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RECORRIDO HISTÓRICO POR LOS MUSEOS DE LA CIUDAD DE LA PAZ

G. Adrian Orozco Villar1

RESUMEN
El presente ensayo tiene como objetivo plantear un circuito de visita por los museos de la urbe
paceña donde se presente un breve recorrido por la historia del país y del departamento
implementando el patrimonio cultural contenido en los museos (MUNARQ, MUSEF, M.
Costumbrista) para relatar esta historia. Con ese fin se presentará una breve explicación de lo que
es la arqueología, se recopilará un breve resumen de las diversas subramas de la arqueología que
se dedican a estudiar el pasado de las sociedades, con el fin de utilizar esta información para
proponer este circuito museológico, que promueva, además, una apropiación del material
expuesto por parte de las personas y se construya una idea más clara de los aportes de la
arqueología en la actualidad. Se documentará el estado del patrimonio expuesto en museos,
proveniente de distintos contextos (arqueológicos e históricos), la situación y manera en la que
están expuestos estos artefactos y finalmente se planteará un posible proyecto de revalorización y
exposición dentro de los espacios existentes en nuestro departamento.
PALABRAS CLAVE:
Arqueología, pasado reciente, museos, arqueología urbana.

ABSTRACT
The objective of this essay is to propose a circuit of visits to the museums of the city of La Paz,
where a brief tour of the history of the country and of the department is presented, implementing
the cultural heritage contained in the museums (MUNARQ , MUSEF, M. Costumbrista) to tell
this story. To this end, a brief explanation of what archeology is will be presented, a brief
summary of the various sub-branches of archeology that will be dedicated to studying the past of
societies will be compiled. In order to use this information to propose this museological circuit,
which also promotes an appropriation by people of the exhibited material and a clearer idea of the
contributions of archeology today. The state of the heritage exhibited in museums will be
documented, coming from different contexts (archaeological and historical), the situation and
way in which these artifacts are exposed and finally a possible revaluation project will be
considered and within the existing spaces in our department.
KEYWORDS:
Archaeology, archeology of the recent past, museums, urban archeology.

1
Estudiante de último año de la carrera de Arqueología de la Universidad Mayor de San Andrés.
Correo electrónico: adryzzz@gmail.com

1
INTRODUCCIÓN
El patrimonio arqueológico no se limita a las vasijas y estructuras que dejaron las culturas
prehispánicas, en la actualidad abarca también el patrimonio histórico y arquitectónico de un
pasado llamado “reciente”. En ese sentido, comprender las distintas áreas o acontecimientos que
pueden ser estudiados por la arqueología es necesario para que se puedan coordinar y realizar
trabajos interdisciplinarios para conservar y estudiar la gran cantidad de patrimonio material e
inmaterial que se tiene en nuestro país.
En nuestro contexto, la ciudad de La Paz, las infraestructuras donde se encuentran emplazados
muchos museos son en si parte del patrimonio arqueológico colonial y republicano que tenemos
dentro de la urbe, esta característica y el hecho de que poseen material arqueológico, histórico y
etnográfico nos brinda una gran opción para implementar estos elementos en la educación y
sensibilización sobre el patrimonio que poseemos a la población en general.
La situación actual de muchos museos es preocupante, así como el conocimiento que tiene la
población en general con respecto a lo que hace un arqueólogo como profesional. La relación de
los arqueólogos con los museos es muy directa y se remontan a los inicios de la arqueología con
la sistematización de materiales de colecciones de museos propuesta por C. J. Thomsen, en
conjunto con las teorías de la antigüedad del hombre de Boucher de Perthes y la teoría de la
evolución de Darwin (Renfrew & Bahn, 2007).
Para comprender mejor como se planteará la disposición de la muestra museológica que se
plantea para contar nuestra historia, se deberá comprender bien que es la arqueología y las
diferentes ramas de estudio que nos brinda para estudiar diferentes épocas del desarrollo de
nuestro país. Así, inicialmente se intentará desligar a la arqueología de su relación con el pasado
lejano, antiguo, olvidado, mostrando las diversas áreas en las que los estudios arqueológicos son
posibles de implementarse y lograr comprender sus alcances en la actualidad.
El relacionamiento que se hace de la arqueología con este pasado lejano en muchos casos
invisibiliza los alcances de la arqueología que se fueron construyendo en los últimos 50 años. Se
ve la necesidad de presentar estos nuevos estudios con ayuda de los museos que contienen
artefactos de distintas épocas que pueden ser representativos de los periodos que estudian estas
ramas.
La importancia de los museos como contenedores y presentadores de este pasado material, como
se menciona antes, son en si parte del pasado colonial y republicano de ciudad de La Paz,
entonces es necesario incluir un relato sobre estos lugares, su construcción, arquitectura, hechos
relevantes (cuál era su condición o acción durante las dictaduras por ejemplo u otros periodos)
que llevan a recordar y conocer cosas que sucedieron y quedan en la memoria de las personas
pero también de los restos materiales.

