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Resumen
Pasados cien años desde la aparición y nacimiento de la publicación Harmonía, es oportuno
rendirle homenaje por la importancia y el peso que esta revista concedió a la música para Palabras clave
banda. El estudio se ha centrado en una profunda revisión de las diferentes fuentes que han Harmonia, Bandas de
analizado su creación, desarrollo e influencia sobre la estética, la sociedad y la historia. Har- Música, Crítica, Publicacio-
monía fue una revista musical nacida para el estudio, la crítica y la edición de partituras para nes musicales, Partituras
estas agrupaciones. Mariano San Miguel, Julio Gómez y Ángel Andrada fueron los principales
responsables del desarrollo de este trabajo que se convertirá en un testimonio fiel de la reali-
dad que vivieron las bandas de música a lo largo de la primera mitad del siglo XX.
Abstract
On the centenary of the birth of the publication Harmonia, it is appropriate to pay homage to
this magazine dedicated to wind orchestra music. The study focuses on a thorough review of the Keywords
various sources that have comprised its creation, development and influence on aesthetics, so- Harmonia, Wind
ciety and history. Harmonia was a musical magazine born for the study, the critique and edition Bands, Review, Music
of scores for these ensembles. Mariano San Miguel, Julio Gómez and Ángel Andrada were the publication, Scores
main contributors overseeing this project, constituting a faithful testimony reflecting the reality
of wind orchestras throughout the first half of the 20th century.
Azahara Arévalo Galán
Beatriz Martínez del Fresno, en su trabajo Andrada, dejando como único superviviente
«La revista Harmonía (Madrid, 1916-1959), a Julio Gómez, es entonces cuando la revis-
editora de música para banda», recoge fiel- ta moduló su publicación convirtiéndose en
mente el recorrido de la revista durante su una edición semestral. Su último director
edición subrayando cada una de las fases de prolongó la vida de la misma una década
la revista, los propósitos de su publicación más, convirtiéndose en un ejemplo por su
en su nacimiento, las dificultades financie- participación activa como crítico y compo-
ras surgidas en torno a 1920 viéndose obli- sitor. Según Martínez del Fresno «sus cola-
gada a reducir gastos, la apuesta por parte boraciones en la revista Harmonia da refe-
de la Junta Nacional de Música y Teatro lí- rencias a nuestra tradición musical en una
ricos por proyectos musicales reflejados en sección fija»4. Es en la documentación de
sus páginas durante la Segunda República. las obras estudiadas y publicadas en Har-
En 1935 falleció uno de sus fundadores, Ma- monia, en el catálogo de su obra, iniciativa
riano San Miguel, y en el 36, se suspende la de la Fundación Juan March, donde Martí-
edición por el conflicto bélico. Más de una nez del Fresno subraya su «inmenso bagaje
década después, en el 1949, muere Ángel cultural y su humanismo profundo que le
permitían orientar intelectualmente a quie-
nes acudían a él con alguna inquietud»5.
4
martínez Del Fresno, Beatriz. «Un contrapunto del modelo pedre-
lliano: el nacionalismo de Julio Gómez». Recerca musicológica,
11-12 (1991), p. 369.2 Ibid., p. 459.
5
martínez Del Fresno, Beatriz. Catálogo de obras de Julio Gó-
Imagen 1: [Portada]. Harmonía, noviembre 1916 mez. Madrid, Fundación Juan March/Centro de documentación
Imagen cedida por ERESBIL. de la Música Contemporánea, 1987, p. 6.
de las agrupaciones fue narrada por prota- biera formado parte de la audición exclusiva
gonistas de primera línea6: Mariano Miedes de solo unos cuantos oídos especializados.
Aznar, Germán Álvarez Beigbeder, Conrado Otros como Adolfo Salazar y Juan del Brezo
del Campo, Ricardo Villa, Paulino Cuevas, defendían la creación de un repertorio ex-
Bonifacio Gil, Juan del Brezo, César Jua- clusivo y específico para banda, y detractan
rros, Federido Moreno Torroba, José Algíbez, las transcripciones por no ser repertorio
Adolfo Salazar, Emilio Vega, Rogelio Villar, original para la agrupación. Será Harmonía
Julio Gómez, Jesús Calleja, José Subirá, una de las revistas cuyo escenario musical
José Manuel Izquierdo, Joaquín Turina… elige Salazar para dar «sus primeros pa-
Harmonía dejo huella en sus partitu- sos», según Consuelo Carredano, por ser
ras editadas, principalmente por su capa- la publicación, el lugar donde se subraya
cidad como órgano de difusión de la «savia los distintos criterios que prevalecían entre
que alimentó estas agrupaciones». Existie- quienes se interesaban por la «buena mar-
ron obras de nueva creación específicamen- cha de los asuntos musicales en España»7.
