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Cuenca

Cultura
Cuenca es oficialmente reconocida por la riqueza cultural que
ostenta y que emana de su combinación única de modernidad
y encanto colonial; una mezcla que le imprime una huella
distintiva a una ciudad cuyo desarrollo, desde tiempos
precolombinos hasta el día de hoy, ha sido conducido
mediante un plan preconcebido para resaltar lo mejor del arte
y la arquitectura como testimonio de la eminencia cultural que
es posible encontrar en las Américas. Para comprobar lo antes
dicho, basta con realizar una caminata por sus estrechas calles
empedradas o por la radiante campiña que la rodea.

Gastronomía
Diciembre es ideal para pasar a Cuenca. Todo el color de la
religiosidad exitosa y el neo-barroco estallan el 24, en el Pase de
Infante. Sus reminiscencias solares las resalta el ritual de la chicha
brindada a los priostes y a los asistentes, además del pan clásico de
la pascua navideña. Navidad y Año Nuevo son fiestas marcadas por
el pavo, una presencia mundial en nuestra comida; y los tamales y
buñuelos que poseen como base la harina de maíz. Unos y otros,
deliciosos. Las familias conservan antiguas recetas de buñuelo, sin
embargo lo importante de ellas es la dosis precisa de harina de maíz
precocida con anís, a la que se agregan huevos y leche, batiendo a
mano, hasta el postración.

Arquitectura
Cuenca tiene una gigantesca mezcla de estilos de creación y
decoración. Su Centro Histórico está construido por una metrópoli
de aires coloniales, sin embargo que es realmente republicana,
puesto que la mayor parte de sus atractivas estructuras proceden
del siglo XIX. Hay además varias construcciones del siglo XVIII, más
que nada ambos conventos de clausura, el del Carmen y el de la
Inmaculada Concepción, parte de la vieja Catedral, y unas escasas
viviendas particulares. Empero lo cual resulta especialmente
llamativo es el aire homogéneo del grupo, solo alterado por ciertos
alardes de chocante modernidad, en inmuebles de las décadas del
50 y 60, del siglo XX.

David Pila - 2BGU C

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