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UNIVERSIDAD CATÓLICA DE HONDURAS

“NUESTRA SEÑORA REINA DE LA PAZ”

CAMPUS SAN PEDRO Y SAN PABLO

INVESTIGACIÓN

ALUMNO(A): MELANI NICOLE DÍAZ HÉRCULES


0501200209671

TEMA: RABDOMIOSARCOMA

ASIGNATURA: LABORATORIO DE HISTOLOGIA

SECCIÓN: 1309

CATEDRÁTICO: DRA. JENNIFER GUZMAN

FECHA DE ENTREGA: 11.FEB.2023


RABDOMIOSARCOMA
El rabdomiosarcoma (RMS) es un tumor maligno que se origina a partir de células musculares
esqueléticas normales. No se sabe con seguridad por qué una célula muscular estriada
experimenta transformación neoplásica. También llamada: rabdomiosarcoma infantil,
rabdomiosarcoma embrionario, rabdomiosarcoma alveolar; puede ocurrir durante la infancia y
puede estar presente en el nacimiento.

Tipos de Rabdomiosarcoma
● Embrional: Este es el tipo más común. Es más común en los niños pequeños.
● Alveolar: Es más común en niños más grandes y adolescentes. Este tipo crece con más
rapidez. Es más probable que se extienda a otras áreas del cuerpo (haga metástasis).

Sintomas
El síntoma más común es una masa que puede o no ser dolorosa. Otros síntomas varían según la
localización del tumor:
● Los tumores en la nariz o en la garganta pueden causar sangrado, congestión, problemas
para deglutir o problemas en el sistema nervioso si se extienden al cerebro.
● Los tumores alrededor de los ojos pueden causar protrusión ocular, problemas con la
visión, hinchazón alrededor del ojo o dolor.
● Los tumores en los oídos pueden causar dolor, pérdida de la audición o hinchazón.
● Los tumores vaginales y vesicales pueden causar problemas para iniciar la micción o
tener deposiciones, o un control deficiente de la orina.
● Los tumores en los músculos pueden llevar a que se presente una protuberancia dolorosa
y se pueden confundir con una lesión.

Los niños con RMS orbitario (alrededor del 10% del total de casos de RMS) pueden presentar un
ojo protruyente o hinchado (proptosis).
Aunque en ocasiones este cuadro puede ser confundido con una infección del seno orbitario
(sinusitis), los niños con tumores en esta localización carecen de los síntomas adicionales que
habitualmente acompañan a esta infección (dolor, fiebre, coloración purpúrica del ojo).

Causas
No hay raza o área del mundo que se haya relacionado con tasas más altas de rabdomiosarcoma.
Es un poco más común en niños que en niñas.
Algunos cambios en el ADN transmitidos de sus padres (heredados) pueden aumentar el riesgo
de rabdomiosarcoma. Se sabe que los rabdomiosarcomas están asociados con afecciones como el
síndrome de Li-Fraumeni, el síndrome de Costello y el síndrome de Noonan. Se desconoce la
causa exacta de estas mutaciones genéticas.
Tratamientos
Los pacientes generalmente se someten primero a cirugía.

● Cirugía — se utiliza para realizar una biopsia del tumor (extraer una pequeña parte para
examinar en el laboratorio) y para extraer el tumor o tanto de este como sea posible.
Después de la cirugía todos los pacientes reciben quimioterapia.

● Quimioterapia (“quimio”) — utiliza medicamentos potentes para destruir las células del
cáncer o impedir que crezcan (se dividan) y formen más células cancerosas.
- La quimio puede inyectarse, para que pueda desplazarse por el cuerpo.
- Algunos tipos de quimio se pueden administrar por vía oral.
- La terapia de combinación usa más de un tipo de quimio a la vez.

En algunos pacientes se puede usar más cirugía y/o radioterapia.

● Radioterapia — usa rayos X de altos niveles de energía u otros tipos de radiación para
destruir las células cancerosas o detener su crecimiento:
- La radiación externa usa máquinas fuera del cuerpo para proporcionar la dosis de
rayos X.
- La radiación interna usa agujas, semillas, cables o catéteres (tubos) para
administrar la radiación directamente en o cerca del cáncer.

Cambios Histologicos
La implantación de terapias ajustadas al riesgo en los niños con RMS se basa en el intento de
maximizar la probabilidad de curación reduciendo simultáneamente la aparición de
complicaciones a corto, medio y largo plazo. Los efectos tardíos relacionados o atribuibles a la
terapia pueden desarrollarse meses o incluso años después de haberse completado el tratamiento.