LOCALIZACIÓN DEL ÁREA DE ESTUDIO


La propuesta aquí expuesta se encuentra emplazada en las calles de la ciudad de La Paz, en la
Provincia Murillo del departamento de La Paz. La mayoría de los museos se encuentran en el
casco urbano central en calles que por defecto tienen mucha historia. El Museo Nacional de
Arqueología (MUNARQ) se encuentra en la esquina de la calle Tiahuanaco y Federico Zuazo no
muy lejos del prado paceño y ocupando los predios del edificio que en un tiempo fue propiedad

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de Arthur Posnansky. El Museo Nacional de Etnografía y Folklore (MUSEF) se encuentra en la
esquina que interseca las calles Ingavi y Genaro Sanjinés ocupando los predios de lo que en
tiempos de la colonia fuera el ex palacio de los Marqueses de Villaverde. El Museo Costumbrista
se encuentra en la Sucre esquina Jaén al frente de la plaza Riosiño y se encuentra en los predios
de una casa colonial y el recorrido incluye los predios de lo que fuese la casa de Pedro Domingo
Murillo.

MARCO TEÓRICO
La arqueología, como ciencia que estudia el pasado, en la actualidad utiliza la metodología de
varias ramas, como la física, química, geología, antropología o la historia entre otras, para lograr
realizar una mejor interpretación de los contextos que se analizan. Debido a esto surgen gran
cantidad de ramas de la arqueología que se dedican a estudiar periodos específicos dentro de un
país o región. Se recopilan algunos conceptos presentados por diferentes autores.
Arqueología. - La arqueología es, pues, tanto una actividad física de campo como una búsqueda
intelectual en el estudio o el laboratorio y esto forma parte de su gran atractivo. La deliciosa
mezcla de peligro y labor detectivesca también la han convertido en el vehículo perfecto para
escritores de ficción y cineastas. Por mucho que estas imágenes se alejen de la realidad, captan la
verdad esencial de que la arqueología es una búsqueda excitante - la búsqueda del conocimiento
de nosotros mismos y del pasado humano (Renfrew & Bahn, 2007).
El objeto de la arqueología es el conocimiento de las sociedades del pasado, y como se puede ver,
no hemos puesto fronteras cronológicas en ese pasado, con lo cual queremos decir que es posible
estudiar arqueológicamente; tanto la Prehistoria, como la Edad Antigua, como la Medieval, la
Moderna o la Contemporánea. No consideramos que el criterio cronológico deba definir la
Arqueología, sino. la reflexión histórica y metodológica. Así pues, la Arqueología de las
sociedades modernas no presenta más diferencias que la posibilidad de captar además con otro
tipo de fuentes (Vergara, 2010).
Patrimonio Cultural. - El patrimonio cultural en su más amplio sentido es a la vez un producto
y un proceso que suministra a las sociedades un caudal de recursos que se heredan del pasado, se
crean en el presente y se transmiten a las generaciones futuras para su beneficio. Es importante
reconocer que abarca no sólo el patrimonio material, sino también el patrimonio natural e
inmaterial. Como se señala en nuestra diversidad creativa, esos recursos son una “riqueza frágil”,
y como tal requieren políticas y modelos de desarrollo que preserven y respeten su diversidad y
su singularidad, ya que una vez perdidos no son recuperables. El patrimonio cultural es un
conjunto determinado de bienes tangibles, intangibles y naturales que forman parte de prácticas
sociales, a los que se les atribuyen valores a ser transmitidos, y luego resignificados, de una época
a otra, o de una generación a las siguientes. Así, un objeto se transforma en patrimonio o bien
cultural, o deja de serlo, mediante un proceso y/o cuando alguien -individuo o colectividad-,
afirma su nueva condición (Dibam, Memoria, cultura y creación. Lineamientos políticos.
Documento, Santiago, 2005).
El hecho de que el patrimonio cultural se conforme a partir de un proceso social y cultural de
atribución de valores, funciones y significados, implica que no constituye algo dado de una vez y
para siempre sino, más bien, es el producto de un proceso social permanente, complejo y
polémico, de construcción de significados y sentidos. Así, los objetos y bienes resguardados
adquieren razón de ser en la medida que se abren a nuevos sentidos y se asocian a una cultura

