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Ezequiel

Ezequiel
Estructura de Ezequiel

Autor y fecha

Aspectos Literarios

Contexto Histórico de Ezequiel

Gobernantes y Profetas de la época de Ezequiel

Retos de Interpretación

Temas históricos y teológicos

Vista Panorámica de Ezequiel

Referencias Proféticas

Importancia en la Biblia

El Carácter de Dios en Ezequiel

Apuntes de Ezequiel
‫יחזקאל‬
"Dios revela esperanza"

Lee la Biblia: Ezequiel 1-33

Segundo Video

Ezequiel en varias versiones:

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25

26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48

Tiempo de Lectura= 2:25 / Contiene: 48 capítulos, 1.273 versículos y 39.407 palabras.

MÉTODO CRÍTICO

1) ¿QUIÉN ESCRIBIÓ EL LIBRO? Ezequiel

2) ¿CUÁNDO FUE ESCRITO? 592 a 572 a.C.

3) ¿A QUIÉN FUE ESCRITO? A cautivos de Israel

4) ¿DE DÓNDE FUE ESCRITO? Babilonia

MÉTODO HISTÓRICO

1)¿CUÁL ES EL TRASFONDO HISTÓRICO DEL LIBRO? Siendo joven Ezequiel fue llevado al cautiverio 11 años antes de la destrucción de Jerusalén. El tema de su
profecía es precisamente la destrucción de Jerusalén, el juicio sobre el pueblo, y finalmente, el regreso de los exiliados y el futuro glorioso de Israel.

Libro de carácter profético cuyo autor es el joven Ezequiel que fue llevado cautivo a Babilonia a los 11 años, antes de la destrucción de Jerusalén. El tema de su profecía
es, precisamente, la destrucción de dicha ciudad, las profecías sobre las demás naciones, el juicio sobre el pueblo, el regreso de los exiliados, y el futuro glorioso y la
restauración de Israel. Se destaca un estilo narrativo ordenado y coherente.

MÉTODO LITERARIO

1) ¿QUE GENERO DE LITERATURA ES EL LIBRO? Profecía (Uno de los profetas mayores)


MÉTODO PANORÁMICO

1) ¿CUÁL ES LA IDEA PRINCIPAL DEL LIBRO? Mientras Jeremías profetizaba en Jerusalén que la ciudad pronto caería ante los babilonios, Ezequiel daba el mismo
mensaje a los cautivos que ya se encontraban en Babilonia. Al igual que los que estaban en Jerusalén, los cautivos seguían obstinados en su creencia de que Jerusalén no
caería y que pronto regresarían a su tierra. Ezequiel les advirtió que el castigo era seguro debido a sus pecados y que Dios estaba purificando a su pueblo. Dios siempre
castiga el pecado, lo creamos o no.

2) ¿CUÁL FUE LA RAZÓN PRINCIPAL POR LA CUAL SE ESCRIBIÓ ESTE LIBRO? Anunciar el castigo de Dios sobre Israel y otras naciones y predecir la salvación final para
el pueblo de Dios.

PALABRAS CLAVE EN EZEQUIEL (RV1960): hijo de hombre, pacto, visión (visiones), gloria, Espíritu (espíritu), sabréis (sabrán, conocerán, que yo soy Jehová), maldad
(iniquidad, perversidad, pecado), rebelarse (rebeldes, rebeliones), ira (enojo, furor), corazón, remera (fornicar, fornicación, adulterio, adulterios, adulterar, prostituirse).

ÉNFASIS: La inevitable de la caída de Jerusalén por causa de sus pecados, especialmente el de idolatría; la trascendental soberanía de Dios como Señor de todas la
naciones y de toda la historia; la pérdida y la restauración de la tierra y de la presencia de Jehová entre el pueblo de Dios; la promesa del Espíritu que da vida como la clave
para la fidelidad al pacto.

CÓMO LEER EZEQUIEL

La nación estaba en crisis. La confusión giraba a su alrededor. Las cambiantes realidades políticas en Asiria, Egipto y Babilonia amenazaban la existencia misma de
Jerusalén. A medida que fueron desplazados los grandes imperios, Dios llamó a su pueblo rebelde a regresar a Él. «Repetidas veces el Señor, Dios de sus antepasados,
envió a sus profetas para advertirles, porque tenía compasión de su pueblo y de su templo.» (2Cr 36:15). Estos profetas incluyen a Jeremías, Ezequiel, y Daniel, sus
ministerios se superponen entre sí. «Sin embargo, el pueblo se mofaba de estos mensajeros de Dios y despreciaba sus palabras... Dios los entregó a todos en manos de
Nabucodonosor.» (2Cr 36:16-17).

