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Este documento describe el régimen constitucional de la Ciudad de México. Establece que la Ciudad de México es una entidad federativa que goza de autonomía en su régimen interior y organización política y administrativa. Su gobierno está a cargo de poderes locales de acuerdo con su propia constitución, la cual debe ajustarse a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. La constitución de la Ciudad de México debe establecer normas y garantías para los derechos humanos.
Este documento describe el régimen constitucional de la Ciudad de México. Establece que la Ciudad de México es una entidad federativa que goza de autonomía en su régimen interior y organización política y administrativa. Su gobierno está a cargo de poderes locales de acuerdo con su propia constitución, la cual debe ajustarse a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. La constitución de la Ciudad de México debe establecer normas y garantías para los derechos humanos.
Este documento describe el régimen constitucional de la Ciudad de México. Establece que la Ciudad de México es una entidad federativa que goza de autonomía en su régimen interior y organización política y administrativa. Su gobierno está a cargo de poderes locales de acuerdo con su propia constitución, la cual debe ajustarse a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. La constitución de la Ciudad de México debe establecer normas y garantías para los derechos humanos.
Diana Laura Valenzuela Hernández Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, UDG Derecho Constitucional II Mtro. Carlos Ramiro Ruiz Moreno 11 de noviembre de 2022 2
| Prerrogativas constitucionales de los Estados.
“Una prerrogativa es un permiso, un beneficio o una dispensa que se otorga a una persona respecto a un determinado asunto. La prerrogativa, de este modo, permite evitar o evadir un cierto límite.” Las prerrogativas, conforme a su definición, son los privilegios, gracias o excepciones que se conceden a alguien a consecuencia de alguna dignidad, de un cargo, de un empleo o de una condición particular. La palabra prerrogo significa etimológicamente "el que vota antes", el que tiene algún privilegio para actuar antes o a excepción de los demás. Cuando los Constituyentes de 1857 y de 1917 pretendieron asimilar la condición de ciudadano a un estado especial con ciertas prerrogativas, estaban hablando de derechos y en consecuencia, la palabra "prerrogativa" no responde a lo que en verdad son los derechos del ciudadano mexicano, entre ellos, el de votar en elecciones populares. Además, desde el punto de vista jurídico y hasta de lógica elemental, lo opuesto, lo complementario a las obligaciones no son prerrogativas sino los derechos. No obstante, como lo viene impuesto en el artículo 38° de nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; los derechos o prerrogativas de los ciudadanos se suspenden: I.- Por falta de cumplimiento, sin causa justificada, de cualquiera de las obligaciones que impone el artículo 36. Esta suspensión durará un año y se impondrá además de las otras penas que por el mismo hecho señalare la ley; II.- Por estar sujeto a un proceso criminal por delito que merezca pena corporal, a contar desde la fecha del auto de formal prisión; III.- Durante la extinción de una pena corporal; IV.- Por vagancia o ebriedad consuetudinaria, declarada en los términos que prevengan las leyes; V.- Por estar prófugo de la justicia, desde que se dicte la orden de aprehensión hasta que prescriba la acción penal; y VI.- Por sentencia ejecutoria que imponga como pena esa suspensión. La ley fijará los casos en que se pierden, y los demás en que se suspenden los derechos de ciudadano, y la manera de hacer la rehabilitación. 3
| Obligaciones constitucionales a cargo de los Estados.
Principalmente, en el ámbito de los derechos humanos (civiles, políticos, económicos, sociales y culturales), los Estados tienen tres niveles de obligaciones: respetar, proteger y realizar. El primer párrafo del articulo 1° de la CPEUM establece las obligaciones del Estado en materia de derechos humanos. Por un lado, señala las obligaciones de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos; por el otro, las de prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos en los términos que establezca la ley. Esta separación responde a que existen obligaciones genéricas y obligaciones especificas para asegurar la protección de los derechos humanos, sin que eso signifique que haya una jerarquía entre ellas. Las obligaciones que son comunes a todos los derechos son las llamadas obligaciones genéricas. Una de ellas es la de promover, la obligación de promover está orientada hacia la sensibilización social en el ámbito de los derechos humanos, el Estado esta obligado a adoptar medida encaminadas a lograr una cultura basada en derechos a través de cambios en la conciencia pública, el cumplimiento puede ocurrir de manera gradual y progresiva. Promover los derechos humanos significa que el Estado tiene la obligación de asegurar que las personas conozcan tanto sus derechos como los mecanismos de defensa de estos, pero también el deber de garantizar que sepan como ejercer mejor esos derechos. La obligación de respeto, por otro lado, es la que se exige de manera mas inmediata, requiere que las autoridades se abstengan de llevar a cabo acciones que vulneren derechos y, en paralelo, que no impidan u obstaculicen las circunstancias que hacen posible el goce de los derechos humanos a todas las personas. Asimismo, la obligación de proteger impone al Estado el deber de asegurar que las personas no sufran violaciones de derechos cometidas por las autoridades o por parte de algún particular. Y finalmente, la obligación de garantizar se refiere a que el Estado tiene que adoptar medidas que creen las condiciones necesarias para el goce efectivo de los derechos. Por otra parte, las obligaciones especificas se señala la de prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones de los derechos. 4
| Prohibiciones constitucionales a los Estados.