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presente que los contextualiza, los recrea e interpreta de manera dinámica (Qué entendemos por
patrimonio cultural | Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, 2020).
Patrimonio arqueológico. - Según la Ley 530 de Patrimonio Cultural Boliviano el Patrimonio
Cultural Arqueológico. Comprende aquellos vestigios producto de la actividad humana, como ser
restos orgánicos e inorgánicos, antiguas áreas de habitación, fortalezas y estructuras defensivas,
terrazas de cultivo, sistemas de riego y almacenaje de agua, camellones, áreas y estructuras
ceremoniales, canteras, minas, ciudadelas, cementerios, caminos, centros y estructuras de
almacenamiento de alimentos y otros productos, restos de antiguos animales y vegetales, y
representaciones rupestres.
Sin embargo, una definición más completa de lo que representa el patrimonio arqueológico es
presentada por Altuna (2003) quien dice lo siguiente: El Patrimonio Arqueológico constituye una
parte singular del Patrimonio Cultural. Está integrado por bienes muebles e inmuebles, que
constituyen un valor histórico. Presenta una peculiaridad y es que su conocimiento implica la
utilización de metodologías y técnicas especializadas, todas las cuales constituyen una disciplina
histórica denominada Arqueología. Este Patrimonio conecta a los seres humanos del pasado con
los del futuro. Es un legado que relaciona una generación con otra a fin de que la vida continúe.
Y ello debido a que los objetos que constituyen este Patrimonio pueden durar más que las
personas, viniendo a formar así una historia materializada, que, como dicen J. Ballart y J. Juan-
Tresserras habla de culturas y civilizaciones, de prácticas y costumbres, de creencias y rituales.
Para los arqueólogos, antropólogos, historiadores y otros científicos es insustituible como objeto
de estudio porque sirve de puerta de acceso al pasado, junto con la memoria y la historia escrita,
cuando éstas existen. Para ellos y para el resto de los mortales el Patrimonio es motivo de
inspiración, compendio de lecciones y catalizador de sutiles emociones (Altuna, 2003).
Arqueología histórica. - Definimos la arqueología histórica como la arqueología que se ocupa
de todas aquellas sociedades sobre las que existen fuentes escritas, incluyendo aquellas
sociedades iletradas sobre las que sí escribieron sus vecinos. Algunos autores definen el campo
de forma más estrecha, como la arqueología que trata del estudio de los últimos 500 años,
centrándose especialmente en la expansión colonial europea y su impacto (Renfrew & Bahn,
2005).
La Arqueología histórica puede definirse tentativamente como la especialidad dedicada a la
investigación del pasado reciente del ser humano, que en el caso de América cubre el rango
temporal que se inicia con la invasión de los europeos al continente (Landa & Ciarlo, 2016). Una
de las perspectivas más notorias en esta rama considera a la Arqueología histórica como un
campo particular de investigación, con características propias y particulares. Esta perspectiva
considera que la Arqueología histórica se caracteriza por compartir paradigmas, teorías,
metodologías y modelos con diversas disciplinas científicas (Historia, Antropología, Etnohistoria,
Sociología, Filosofía, Geografía, Biología, Economía, Ecología, Arquitectura, Ciencia de
materiales, entre otras) sin que ello implique la supeditación a alguna de ellas en particular. De
este modo, pues, posibilita un mayor conocimiento de las actividades y comportamientos
cotidianos de los diversos grupos sociales del pasado. Los bienes materiales y las fuentes
históricas han sido producidos y/u obtenidos y utilizados por individuos dentro de contextos
socio-culturales peculiares. Su análisis, si bien se desarrolla por separado, debe ser integrado
aplicando una mirada intensiva y crítica que permita comprender el rol que estos bienes
desempeñaron en las sociedades bajo estudio y las motivaciones e intenciones de los grupos e

