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Ensayo definitivo:

https://www.youtube.com/watch?v=og8PhRKUjqw

mas alla de los limites del universo

https://www.youtube.com/watch?v=3o_X63f6fNY

https://www.youtube.com/watch?v=og8PhRKUjqw
Solemos ver el sistema solar como un lugar majestuoso y Pacífico, pero
teniendo en cuenta que en un principio no existía más qué una gran y fina capa de
gas se puede suponer un nacimiento caótico y violento como la formación de un
sistema solar. Desde que se tiene registros del hombre, este observa el cielo y
estudia lo que ve en el cuestionándose asimismo qué relación existe entre
nosotros y esos objetos brillantes a los que llamamos planetas. Nuestros
ancestros han construido templos para prevenir sucesos cósmicos y adorar a
dioses del cielo.
Sin embargo, los primeros telescopios nos mostraron que el universo era
muy diferente a lo que se imaginaba. Fue entonces cuando se comenzó a
descubrir se lo que poblaba realmente el exterior no eran dioses sino, planetas,
estrellas e inmensas nubes de gas. Para 1755 el científico y filósofo alemán
Enmanuel Kant dedicó sus estudios a esas inmensas nubes reconociéndolas
como nebulosas y resultando un aspecto indispensable en el espacio interestelar,
ya que, a partir del colapso y condensación de ellas nacen las estrellas y se
forman los planetas. Esta teoría fue denominada teoría nebular.
250 años más tarde, esta teoría sigue ayudando a explicar las
observaciones sobre el origen del sol, los planetas, lunas y del sistema solar. Los
avances en la astronomía, permiten demostrar cómo fue que surgió el sistema
solar y estudiar la formación de otros sistemas más lejanos. Lo que probo que los
nuevos sistemas solares surgen en el interior de nubes de gas interestelar, por lo
que es imposible percibir estos sucesos bajo los sentidos humanos de manera
natural. Esto se debe a que los cuerpos celestes emiten radiación infrarroja que
presenta una longitud de onda más larga a la de la luz visible.
El polvo se dispersa y no puede observarse con los telescopios
convencionales, pero si mediante sensores infrarrojos. Es en este momento que
se crea el Spitzer, un telescopio espacial conocido como una instalación de
infrarrojo, siendo el cuarto y último de los grandes observatorios de la NASA. A
través del cual se puede observar el momento en el que el polvo comienza a
acumularse y a calentarse hasta que nace una estrella. Es por ello que se puede
suponer que nuestra nebulosa comenzó a calentar hace 4.600 millones de años y
es probable que llevara un tiempo girando lentamente en el espacio.
Lo que produjo un colapso y comenzó a girar mucho más deprisa. A
medida que se contrae la nebulosa se concentra la energía en un espacio más
pequeño y por ende debe aumentar la velocidad de rotación debido a su propia
gravedad. Nuestra nebulosa comenzó a colapsar y a girar cada vez más rápido
formando un trozo denso de materia y del centro había nacido una proto estrella.
En un inició el calor que emanaba se debía la fricción, pero al alcanzar 10 millones
de grados Celsius empezó a actuar la fusión nuclear. Entonces acababa de nacer
nuestra estrella y los átomos de hidrógeno se fusionaron hasta formar helio.
Durante este proceso se liberaron protones. El sol acababa de emitir sus
primeros rayos de luz, una luz que sigue brillando cuatro mil millones de años
después, cosa que se asemeja a un horno nuclear enorme de 1,600.000
kilómetros de diámetro. El sol irradia su energía por todo el sistema solar
primigenio, desarrollando todo tipo de actividades; donde los objetos caminaron
rápidamente, las explosiones fueron violentas y la radiación intensa. Una
investigación reciente, sugiere que el nacimiento del sistema solar no fue nada
Pacífico y que posiblemente el sol surgió como producto de los acontecimientos
más violentos del cosmos.
La muerte explosiva de una estrella que al parecer se produjo de otra
explosión más grande conocida como el big-bang, tras la cual se creó el universo,
nadie sabe que desencadenó esta explosión, pero se cree que por medio de ella
se formó el espacio, tiempo y toda la materia del universo. Esta es una de las
teorías más famosas y conocidas, pero ¿Y si no fue así?, esta teoría tiene tantos
seguidores como estudiosos de la materia que difieren de ella. Pues esta ley no
justifica que durante el proceso no se elaborará casi ninguno de los 88 alimentos