La historia real detrás de los titulares políticos es de un Dios que hará cualquier esfuerzo para perseguir a su pueblo y traerlo de regreso a Él. Lo último que Dios quiere
para su pueblo es juicio. Dios prefiere perdonar que juzgar, pero va a juzgar si es necesario. Debido a su persistente desobediencia, Dios les pregunta: «¿Acaso piensan que
me agrada ver morir a los perversos?... ¡Claro que no! Mi deseo es que se aparten de su conducta perversa y vivan. Sin embargo, si los justos se apartan de su conducta
recta y comienzan a pecar y a comportarse como los demás pecadores, ¿se les permitirá vivir? No, ¡claro que no!» (Eze 18:23-24). Por lo tanto, Él profetizó destrucción
inminente, esperando que su pueblo se arrepienta y que el juicio sea evitado. Este es el deseo del corazón de Dios. Él clama apasionadamente, «No quiero que mueras, ...
¡Cambia de rumbo y vive!» (Eze 18:32).

Ezequiel poseía un gran talento artístico, presentaba obras y escribía poesía. Él describió algunas de las visiones más gráficas que puedas encontrar. No te preocupes si
no puedes imaginarte todos los detalles de algunas de estas maravillosas experiencias proféticas. Ezequiel está describiendo lo indescriptible, como él mismo dice: «Así se
me presentó la gloria del Señor.» (Eze 1:28). Sus ilustraciones desafían nuestra imaginación y nos dirigen a una fe en un Dios fuera de lo común, ¡un Dios increíble en
majestad, poder y gloria! Dios es capaz aun de hacer que esqueletos vuelvan a la vida (capítulo 37). Permite que estas extraordinarias imágenes resuenen en tu corazón y
fortalezcan tu esperanza en Él, quien poderosamente restaura la vida de entre las cenizas. Que tu hambre aumente por una intimidad renovada con un Dios que te anhela,
y acepta un nuevo enfoque y así vivir plenamente para su gloria.

TÍTULO: El libro siempre ha sido nombrado por su autor, Ezequiel (1:3; 24:24), quien no es mencionado en ningún otro lugar en las Escrituras. Su nombre quiere decir
"fortalecido por Dios", lo cual, de hecho, él experimentó para llevar a cabo el ministerio profético al que Dios lo había llamado (3:.8, 9). Ezequiel usa visiones, profecías,
parábolas, señales y símbolos para proclamar y dramatizar el mensaje de Dios a su pueblo exiliado.

TEMAS:
1. Juicio. El profeta Ezequiel usó maneras poco comunes para profetizar el juicio venidero de Dios. Él horneó comida utilizando excremento de vaca como combustible
(4:9-17); se rasuró su cabello y su barba, quemando una tercera parte del pelo (5:1-4); cavó un agujero grande en la muralla de la ciudad y pasó a través de él (12:1-6); y
se acostó sin moverse por largos periodos de tiempo (3:24-27; 4:4-8). Estos hechos visibles fueron igualados por visiones e imágenes proféticas (1:1-28; 8:1-11:25;
40:1-48:35). Dios juzgaría tanto al pueblo (1:1-24:27) como a las naciones extranjeras (25:1-32:32) por su comportamiento pecaminoso.
2. La soberanía de Dios. Dios es soberano durante el curso de la historia humana. Sus juicios son frecuentemente una manera de autorrevelación.
3. Esperanza futura. Habría esperanza para el pueblo de Dios después del juicio (33:1-39:29).