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individuos que los utilizaron. La Arqueología histórica comparte con la Historia y la Etnohistoria
el estudio del pasado humano, y puede diferir con ellas en la manera de abordar la investigación,
es decir, en el plano teórico-metodológico. La Historia, en su afán por explicar el pasado humano,
emplea fuentes documentales escritas (éditas e inéditas), fotografías, mapas, obras pictóricas,
monumentos y tradiciones orales, entre otras. Por otra parte, la Etnohistoria, con objetivos afines,
utiliza dichas fuentes desde una óptica antropológica (Landa & Ciarlo, 2016).
Arqueología industrial. - La Arqueología Industrial es la disciplina científica que estudia y pone
en valor los vestigios materiales y testimonios históricos de los procesos productivos y de su
tecnología reciente. Su estudio nos aproxima a una mejor comprensión de las estructuras y los
mecanismos que han generado el desarrollo de las sociedades técnico-industriales, sus fuentes de
energía, sus lugares y espacios de trabajo, su organización productiva, su forma de responder a
una economía de mercado. Ya en 1963, uno de los padres de esta disciplina, Kenneth Hudson,
nos proponía que la finalidad de estos estudios científicos era «el descubrimiento, la catalogación
y el estudio de los restos físicos del pasado industrial, para conocer a través de ellos aspectos
significativos de las condiciones de trabajo, de los procesos técnicos y de los procesos
productivos» (Civera, 2007).
El análisis e investigación de este patrimonio reciente tiene sus propias particularidades, de la
misma forma que el estudio de otras épocas históricas plantea diferentes problemáticas en su
análisis. En este sentido, para el estudio de este patrimonio, es evidente que se mantiene el uso de
las fuentes tradicionales: fuentes documentales en archivos y fuentes publicadas (obras generales,
revistas y publicaciones periódicas); sin embargo, el período al que nos referimos, la era
mecánica y el objeto estudiado, el resto industrial, nos remite a otras fuentes específicas de la
época. Fuentes que la arqueología industrial ha utilizado desarrollando y difundiendo una nueva
metodología científica de análisis e investigación. Por ello, quiero referirme a la importancia que
adquieren en nuestra investigación el estudio de los archivos de empresa, el vaciado de la
«literatura gris» en revistas profesionales, la historia oral y el registro arqueológico. Es por ello
de enorme interés introducirnos en los archivos de empresa, rico y valioso material que, debido a
la evolución propia de estas empresas, cierres, quiebras, fusiones, traslados, etc., desaparece
rápidamente. El archivo de empresa ha sido definido como «el conjunto de documentos
producidos por una empresa en el desarrollo de las actividades que le son propias, de manera
orgánica y automática y conservados como testimonios e información» (Civera, 2007).
La arqueología militar y el estudio de los campos de batalla. - La Historia Militar antigua y la
Arqueología militar son ya desde hace largo tiempo subdisciplinas consolidadas y establecidas de
la Historia Antigua y la Arqueología. Cuentan con una floreciente y productiva actividad
investigadora y –sobre todo– divulgativa, que en algunos países constituye por sí misma una
pequeña industria editorial de gran éxito comercial. Mucho más reciente es la existencia de la
llamada “Arqueología de los campos de batalla” en la dominante producción anglosajona, una
nueva sub-subdisciplina, o si se quiere, una ‘rama’ especializada de la Arqueología militar.
La principal consideración que queremos proponer aquí es que un campo de batalla puede y debe
ser considerado entre otras muchas cosas como un tipo de yacimiento arqueológico, susceptible
de ser localizado, prospectado y eventualmente excavado e interpretado como cualquier otro
yacimiento, bien que aplicando una metodología apropiada a sus peculiaridades, exactamente
igual que ocurre con un yacimiento subacuático, una cueva o un poblado, cada uno de los cuales
exige estrategias y tácticas de intervención diferente.

