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uento infantil con valores - La cigüeña María

El cuento que a continuación vais a leer, ha sido enviado por Miguel Ángel


Anguita Raigón (España). Es una buena herramienta para educar en valores a
los niños mayores, pero también podemos leerlo, al menos un trozo de la historia,
con los bebés, pues se trata de una historia protagonizada por unos tiernos
personajes.
Érase una vez una joven pero valiente cigüeña que, pese a su juventud, se
aventuró a emprender un largo viaje y cumplir con su primera tarea, llevar a una
preciosa niña a los brazos de su mamá.

Preparó todo para tan atrevida aventura, y una mañana empezó un largo camino
desde los cálidos vientos del sur hacia los fríos de las estepas rusas. Vivió toda
clase de aventuras, le sorprendieron tormentas, nieves e incluso un feroz ataque
de una águila que, confundida, no llegó a comprender la hermosa labor que había
comenzado la joven cigüeña.

Pese a todo, y ya malherida y tiritando de frío, vio las heladas aguas del río Volga,
y en vertiginoso descenso, puso a la niña en el dulce regazo de un moisés que
pese a su humildad, sería un cálido lugar donde mecerla y dejarla a los cuidados
de su mamá.

Tras un breve descanso, y sintiéndose en una tierra extraña, emprendió el largo


viaje de vuelta hacia su hogar, una antigua torre donde en un hermoso nido le
esperaba su familia, la que se sentiría orgullosa de a pesas de su tierna juventud,
haber terminado con éxito la bella labor para que las cigüeñas habían sido
creadas.

Así, repetidamente, cumpliría con otros viajes a alejadas partes del mundo donde
madres y padres esperaban la deseada llegada de sus bebés. Se sentía
orgullosa con la tarea que la naturaleza le había concedido, aunque con
tristeza escuchaba a veces las viejas historias que cigüeñas más experimentadas
contaban de bebés que no siempre eran felices en los lugares donde con tanta
ilusión los habían dejado.

La feliz tarea de la cigüeña de llevar los bebés a los


hogares
En la pequeña aldea de la estepa, y en su camita de madera se encontraba
nuestra hermosa bebé Tania. Ya había mucho tiempo que nuestra amiga la
cigüeña María la trajo, pero sus ojos estaban tristes y, junto al frío, empezó a
darse cuenta que no tenía una buena mamá. Pasaron varios años y su vida no
cambiaba. Estaba abandonada la mayoría de los días y apenas su vieja vecina
Ivana, por lástima, le daba algún cariño y mimo, así como la poca comida que
alimentaba su frágil cuerpecito.

Un día, creyendo que en un vaso había leche, se lo tomó, pero el vaso contenía
pintura, y el pequeño cuerpo de Tania se enfermó. Por suerte se curó. Y para
que no estuviera más solita, la llevaron a un orfanato donde la cuidarían junto a
otros niños y niñas que no tenían a sus papás y mamás. Allí tuvo a sus
primeros amigos, y empezó a veces a reír, pero ella lo que quería era tener un
papá y una mamá.

Cuando cumplió cuatro años, una familia que deseaba tener una hija vino a
verla. Después de jugar con ellos los besó y, por primera vez, sus pequeños y
sonrosados labios dijeron las bellas palabras papi y mami. Un día salió radiante
del orfanato y después de un largo viaje, igual como el que en su día hizo la
cigüeña María, fue feliz en una hermosa casa, llena de muñecos, juguetes, y del
amor de su papá y mamá.
La sonrisa de su carita y la alegría de sus ojitos expresaban a todos su felicidad.
Ya no sintió más frío, y el sol del sur la acariciaba, las flores reían de felicidad a su
paso, y todos los animalitos del parque cantaban canciones de amor y felicidad.
Tania ya no lloraría más de soledad. Un día ocurrió algo maravilloso. Paseaba
Tania con sus padres por el bosque y encontró a la ya vieja cigüeña María.

La llamó y le dijo que la llevara otra vez en sus alas. También le pidió si podría
ponerla dentro del vientre de su madre, que lo acariciara su papá, y así ella sería
de nuevo un bebé, tendría la dulce leche del pecho de su mamá, crecería,
y viviría en el mundo de felicidad que a todos los niños les corresponden. La
cigüeña María, sorprendida, la escuchó atentamente.

Y después de pensar un momento le dijo: 'Tania, Dios escribió tu destino, lo que


será tu vida, y para eso se valió de una apasionada y joven cigüeña, de un largo y
alocado viaje, de una mamá y papá que desde la distancia te buscaban, y así en
su infinito amor. Levantó con mimbres de caricias y perfumes de rosa tu hogar,
para siempre, y Dios se siente feliz solamente con que por las noches les dé las
gracias por la vida y un minuto del día te acuerdes de su eterno amor'.

FIN

Actividades educativas tras la lectura de los cuentos


infantiles
Tras la lectura de los cuentos, podemos proponerles algunas actividades
educativas a nuestros hijos con los que trabajemos algunos aprendizajes y
habilidades que deben ir trabajando. Plantea estos ejercicios que a continuación te
proponemos con una dificultad adaptada a las necesidades de tus hijos. Es mejor
sugerir estas actividades como si fuera un juego o un reto que los niños deben
superar, ¡así los pequeños aprenden más y se divierten!
1. Comprensión lectora
En primer lugar te proponemos algunas actividades de comprensión lectora para
que los niños puedan evaluar si han prestado atención en la lectura o necesitan
releer el texto.

¿Cómo se llama la cigüeña protagonista de este cuento?


¿Cuál es la labor de las cigüeñas?
¿Cómo se siente Tania con la mamá en la que la cigüeña le dejó?
¿Encontró la bebé una familia que le daba amor y cariño?
¿Crees que el cuento tiene un final feliz?

2. Educar en valores a los niños


A través de los cuentos infantiles, los padres podemos educar en valores a
nuestros hijos. En el caso de esta historia, se habla de la gratitud, la humildad, la
generosidad de corazón, la bondad... Para ello, puedes organizar un pequeño
debate en casa con preguntas que hagan reflexionar a los más pequeños de la
casa.

¿Qué significa ser agradecido?


¿Qué cosas te hacen sentir agradecido o agradecida?
¿Qué significa ser humilde?
¿En qué sentido se habla de humildad en este cuento?

Los cuentos para niños son una buena herramienta para reflexionar con los niños
sobre los valores. Sin embargo, hay un recurso que nunca falla: nuestro ejemplo.
Nunca podemos olvidar que los padres somos los principales referentes de
nuestros hijos y, por tanto, debemos cuidar nuestros actos y palabras.

3. Envíanos tu cuento
Y si tú o algún familiar o amigo escribe cuentos infantiles, no dejéis de
enviárnoslos a: ¿CÚENTANOS UN CUENTO!

Dibujo para niños inspirado en este cuento corto


¡Seguimos con las actividades divertidas! Ahora te proponemos hacer
un dibujo inspirado en el cuento: una cigüeña llevando un bebé en su pico. Este
tipo de actividades también fomentan el hábito de lectura, porque los niños
saben que pueden hacer ejercicios muy divertidos a partir de la lectura.

Descarga (pincha en la imagen y guárdala en tu dispositivo) e imprime el dibujo


para que tus hijos se diviertan como nunca.

Puedes usar este cuento de dos formas diferentes: puedes animar a tu hijo o hija a
que coloree el dibujo igual que el ejemplo pintado o puedes dejar libertad a su
creatividad para que use los colores que más le gusten.

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