


COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 111

Es un hecho que la jurisprudencia (...) sólo están obligadas


a obedecerla las autoridades judiciales y las demás autori-
dades que realizan la función jurisprudencial, por ejemplo,
los tribunales autónomos de lo contencioso-administrativo
de nuestra jurisprudencia está constituida, prácticamente,
por autoridades jurisprudenciales, quedando fuera de dicha
esfera las autoridades administrativas y legislativas.8

De lo transcrito, y del contenido del numeral 192 de la


Ley de Amparo, queda establecido que la jurisprudencia obli-
ga única y exclusivamente a los órganos jurisdiccionales y,
fuera del ámbito del Poder Judicial, ninguna autoridad del
Poder Ejecutivo o del Poder Legislativo se encuentra obligada
a acatarla.

Por su parte, el artículo 193 de la Ley de Amparo señala:

La jurisprudencia que establezca cada uno de los Tribunales


Colegiados de Circuito es obligatoria para los Tribuna-
les Unitarios, los Juzgados de Distrito, los Tribunales Milita-
res y Judiciales de fuero común de los Estados y del Distrito
Federal y los Tribunales Administrativos y del Trabajo,
locales o federales.

Las resoluciones de los Tribunales Colegiados de Circuito


constituyen jurisprudencia siempre que lo resuelto en ellas
se sustente en cinco sentencias no interrumpidas por otra en
contrario, y que hayan sido aprobadas por unanimidad
de votos de los Magistrados que integran cada Tribunal
Colegiado.

8
González Cosío, Arturo, El juicio de amparo, tercera edición actualizada, Editorial Porrúa,
México, 1990, p. 288.
112 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Para nuestros propósitos es interesante el contenido del


párrafo primero; y dada su casi identidad con el contenido
del mismo párrafo del artículo 192 de la ley en cita, valgan,
mutatis mutandis, los comentarios vertidos en relación con
dicho numeral.

5. CONTRADICCIONES DE TESIS
40/2001 Y 27/2004-SS

a) Contradicción de tesis 40/2001

En este caso la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia


resolvió la diferencia planteada por el Primer Tribunal Cole-
giado del Décimo Cuarto Circuito y el Tercer Tribunal Colegia-
do en Materia Administrativa del Sexto Circuito.

Las tesis en las que existía la contradicción eran: la tesis


número XIV.1o.8 K publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, tomo VIII, pág. 1061, con rubro:
Jurisprudencia. Es obligatoria para las autoridades adminis
"Jurisprudencia. adminis--
trativas en acatamiento al principio de legalidad que dimana
del artículo 16 Constitucional
Constitucional", sustentada por el Primer Tri-
bunal Colegiado del Décimo Cuarto Circuito, en la que sus-
tancialmente se afirma:

Si bien los artículos 192 y 193 de la Ley de Amparo (…) se


refieren de manera genérica a órganos jurisdiccionales sin
hacer mención a las autoridades administrativas, éstas tam-
bién quedan obligadas a acatarla y aplicarla, lo cual se
deduce del enlace armónico con que se debe entender
el texto del artículo 16, primer párrafo, de la Constitución
Federal y del texto del artículo 94 de la misma codifica-
ción suprema…
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 113

En esta tesis se entiende que la jurisprudencia sólo es la


interpretación reiterada y obligatoria de la ley y que el principio
de legalidad impone a las autoridades la obligación de fundar
y motivar sus actos, por lo que para hacerlo cabalmente, la
autoridad no sólo debe aplicar la ley, sino hacerlo del modo
como ésta ha sido interpretada por los órganos facultados
para ello.

En cambio, el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Admi-


nistrativa del Sexto Circuito, al dictar sentencia en el amparo
directo 304/2001 determinó:

El párrafo octavo del artículo 94 de la Constitución Federal


cuando establece: ‘La ley fijará los términos en que sea
obligatoria la jurisprudencia’, se refiere a la ley ordinaria
que, en el caso es la Ley de Amparo y no la propia ley
constitucional, por lo que no puede sostenerse la obligato-
riedad de las autoridades administrativas de fundar sus
actos en la jurisprudencia, con base en una interpretación
armónica de lo que dicen los numerales 16, primer párrafo,
y 94, octavo párrafo del ordenamiento constitucional.