Estructura de Ezequiel
Título: “Conociendo a Dios en conflictos y restauración”

Versículo Clave: 39:28,29 “Y sabrán que yo soy Jehová su Dios, cuando después de haberlos llevado al cautiverio entre las naciones, los reúna sobre su tierra, sin dejar
allí a ninguno de ellos. Ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de mi Espíritu sobre la casa de Israel, dice Jehová el Señor’

1:1  Visión y Gloria Divina PRIMER


LLAMAMIENTO
DE
EZEQUIEL
2:1  Llamamiento de Ezequiel

4:1  Predicción sitio de Jerusalén

6:1  Profecía contra Israel CAÍDA


DE
JERUSALÉN
7:1  El fin viene
8:1  Visión abominaciones en Israel

9:1  Visión muerte de culpables

10:1  Gloria de Jehová abandona el


templo JUICIOS Y
MISERICORDIA

11:1  Reprensión, promesa,


restauración

12:1  Salida Ezequiel señal cautividad

13:1  Condenación falsos profetas

14:1  Juicio idolatría y Jerusalén

15:1  Jerusalén vid inútil


16:1  Infidelidad de Jerusalén

LLAMAMIENTO
PARA
 
JUICIO
17:1  Parábola águila y la vid

18:1  El alma que pecare morirá CAÍDA DE


JERUSALÉN
PROMESA DE
19:1  Dios versus Israel RESTAURACIÓN

21:1  Pecados de Jerusalén

23:1  Las dos hermanas

24:1  Parábola de la olla hirviente

25:1  Amón, Moab 


 
Edom, Filisteos

26:1  Profecía Tiro y Sidón PROFECÍA


NACIONES
29:1  Profecía a Egipto

33:1  El deber del Atalaya

34:1  Profecía contra pastores de


Israel

35:1  Profecía contra monte Seir

SEGUNDO
LLAMAMIENTO

36:1  Restauración de Israel ATALAYA


37:1  Valle de huesos secos

38:1  Profecía contra Gog LLAMAMIENTO

PARA
40:1  La visión del templo
RESTAURACIÓN
43:1  Gloria en el templo leyes
NUEVA

JERUSALÉN
47:1  Aguas salutíferas, repartición de
tierras
Autor y fecha
Si "el año treinta" del 1:1 se refiere a la edad de Ezequiel, él tenía 25 años de edad cuando fue llevado cautivo y 30 cuando fue llamado al ministerio. 30 años era la edad
en la que los sacerdotes comenzaban su cargo, y por lo tanto era un año notable para Ezequiel. Su ministerio comenzó en el 593/92 a.C. y se extendió por lo menos 22 años
hasta el 571/70 a.C. (25:17). Él era un contemporáneo tanto de Jeremías (quien era unos 20 años mayor) y Daniel (quien era de la misma edad), a quien él nombra en el
14:14, 20; 28:3 como un profeta que ya era bien conocido. Al igual que Jeremías (Jer 1:1) y Zacarías (Zac 1:1 con Neh 12:16), Ezequiel fue tanto un profeta como un
sacerdote (1:3). Debido a su contexto sacerdotal, él estaba particularmente interesado y a la vez familiarizado con los detalles del templo; y así Dios lo usó para escribir
mucho acerca de ellos (8:1-11:25; 40:1-47:12).

Ezequiel y su Esposa (quien es mencionada en el 24:15-27) estaban entre los diez mil judíos que fueron llevados cautivos a Babilonia en el 597 a.C. (2 R 24:11-18). Ellos
vivián en Tel-abib (3:15)en la cuenca del río Quebar, probablemente al SE de Babilonia. Ezequiel escribe de la muerte de su esposa en el exilio (Ez 24:18), pero el libro no
menciona la muerte de Ezequiel, las cual la tradición rabínica sugiere que ocurrió en las manos de un príncipe israelita cuya idolatría él reprendió alrededor del 560 a.C.

El autor recibió su llamado a profetizar en el 593 a.C. (1:2), en Babilonia ("en la tierra de los caldeos"), durante el quinto a{o de la cautividad del rey Joaquín, las cual
comenzó en el 597 a.C: Frecuentemente, Ezequiel fecha sus profecías a partir del 597 a.C. (8:1; 20:1; 24:1; 26:1; 29:1; 30:20; 31:1; 32:1, 17; 33:21; 40:1). Él también fecha
el mensaje en el 40:1 como el 573/72, el decimocuarto año después del 586 a.C., esto es, la caída final de Jerusalén. La última profecía fechada de Jerusalén fue en el
571/70 a.C. (29:17).

Las profecías en los capítulos 1-28 están en orden cronológico. En el 29:1, el profeta regresa a un año antes del 26:1. Pero a partir del 30:1 (31:1; 32:1, 17), él está cerca
de ser estrictamente cronológico.