1. Infertilidad (asociada especialmente con el uso de agentes alquilantes como la


ciclofosfamida y la ifosfamida): El riesgo de aparición de infertilidad inducida por
quimioterapia es mucho mayor en los niños que en las niñas. Siempre y cuando sea
factible, incluso en varones en el pico de crecimiento puberal, debe valorarse la
posibilidad de criopreservación de esperma. Pese a que son objeto de intensa
investigación en los laboratorios, la criopreservación del tejido ovárico o la de las
ovogonias no es actualmente un procedimiento factible como técnica rutinaria de
preservación de la fertilidad en niñas; afortunadamente, el riesgo de infertilidad parece
ser mucho más bajo en éstas que en los varones. Para aquéllas que vayan a recibir
irradiación pélvica, o para niños a los que vaya a suministrarse irradiación escrotal, la
trasposición quirúrgica de la(s) gónada(s) lejos del campo de radiación puede ser de
ayuda en la preservación de la función hormonal y/o de la fertilidad.

2. Disfunción vesical: Aunque la cirugía conservadora "no mutilante" y la irradiación a


dosis completa se ha convertido en el tratamiento de elección para la preservación de la
vejiga en niños con RMS prostático o vesical, aproximadamente la mitad de los niños con
vejigas "intactas" tendrán uno o varios de los síntomas propios de la disfunción vesical,
incluyendo goteo miccional, incontinencia urinaria y enuresis.

3. Daño por radiación de las estructuras de cabeza y cuello: El uso de la radiación para
tratar tumores originados en las estructuras de la cabeza y el cuello es con frecuencia
impracticable dada la ausencia de órganos o tejidos "no esenciales" que puedan ser
"sacrificados" si se intenta realizar una resección quirúrgica completa. Entre las
complicaciones bien conocidas de la radiación se incluyen la formación de cataratas tras
dosis del globo ocular tan bajas como de 1000 cGy; el desarrollo facial asimétrico como
resultado del crecimiento de hueso atrapado de forma permanente y de la fibrosis
("cicatrización") de los tejidos circundantes; infecciones crónicas de los senos
paranasales; retraso del crecimiento secundario a lesión hipofisaria; y anomalías dentarias
complejas múltiples. Se desconoce si ciertas técnicas nuevas de radioterapia, dirigidas de
forma más precisa, como la Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT), reducirá el
riesgo de complicaciones tardías derivadas de la irradiación de las estructuras de cabeza y
cuello.

4. Neoplasias secundarias (SMN): Quizá la complicación tardía más devastadora del


tratamiento de cualquier tipo de cáncer, y no sólo del RMS, sea el desarrollo de una
segunda neoplasia maligna (SMN). El uso de radio y quimioterapia pueden llevar al
desarrollo de segundas neoplasias malignas. Las neoplasias secundarias asociadas a
quimioterapia son más frecuentemente leucemias (típicamente leucemias mieloides
agudas [AML]) y podrían estar relacionadas con el uso de agentes alquilantes
(ciclofosfamida e ifosfamida) y de inhibidores de la topoisomerasa II (etopósido y
doxorrubicina). El riesgo de aparición de una leucemia secundaria es, afortunadamente,
bastante bajo (generalmente de entre el 1 y el 2%). La radiación también se asocia al
desarrollo de cánceres secundarios, más frecuentemente otros sarcomas (ya sea del hueso
o de partes blandas). A las dosis que se usan habitualmente para tratar niños con RMS, el
riesgo de desarrollo de sarcomas secundarios es aproximadamente del 5% a los 20 años.
A diferencia de lo que sucede con las leucemias secundarias, que de modo característico
aparecen en los primeros 4 años tras el tratamiento, la mayoría de los sarcomas
secundarios no se desarrolla hasta pasados 5 años o más del fin de éste. La posible
contribución de "factores de riesgo genético" subyacentes en el desarrollo de las
neoplasias malignas inducidas por el tratamiento está siendo investigada de forma activa.
BIBLIOGRAFIA

Dra. Eva Tejerina y Dr. Ricardo Cubero. (2010). Rabdomiosarcoma. 2023, enero 30, de Liddy
Shriver Sarcoma Initiative. Sitio web:
https://sarcomahelp.org/translate/es-rabdomiosarcoma.html

Cancer.Net Editorial Board. (2021). Rhabdomyosarcoma. 2023, enero 30, de Cancer.Net. Sitio
web: https://www.cancer.net/cancer-types/rhabdomyosarcoma-childhood

NIH. (2022). Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil (PDQ®)–Versión para profesionales de


salud. 2023, enero 30, de Instituto Nacional del Cancer. Sitio web:
https://www.cancer.gov/espanol/tipos/sarcoma-de-tejido-blando/pro/tratamiento-rabdomiosarco
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St. Jude Children's Research Hospital. (2023). Rabdomiosarcoma. 2023, enero 30, de St. Jude
Children's Research Hospital. Sitio web:
https://www.stjude.org/es/cuidado-tratamiento/enfermedades-que-tratamos/rabdomiosarcoma.ht
ml

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