Por lo cual era necesario establecer si en los términos


legales precisados la jurisprudencia obliga o no a las autori-
dades administrativas. La Segunda Sala de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación, en mi opinión, acertadamente, deter-
minó que:

... no puede sostenerse la obligación de las autoridades


administrativas de fundar sus actos en la jurisprudencia, con
base en una interpretación armónica de los numerales 16,
primer párrafo, y 94, octavo párrafo del ordenamiento
constitucional, en razón de que la obligación de las autori-
114 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

dades administrativas de fundar y motivar sus actos consiste


en citar de manera específica la ley exactamente aplicable
al caso, así como expresar las circunstancias especiales,
razones particulares o causas inmediatas que se hayan
tenido en consideración y la adecuación de entre los moti-
vos aducidos y las normas aplicables, y no citar también
la jurisprudencia respectiva.

Lo anterior se reitera en la jurisprudencia que lleva por


rubro: "Jurisprudencia sobre inconstitucionalidad de leyes. Las
autoridades administrativas no están obligadas a aplicarla
al cumplir con la garantía de fundar y motivar sus actos" (juris-
prudencia 2a./J 38/2002).

En dicha jurisprudencia se reitera el criterio mencionado


y se sostiene:

La obligación de las autoridades administrativas de fundar


y motivar sus actos consiste en citar de manera específica
la ley exactamente aplicable al caso, así como expresar las
circunstancias especiales, razones particulares o causas inme-
diatas que se hayan tenido en consideración y la adecua-
ción de entre los motivos aducidos y las normas aplicables,
y no citar también la jurisprudencia respectiva, esto es, la
obligación de fundar y motivar los actos en ley, no implica
hacerlo en la forma en que haya sido interpretada por los
órganos del Poder Judicial de la Federación, dado que la
jurisprudencia tiene notables diferencias con la Ley y no
puede ser equiparable a ésta, principalmente porque la
jurisprudencia es obra de los órganos jurisdiccionales y
la ley del órgano legislativo, es decir, no es una norma
general y sólo se aplica a casos particulares, conforme al
principio de relatividad de las sentencias que rige el juicio
de garantías (…) habida cuenta por remisión del artículo
94 de la Constitución Federal, los preceptos 192 y 193 de
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 115

la Ley de Amparo, establecen con precisión que la jurispru-


dencia obliga solamente a los órganos jurisdiccionales.

La decisión es acertada porque el principio de legalidad


que establece el artículo 16 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos delimita con claridad que todo
mandamiento escrito de autoridad competente debe estar
fundado y motivado. Correlacionando este precepto con la
garantía de legalidad que regula el artículo 14, párrafo final
de la Carta Fundamental, se infiere, en rigor, que la forma
más adecuada de "fundar" consiste en expresar la norma jurí-
dica que sustente el acto de molestia. En este sentido, los
artículos 16 y 94 de la Constitución federal no podrían servir
de apoyo para sustentar la obligación de las autoridades admi-
nistrativas de aplicar la jurisprudencia en los casos concretos
de su competencia.