Aspectos Literarios
Los tres profetas mayores (Isaías, Jeremías, Ezequiel) y Sofonías, tienen la misma secuencia básica de mensajes:

1. Oráculos con Israel.

2. Oráculos contra las naciones.

3. Consolación para Israel.

En ningún otro libro este patrón se muestra tan claramente como en Ezequiel. Además de la claridad de la estructura, el libro de Ezequiel revela simetría. La visión del
templo profanado listo para su destrucción (caps. 8-11) se equilibra por la visión del templo restaurado y purificado (caps. 40-48). El Dios que se presenta como un Dios de
ira (cap. 1) también se muestra como un Dios de consolación ("Aquí Habita el Señor", 48:35). El llamado de Ezequiel para ser un centinela del juicio divino (cap. 3) se
equilibra con un llamado a ser un centinela de la nueva era (cap. 33). En un lugar (cap. 6) las montañas de Israel reciben una amonestación profética, pero en otro (cap. 36)
son consolados.
Los libros proféticos, por lo general, son extensamente poéticos, y sus profetas hablan aparentemente en estilos imaginativo y rítmicos. La mayor parte de Ezequiel, sin
embargo, está escrito en prosa,tal vez debido a su trasfondo sacerdotal. Sus reiteraciones tienen un efecto percutor inolvidable, y su orientación sacerdotal también se
refleja en el tipo de oraciones gramaticales semejantes a las que se usaban en los casos legales (compárese 3:19, "si tú se lo adviertes..." con Ex 21:1, "Si alguien compra un
esclavo hebreo...").

El libro contiene cuatro visiones (caps. 1-3; 8-11; 37:1-14; 40-48) y 12 actos simbólicos (3:22-26; 4:1-3; 4:4-8; 4:9-11; 4:12-14; 5:1-3; 12:1-16; 12:17-20; 21:6-6; 21:18-
24; 24:15-24; 37:15-28). Cinco mensajes se expresan en forma de parábolas (caps. 15; 16; 17; 19; 23).

Contexto Histórico de Ezequiel


Desde la perspectiva histórica, el reino unido de Israel duró más de ciento diez años (1043-931 a.C.), pasando por los reinados de Saúl, David, y Salomón. Después el
reino dividido, Israel (norte) y Judá (sur), se extendió del 931 a.C. al 722/21 a.C. Israel cayó en manos de Asiria en el 722/21 a.C. dejando a Judá, el reino sobreviviente por
ciento treinta y cinco años, el cual cayó en manos de Babilonia en el 605-586 a.C.

En el contexto más inmediato, varias características fueron estratégicas. Políticamente, el poder militar de Asiria se derrumbó después del 626 a.C. y la capital, Nínive,
fue destruida en el 612 a.C. por los babilonios y los medos (Nahum). El Imperio Neobabilonio había manifestado su poderío desde que Nabopolasar tomó el trono en el
625 a.C., y Egipto, bajo Faraón Necao II, estaba determinado a conquistar lo que pudiera. Babilonia aplastó a Asiria en el 612-605 a.C., y registró una victoria decisiva en
contra de Egipto en el 605 a.C. en Carquemis, sin dejar, de acuerdo a la crónica babilonia, sobreviviente alguno. También en el 605 a.C., Babilonia guiada por
Nabucodonosor, comenzó la conquista de Jerusalén y la deportación de los cautivos, entre los cuales estaba Daniel (Dn 1:2). En diciembre de 598 a.C., volvió a sitiar a
Jerusalén y en el 16 de marzo de 597 a.C. tomó posesión de ella. En esta ocasión se llevó cautivo a Joaquín y a un grupo de diez mil que incluyó a Ezequiel (2 R 24:11-18).
La destrucción final de Jerusalén y la conquista de Judá, que incluyó la tercera deportación, ocurrió en el 586 a.C.

Religiosamente, el rey Josías (640-609 a.C.) había instituido reformas en Judá (2 Cr 34). Trágicamente, a pesar de su esfuerzo, la idolatría había insensibilizado a los
judíos de tal manera que su despertar fue solo "tan profundo como su piel" en términos generales. El ejército egipcio mató a Josías al cruzar Palestina en el 609 a.C., y los
judíos se hundieron en el pecado para juicio bajo Joacaz (609 a.C.), Joacim (609-698 a.C.), Joaquín (598-597 a.C.) y Sedequías (597-586 a.C.).