químicos de la naturaleza.
En nuestro hay alrededor hidrógeno, helio, carbono, oxígeno, hierro y silicio,
estos elementos no surgieron de esa gran explosión. Entonces debieron provenir
de otro lugar, hoy en día la humanidad ha aprendido crear elementos por su propia
cuenta, mediante la tecnología nuclear. Es lo mismo que sucede en las estrellas
con el hidrógeno y el helio que se fusionan para producir elementos más pesado y
si la estrella es lo suficientemente grande la energía de la explosión será de una
supernova, prácticamente equivale a toda la energía que el sol emitirá en sus 10
mil millones de años.
Una supernova irradia esa cantidad de energía en menos de un día y se
expande durante varios meses, creando elementos esenciales para que surjan
planetas y vida, dilatando su brillo tanto como una galaxia entera o como mil
millones de soles juntos. Los procesos nucleares extremos que se producen
dentro de una estrella moribunda, son una fusión de los elementos que está creo
en vida y de la que surgen elementos más pesados. Los productos obtenidos tras
millones de reacciones nucleares se dispersan y durante este proceso surgen
algunas nubes, a partir de las cuales nacerán nuevas estrellas.
Lo complicado es descubrir que provoca todo esto y el mejor modo es
examinar la materia que una vez constituyó esa nube. Lo que significa analizar los
dos objetos más antiguos del sistema solar, los asteroides y los cometas. Para los
científicos los cometas son una especie de reliquia de los primeros días de
existencia del sistema solar que pueden ofrecer datos para entender nuestro
origen, pero para poder estudiarlos a profundidad se necesitaban muestras. Así
que 1981 el doctor Peter show de la NASA empezó a trabajar en la idea de
recolectar fragmentos de cometas como una especie de ciencia forense.
Para esto se debía viajar a más de 480 millones de kilómetros de la tierra,
pero había un problema las partículas de polvo iban a una velocidad 6 veces
superior a la de una bala. Pese a ello se necesitaba que llegaran a la tierra
intactas y para esto se requería un material especial que fuera capaz de contener
una bala a esa velocidad, sin romperla o hacerla explotar. Se realizaron más de
2000 experimentos para perfeccionar el aparato a emplear como sus
componentes, finalmente se usó el mismo dióxido de silicio para presentar una
densidad mil veces inferior. Fue llamado aerogel de silicio con gradiente suave.
La sonda despegó el 7 de febrero de 1999 sobre un cohete delta especial.
Volvería convertida en una máquina del tiempo, llena de elementos procedentes
de la formación del sistema solar. Tuvo un viaje de 3200 millones de kilómetros
hasta que, en 2004 la cápsula entró a la atmósfera de la tierra y aterrizó sin
problemas. Al abrirla supieron que la misión había sido un éxito, pues había más
de tres docenas de partículas de cometas que llegaron en perfecto estado, por
muy pequeños que fueron los fragmentos contenían muchísima información sobre
cómo se formó realmente el sistema solar.
Por otro lado, hay científicos que intentan otro enfoque, los meteoritos que
también son antiguos y presentan una gran ventaja vienen a nosotros. Es
sorprende que cada vez que se data un meteorito, se obtiene casi siempre la
misma respuesta 4.500 millones de años y por tanto estos fragmentos son restos
del sistema solar primigenio, en consecuencia, lo que se tiene es una pieza clave
que relaciona el inmenso universo y nuestra existencia. Al realizar análisis
exhaustivos el equipo de hester descubrió topos inestables de hierro 60 en interior
de los meteoritos.
La presencia de este material es completamente inesperada, ya que, se
desintegra con relativa rapidez. Por ello, se asume que procede algún sitio
cercano porque de haber atravesado una gran distancia habría tenido tiempo
suficiente para descomponerse. Solo una supernova puede fabricar hierro 60, así
que tuvo que haber una de ellas activa cerca sol. Esto resulta una prueba
irrefutable de que el sol del sistema solar primigenio estuvo rodeado de una
estrella enorme que sufrió la explosión de una supernova e impactando todo lo
que se encuentra a 20 años luz a la redonda como una bomba galáctica.
En este sentido, lo que necesitaba exactamente esa fuerza destructiva era
la onda expansiva para concentrar la materia dispersa. Así nuestra gigantesca
nube de polvo pudo haberse inducido por la explosión de una supernova cerca de
