Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Noticias 9, 16, 23 Junio 2017
Noticias 9, 16, 23 Junio 2017
"Gracias de Dios, el número de peregrinos siempre aumenta", así respondía Marija, en una entrevista
en Radio María Italia el pasado 25 de junio, a la pregunta del padre Livio sobre la numerosa
asistencia de peregrinos a Medjugorje con motivo del 36 aniversario da las Apariciones de la Reina de
la Paz.
La vidente informaba: "Hoy, en el altar había 191 sacerdotes que han concelebrado, más los
sacerdotes que estaban confesando en torno a la parroquia, es un triunfo de la fiesta de la Virgen".
Marija invitó a agradecer a su vez también "la perseverancia del gran amor de Dios que nos ha
enviado a la Virgen". "Esta gratitud también la tenemos a la Virgen, porque sin Ella no cambia el
mundo".
Refiriéndose a la fuerte campaña para desacreditar Medjugorje en los medios de comunicación que
se ha desatado en el último año, la vidente Marija advertía: "el diablo sabe lo que hace, no debemos
dejarle vencer".
Marija vive parte del año en Italia y parte en Medjugorje. Ve en este hecho algo providencial, pues se
siente responsable de alentar al pueblo italiano en esta lucha contra el demonio: "creo que la Virgen,
no en vano, me ha mandado a Italia".
Como ha denunciado Marija, el demonio quiere captar nuestra atención a través de los medios de
comunicación, confundirnos y robarnos el recogimiento y la oración. Por eso, el 25 de junio de 2017
la Virgen nos invitaba: "abríos a la oración profunda". Respondamos a esta llamada de nuestra
madre para poder vencer al demonio en este "momento crucial".
Así nos invitaba la Reina de la Paz el pasado 25 de junio en su mensaje a Marija. La vidente nos
explicaba esta frase de la siguiente manera:
"Que oremos tanto que nuestra oración comience a ser un canto, comience a ser gratitud, comienza
a ser alegría, comienza a ser testimonio". "La Virgen quiere que seamos cristianos alegres, con
gratitud a Dios, como Ella dice, que nuestro corazón cante".
La vidente Marija nos transmite que no se trata sobre todo de cambiar nuestras oraciones de
petición por oraciones de gratitud sino de entrar en una "oración profunda", como decía al inicio el
mensaje de la Reina de la Paz. Es solo en esta "oración profunda" que uno descubre esa alegría y
gratitud, comprende que grande es haber sido creado por Dios para "la Eternidad".