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Fallecimiento 1818
Zaragoza
Nacionalidad Española
Familia
Información profesional
Ocupación Militar
Índice
Origen[editar]
Hijo de José Amar y Arguedas, médico de Fernando VI y de Carlos III, y
de María Ignacia Borbón y Vallejo, fue bautizado como Antonio Joseph
Theodoro Miguel Benito Cristóbal Amar y Borbón en Zaragoza, el 24 de marzo
de 1742.7 Su abuelo, Miguel de Borbón y Berné también había sido médico de
Fernando VI. Su hermana, Josefa Amar y Borbón, fue una afamada ilustrada y
feminista aragonesa.8
Carrera militar[editar]
En 1762, a la edad de veinte años, ingresó como cadete en el Regimiento de
caballería de Farnesio, donde obtuvo diversos rangos hasta alcanzar el de
brigadier, al cabo de más de 31 años de servicio. En 1770 fue
nombrado caballero de la Orden de Santiago. Participó en el sitio de Gibraltar,
en 1779, y en la guerra contra la Francia revolucionaria en 1792 (Primera
Coalición), donde se destacó al cubrir la retaguardia de las tropas españolas
hasta Tolosa, en la frontera de Guipúzcoa, en 1794. En 1802, siendo mariscal
de campo, fue hecho teniente general de los Reales Ejércitos. En ese mismo
año, mientras ejercía la comandancia de Guipúzcoa, fue nombrado, mediante
Real Decreto del 26 de julio, como virrey, gobernador y capitán general
del Virreinato de Nueva Granada, además de presidente de la Real Audiencia
de Santafé.
Antes de partir, Amar y su esposa se dirigieron al papa Pío VII implorando «...
su permanente y apostólica bendición, para prometernos el éxito más conforme
al servicio del Todopoderoso y contraer más méritos para que V. S. S. nos
distinga, así como en los bienes espirituales, en los ejercicios que hubieren de
ser mayor exaltación de la Santa Sede...».9
El rey Carlos IV, en las Instrucciones al virrey Amar y Borbón, le dice: «...
Reconoceréis muy atenta y particularmente lo que está dispuesto, y ordenado»,
y luego le advierte de la siguiente manera:
... Como quiera que se debe esperar, y yo confío de los Españoles residentes en aquellas partes,
que conforme a la obligación de buenos, y leales vasallos, y nobleza de nación acuden siempre con
la obediencia que deben a las cosas de mi servicio, pero si (lo que no espero, ni Dios permita)
sucediese que algunos inquietaren la tierra, o causasen alteración, o escándalo, en tal caso
procurareis reducirlo de manera que atajéis y excuséis con prudente prevención los inconvenientes
que podrían resultar de semejantes movimientos, y desasosiego, y no pudiéndolo atajar con los
dichos suaves, y buenos medios, usaréis de los que os parecieren más convenientes para que la
tierra esté quieta, y sosegada, y los causadores de semejantes escándalos queden castigados con
las penas que merecieren sus delitos.10
Gobierno[editar]
Los cinco primeros años del gobierno de Amar y Borbón fueron de una relativa
calma. A partir de 1808, con la invasión napoleónica a España, el poder
virreinal se debilitaría hasta colapsar definitivamente en 1810.
1803:
Al llegar Amar a la población de Honda, envió a Santafé a su sobrino, don
Manuel Jiménez, en calidad de embajador, para avisar a Pedro Mendinueta,
virrey al que sucedería en el cargo, y para poner en manos del Regente de la
Audiencia el título que lo acreditaba como presidente de dicho Tribunal.11 El 16
septiembre llegó a Santafé la comitiva del nuevo virrey y su esposa. Como era
tradición, se les brindó un recibimiento fastuoso, según refiere don José María
Caballero en una crónica publicada en la obra Particularidades de Santa Fe:
A 16 de septiembre, a las cinco y media de la tarde entró el Señor Virrey D. Antonio Amar y Borbón
y su esposa Doña Francisca Villanova; le hicieron el recibimiento el señor Sanmiguel y don Juan
Gómez, alcalde de este año, el uno en Facatativá y el otro en Fontibón, donde se hizo una ramada
que no se ha visto otra semejante en recibimiento de Virreyes. La casa estaba de primor alhajada y
abastecida; se gastaron más de $ 5.000 en solo la comida y refresco. Soy testigo, porque ayudé a
servir la mesa. No hubo Virrey a quien se le hicieren más obsequios de grandeza y aparato que a
éste. El día 22 se fue el Virrey Don Pedro Mendinueta para España, a las siete y media de la
mañana.1213
1808:
En la noche del 2 de agosto de 1808 llegó a Santafé don Juan José
Pando y Sanllorente, enviado de la Junta de Sevilla, con el objeto de
asegurar la fidelidad del virreinato a Fernando VII, mediante jura pública
y solemne. El 5 de septiembre, con todas las autoridades de gobierno
reunidas, el virrey procedió a jurar al rey Fernando VII y declararle la
guerra a Francia. Además, se comprometió a enviar altas contribuciones
económicas a España para ayudar a financiar la guerra.22 En total, el
virreinato de Nueva Granada envió a España una contribución de más
de medio millón de pesos, lo que le valió al virrey el nombramiento
de caballero gran cruz de la Orden de Carlos III, que le fue otorgado por
la Junta Suprema.23
A finales de 1809 el virrey escribió un informe a la Suprema Junta de
Sevilla en el que decía:
Durante el curso de los primeros cinco años del exercicio de mi autoridad fue
constante la paz y el orden recíproco establecido en estos reales dominios que
me fueron confiados; y por eso no perentorio el arbitrio de perdonar crímenes o
exceptuar de indultos conforme a la real voluntad que faculta al Virrey en los
casos de guerra y alteración. El que pudo haber dado causa fue el amenazado
de invasión por el faccioso Francisco Miranda...16