UNA TAZA DE CAFÉ

En un día tranquilo con último trabajo por hacer me quede a esperar su llegada pasada de
las 4 a la hora que la había citado con el olor de un café caliente en un ambiente
reconfortante podía verse a lo lejos su silueta y escuchar su voz diciendo:

-Buenas tardes disculpa por haber llegado tarde, tuve un día muy ocupado en el trabajo,
casi me olvido de que ahora era la entrevista.

-Buenas tardes, no se preocupe estaba disfrutando de este café, no le apetece tomar uno.

-si gracias, ya lo pediré

-Sí, claro, en la espera de su café ¿le parece si iniciamos? –dije de forma entusiasmada

-Por supuesto- dijo Úrsula

Primeramente me gustaría decirle que su concepto de lo que simboliza una bolsa es

bastante acertado pues como capta a las cosas incluso a las personas como parte dentro
de un recipiente o un vasto sesto que sería el universo.- dije esperando su respuesta – y
como se le vino a la mente esta idea?

-Analizando desde otra perspectiva las cosas. El ser humano invento una bolsa para
guardar las cosas en ella para posteriormente utilizar los objetos o consumir los alimentos
y si analizamos desde otra perspectiva existen muchos lugares que almacenan cosas, una
bastedad de casas albergan personas, un refrigerador almacena un alimento y una bolsa
de mano lleva adentro el monedero y el maquillaje de una mujer. – dijo Úrsula muy
concentrada

-Muy interesante lo que usted plantea, pero dígame, ¿cómo va esto encaminado a la
ciencia ficción? – dije de forma intrigada

-Excelente pregunta. La ciencia ficción resulta ser la forma en que describes que pasa
realmente, esa bastedad de cosas que se acercan. – dijo Úrsula

Una asombrosa descripción de tu parte. – dije de forma cautivada

Y así se fue la tarde, entre preguntas, respuestas. Disfrutamos de un cremoso café y una
maravillosa conversación. Al final solo quedo despedirnos y desear un hasta luego.