Primeramente para realizar una investigación, el investigador necesita tener una idea previa sobre

lo que va a investigar y arduo apetito por responder las incógnitas que se plantea en el proyecto.
Sumado a esto, debe estar comprometido y tomar en serio las actividades de una manera precisa
y exacta, prestando mucha atención a los detalles mientras se está realizando los análisis y las
observaciones, provenientes de datos precisos. Igualmente, tiene que estar desligado de sus
sentimientos y poseer valores morales para plasmar lo que es real y existente, de una manera
justa y honesta. Además de tener un gran deseo querer indagar más y más sobre el objeto a
investigar y contar con una mente abierta, para llegar a resultados útiles y novedosos.