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Conviene insistir en otro factor específico: el ámbito cronológico no es un factor limitador, como
tampoco en otras ramas de la Arqueología. Exactamente igual que la Arqueología Industrial se
preocupa de las actividades humanas reflejadas en la cultura material de época posterior a la
Revolución Industrial, complementando y enriqueciendo los conocimientos obtenidos por las
fuentes documentales, la arqueología de un campo de batalla moderno tiene la capacidad de
enriquecer los conocimientos obtenidos por las fuentes archívales e incluso el testimonio de
participantes en el conflicto, e incluso de modificarlos sustancialmente (Sanz, 2008).
Etnoarqueología. - la etnoarqueología es una subdisciplina de la arqueología y de la
antropología social que obtiene información sistemática acerca de la dimensión material de la
conducta humana, tanto en el orden ideacional como en el fenomenológico. Es una generadora de
referentes analógicos para la interpretación arqueológica y es una fuente de producción y testeo
de hipótesis y modelos acerca de cómo funcionan las sociedades. Además, la etnoarqueología es
uno de las mejores vías para proveer la información requerida para contextualizar las analogías y
para justificar asunciones. En su uso corriente es considerada como una metodología de
obtención de datos de sociedades vivas, pero desde una perspectiva arqueológica y sobre todo,
prestando especial atención a los derivados materiales de las conductas humanas. Sin duda, los
datos provenientes de investigaciones etnográficas (stricto sensu) y de los documentos históricos
son de gran utilidad para la interpretación arqueológica y pueden servir para la formulación y el
testeo de hipótesis así como para proveer fuentes de analogía, pero en la casi totalidad de los
casos carecen de información sistemática y controlada sobre los productos materiales de las
conductas a la que hacen referencia (Politis, 2002).
Arqueología Urbana. - La arqueología urbana se hace para explicar una ciudad en
funcionamiento, la que no queremos paralizar, sólo extraer información sustantiva para nuestro
campo del conocimiento. A la vez recuperar contextos y elementos (desde arquitectura hasta
objetos) que son significativos para la arqueología en primer lugar, y para el patrimonio en
segundo, cualquiera sea la definición que le demos a ambas cosas. Porque no todo lo que se
excava es patrimonio, pero sí queremos aportar en la medida de lo posible a la conservación de la
cultura, aunque no es esa nuestra responsabilidad sino la de los especialistas (Schávelzon, 2018).
Museos y lugares de interés.
En este acápite veremos la importancia de la implementación de la museología y museografía
para mostrar las colecciones, con ese fin inicialmente veremos las definiciones y conceptos
relacionados a estos términos y veremos si son aplicados en los museos que se pretenden incluir
en la propuesta.
Los museos escogidos para esta propuesta son, a mi parecer, los que con los artefactos que
poseen en sus depósitos y exposiciones pueden aportar de gran manera a la elaboración del relato
que se propone. Por tal motivo se revisará la información existente de estos museos en línea y en
los lugares como tal.
La museología cubre un campo muy vasto que comprende el conjunto de tentativas de
teorización o de reflexión crítica vinculadas con el campo museal. El común denominador de este
campo se caracteriza por la documentación de lo real a través de la aprehensión sensible y
directa. No rechaza a priori ninguna forma de museo, incluyendo tanto a los más antiguos como a
los más recientes, ya que tiende a interesarse por un orden abierto a toda experiencia que se
refiera al campo de lo museal. Tampoco se restringe de ninguna manera a quienes reivindican el
título de museólogos (Mairesse et al., 2010).

