La Revolución De La Cultura Audiovisual

Jorge Carrión Y Rosa Belmonte Entrevistados Por Antonio San José E Íñigo Alfonso
El principal tema que afecta a todos es el consumo de la televisión, la industria audiovisión,
las series de televisión y el auge de estas.
Las series siempre han existido, ¿pero a que se ah debido el auge de la ficción?
Existe un momento en el que el cable transforma la televisión y luego el internet que
revoluciona, es por esto esque se ha crecido la oferta de series, se pueden ver en la cantidad
que queramos y en el lugar que sea.
En el año 81 se dio un gran cambio con una serie “Street” en la cual habían muchos hilos
argumentales, muchos más personajes principales, se crea el dramatismo en las series, las
cales el espectador no había visto nunca antes.
El ser humano es un ser adicto a la ficción y a la serialidad, se manejaba mucha la novela,
en el siglo XIX se maneja esta en los escritos tales como uno de los mas conocidos que es
el Quijote, ya en el siglo XX esta pasa al cine tales como James Bond, Cantinflas, Star
Wars etc y en siglo XX! Televisión fragmentada en la que se vive.
Telerrealidad y la Tele ficción se van o se volvieron, temas importantes o relacionados en el
siglo XXI
Después nacen las redes sociales, Facebook provoca sobre todo el fenómeno perdidos y ya
en los últimos años con Netflix y Amazon lo cual se entra en un tema masivo, lo cual ya
cansa el sistema serial.

Las redes sociales, la inmediatez, las campañas virales y la interactividad han

revolucionado la comunicación audiovisual en todos sus ámbitos. Medios, marketing y
publicidad invierten ahora sus esfuerzos en adaptar todos los soportes a las necesidades de
los internautas, la audiencia que más ha crecido en el siglo XXI y hacia la que se dirigen
todas las miradas.

Se viene incrementando el tema oral, tales como el podcasts y las series para escuchar, hoy
en día todo es una ficción, en nuestra cabeza hay miles de escenas entre la realidad y
ficción
¿Por qué necesitamos ficción o ponernos delante de la televisión después de un día largo y
agotador?
Es una actualización de la lectura de las novelas de la antigüedad, a las personas le gusta
adentrarse a explorar la vida de los demás
La televisión se ah vuelto mas atractiva en cambio de los libros, hoy en día se busca
reunirse con familia y/o amigos para encontrarse en un punto del día para compartir frente a
la pantalla
Es evidente, por tanto, que el formato vídeo ya forma parte del irreversible proceso 2.0.
Pioneros en esta revolución han sido los creadores de The Mad Video, un grupo de jóvenes
emprendedores y nativos digitales que han sabido darle una vuelta de tuerca al soporte
audiovisual e integrarlo definitivamente en la era digital.
Y esto viene igual desde la antigüedad, cuando hasta nuestros propios abuelos se ponían
frente a las cajas grandes con sonido que se calentaban para escuchar las noticias
Hemos pasado a la televisión en el bolsillo, la tenemos en el móvil, en cualquier lado lo
podemos sacar en cualquiera lado para checar un canal
Hoy en día todas las plataformas digitales están hechas en forma de serie, y estas buscan es
llamar la atención, y adentrarnos tanto que no queramos salir de esta, claro ejemplo de esta
es Netflix con la reproducción automática de los capítulos
El logaritmo de Google o de Facebook, que nos limita el mundo que es algo mas complejo
a una pequeña parte de que nos interesa o solo nuestros amigos, de modo que nos hace
olvidar el resto de mundo que hay detrás de esto.
Estas plataformas tienen vigilado todo lo que se hacen, si buscas algo, si pausas o
reproduces un video, este te supervisa todo, cuando piensas en algo y de la nada te sale en
lo que estabas pensado de la nada.
Efectivamente, se trata de un sistema que integra el texto y la imagen dentro del vídeo, y no
a la inversa, por lo que atiende a las demandas de la sociedad de la información, con
usuarios que exigen un flujo constante e inmediato de datos y que reclaman participar de
toda información cuanta reciben.
La unión de todos los formatos informativos en un solo soporte culmina, por el momento,
el proceso comunicativo digital y abandera la revolución de la comunicación audiovisual,
demostrando que la creatividad y la magia de las imágenes soñadas por George Méliès
siguen siendo, no solo el motor de su Viaje a la Luna, sino también la razón de ser de los
contadores de historias.