Una prohibición referida a una autoridad, en estricta técnica jurídica, no tiene razón de ser; es suficiente que no se le otorgue la facultad o atribución para actuar sobre determinada materia, para que se entienda que la tiene prohibida; no obstante, ese principio en la Constitución aparece un numero crecido de ellas; su existencia se explica solo en función de que pudiera tratarse de una acción gravemente nociva, impolítica, o violatoria de un derecho individual o político a favor de los ciudadanos; también existen referidas a los Estados para impedir la realización de acciones que pudieran implicar la comisión de una invasión grave al ámbito federal, que entorpezcan una actividad confiada a el o impidan el ejercicio de un derecho de los particulares o acciones que pudieran afectar las relaciones con otros países. Como lo menciona en el articulo 117° de la CPEUM:
Los Estados no pueden, en ningún caso:
I. Celebrar alianza, tratado o coalición con otro Estado ni con las Potencias extranjeras. II. Derogada. III. Acuñar moneda, emitir papel moneda, estampillas ni papel sellado. IV. Gravar el tránsito de personas o cosas que atraviesen su territorio. V. Prohibir ni gravar directa ni indirectamente la entrada a su territorio, ni la salida de él, a ninguna mercancía nacional o extranjera. VI. Gravar la circulación ni el consumo de efectos nacionales o extranjeros, con impuestos o derechos cuya exención se efectúe por aduanas locales, requiera inspección o registro de bultos o exija documentación que acompañe la mercancía. VII. Expedir ni mantener en vigor leyes o disposiciones fiscales que importen diferencias de impuestos o requisitos por razón de la procedencia de mercancías nacionales o extranjeras, ya sea que esta diferencia se establezca respecto de la producción similar de la localidad, o ya entre producciones semejantes de distinta procedencia. VIII. Contraer directa o indirectamente obligaciones o empréstitos con gobiernos de otras naciones, con sociedades o particulares extranjeros, o cuando deban pagarse en moneda extranjera o fuera del territorio nacional. IX. Gravar la producción, el acopio o la venta del tabaco en rama, en forma distinta o con cuotas mayores de las que el Congreso de la Unión autorice. 5
| Régimen constitucional de la Ciudad de México.
El régimen constitucional de la Ciudad de México lo limita y expresa en el articulo
122° de la CPEUM: La Ciudad de México es una entidad federativa que goza de autonomía en todo lo concerniente a su régimen interior y a su organización política y administrativa. El gobierno de la Ciudad de México está a cargo de sus poderes locales, en los términos establecidos en la Constitución Política de la Ciudad de México, la cual se ajustará a lo dispuesto en la presente Constitución. La Ciudad de México adoptará para su régimen interior la forma de gobierno republicano, representativo, democrático y laico. El poder público de la Ciudad de México se dividirá para su ejercicio en Legislativo, Ejecutivo y Judicial. No podrán reunirse dos o más de estos poderes en una sola persona o corporación ni depositarse el Legislativo en un solo individuo. La Constitución Política de la Ciudad de México establecerá las normas y las garantías para el goce y la protección de los derechos humanos en los ámbitos de su competencia, conforme a lo dispuesto por el artículo 1o. de esta Constitución. La Constitución Política de la Ciudad de México establecerá las facultades del Jefe de Gobierno y los requisitos que deberá reunir quien aspire a ocupar dicho encargo Las leyes federales no limitarán la facultad de la Ciudad de México para establecer las contribuciones sobre la propiedad inmobiliaria, su fraccionamiento, división, consolidación, traslación y mejora, así como las que tengan por base el cambio de valor de los inmuebles y las derivadas de la prestación de servicios públicos a su cargo, ni concederán exenciones en relación con las mismas. La Ciudad de México contará con los organismos constitucionales autónomos que esta Constitución prevé para las entidades federativas. Los poderes federales tendrán respecto de la Ciudad de México, exclusivamente las facultades que expresamente les confiere esta Constitución. El Gobierno de la Ciudad de México, dado su carácter de Capital de los Estados Unidos Mexicanos y sede de los Poderes de la Unión, garantizará, en todo tiempo y en los términos de este artículo, las condiciones necesarias para el ejercicio de las facultades constitucionales de los poderes federales.