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La museografía se define como la figura práctica o aplicada de la museología, es decir el
conjunto de técnicas desarrolladas para llevar a cabo las funciones museales y particularmente las
que conciernen al acondicionamiento del museo, la conservación, la restauración, la seguridad y
la exposición. La palabra misma ha sido utilizada desde hace mucho tiempo en concurrencia con
el término museología para designar las actividades intelectuales o prácticas atinentes al museo
(Mairesse et al., 2010).
Cada uno de los muesos elegidos para esta propuesta cuentan con una historia particular la cual
es presentada en los sitios de información de cada museo. La situación actual de los museos
refleja la dejades que tienen quienes gestionan estos lugares por preservar el rico patrimonio
material, cultural que tenemos dentro de nuestro territorio y que en la actualidad se encuentra
archivado en varios edificios, sin el cuidado debido que se les debe aplicar.
Propuesta
Una historia bien contada llama la atención de muchos y mucho más si esta historia cuenta las
distintas etapas que llevaron a la conformación de su país, de esta manera, si los materiales
expuestos en los museos tuvieran una secuencia de presentación conjunta, se podría contar la
historia del país y del departamento con ayuda de las locaciones y de las colecciones existentes
en los distintos museos. Se puede recurrir también a algunas ideas provenientes de la arqueología
sensorial donde se plantea que algunas modalidades sensoriales que no forman parte del sensorio
occidental de los cinco sentidos, incluyendo el sentido de la temperatura, el equilibrio y el
movimiento (kinestesia), el sentido del cine (cinestesia) no son considerados al momento de
plantear los recorridos por los museos. Añaden como ejemplo el sentido de lugar: el modo
experiencial asociado al emplazamiento de la acción humana; su conexión con lugares
específicos; la familiaridad que tal relación trae consigo; el sentido casi instintivo y automático
del reconocimiento sensorial de caminos, rutas y rasgos; la capacidad de los lugares para
recolectar y acoger recuerdos. Las experiencias sensoriales no son sólo cinestésicas sino también
kinestésicos; todas implican movimiento, así como la articulación y el trabajo conjunto de
muchos sentidos. Por lo tanto, las modalidades sensoriales son infinitas, ya sea por la infinidad de
cosas, como por las situaciones contextuales y lugares donde la experiencia sensorial se
desarrolla (Hamilakis, 2015).
Un circuito museológico que integre los distintos museos de la ciudad podría implementarse para
contar esta historia. El MUNARQ, el MUSEF, y el museo costumbrista poseen colecciones de
diferentes temporalidades en sus depósitos que nos permitirán organizarlos de manera tal que se
pueda recorrer la historia del país desde lo más antiguo a lo más reciente y viceversa, además, el
recorrido se complementara con visitas por sitios emblemáticos de la ciudad (edificios, lugares,
zonas), que pueden ayudar a ampliar la información y el relato que se construirá, generando así
visitas en otros museos y locales. Para comprender mejor la siguiente descripción se recomienda
acompañarla con las imágenes incluidas en el Anexo.
El circuito podría iniciar en el MUNARQ, donde se implementarán salas que muestren el pasado
más lejano de nuestro país. Inicialmente se podría mostrar algo del trabajo del arqueólogo, donde
existan elementos que permitan explicar la metodología arqueológica de obtención de datos
(recolección de información, prospección, excavación y análisis), y que es a partir de los cuales
se construyen las interpretaciones de este pasado y que se utilizaran para la elaboración del relato
histórico. Las siguientes salas podrían mostrar los materiales regional y cronológicamente
ordenados y que se muestre como lograban obtener o confeccionar estos materiales. Para lograr la

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apropiación y conocimiento de los mismos se pueden hacer talleres de recreación de vasijas con
arcilla, dibujo, entre otras actividades que se planearan de acuerdo al público que ingrese al
museo. Se juntará los distintos artefactos para con ellos mostrar el cotidiano de las poblaciones
representadas, dejando de lado la separación por material de elaboración (cerámico, lítico, óseo,
metal o textil) y presentándolos en conjunto, que es como posiblemente se encontraban cuando
eran utilizados. En las distintas salas del MUNARQ se podría relatar la historia del país hasta el
Periodo Intermedio Tardío (1200-1450 d.C.) utilizando la información y el material arqueológico
que se encuentra en los depósitos del museo. El recorrido incluirá un relato sobre la historia del
predio que aloja al museo. La construcción del “palacio” no fue premeditada para que albergara
el museo arqueológico, en su concepción fue la casa particular de Arthur Posnansky. Pero tiene
una historia más profunda como base del centro de investigaciones en Tiwanacu y muchas otras
instituciones que fueron albergadas por esta infraestructura y que hasta el día de hoy siguen
generando historias. Podría relatarse como estos predios pasaron a contener el material
arqueológico, o relatos de lo que sucede en los predios, como fenómenos paranormales que
experimentaron los funcionarios o eventos desafortunados que ocasionaron el cierre de algunos
predios como el incidente con la máquina de datación por carbono 14.
A continuación, se recorrerían las calles de la ciudad de La Paz, con dirección al museo
costumbrista, donde se presentará la historia del país desde el periodo incaico, pasando por el
Periodo Colonial y finalizando en el inicio del Periodo Republicano mostrando los artefactos
característicos de estas épocas. Las salas presentaran una disposición similar a las del anterior
museo.
El recorrido terminara en el MUSEF, donde se observarán artefactos más contemporáneos y en
base a sus muestras actuales se mostrará la cadena de producción de los artefactos mostrados en
los museos anteriores y se presentara material etnográfico de distintas regiones (como se hace en
la actualidad) adecuado al relato histórico que se presenta desde el inicio.
En el recorrido podrían incluirse los museos militares, que podrían presentar los relatos de los
distintos conflictos bélicos en las que participo nuestro país. Además, podría incluirse recorridos
por las iglesias o por edificios del periodo colonial que poseen restaurantes. De igual manera no
se trataría de un paseo cerrado y que obligatoriamente deba seguirse por dicho recorrido. Cada
museo podrá visitarse de manera individual y no será necesario visitar los otros para comprender
la idea que se plantea. También podría implementarse en museos comunitarios y sitios
arqueológicos museables, como Tiwanaku o Chiripa, que se pueden integrar y presentar un
recorrido por el tiempo arqueológico por distintas comunidades.
Para lograr este fin se necesitará realizar un trabajo interdisciplinario para organizar las
colecciones de manera tal que relaten la historia pensada. De esta manera se necesitará la
contratación de profesionales en arqueología, historia, arquitectura, restauradores, conservadores,
curadores, diseñadores gráficos y comunicadores, con tal de que el recorrido sea construido con
distintos puntos de vista y con elementos suficientes que logren atraer la atención del público que
realice el recorrido propuesto.

