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Guatemala

“La paz no es solamente la ausencia de guerra; mientras


haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión difí-
cilmente podremos alcanzar un mundo de paz”.
Rigoberta Menchú Tum (1959)

Lugar: Guatemala
Fecha: 1981 a 1983
Víctimas: Más de 200,000 indígenas mayas fueron asesinados durante el conflicto, de los cuales 100,000 son
relacionados al genocidio.
Desplazados: Los números conservadores indican que por lo menos medio millón de personas fueron desplaza-
das, pero esta cifra podría alcanzar hasta un millón y medio.

Guatemala: represión y discriminación


Los indígenas guatemaltecos, además de padecer pobreza, han sido víctimas de discriminación social, económica
y cultural durante décadas, lo que allanó el camino para cometer el primer genocidio en América Latina. Un geno-
cidio prácticamente desconocido en el mundo.

La historia de Guatemala ha estado marcada por gobiernos dictatoriales y represivos, originando una división
política de la población y el surgimiento de movimientos sociales y grupos guerrilleros. Esto causó una guerra
civil que se prolongó desde la década de 1960 hasta 1996.

El terror y el genocidio
Durante el conflicto, el gobierno desató el terror y se centró en aniquilar a la guerrilla y a los movimientos so-
ciales; al considerar a los indígenas un grupo ignorante y fácil de sumar a la guerrilla, se aplicó una política de
destrucción masiva en donde los mayas se convirtieron en un objetivo militar.

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Las paredes que revisten la exposición del genocidio en Guatemala hacen alusión a las más de 600 aldeas asalta-
das por el ejército, bajo una política llamada “tierra arrasada”, en donde las aldeas eran devastadas, los indígenas
eran torturados y brutalmente asesinados, las mujeres eran violadas, los niños golpeados hasta la muerte o bien
secuestrados para servir de esclavos.

En un nicho de la exposición se pueden escuchar los desgarradores testimonios de las víctimas, testigos palpables
de la brutalidad del ejército, la discriminación de la sociedad y la indiferencia del mundo.

Ante el genocidio, dentro y fuera del país, las víctimas fueron invisibles. No se realizó ninguna intervención inter-
nacional. La discriminación y el olvido marcaron la violencia contra los indígenas.

El Museo tiene una manta original hecha por los sobrevivientes del genocidio y en donde honran a sus familiares
masacrados durante el conflicto. Esta manta representa a una sociedad que lucha por la justicia y el reconoci-
miento histórico. Parte importante de sus logros es la creación de una comisión para el esclarecimiento histórico
y el reconocimiento del genocidio por parte del gobierno e instancias internacionales. Sin embargo, los principa-
les responsables, los ex presidentes Fernando Romeo y Efraín Ríos Montt nunca pisaron una cárcel a pesar de ser
señalados por la Comisión para el Esclarecimiento Histórico como responsables de actos de genocidio contra la
población indígena guatemalteca.

Si se mantiene el germen discriminatorio que inició la violencia, si no mejoran las condiciones de vida de las mino-
rías discriminadas en el país, si no se logra la reparación y justicia debida, jamás llegará la reconciliación.

2| Museo Memoria y Tolerancia | www.myt.org

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