No obstante los razonamientos vertidos líneas arriba, debe


Jurisprudencia. Es obli-
mencionarse que la tesis XIV.1o.8 K: "Jurisprudencia.
gatoria para las autoridades administrativas en acatamiento
al principio de legalidad que dimana del artículo 16 Cons Cons--
titucional
titucional", fue alabada por un sector de la doctrina, afirman-
do que consistía en: "Un triunfo excepcionalmente importante
y que fue materia de debate constante".9

b) Contradicción de tesis 27/2004-SS

En este caso la denuncia de la existencia de la contradicción


la formula la oficina del administrador de lo Contencioso de

9
González de la Vega, René, Justicia e ideología, UNAM-IIJ, México, 2005, pp. 122-123.
El autor lista la tesis XIV.1o.8 K, como una de las "tesis relevantes, que mucho nos interesan
en el esfuerzo de comprender la tarea interpretativa judicial, con tonos verdaderamente actua-
lizados por su evidente sentido material y no escuetamente formal" (p. 121).
116 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Grandes Contribuyentes de la Secretaría de Hacienda y Cré-


dito Público, que considera que existe una posible contradic-
ción entre los criterios sustentados por el Segundo Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, en
la revisión fiscal 165/2002, y el del Tercer Tribunal Colegiado
en Materia Administrativa del Segundo Circuito, al resolver
el amparo directo 323/2003.

En la revisión fiscal 165/2002, al resolver el recurso de


revisión, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Adminis-
trativa del Primer Circuito consideró que las autoridades admi-
nistrativas no estaban obligadas a aplicar la jurisprudencia
cuando emiten sus actos; sin embargo, estimó que la Cuarta
Sala Regional Metropolitana del Tribunal Fiscal de la Federación
sí está obligada a aplicar la jurisprudencia en su resolución.

En cambio, en el amparo directo 323/2003, el Tercer


Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Segundo
Circuito, señaló que el artículo 16 de la Carta Magna no esta-
blece la obligación de las autoridades administrativas de fun-
dar y motivar sus actos según la forma en que el Poder Judicial
de la Federación haya interpretado la ley, al ser la jurispruden-
cia sólo aplicable a casos particulares; por tanto, no se con-
sidera una norma general. Además, la jurisprudencia sólo
obliga a órganos jurisdiccionales, por lo que el Tribunal Cole-
giado consideró que la Sala Fiscal era una autoridad adminis-
trativa y que no estaba obligada a aplicar la jurisprudencia.

Aquí, aunque los dos tribunales coincidieron en que las


autoridades administrativas no están obligadas a acatar la
jurisprudencia, existía la discrepancia sobre la obligación del
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 117

Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa de acatar


el contenido de la jurisprudencia. La Sala determinó que en
términos de la jurisprudencia 2a./J 38/2002, derivada de la
controversia 40/2001, las autoridades administrativas no
están obligadas a fundar y motivar sus actos aplicando la juris-
prudencia que declara la inconstitucionalidad de una ley. Sin
embargo, consideró que cuando el Tribunal Federal de Justicia
Fiscal y Administrativa aplica la jurisprudencia realiza un estu-
dio de legalidad no de constitucionalidad. Esta decisión de
la Segunda Sala de nuestro Máximo Tribunal también es acer-
tada, pues de una recta lectura de los artículos 192 y 193 de
la Ley de Amparo, es claro que los "tribunales administrativos",
entre éstos el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Adminis-
trativa, están obligados a acatar la jurisprudencia que emitan
los órganos facultados para ello. Además, esa imposición
a los tribunales administrativos ya se conocía desde 1968,
por lo que la Sala ratificó este criterio.

6. CONCLUSIÓN: HACIA UN NUEVO


PARADIGMA INTERPRETATIVO

Estamos conscientes que de la literalidad de los artículos 16


y 94 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexi-
canos, y 192 y 193 de la Ley Reglamentaria de los Artículos
103 y 107 Constitucionales, se advierte con claridad quiénes
son los sujetos obligados a acatar la jurisprudencia.