Domésticamente, Ezequiel y los diez mil vivieron en exilio en Babilonia (2 R 24:14), más como colonos que como cautivos, teniendo permiso de cultivar porciones de
tierra bajo condiciones algo favorables (Jer 29). Aun Ezequiel tenía su propia casa (3:24; 20:1).

Proféticamente, los profetas engañaban a los exiliados con certezas de un regreso pronto a Judá (13:3, 16; Jer 29:1). Del 593-585 a.C. , Ezequiel advirtió que su amada
Jerusalén sería destruida y su exilio prolongado y por lo tanto, no había esperanza de un regreso inmediato. En el 585 a.C., una persona que se escapó de Jerusalén, quien
había evadido a los babilonios, llegó a Ezequiel con las primeras noticias de que la ciudad había caído en el 586 a.C., alrededor de seis meses antes (33:21). Esto destrozó
las falsas esperanzas de cualquier liberación inmediata para los exiliados, y entonces el resto de las profecías de Ezequiel se relacionaron a la restauración futura de Israel
a su tierra de origen y las bendiciones futuras del reino mesiánico.

Gobernantes y Profetas de la época de Ezequiel


660 650 640 630 620 610 600 590 580 570 560 550 540 530 520 510 500 490
  Imperio neobabilónico        
      605
  Nabucodonosor
  562 560-556
Neriglisar      
Reyes de Babilonia             562-560
Evil
-   556
Labasi Marduk    
            merodiac   556-539
Nabónido    
                    553-539
Belsasar    
Joacim (Conías/Jeconías)

                 
3 meses
    Joakim Sedequias       Zorobabel
 
(Eliaquin)
609- (Matanias)
597-
    597 586       538

Últimos reyes de     605


          Cautiverio judío de 70 años 
      536 538
Decreto de Ciro
Judá 536
Comienza

    3 Etapas del cautiverio reedificación templo


(Reino del Sur)
534
Se detiene

    605 Daniel y sus amigos        


 reedificaron templo
597 Ezequiel y los diez

        520
Se reanuda edificación
mil cautivos
586 Destrucción

          516
El templo terminado
 de Jerusalén
               
627                     Jeremías                 574
               
Ezequiel y los profetas
de su época                      
593  
EZEQUIEL
  559
                     
(Reino del Sur)
               
   605                   Daniel                  536
               
660 650 640 630 620 610 600 590 580 570 560 550 540 530 520 510 500 490

Retos de Interpretación

Ezequiel usa un lenguaje simbólico de manera extensa, como lo hicieron Isaías y Jeremías. Esto da lugar a la pregunta de que si ciertas porciones de los escritos de
Ezequiel deben ser tomadas literalmente o en sentido figurado p.ej. ser atado con cuerdas, 3:25; si el profeta fue llevado corporalmente a Jerusalén o no, 8:1-3;
como el juicio individual puede ser llevado a cabo en el capítulo 18 cuando los impíos evaden la muerte en el 14:22, 23 y algunos de los piadosos mueren en una
invasión, 2:3, 4; como Dios permitiría que la esposa de un profeta fiel muriera (24:15-27); cuándo ocurrirían algunos de los juicios sobre otras naciones (caps. 25-
32); si el tiempo en los caps. 40-46 será literal y en qué forma; y cómo las promesas del futuro de Israel se relacionan al programa de Dios con la iglesia.

Temas históricos y teológicos

La "gloria de Jehová" es central a Ezequiel, apareciendo en el 1:28; 3:12, 23; 10:4, 18; 11:23; 43:4, 5; 44:4. El libro incluye descripciones vívidas de la desobediencia
de Israel y de Judá, a pesar de la bondad de Dios (cap. 23; cp. cap 16). Muestra el deseo de Dios porque Israel diera fruto que Él pueda bendecir; no obstante, los
deseos egoístas habían dejado a Judá lista para el juicio, como una vid, lista para ser quemada (cap. 15). Hay bastantes referencias a la idolatría de Israel y sus
consecuencias, tales como Pelatías cayendo del muro (11:13), una ilustración simbólica del desastre general para el pueblo.

