Tras la caída del Imperio romano, la parte oriental fue tomada por La lucha iconoclasta prohibió las imágenes
ó las imágenes religiosas,
los turcos otomanos, en 1453. Se le denomina Imperio bizantino
porque el emperador Constantino estableció su capital en la
antigua ciudad griega de Bizancio, ubicada hoy en Estambul,
Turquía. Abarcó la península de los Balcanes, Asia Menor, Siria,
Palestina, Egipto y las islas del Mediterráneo oriental. Fue la
ciudad más grande y poblada de Europa durante la Edad Media.
Su grandeza favoreció el desarrollo de una cultura en la que se
fusionaron elementos romanos, griegos y persas. Su lengua
oficial era el griego.
El puerto de Constantinopla
Las Santas Escrituras y la Santa Tradición
Las enseñanzas de la Iglesia de Roma tiene su
fuente en Las Santas Escrituras, adoran a Dios en
Trinidad y honran a los Santos, reconocen los siete
sacramentos. Las enseñanzas de la Iglesia ortodoxa
en la Santa Tradición, sus miembros esperan
"deificación", la verdadera unión con Dios, un
proceso dinámico y gradual que dura toda la vida.
conduciendo a enfrentamientos, en el Concilio de Nicea
se restableció el culto a las imágenes, produciendo a la
separación de la iglesia fiel al Papa de Roma y la fiel al
Patriarca de Constantinopla. Esta serie de conflictos
entre los pueblos túrquicos y el Imperio bizantino, se
libraron a lo largo del siglo XI hasta la decadencia de
Constantinopla, destacando las Cruzadas.
Las guerras
otomano bizantinas
La Iglesia de Roma y La Iglesia ortodoxa
El legado religioso del imperio bizantino en el cisma de Oriente
1054 d.C. es la separación del Cristianismo en dos bloques
con dos líneas teológicas y doctrinales diferentes, la Iglesia de
Roma y la Iglesia ortodoxa, las diferencias son el espíritu
santo, el purgatorio, el pecado original, la virgen maría, la
inefabilidad papal, las congre-gaciones, el bautismo, la
confirmación, el celibato del clero, las estatuas, la santa
unción, la eucaristía, la señal de la cruz y los sacramentales.