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CONSIDERACIONES FINALES
La implementación de un circuito como el propuesto significaría una opción novedosa para la
población para ir a visitar los museos y conocer mediante los artefactos expuestos y los predios
donde se encuentran expuestos hechos que son poco conocidos o que por el pasar del tiempo son
olvidados. Además, se rompería con la idea monótona de un museo como un “mausoleo donde se
exponen piezas interesantes” y se fomentaría el interés por conocer algo más sobre nuestro
trabajo.
La situación actual de los museos refleja la dejades que tienen quienes nos gobiernan por
preservar el rico patrimonio material, cultural que tenemos dentro de nuestro territorio y
almacenado en los depósitos de varios museos (si no en las casas de los directores). El manejo y
cuidado de todo este patrimonio cultural material debe promoverse desde las instancias más altas
de gobierno.
La falta de continuidad en el trabajo de los museos por parte de los profesionales en manejar este
tipo de muestras y materiales se refleja en la pobre (sino inexistente) lógica que existe para
presentar las exposiciones. Muchas de las muestras tienen la misma configuración de exposición
desde hace años, notándose poca renovación en el manejo de las colecciones. Muchas veces los
materiales expuestos no cuentan ni con la ficha de registro o identificación pertinente para
conocer la información de la pieza expuesta. Se ve la necesidad de contar con un profesional (o
varios) que se encargue de esos detalles de forma permanente en cada uno de los museos
La falta de presupuesto para estas instituciones se refleja en la completa falta de especialistas que
se encarguen de las exposiciones y de las colecciones que se encuentran en estos museos. No
solamente arqueólogos, sino historiadores, antropólogos, curadores y conservadores que realicen
un trabajo multidisciplinario para crear las condiciones adecuadas para las exposiciones
propuestas.
La falta de información en páginas web propias y actualizadas (en el caso del MUNARQ y del
museo de metales preciosos) de igual manera deberá mejorar. En la actualidad si no estas en línea
puede decirse que no existes. La información en la web es de vital importancia para lograr que
más público se acerque las instalaciones de los museos. El circuito deberá contar mínimamente
con mapas de recorrido colgados en la web y en forma física con información adicional sobre las
exposiciones en cada museo.

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BIBLIOGRAFÍA
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Cultura.
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Vergara, Ó. G. (2010). Arqueología Industrial. Un comentario bibliográfico tras medio siglo de
historiografía. Anales de Prehistoria y Arqueología, 275-300.

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ANEXOS

Ilustración 1 mapa de recorrido

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Ilustración 2 MUNARQ

Ilustración 3 MUSEF

12
Ilustración 4 Museo Costumbrista

Ilustración 5 Museo de Historia Militar

13
Ilustración 6 Museo Naval

14
Ilustración 7 Frontis MUNARQ

15
Ilustración 8 Frontis MUSEF

16
Ilustración 9 Frontis Museo Costumbrista

17
Ilustración 10 Frontis Museo de Historia Militar

18
Ilustración 11 Frontis Museo de Metales Preciosos

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