Muchas escenas pintorescas ilustran principios espirituales. Entre estas está Ezequiel comiendo un rollo (cap. 2); las caras de cuatro ángeles representando
aspectos de la creación sobre la cual Dios gobierna (1:10); una escena de "peluquería" (5:1-4); pinturas en las paredes del templo recordándole a los lectores de lo
que Dios realmente quiere en su lugar de morada, esto es santidad y no inmundicia (8:10); y carbones encendidos esparcidos mostrando juicio (10:2, 7).

Los principales temas teológicos son la santidad y la soberanía de Dios. Estos son comunicados a través de un contraste frecuente entre su gloria brillante y el
despreciable contexto de los pecados de Judá (1:26-28; frecuentemente en los caps. 8-11; y 43:1-7). Relacionado muy de cerca está el propósito de Dios de triunfo
glorioso para que todos sepan "...que yo soy Jehová". Este monograma divino, la firma de Dios certificando sus obras, es mencionado más de 70 veces, normalmente
con un juicio (6:7; 7:4), pero ocasionalmente después de la restauración prometida (34:27; 36:11, 38; 39:28).

Otra característica involucra a los ángeles de Dios llevando a cabo su programa detrás de las escenas (1:5-25; 10:1-22). Un tema que también es importante es que
Dios hace responsable a todo individuo por buscar la justicia (18:3-32).
Ezequiel también enfatiza la pecaminosidad de Israel (2:3-7; :9, 10) y otras naciones (a lo largo de los capítulos 25-32). Él lidia con la necesidad de la ira de Dios para
lidiar con el pecado (7:1-8; 15:8); la frustración por parte de Dios de los planes del hombre para escapar de la Jerusalén sitiada (12:1-13; cp. Jer 39:4-7); y la gracia
de Dios prometida en el pacto abrahámico (Gn 12:1-3) siendo cumplida en la restauración del pueblo de Abraham a la tierra del pacto (caps. 34, 36-48; cp. Gn 12:7).
Dios promete preservar a un remanente de israelitas a través de quienes Él cumplirá sus promesas de restauración y mantener su palabra inviolable.

Vista Panorámica de Ezequiel


Si un creyente tiene compañerismo con Dios en cierto lugar, y luego es removido a la fuerza de ahí, ¿puede él encontrar a Dios en presencia de sus enemigos? ¿Puede Dios
ser adorado fuera del templo que Él ordenó para ese propósito? Estas son preguntas que inquietaron al profeta Ezequiel.

Al igual que Jeremías, Ezequiel también era sacerdote (1:3). Su nombre significa “fortalecido por Dios.” El era miembro de la aristocracia de Jerusalén y fue llevado al exilio
en el año 597 a.C. durante la segunda deportación, en el mismo tiempo que el rey Joaquín (1:2; 2 R 24:11–18). Ezequiel llegó a ser un líder de la comunidad del exilio en Tel
Abib en las márgenes del río Quebar en Babilonia (1:1; 3:15). Aunque se menciona su esposa (24:15–27), no se habla de ningún hijo. Su casa era usada como lugar de
reunión para los ancianos de Israel (3:24; 20:1). El ministró a los exiliados del reino del norte, Israel (2:3; 3:1, 3:11; 11:25); así que Ezequiel fue el primer profeta a su propia
gente en tierra extranjera. Daniel, contemporáneo suyo, fue profeta entre los gentiles y sus gobernantes.

En el 592 a.C., cinco años después de haber sido exiliado (1:2), Ezequiel tuvo una impresionante visión de la gloria de Dios que marcó el inicio de su ministerio el cual se
divide en dos períodos claros, siendo la caída de Jerusalén (586 a.C.) la línea divisoria. Del 592 al 586 a.C., él predicó arrepentimiento y juicio, anunciando la próxima
destrucción de Jerusalén como castigo por los pecados de apostasía, idolatría y las alianzas extranjeras. El denunció a los falsos profetas que daban al pueblo un falso
sentido de seguridad y negaban la severidad del juicio divino. Uno de los temas principales durante este período del ministerio de Ezequiel fue la justicia de Dios (18:25,
29; 33:17, 20). Su esposa murió en el 587 a.C., poco antes de la caída de Jerusalén (24:18). Cuando Jerusalén cayó, Ezequiel predicó un mensaje de consuelo y de reforma,
anunciando la futura restauración de Judá.