No obstante, para el maestro Diego Valadés: "En los Esta-


dos constitucionales el único denominador común consiste en
controlar eficientemente al poder para garantizar el espacio de
libertades individuales y colectivas, así como las relaciones
118 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

de equidad entre los miembros de la sociedad".10 El contralor


por excelencia del poder es el derecho, una autoridad que
se sujeta a las leyes ejerce un poder institucionalizado. Lo ante-
rior nos permite afirmar que para sujetar el Estado al derecho
debe variarse el paradigma interpretativo de la norma (estricta
legalidad o summum ius, suma iniuria), para permitir una
integración armónica del sistema de fuentes del derecho en
la resolución de controversias; para lograr desde la perspec-
tiva general la supremacía del derecho y, en el caso concreto,
un mayor contenido de justicia, lo que se podría conciliar
con la interpretación personal que formulo del artículo 17 de
nuestra Carta Magna, en el que advierto que todo ciudadano
tiene derecho a que se le administre justicia pronta y expedita.

Ahora bien, como lo advertimos en la introducción, una


de las fuentes del derecho es la jurisprudencia, entendida
como la interpretación y determinación del sentido de la ley.
Atendiendo al hecho de que en nuestro régimen jurídico la
jurisprudencia no es una fuente autónoma del derecho, al divor-
ciarla de la norma a la cual complementa podemos llegar al
absurdo de contar con diversas interpretaciones de un mis-
mo precepto: la que genere cada autoridad administrativa
en ejercicio de sus funciones legales, y la que por su parte
fije el Poder Judicial en ejercicio de sus facultades constitu-
cionales y legales; lo anterior, por un lado sería contrario a
la idea del derecho como sistema y, por el otro, atentaría con-
tra la seguridad jurídica, pues ¿cuál sería el sentido de la
norma que su destinatario debería atender? En este contexto,
es deseable que no sólo los órganos jurisdiccionales formal y
materialmente apliquen la jurisprudencia, sino que también
los demás órganos del poder público se sujeten a su contenido.

10
Valadés, Diego, El gobierno de gabinete, IIJ-UNAM, México, 2003, p. 2.
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 119

Para continuar con nuestra argumentación, vamos a apo-


yarnos en la tesis ampliamente aceptada por un sector de la
doctrina: que en la Constitución existen principios y reglas, que
a los principios se presta adhesión y las reglas se obedecen.11
En este sentido, consideramos posible armonizar en nuestro
país los principios plasmados en la Constitución y las reglas
que su propio ordenamiento federal contiene, con las dispo-
siciones secundarias que emanan de ella.

Así, el artículo 14, párrafo final de nuestra Constitución,


señala que: "En los juicios del orden civil, la sentencia definitiva
deberá ser conforme a la letra o a la interpretación jurídica de
la ley, a falta de está se fundará en los principios generales
del derecho".12 Por lo que nada se opone a que, sustentándose
en este precepto constitucional y tomando en consideración
a la norma de la cual emana, las autoridades administrativas
y legislativas puedan aplicar directamente la jurisprudencia,
de manera indicativa o para fundar sus determinaciones, en
el ejercicio de sus funciones.

Lo anterior nos plantea la cuestión de si las autoridades


administrativas deben o no respetar la parte dogmática de
nuestra Constitución. En mi opinión, ese debate ya está supera-
do; como apoyo a lo anterior debe mencionarse que sobre
las garantías de seguridad jurídica que tutela el artículo 14
de nuestra Constitución federal, el Poder Judicial de la Fede-
ración se ha pronunciado en este sentido:

11
Gustavo Zagrebelzki, El derecho dúctil. Ley, derecho, justicia, trad. Marina Gascón, 2ª
ed., Trotta, España, 1997, pp. 109 y 110; para él "distinguir los principios de las reglas
significa, a grandes rasgos, distinguir la Constitución de la ley". Afirma que: "las fórmulas ‘de
principios’ [...] deben ser entendidas en su ethos. En pocas palabras, a las reglas ‘se obedece’
[...] a los principios, en cambio, ‘se presta adhesión’".
12
El contenido de este precepto constitucional se refrenda en el artículo 158, párrafo
segundo de la Ley de Amparo, 1324 del Código de Comercio (aunque sólo menciona a los
principios generales de derecho); y 19 del Código Civil Federal.
120 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Son cuatro las garantías de seguridad jurídica que contiene