las ondas que hicieron que se comprimiera el gas que había años luz. Dicha
compresión provocó el nacimiento de otras estrellas y cuando estuvo lo
suficientemente comprimida, empezó a hacer su efecto la gravedad iniciando el
colapso en el interior de la nebulosa, girando alrededor del sol y tomando forma
los planetas.
También hay astrónomos que se oponen a esto. Pues creen que los
planetas crecieron dentro de una nube de partículas de gas, rodeadas de un sol
“recién nacido” pero esa materia estaba demasiado dispersa como para que la
gravedad las juntara. En 2003 una serie de experimentos informales a bordo de la
estación espacial internacional, lanzaron algo de luz sobre este antiguo misterio.
Observaban el comportamiento de partículas en ausencia de gravedad tomado,
distintos granos de café, azúcar y sal en bolsas y comenzaron a unirse unos a
otros dándose cuenta de la fricción surgida entre partículas
Al estar dentro de una bolsa se creaba una carga electrostática que las
atrae entre sí, formando trozos de materia con la misma carga. El estar en un
ambiente de gravedad cero como la del sistema solar primigenio, las partículas
protoplanetarias cargadas debieron atraerse entre sí. Este proceso recibe el
nombre de acreación, donde las partículas colisionan dentro de una nebulosa
solar y se convierten en objetos más grandes cuando ya tienen un gran tamaño
empieza actuar la fuerza gravitatoria, qué es más fuerte que la fuerza
electrostática acelerando el proceso en periodos de millones de años.
Por ende, esa fuerza electrostática pudo haberse convertido en partes de
planetas que con el tiempo conformarían planetas enteros. En otro sentido
sabemos que, la gravedad es quién mantiene los planetas en sus órbitas
alrededor del sol. Un planeta en un espacio-tiempo distorsionado, aunque intenté
llegar movimiento rectilíneo y en cambio resultará moviéndose en torno a un
objeto central, ejerciendo la misma fuerza en todas las direcciones y atrayendo
siempre a las materias hacia el centro del cuerpo. Cuando es lo suficientemente
potente puede convertir cualquier objeto en una esfera.
Por esta razón los planetas del sistema solar son esferas prácticamente
perfectas, si su diámetro sobrepasa los 480 km no pueden presentar otra forma.
Todos los planetas son más o menos esféricos y todos proceden del mismo disco
original, a pesar de ser completamente distintos. Es posible clasificar los planetas
en dos grupos; los llamados terrestres (mercurio, Venus, tierra y Marte) que se
caracterizan por ser planetas rocosos, compuestas principalmente por silicatos y
ubicarse relativamente cerca del sol.
Los llamados planetas gigantes (júpiter, Saturno,Urano y Neptuno) no
poseen una superficie sólida, están compuestos principalmente por hidrógeno y
helio, son más alejados del sol. El proceso de formación para cada grupo de
planetas es distinto. Los planetas terrestres se formaron a partir de una nebulosa
solar primitiva, mediante procesos de acrecimiento donde pequeños granos de
polvo llamados planetesimales colisionaron incrementando su tamaño hasta dar
lugar a los planetas terrestres estando compuestos esencialmente por materiales
de alto poder de fusión como silicatos y metales
Los gigantes gaseosos son aquellos que están constituidos en particular
por hidrógeno y helio. El hielo es un componente sustancial en su composición
tanto así, que también son denominados gigantes helados, al no contar con un
núcleo sólido rocoso pueden consistir de gases paulatinamente más densos qué
adquieren propiedades de fluidos cuando entran en alta presión. Este es el motivo
por el que los embriones planetarios pudieron crecer más que los terrestres. La
inmensa mayoría de los planetas extrasolares descubiertos hasta ahora son
probablemente gaseosos o al menos en parte.
A pesar de todas las teorías que están expuestas sobre el big-bang no
estamos seguros de que el universo comenzará a partir de él, también se expone
que del vacío pudo emerger el cosmos y no quizás por una gran explosión. Puede
que, para ese momento, es decir, hace 3.800 millones de años lo que se
experimentará fuera un gran rebote tras un período de contracción que desde
entonces no ha dejado expandirse. A pesar de contar con numerosas pruebas
recabadas se necesitan al menos varias décadas más para poder afirmar alguna
teoría con firmeza.

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