Ezequiel era un magistral comunicador y usó diferentes medios para transmitir los mensajes y las visiones que Dios le daba, a quienes les predicaba (37:1–14). También
predicó “sermones dramatizados” (4:1–8; 24:24) y a veces usó alegorías (17:1–10). Además de estos métodos excepcionales, él usó sermones y discursos orales en la
forma tradicional (6:1; 7:1; 12:1; 13:1; 15:1).

Como sacerdote, Ezequiel sintió mucho la destrucción de Jerusalén; pero, él entendió la necesidad del exilio. Con la pérdida del templo y sus rituales, Ezequiel aprendió a
depender en Dios solamente. Al igual que Jeremías, contemporáneo suyo, Ezequiel enseñó la responsabilidad individual. Este libro, lleno de esperanza demuestra que
Dios, por su gracia, no aniquiló a su pueblo escogido (28:25–26) como lo hizo con otras naciones culpables de ofensas semejantes. En su lugar, El los disciplinó para
corregir su pecado y que por ello cambiaran sus caminos. La disciplina de Dios dio resultado ya que el cautiverio babilónico curó a los judíos de la idolatría. Los creyentes
de cualquier generación pueden beneficiarse al someterse a la disciplina del Padre (He 12:4–11).

Referencias Proféticas
Ezequiel 34 es el capítulo donde Dios denuncia a los líderes de Israel como falsos pastores, por su poco cuidado a Su pueblo. En lugar de apacentar a las ovejas de Israel,
ellos se preocupaban por ellos mismos. Ellos comían bien, estaban bien vestidos y bien atendidos por el mismo pueblo sobre el que ellos habían sido puestos para cuidar
(Ezequiel 34:1-3). En contraste, Jesús es el Buen Pastor quien da Su vida por las ovejas, y quién las protege de los lobos que destruirían al rebaño (Juan 10:11-12). El verso
4 del capítulo 34 describe al pueblo cuyos pastores fracasaron en ministrar a las ovejas débiles, enfermas, heridas y pérdidas. Jesús es el Gran Médico quien sana nuestras
heridas espirituales (Isaías 53:5) por Su muerte en la cruz. Él es quien busca y salva a lo que se había perdido (Lucas 19:10).

Importancia en la Biblia
Las tensiones sicológicas y emocionales que experimentaba Ezequiel se reflejan en la profunda bipolaridad de su teología. Siempre se muestra sensible y fiel en cuanto a
ambos lados de la verdad y expresa esta en las grandes paradojas de la revelación divina.En su visión inaugural (cap. 1), Ezequiel hace énfasis en la trascendencia,
movilidad y omnipresencia de Dios. Sin embargo, termina el libro con la afirmación de que la nueva Jerusalén se llamará «Jehová allí», recalcando otra vez la presencia
local de Dios en el templo reconstruido (48.35). Insiste en que Dios es infinito, misterioso e incomprensible

(1.28). Pero, como ningún otro autor bíblico, proclama determinantemente que el hombre sí puede conocer verdaderamente a Dios. Ochenta y seis veces aparecen en el
libro frases como «sabréis que yo soy Jehová» (por ejemplo, 6.7, 10, 13, 14; cf. Jn 17.3).

Todo el libro muestra que Dios es el omnipotente soberano, que actúa en toda la historia humana (5; 7; etc.). Pero, más que los demás autores bíblicos, Ezequiel pone de
relieve la realidad del pecado que domina aún al pueblo escogido en muchos momentos de su historia (16; 20; 23). A la vez que reconoce la soberanía divina, recalca que el
hombre tiene la responsabilidad de su pecado y tiene el llamado al arrepentimiento (18.31, 32). Los tonos oscuros y repulsivos con que Ezequiel pinta el pecado destacan
su concepto de la gracia divina (por ejemplo, 36.25–27).Como ningún otro profeta, Ezequiel acentúa la realidad del juicio y la ira de Dios (caps. 5; 7; 20; etc.). Pero también
habla con pasión del tierno amor de Jehová, quien busca a sus ovejas perdidas (cap. 34), no quiere «la muerte del que muere» y ruega: «convertíos, pues, y viviréis» (18.32).