el artículo transcrito: en primer término, la garantía de irre-
troactividad de la ley; en segundo lugar, la garantía de audien-
cia, seguida por la garantía de exacta aplicación de la ley
—prohibición de aplicar analogía y mayoría de razón en
los procesos penales—y, por último, la garantía de legali-
dad en materia civil y administrativa [y que]: Es imprescin-
dible tener en cuenta que, al hablar de ‘juicios del orden
civil’, el texto constitucional no alude exclusivamente a los
que son regulados por las normas procesales civiles; antes
bien, esta garantía tiene un alcance que involucra, asimismo,
a los juicios administrativos, mercantiles, familiares, de
arrendamiento y aun a los laborales, 13

Criterio del que se advierte que la exacta aplicación de


la ley —incluida la Constitución como norma— constituye
una garantía de seguridad jurídica que deben acatar, no
sólo los órganos jurisdiccionales, sino también las autoridades
administrativas.

Tampoco debemos soslayar que, en términos del artículo


128 de la Ley Fundamental, todo servidor público, sin excep-
ción alguna, antes de tomar posesión de su encargo prestará
la protesta de guardar y hacer guardar la Constitución y las
leyes que de ella emanen. Además, la obediencia a la Carta
Magna es una consecuencia del principio de legalidad.14

Así, la literalidad del artículo 94, párrafo octavo, de la


Constitución, en el sentido de que "La ley fijará los términos

13
Suprema Corte de Justicia de la Nación, Las garantías de seguridad jurídica, SCJN,
México, 2003, pp. 37 y 75-76.
14
Si la autoridad "sólo puede hacer aquello que la ley le permite" es evidente que "donde
la ley no distingue no se debe distinguir", y por otra parte, si la fuente de legitimidad última
del poder del Estado es la propia norma fundamental, en este contexto si la Constitución
Federal impone la obligación de guardar y hacer guardar su contenido a cierta autoridad
¿de qué manera se le privaría de esa obligación sin caer en la ilegalidad?
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 121

en que sea obligatoria la jurisprudencia", no debe entenderse


como restrictiva, esto es, que única y exclusivamente en la
Ley de Amparo se plasman los supuestos de aplicación de
la jurisprudencia, atendiendo al hecho de que en la Consti-
tución también existen reglas —normas—, como el artículo
14, párrafo final, de las que podría desprenderse otro caso
de obligación de aplicar la jurisprudencia ante el defecto de
la ley, atendiendo a la frase "la sentencia definitiva deberá
ser conforme (…) a la interpretación jurídica de la ley ", y al
uso de la disyunción "o", lo que desde nuestro punto de
vista implica alternativa o una u otra, esto es, la ley o la
jurisprudencia.

Para Miguel Acosta Romero y Alfonso Pérez Fonseca, en


una exégesis de lo dispuesto por el artículo 14 constitucional,
sostienen que la sentencia definitiva deberá ser: 1. Conforme
a la letra de la ley (cuando ésta es clara o perfecta); 2. Con-
forme a la interpretación jurídica de la ley (cuando la norma
es oscura, función teleológica, específica y propia de la juris-
prudencia), y 3. A falta de ésta, se fundará en los principios
generales de derecho (función también propia de la jurispru-
dencia conocida como integración).15 Criterio con el que coin-
cidimos, puesto que, como lo señalamos más arriba, el uso
de la disyunción en la norma constitucional implica, lógica y
gramaticalmente, alternativa, esto es, la posibilidad de optar,
respetando, por supuesto, la prelación que la propia norma
constitucional establece: ley, interpretación de la ley o jurispru-
dencia y, al final, los principios generales de derecho.

No debemos olvidar que en nuestro régimen jurídico se


plantea la posibilidad de que el caso concreto rebase al conte-

15
Cfr. Acosta Romero, Miguel y Pérez Fonseca, Alfonso, Derecho jurisprudencial mexicano,
3ª ed., Porrúa, México, 2002, p. 197.
122 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

nido de la ley, así, en los siguientes preceptos del Código


Civil Federal se establece que:

Artículo 18. El silencio, obscuridad o insuficiencia de la


ley, no autorizan a los jueces o tribunales para dejar de
resolver una controversia.

