ESCUELA DE TEOLOGÍA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA Prof. Pbro. Oscar Arias
Presenta: Oscar Gómez Notario, FMAP
4° Teología Tlalpan, CDMX, 4 de noviembre de 2022 LAUDATO SI
El Papa Francisco hace una reflexión sobre el problema ecológico para
entrar en dialogo acerca de la casa común. Hace referencia a sus antecesores retomando la idea de que cualquier avance técnico o científico se vuelve contra el hombre si no hay progreso social y moral. Y la de la capacidad de transformar la realidad que tiene el ser humano debe desarrollarse sobre la base de la donación originaria de las cosas por parte de Dios. El hombre aunque es espíritu y voluntad es tambien naturaleza y el problema es cuando no reconoce instancias por encima de él. Los aportes de los Papas recogen la reflexión de innumerables científicos, filósofos, teólogos y organizaciones sociales que enriquecieron el pensamiento de la Iglesia sobre estas cuestiones. El Papa cita al patriarca Bartolomé que propuso pasar del consumo al sacrificio, de la avidez a la generosidad, del desperdicio a la capacidad de compartir, en una ascesis que «significa aprender a dar, y no simplemente renunciar. Es un modo de amar, de pasar poco a poco de lo que yo quiero a lo que necesita el mundo de Dios. Es liberación del miedo, de la avidez, de la dependencia ». A partir de la obra de San Francisco de Asis el Papa llama proteger nuestra casa común y preocuparnos de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral. El Papa hace un breve recorrido por distintos aspectos de la actual crisis ecológica, para dejarnos interpelar por ella en profundidad y dar una base concreta ética y espiritual. A partir de esa reflexión, llega a razones que se desprenden de la tradición judío-cristiana, para procurar una mayor coherencia del compromiso con el ambiente. Y intenta llegar a las raíces de la actual situación, de manera que no miremos sólo los síntomas sino también las causas más profundas para proponer una ecología que incorpore al ser humano en este mundo con la realidad que lo rodea. Comenta que moderar el consumo, maximizar la eficiencia del aprovechamiento, reutilizar y reciclar. Abordar esta cuestión sería un modo de contrarrestar la cultura del descarte, que termina afectando al planeta entero, pero observamos que los avances en este sentido son todavía muy escasos. Dice que es un bien para la humanidad y para el mundo que los creyentes reconozcamos mejor los compromisos ecológicos que brotan de nuestras convicciones. Esto cuestiona seriamente los hábitos injustos de una parte de la humanidad. El rico y el pobre tienen igual dignidad, porque « a los dos los hizo el Señor» (Pr 22,2); Esto tiene consecuencias prácticas, como las que enunciaron los Obispos de Paraguay: «Todo campesino tiene derecho natural a poseer un lote racional de tierra donde pueda establecer su hogar, trabajar para la subsistencia de su familia y tener seguridad existencial. Su Santidad manifiesta que el hombre que posee la técnica sabe que, en el fondo, esta no se dirige ni a la utilidad ni al bienestar, sino al dominio; el dominio, en el sentido más extremo de la palabra. Por eso «intenta controlar tanto los elementos de la naturaleza como los de la existencia humana.1 El paradigma tecnocrático también tiende a ejercer su dominio sobre la economía y la política. Comenta en el 162 que el hombre del mundo posmoderno corren el riesgo permanente de volverse profundamente individualistas, y muchos problemas sociales se relacionan con el inmediatismo egoísta actual, con las crisis de los lazos familiares y sociales. Deben identificarse diversas responsabilidades. Por eso, las cuestiones relacionadas con el ambiente y con el desarrollo económico ya no se pueden plantear sólo desde las diferencias entre los países, sino que requieren prestar atención a las políticas nacionales y locales. Para concluir pude tomar aquellas palabras del papa que donde dice que hace falta entonces una conversión ecológica, que implica dejar brotar todas las consecuencias de su encuentro con Jesucristo en las relaciones con el mundo que los rodea. Vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa, no consiste en algo opcional ni en un aspecto secundario de la experiencia cristiana.
Matriz de Orientaciones para El Desarrollo de Experiencias de Aprendizaje Del Área de Educación Religiosa en El Contexto de La Emergencia Sanitaria Del Covid-19 - Actualizado