Ezequiel fue el primero que instó a la responsabilidad individual (cf Dt 24.16), pero en el famoso capítulo 18 tenemos un desarrollo sin paralelo de esta doctrina. Sin
embargo, el libro termina con la visión de una sociedad (40–48) que no deja campo para el individualismo egoísta, tan común en épocas posteriores.Con aún más precisión
que Jeremías (31.31–34), Ezequiel presentó la solución de la problemática de la persona en la regeneración interna, la obra del Espíritu de Dios y el

sello del → PACTO renovado (11.19; 18.31; 36.25–27). Pero como sacerdote (1.3), siempre buscaba la renovación (jamás el rechazo) del templo, culto, sacrificios y otras
expresiones externas de la religión (40–48).Como ningún otro profeta, Ezequiel se puso de parte de Dios y aun expresó deleite en los juicios divinos (2.8–3.3). Pero, con su
profunda conciencia del valor del individuo, asignó al cuidado pastoral un papel profético. Su hondo sentido de responsabilidad como

«atalaya» (3.16–21; 33.1–9), que debía velar por la salvación del prójimo, no tuvo paralelo humano en la historia bíblica hasta San Pablo (cf. Ro 9.1–3; 10.1).
El Dios de Ezequiel es ejecutor de juicio y muerte, pero también autor de resurrección y nueva vida (cap. 37; 47.1–12). Aunque Ezequiel no alcanza a discernir el
sufrimiento con la claridad de Isaías 53, es notable que las aguas de vida brotan desde debajo del altar, el lugar del → SACRIFICIO, en su nuevo templo (47.1).Aunque
muchos de los elementos individuales de su teología tienen abundantes antecedentes, Ezequiel mostró una capacidad única en el Antiguo Testamento para mantener
verdades doctrinales en tensión paradójica. Por eso es considerado por muchos como el teólogo más grande del Antiguo Testamento.

El Carácter de Dios en Ezequiel


1. Dios es glorioso: 1:28; 3:12, 23; 9:3; 10:4, 18, 19: 11:23; 43:4, 5; 44:4

2. Dios es santo: 1:26-28; 8-11; 43:1-7

3. Dios es justo: 18:25, 29; 33:17, 20

4. Dios es paciente: 20:17

5. Dios provee: 28:2-10

6. Dios se aíra: 7:19

Cristo en Ezequiel

Ezequiel contiene varios pasajes que ilustran el triunfo de Israel a través de la obra del Mesías. Vemos a Cristo como "cogollo de aquel alto cedro" (17:22-24). Esta
profecía mesiánica demuestra el linaje real de Cristo en relación con David. En las Escrituras se usa a menudo la imagen de la rama en referencia al Mesías y a Cristo como
tierno retoño que será plantado en el monte de Israel (34:23, 24; 37:24, 25; Is 4:2; Jer 23:5; 33:15; Zac 3:8; 6:12). Sobre lo alto, Ezequiel pinta a Cristo como cedro
majestuoso, que puede proteger con su sombra a Israel.

También, Cristo aparece como Pastor que cuida sus ovejas (34:11-31). Pero Ezequiel describe además el juicio del Pastor contra quienes abusan del pueblo de Israel o lo
maltratan (34:17-24; Mt 25:31-46)

Apuntes de Ezequiel
1. Libro de Ezequiel
2. Libro de Ezequiel 2
3. Preguntas en Ezequiel
4. Ocasión y resumen
5. Ezequiel en Wikipedia
6. Calendario Judío
7. LOS PROFETAS
8. Ezequiel: Autor y Fecha

9. Juicio contra Naciones

10. Estructura de Ezequiel

11. Trasfondo de Ezequiel

12. Significado teológico

13. Vista panorámica de Ezequiel


14. Bosquejo de Ezequiel

15. Pasaje difícil de Ezequiel


16. Estudiando Ezequiel

17. ¿Por qué leer Ezequiel?


18. ¿Quienes eran los profetas?

19. Gog y el Anticristo

20. Anímese a leer Ezequiel


21. Diccionario Ezequiel

22. Jesucristo en Ezequiel

El libro de Ezequiel es una parte significativa en la historia de Dios, ya que habla del fracaso final del pueblo de Dios como fue constituido por los primeros pactos, pero
que espera su reconstitución por medio de un nuevo pacto que incluye al verdadero Pastor y el don del Espíritu Santo.
"Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir (Observación) la ley de Jehová y para cumplirla (Aplicación), y para enseñar
(Interpretación) en Israel sus estatutos y decretos".

Esdras 7:10

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