Artículo 19. Las controversias judiciales del orden civil de-


berán resolverse conforme a la letra de la ley o a su inter-
pretación jurídica. A falta de ley se resolverán conforme a
los principios generales de derecho.

Artículo 20. Cuando haya conflicto de derechos, a falta


de ley expresa que sea aplicable, la controversia se decidirá
a favor del que trate de evitarse perjuicios y no a favor del
que pretenda obtener lucro. Si el conflicto fuere entre dere-
chos iguales o de la misma especie, se decidirá observando
la mayor igualdad posible entre los interesados.

De lo que se desprende que aun cuando no exista ley, ésta


sea oscura o insuficiente en el caso concreto, los Jueces están
obligados a resolver la controversia puesta a su consideración;
por eso se establece como mecanismo de resolución de conflictos
una gradación que va de la ley a su interpretación jurídica,
para culminar con los principios generales de derecho, e in-
cluso, en casos extremos, puede acudirse a la equidad.

Por otra parte, el imperativo de justicia del artículo 17 de


la Carta Fundamental nos podría llevar a concluir que lo impor-
tante en el caso concreto es la justicia, traducida en la seguri-
dad jurídica que se otorga al justiciable al respetar la garantía
de exacta aplicación de la ley.
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 123

En este sentido, existe la posibilidad de que las autorida-


des administrativas actúen dentro de los márgenes del derecho
si aplican la jurisprudencia en los casos concretos de que
tienen conocimiento. Tampoco sería limitante el llamado "prin-
cipio de relatividad de las sentencias", que en rigor sólo rige
para el caso concreto, o sea, que se impone sólo a los litigan-
tes; en cambio, el criterio que emana del caso concreto (la
jurisprudencia) adquiere cierta generalidad en cuanto puede
aplicarse no sólo al caso del cual emanó, sino también a
otros similares.

Ya en otra obra nos ocupamos de manera breve de la


posibilidad de que la jurisprudencia fuera obligatoria para
las autoridades administrativas, dijimos que:

Las reformas planteadas por sí mismas no van a solucionar


el problema de la aplicación del derecho en la materia
administrativa. Para que estas propuestas se pudieran trans-
formar en un gran eje de lucha contra la corrupción y de
tutela de la legalidad, se requieren, paralelamente, otro
tipo de reformas; tal es el caso de los artículos 192 y 193
de la Ley Reglamentaria de los Artículos 103 y 107 Consti-
tucionales, para obligar a las autoridades administrativas
que aplican normas jurídicas a sujetarse a la interpreta-
ción que realiza el Poder Judicial de la Federación de las
mismas, con el propósito de uniformar los criterios de solu-
ción de controversias jurídicas. 16

Aceptar el criterio de que las autoridades administrativas


pueden aplicar la jurisprudencia en sus determinaciones, in-

16
Márquez Gómez, Daniel, Los procedimientos administrativos materialmente jurisdicciona-
les como medios de control de la administración pública; IIJ-UNAM, México, 2002, p. 212.
124 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

cluida la vinculada con leyes declaradas inconstitucionales


por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, permitiría
uniformar la manera en la que se fundamentan los actos de
autoridad en los ámbitos administrativo, legislativo y jurisdic-
cional. Así, para Rubén A. Sánchez Gil, la obligatoriedad de
la jurisprudencia stricto sensu es el elemento necesario para
que logre su objetivo de unificar la interpretación y aplicación
del derecho.17

