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El documento describe el pensamiento crítico como una operación intelectual individual que evalúa el paradigma en el que se basan otros pensamientos. El pensamiento crítico implica interpretación, análisis, evaluación, inferencia, explicación y autorregulación. Las personas con espíritu crítico pueden pensar de manera independiente y colaborativa, alejándose de la aceptación de autoridad y situándose más allá del relativismo y contextualismo.
El documento describe el pensamiento crítico como una operación intelectual individual que evalúa el paradigma en el que se basan otros pensamientos. El pensamiento crítico implica interpretación, análisis, evaluación, inferencia, explicación y autorregulación. Las personas con espíritu crítico pueden pensar de manera independiente y colaborativa, alejándose de la aceptación de autoridad y situándose más allá del relativismo y contextualismo.
El documento describe el pensamiento crítico como una operación intelectual individual que evalúa el paradigma en el que se basan otros pensamientos. El pensamiento crítico implica interpretación, análisis, evaluación, inferencia, explicación y autorregulación. Las personas con espíritu crítico pueden pensar de manera independiente y colaborativa, alejándose de la aceptación de autoridad y situándose más allá del relativismo y contextualismo.
El pensamiento es la operación intelectual de carácter individual que se produce a partir de procesos
de la razón. Uno de sus aspectos importantes es el pensamiento crítico que es capaz de evaluar el paradigma con el que se fundan todos los otros pensamientos. Se trata de evaluar la forma en la que se desenvuelve el conocimiento, asegurando una mayor autonomía a la hora del ejercicio del pensamiento que tiene como puntos esenciales: interpretación, análisis, evaluación, inferencia, explicación y auto regulación. Aquella persona que tiene la capacidad de usar el pensamiento crítico es quien tiene el espíritu crítico que no significa que la persona sea siempre negativa ni excesivamente crítica de todo y de todos. Lo valioso de esto es alcanzar lo que la gente ha llamado una “educación liberal” es sentido liberador, que consiste en aprender a aprender, a pensar por uno mismo, de manera independiente y en colaboración con otros. La educación liberal nos conduce a apartarnos de la aceptación ingenua de la autoridad, para situarnos por encima del relativismo contraproducente y más allá del contextualismo ambiguo.