te compuestas para ser interpretadas con A pesar de las críticas, muy pocos
exclusividad por las bandas y otras obras dudaban del valor mediático de las ban-
que cumplían la necesidad de divulgar y dar das y su influencia sobre el sentir y vivir
a conocer por el público los distintos reper- de los pueblos. Dentro de este flujo de opi-
torios clásicos: óperas, zarzuelas, suites, niones, había diversas que defendían una
poemas sinfónicos, marchas, intermedios, regulada metamorfosis de las bandas en
obras originales de piano y orquesta, fanta- orquestas con la inclusión de instrumen-
sías… En relación a ambas ediciones se ma- tos de cuerda en su plantilla. Sin embargo,
nifestaron defensores y detractores cuyas la postura de la editorial fue clara desde
opiniones corrieron como ríos de tinta por un principio, apostando por la dualidad de
las páginas de la revista. La legitimidad de composiciones e interpretaciones con el
las partituras cultas que se transcribieron objetivo de enriquecer el patrimonio y la
para completar su repertorio fue uno de los cultura del pueblo, pero también su prio-
grandes debates relacionados con el entor- ridad por vender ejemplares. No obstante,
no bandístico. Julio Gómez a través de dife- todas las bandas que adquirían las parti-
rentes fuentes periodísticas subrayó su im- turas publicadas no procesaban la misma
portancia puesto que era la forma principal dedicación, ni contaban entre sus plantillas
de europeizar al pueblo y de hacerle llegar con profesionales cualificados para inter-
una música, que sin estas agrupaciones hu- pretarlas correctamente. Desde sus inicios
se vio acertada la solución de proponer dos
6
martínez Del Fresno, Beatriz. «La revista Harmonía (Madrid, 1916- tipos de repertorios, el primero que sería
1959), editora de música para banda». Miscellànea Orioll Mar-
torell. Xosé Aviñoa (eds). Barcelona, Universitat, Secretariado de testimonio fiel de las fuentes originales y el
Publicaciones, 1998, p. 223-266.
7
segundo, definido, por Beatriz Martínez del
CarreDano FernánDez, Consuelo. «Adolfo Salazar en España. Pri-
meras incursiones en la crítica musical: la Revista Musical Hispa- Fresno, como una selección que «sin au-
no-americana (1914-1918)». Anales del instituto de investiga- mentar su dificultad estuvo escrupulosa-
ciones estéticas. Universidad Nacional Autónoma de México,
Instituto de Investigaciones Estéticas. 26, 84, 2004, p. 123. mente escogida y artísticamente arreglada
8
martínez Del Fresno, Beatriz. «La revista Harmonía…, p. 231. para las bandas menos numerosas»8.
No todas las travesías fueron ricas y la evolución de la revista, que fue adquirida
doradas, esta publicación esquivó obstáculos por la valenciana Rivera Editores en 2003, «re-
en el camino sufriendo dos grandes crisis: la editando así gran cantidad de las obras para
primera, nacida en la década de los veinte, banda publicadas en la revista madrileña»15.
cuyas suscripciones milagrosamente soste- El siglo XX ha sido testigo del creci-
nían sus páginas y cuyos resultados fueron miento y desarrollo de las bandas en España
las suspensiones temporales de quizás las especialmente en el litoral levantino a pesar
partes más populares de su entramado, sus de las continuas dudas sobre su importancia
partituras; y por otro, la Guerra Civil, que dejó frente a las orquestas. Las bandas son hoy un
huella en la editorial puesto que la base que instrumento que hace llegar la música a to-
sostenía los pilares de esta gran casa deno- dos los diferentes rincones de una población.
minada Harmonía fue la más brutalmente Estas contribuyen por un lado a la recupera-
atacada, su pueblo. Quedó mermada así la ción del patrimonio, además de construir una
conciencia moral caracterizando los años cantera de músicos, que sin necesidad de
bélicos y posteriores por un vacío entre las adquirir la profesionalidad de sus estudios,
páginas de la publicación. A pesar de cele- viven y sienten la música con un espíritu que
brar dos décadas de producciones, tuvieron prolifera sus instituciones. Estas bandas son
que ausentarse y, ante sorpresa de muchos, un capítulo de nuestra historia, cuyo discurso
volver con más fuerza, puesto que muchos en parte fue elaborado por Harmonía a través
archivos fueron destruidos y la necesidad de de sus escritos, transcripciones y composi-
recuperar partituras y arreglos estuvo vigen- ciones. Es necesario no olvidar que una parte
te entre las agrupaciones que sobrevivieron de este discurso histórico fue construido por
a la destrucción. Tras la pérdida de su princi- estas tendencias que surgieron y se desarro-
pales maestros y precursores, en las últimas llaron en las localidades, que dieron trabajo,
décadas a pesar de su constancia el número formación y salida a muchos músicos cerca
de publicaciones fue menor, con un carácter de sus hogares. En ocasiones, está línea de
semestral hasta reducir a un solo número en investigación es olvidada por muchos que solo
su última tirada. dirigen su mirada hacia los temas que duran-
Durante gran parte de la segunda te muchos años nutrieron a una pequeña élite
mitad del siglo XX Harmonía fue únicamente privilegiada. Solo nos queda analizar las hue-
el recuerdo de algunas bandas que se nutrían llas de nuestro pasado para construir un lega-
del catálogo de sus partituras, quizás porque, do fiel para las futuras generaciones, hacien-
como bien subraya el musicólogo Juan Carlos do una parada en el camino porque de todas
Galiano, la «historiografía musical del s. XX ha las huellas musicales, Harmonía fue una que
ignorado frecuentemente el fenómeno ban- brilló con notable fuerza.
dístico, siendo consideradas tanto las bandas
14
como los coros, una rémora estética»14. Sin galIano Díaz, Juan Carlos. «En pro y en contra de las bandas
de música: polémicas y repertorio lírico en la revista Harmonía
embargo, desde 1975, un especial porcentaje (1920)». Comunicación inédita realizada en el Congreso Música y
de los fondos musicales de Harmonía fueron prensa en España (1868-1936): ópera, drama lírico y zarzuela
celebrado en la Universidad de Oviedo del 12 al 14 de noviembre
expuestos a la venta de nuevo por la editorial de 2015.
Respaldiza. Galiano realizó el seguimiento de 15
Ibidem