Otro aspecto benéfico de obligar a todas las autorida-


des, incluidas las administrativas y legislativas, a respetar la
jurisprudencia, se traduciría en la disminución de cargas de
trabajo a los órganos jurisdiccionales, al evitar que los par-
ticulares o las propias autoridades recurran constantemente
a los juicios de garantías para impugnar el contenido de actos
jurídicos contrarios a la interpretación de los Tribunales Fede-
rales. En nuestro Máximo Tribunal están conscientes de esta
situación, puesto que en el amparo directo 304/2001, el Tercer
Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Cir-
cuito, menciona que:

Lo que aquí se considera es sin dejar considerar que de


ser obligatoria para las autoridades administrativas la juris-
prudencia establecida por la Suprema Corte de Justicia
de la Nación funcionando en Pleno o en Salas, y la de los
Tribunales Colegiados de Circuito, ello podría redundar
en la reducción de las controversias ante los tribunales,
pero para ello es necesario adecuar las disposiciones cons-
titucionales y de la Ley de Amparo correspondientes. 18

17
Cfr. Sánchez Gil, Rubén A., "La jurisprudencia de inconstitucionalidad y su aplicación",
en Cuestiones Constitucionales, Revista Mexicana de Derecho Constitucional, número 11,
julio-diciembre de 2004, UNAM-IIJ, México, 2004, p. 237.
18
Véase el resultando tercero de la Contradicción de Tesis 40/2001-PL, pp. 20-21.
COMENTARIO DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS 125

Si bien es cierto que compartimos el criterio vertido por el


Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Tercer
Circuito, discrepamos en lo que se refiere a la necesidad de
la reforma legislativa; estimamos que sería suficiente que se
reconociera que en el párrafo final del artículo 14 existe una
verdadera norma que obliga a todas las autoridades a suje-
tarse a la jurisprudencia al emitir sus determinaciones.

Coincidiendo con el criterio de hacer obligatoria la juris-


prudencia a otras autoridades, distintas de las jurisdiccionales,
para Arturo González Cosío:

Podría plantearse la ampliación de esta esfera de obliga-


toriedad a cualquier autoridad, para darle a la jurispru-
dencia significado más radical; de esta manera quedarían
sujetos a ella los Congresos y los órganos de la Administra-
ción Pública, los cuales se verían obligados a actuar en el
sentido que exija la jurisprudencia en el momento de dictar
sus leyes y actos, respectivamente.19

Sin embargo, su comentario es negativo, pues más ade-


lante advierte del peligro de caer en una "tecnocracia judicial".

Consideramos que no existiría el peligro a que alude el


autor en comento, siempre y cuando se precisen los términos
y formas de aplicación de la jurisprudencia en los ámbitos de
competencia de las otras autoridades; además, la realidad
lo desmiente pues, en los hechos, las autoridades se ajustan
a la jurisprudencia ante el temor de que se declare la nuli-
dad o inconstitucionalidad de sus actos en los posibles litigios
que se planteen. Por lo que esperamos un cambio de paradig-
ma de interpretación en la materia.

19
González Cosío, Arturo, op. cit., p. 288.
ÍNDICE

PRESENTACIÓN ....................................................... 9

INTRODUCCIÓN .................................................... 11

I. ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN DE LA
JURISPRUDENCIA EN MÉXICO ............................... 15
1. ANTECEDENTES HISPANOS ................................... 15
2. ANTECEDENTES EN EL DERECHO INDIANO ......... 17
3. DE LA INDEPENDENCIA AL PORFIRIATO ................ 18
4. LA CONSTITUCIÓN DE 1917 ................................ 22
5. REFORMAS CONSTITUCIONALES EN TORNO
A LA JURISPRUDENCIA ............................................... 25
6. REFORMAS A LOS ARTÍCULOS 192, 193 Y 193 BIS
DE LA LEY DE AMPARO .............................................. 29
7. TEXTO ACTUAL DE LOS ARTÍCULOS 192 Y 193
DE LA LEY DE AMPARO .............................................. 32
8. LA JURISPRUDENCIA DEL TRIBUNAL ELECTORAL
DEL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN ................ 33

