“La delincuencia en república dominicana”

Podemos definir a la delincuencia como la situación social de la conducta humana, o una

ruptura de la posibilidad normal de la relación interpersonal. En República Dominicana, la
delincuencia se ha convertido en uno de los problemas más grandes que enfrenta nuestro país.
Cada vez más, el ciudadano se preocupa y teme por su seguridad y por la de sus más allegados.
Es una situación que asusta a las personas por toda la criminalidad que ocurre día tras día y que
no logra darse a notar lo suficiente, tanto como en las redes sociales y periódicos, puesto que las
autoridades no logran tomar la acción verdaderamente necesaria. Por esto, la delincuencia en la
República Dominicana debe ser tomada en serio y tratarse de una vez por todas.

La delincuencia en República Dominicana, mencionada anteriormente, es una realidad

que todos los días enfrentan los ciudadanos, y aún más los que viven en barrios. El 74.6% de los
dominicanos entiende que la delincuencia es el principal problema del país y el 41.4% asegura
que ha limitado alguna actividad por temor a ser víctima de la delincuencia. Además, la tasa de
robos y delitos ha estado en aumento en los últimos días respecto a la de los últimos años. Las
redes sociales están repletas de ejemplos diarios de cómo las autoridades hacen de la vista gorda
a casos flagrantes de delitos, y, en vista de ello, muchas personas de las zonas menos pudientes
han empezado a tomar la justicia por sus propias manos, generando así inconvenientes
relacionados con residentes de varias zonas, los cuales deciden atrapar y "castigar" a los
criminales.  En respuesta, las autoridades dominicanas han aumentado sus patrullas y número de
policías alrededor de las calles en busca de una drástica reducción en las cifras de crimen. Sin
embargo, estas aparentan no ser suficientes.

A lo largo de las últimas dos décadas, en nuestro país, la inseguridad y la violencia se han
convertido en el pan nuestro de cada día, a tal punto que no hay zonas seguras para trabajar,
caminar, recrearse, o estudiar en todo el país, ya que, sin importar la provincia, el día, o el
instante, cualquier espacio puede ser el lugar y hora equivocada para ser asesinado, atracado,
agredido o secuestrado. Nosotros, los dominicanos, estamos encarcelados en lo que llamamos
nuestra propia libertad, es decir, no podemos estar en paz al estar en las calles sin la
preocupación de ser víctimas y ser despojados de nuestras pertenencias. Esto es un hecho que
todos los dominicanos apetecen evitar verse arropados por todas estas desdichas, y por ende, se
debería llevar a cabo un determinado protocolo de seguridad, con el fin de prevenir los
infortunios ya establecidos.

Dicho esto, no es recomendable salir con objetos de mucho valor en horarios muy
nocturnos o de madrugada. Si de casualidad, y desafortunadamente, tienes que andar con un
objeto de valor, como tú celular para comunicarte, y de repente toca la mala suerte de toparse
con uno o varios asaltantes queriendo quitarte tu objeto de valor, es mejor evitarse un conflicto si
ellos están armados con armas blanca o mucho peor, con armas de fuego. La mejor decisión es
entregar el objeto, ya que después de todo es más importante la vida que lo material. La mejor
medida de prevención para estos casos de envolvimiento en eventos delictivos es que, en estos
horarios, se recomienda andar acompañado, y evitar moverse a pie en las calles. Por seguridad,
siempre es mejor utilizar un taxi, y verificar que este siempre sea válido, para no incurrir en
eventos no deseados.

Ahora bien, la delincuencia es un producto no deseado del desorden que tenemos dentro
de nuestro país, tanto que, culpamos a la delincuencia de muchos delitos, pero muchos de estos
delitos son cometidos por personas que ni siquiera nosotros pensamos que serían capaces de ser
partícipes de esto, por ejemplo: senadores, diputados, cierta persona de confianza, es decir, en
cualquier circunstancia o con cualquier persona puede ocurrir esta problemática social. Por esto
mismo, debemos de estar con completo cuidado de cada uno de nuestros alrededores.

En conclusión, la delincuencia en nuestro país ha sido uno un fenómeno social evolutivo

que marca como uno de los grandes problemas en la sociedad, impidiendo que las personas se
sientan seguras y dando paso a que la delincuencia se siga desarrollando y tomando fuerza.
Dicho problema tiene solución, pero debemos hacer conciencia de que tan grave es el problema y
forzar al gobierno a que tome las pautas necesarias para acabar con esto. Sin embargo, no solo es
trabajo para el gobierno, también debemos colaborar como sociedad, propagando la educación
para aquella generación dominicana que formara el mañana de nuestro país. Por otra parte, el
estado debe de dar más oportunidades a aquellos que no tienen a dónde ir para evitar que se vean
en la obligación de ser delincuentes, y que tengan una mejor opción al cual acudir. Este
fenómeno social puede ser reparado, solo si tomamos la correcta acción sobre este.