Para sentencia interlocutoria de segunda instancia estos autos
caratulados: "GHIGLIONI, ROSARIO C/ RODRÍGUEZ, DELIA Y OTROS – ACCIÓN PAULIANA Y SIMULATORIA EN SUBSIDIO" - IUE 156-162/2005, venidos a conocimiento de este Tribunal por virtud del recurso de apelación interpuesto por la parte demandada contra la interlocutoria Nº 1408/2009 (fs. 476), dictada por la Sra. Juez Letrado de Primera Instancia de Artigas de 2º Turno.-
R E S U L T A N D O:
1) Por la recurrida –en lo que aquí interesa- se tuvo por
acreditada la cesión de derechos y por operada la sucesión de parte actora (art. 35 del C.G.P.) y se la tuvo por desistida de su pretensión (arts. 228 y 231.2 del C.G.P.),.-
2) Contra ella se alzaron los demandados, interponiendo
recursos de reposición y apelación en subsidio y articulando los agravios que surgen de fs. 479-480.- En lo medular, sostuvieron que se había violado lo dispuesto por el art. 35.2 del C.G.P. en tanto se les debía haber escuchado a efectos de la oposición allí prevista, máxime cuando se habían opuesto a la cesión en el mismo acto de su notificación, de lo que también se derivaba que había sido desajustado a derecho tener a la parte actora por desistida de su pretensión.- Dedujeron conjuntamente incidente de nulidad por indefensión por vulneración del citado art. 35.2.-
3) Por providencia Nº 1909/2009 (fs. 482) se confirió traslado
de los recursos y se rechazó por formalmente inadmisible el incidente de nulidad con fundamento en el art. 115.2 del C.G.P.-
4) Sergio Irigaray evacuó el traslado, abogando por la
confirmatoria en los términos de fs. 483 y vto.-
5) Por resolución fundada Nº 3362/2009 (fs. 488-491) se
mantuvo la recurrida y se franqueó la apelación, con efecto suspensivo, para ante este Tribunal donde, recibidos los autos el 24/11/2009 (fs. 500) y tras el estudio de precepto (fs. 502-503) y se resolvió dictar decisión anticipada al amparo de los dispuesto por el art. 200.1 Nº 1 del C.G.P.-
C O N S I D E R A N D O:
I) El Tribunal, por el número de votos legalmente requerido (art.
61 de la Ley Nº 15.750), acordó confirmar la interlocutoria apelada por los fundamentos que se pasan a exponer.-
II) Cabe recordar que el objeto de esta instancia queda limitado
a los agravios introducidos por el apelante.- Dicha precisión resulta determinante para la decisión acordada puesto que los embates críticos de la parte impugnante solo hacen caudal de cuestiones de forma.-
En efecto, surge de su escrito de fs. 479-481 que se releva la
inobservancia de lo dispuesto por el art. 35.2 del C.G.P. en cuanto no se les escuchó antes de tener por operada la sucesión de parte, máxime cuando se habían opuesto a la cesión del crédito, de lo que derivan que no correspondía haber tenido a la parte actora (al cesionario) por desistida de su pretensión.-
Sin embargo, no especifican cuáles serían las razones que
podrían haber esgrimido para que dicha sucesión de parte no se aceptara, a lo que cabe agregar que la oposición a la cesión del crédito no tiene otros efectos que la posibilidad de oponer al cesionario todas las excepciones que podría haber opuesto al cedente, aun las meramente personales (art. 1760 C.C.) (cf. Gamarra, Jorge, T.D.C.U., T. IV, 4ª edición actualizada, 2001, p. 381 y 385-387).-
Dicho sea en otras palabras, los apelantes no ponen de
manifiesto cuál sería el perjuicio que se les causó por no habérseles oído y, de todas formas, tienen a su disposición las acciones que estimen pertinentes en relación a la cesión de crédito no consentida.-
Por lo tanto, si bien es cierto que se omitió recabar su
consentimiento antes de admitir la sucesión procesal, como correspondía (cf. C.G.P., Comentado, …, Véscovi y otros, T. 2, p. 50- 51), cuando los cedidos tuvieron oportunidad de esgrimir las razones de su oposición a dicha sucesión, o sea, al momento de recurrir, nada dijeron, salvo una escueta referencia a fraude y/o estafa procesal carente de articulación concreta de los hechos que los habrían configurado.-
Entonces, como no puede haber nulidad sin perjuicio (art. 110
del C.G.P.), es pertinente confirmar la recurrida en cuanto tuvo por operada la sucesión de parte actora.-
III) Luego, el desistimiento de la pretensión no es más que un
desarrollo del principio dispositivo que regula el proceso civil (art. 1 C.G.P.) que se concreta en una declaración unilateral de voluntad de contenido abdicativo que el Tribunal resuelve inaudita altera pars.-
En el caso, no se cuestiona directamente el desistimiento sino
como consecuencia de la admisión de la sucesión de parte, de lo que se deriva que el rechazo de los agravios vertidos en contra de dicha admisión, conlleva la confirmatoria de la impugnada en cuanto tuvo a la parte actora por desistida de su pretensión.-
IV) Se condenará a los perdidosos al pago de las costas de la
instancia por ser de precepto, aunque no así al de los costos en atención a las peculiaridades del presente (art. 57 C.G.P.).-
Por los fundamentos expuestos, normas citadas y lo dispuesto
por los arts. 197, 198 y 257 del C.G.P., el Tribunal R E S U E L V E:
CONFÍRMASE LA INTERLOCUTORIA APELADA, CON
COSTAS.- HONORARIOS FICTOS: $ 10.000.- NOTIFÍQUESE Y DEVUÉLVASE.- DRA. NILZA SALVO – MINISTRO – DR.ALICIA CASTRO – MINISTRO – DR. EDUARDO VAZQUEZ – MINISTRO – ESC. J.A da MISA - SECRETARIO FICHA 156-162/2005 P.E. 301/2009 DERECHO PROCESAL, SUCESIÓN DE PARTE, POR CESIÓN DE CRÉDITO LITIGIOSO, OMISIÓN DE OIR AL CEDIDO, NO CAUSA NULIDAD SI NO SE INVOCA PERJUICIO, DESISTIMIENTO DE LA PRETENSION, ES DESARROLLO DEL PRINCIPIO DISPOSITIVO, SE CONCRETA EN MANIFESTACION UNILATERAL DE VOLUNTAD DE CONTENIDO ABDICATIVO.-