II. CONCEPTO DE JURISPRUDENCIA .......................... 37

127
128 LA JURISPRUDENCIA SOBRE INCONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
Y SU OBLIGATORIEDAD PARA LAS AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

III. ÓRGANOS FACULTADOS PARA EMITIR


JURISPRUDENCIA ................................................... 39

IV. OBLIGATORIEDAD DE LA JURISPRUDENCIA .......... 41

V. LA DOCTRINA Y LA JURISPRUDENCIA ................... 45

VI. MARCO JURÍDICO EN MÉXICO DE LA


JURISPRUDENCIA COMO FUENTE DEL DERECHO ... 49

VII. DIFERENCIAS ENTRE JURISPRUDENCIA Y LEY ........ 53

VIII. EL PRINCIPIO DE RELATIVIDAD DE LAS SENTENCIAS


DE AMPARO O FÓRMULA OTERO .......................... 59

IX. LA GARANTÍA DE LEGALIDAD ................................ 63


1. FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN
DE LOS ACTOS DE AUTORIDAD ................................. 64
2. LA GARANTÍA DE LEGALIDAD EN EL ACTO
JURISDICCIONAL Y EN EL ACTO ADMINISTRATIVO ... 64

X. CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/2001 .................... 69


1. ANTECEDENTES ..................................................... 69
2. EXISTENCIA DE LA CONTRADICCIÓN DE TESIS ..... 70
3. TESIS DEL PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO
DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO .............................. 72
4. CRITERIO DEL TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN
MATERIA ADMINISTRATIVA DEL SEXTO CIRCUITO ...... 74
5. PUNTO DE CONTRADICCIÓN ............................... 75
6. CRITERIO QUE DEBE PREVALECER ......................... 75

XI. CONTRADICCIÓN DE TESIS 27/2004-SS ............... 79


1. CRITERIO SUSTENTADO POR EL SEGUNDO
TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA
DEL PRIMER CIRCUITO ............................................... 80
a) Antecedentes .......................................................... 80
b) Revisión fiscal 165/2002 ....................................... 81
2. CRITERIO SUSTENTADO POR EL TERCER
TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA
DEL SEGUNDO CIRCUITO ......................................... 82
ÍNDICE 129

a) Antecedentes .......................................................... 82
b) Amparo directo 323/2003 ..................................... 84
3. MATERIA DE LA CONTRADICCIÓN DE TESIS ......... 84
4. CRITERIO DE LA SEGUNDA SALA DE LA SUPREMA
CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN .......................... 86
5. TESIS DERIVADAS DE LA RESOLUCIÓN .................. 89

XII. CONCLUSIONES .................................................... 93

XIII. COMENTARIO DEL INSTITUTO DE


INVESTIGACIONES JURÍDICAS ............................... 99
1. INTRODUCCIÓN ................................................... 99
2. ARTÍCULOS 94, PÁRRAFO OCTAVO; Y 107,
FRACCIÓN XIII, DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA
DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS ................... 102
3. EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LOS ARTÍCULOS
192 Y 193 DE LA LEY DE AMPARO ............................. 104
4. LOS ARTÍCULOS 192 Y 193 DE LA LEY
REGLAMENTARIA DE LOS ARTÍCULOS 103 Y 107
CONSTITUCIONALES, VIGENTES ............................... 106
5. CONTRADICCIONES DE TESIS 40/2001
Y 27/2004-SS ............................................................ 112
a) Contradicción de tesis 40/2001 ............................. 112
b) Contradicción de tesis 27/2004-SS ........................ 115
6. CONCLUSIÓN: HACIA UN NUEVO PARADIGMA
INTERPRETATIVO ......................................................... 117
Esta obra se terminó de imprimir y
encuadernar en mayo de 2005 en
los talleres de Editorial Color, S.A. de
C.V. Se utilizaron tipos Futura Lt Bt y
Futura Md Bt en 10, 11 y 13 puntos.
La edición consta de 5,000 ejempla-
res impresos en papel bond de 75 grs.

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