La calle del tango en Manizales es un recorrido por la memoria y tradición de una época que aun

esta en el alma de la ciudad, es un trasegar constante de ese pasado clásico con sus vestidos de
paño y trajes con lentejuelas, a una nostalgia de una época que parece ocultarse solo en la
memoria de un par de personas, que disfrutan y sienten esta música como la forma de expresar y
sentir sus vidas.

Varios pendones se encuentran dispersos en la calle, son la invitación a revivir la vida de 10

personajes que por su trabajo permitieron que esta cultura se situara y prevaleciera en los ruidos y
movimientos de Manizales. Fue ya en la época de los 30, cuando se da el fenómeno de Carlos
Gardel. La vibra y el sentimiento de esta música se vuelve latente, forjando la vitalidad de artistas
como Mamá Berta (María Bertilda Valencia Corredor) y Armando Moreno que le han dado un
impulso impresionante a la formación de público y de bailarines para ser lo que son hoy en día a
nivel nacional.

A pesar del frio que hiela las calles y de la neblina que empaña la mirada, el tango retumba y
mueve el sentir de estos bares en el centro de la cuidad. Los movimientos precisos, sensuales y
apasionados de los bailarines y practicantes invitan a moverse y sentir la magia de este baile,
algunos espectadores asombrados por tales movimientos se quedan perplejos y solo recobran el
sentido para volcarse sobre sus bebidas. Al final de las canciones no queda mas que un
apabullante aplauso que le rinde homenaje a el talento y el bello arte que siguen alimentado estos
apasionados.