Esta lectura se basa en el pensamiento tolteca, habla de cómo se debe equilibrar lo personal, lo

emocional y lo espiritual. La forma de escribir de Miguel Ruiz, autor del libro, es interesante porque
expresa claramente lo que quiere transmitir. El libro cubre temas muy interesantes, como el proceso
de domesticación humana; el autor define la parte de la vida en la que los humanos aceptan
acuerdos, creencias, reglas sociales y estilos de vida. El libro también expresa que el hombre habita
en un sueño, aunque no es el sueño que quiere vivir, sino el que la sociedad construye.

A medida que avanza el libro, Miguel Ruiz presenta los cuatro acuerdos, dice que son los más
importantes que nos llevarán a la conciencia interior y la liberación personal, aunque explica que se
requiere mucha disposición para aceptarlos e intentar a existir con ellos en la cotidianidad. Afirma
que cuando se realicen, el drama infernal desaparecerá para comenzar a vivir el sueño del paraíso
del individuo.

El primer acuerdo, el más complicado y muy importante: "Sé perfecto en tus palabras", las palabras
son las herramientas más poderosas que posee el hombre, una palabra construye o destruye. Este
acuerdo se fundamenta en hablar y expresar palabras para bien, no para mal. La mayoría de las
veces usamos las palabras para mal, para culpar o para atacar. Las palabras se usan para difundir la
desconfianza, los celos, el rencor.

Otro acuerdo que se deriva del anterior es “No te tomes nada personal”, este dice que cada uno
vive sus sueños y lo que hacen los demás no lo hacen por ti, ellos lo hacen por ellos mismos.
Entonces, si alguien te lastima o te envenena con sus emociones, déjalo pasar, eso lo hacen por
ellos, no por ti, no lo tomes como algo personal. Lo que expresamos depende mucho de nuestro
ánimo, cuando estamos felices decimos cosas positivas, lo mismo sucede cuando estamos de mal
humor; solo recibir para nosotros lo que creamos por nosotros mismos en nuestros propios sueños.
Nadie puede afectar nuestras vidas y emociones, somos responsables de hacernos miserables, así
como de hacernos felices. Tomar las cosas personalmente significa sufrir en vano. Dondequiera que
vayamos, nos encontraremos con personas que nos mentirán y esparcirán su veneno emocional, así
que, si les creemos o no, depende de nosotros.

Al final, cuando has dado lo mejor de ti, aprendes a aceptarte, pero tienes que reconocer tus errores
y aprender de ellos. Esto significa práctica, evaluación justa de los resultados y práctica continua.
Así es como se expande la conciencia. La lectura de este libro me proporcionó mucha información y
me hizo ver las cosas de otra forma, haciendo que los días siguientes a haber leído el libro pudiera
comenzar a aplicarlo en mi día a día, logrando darme cuenta de cosas que antes no había detallado
y llegar al punto resolver conflictos que tenía por la falta de aplicar los dos primeros acuerdos.