A través de los siglos se le ha dado un lugar especial a las religiones y creencias, reconozcamos

que en estos momentos es necesario unir nuestras voces al llamado fraternal de todas las
naciones y empezar una Jornada de Oración Internacional para la sanación física, espiritual
y emocional, así como por la readaptación familiar, social, económica y académica.
Todo pensamiento, sentimiento y palabra que surge de los humanos contiene una vibración que
forma parte de nuestro ser y se conecta con el universo, unamos esa energía vibrante a través
de la oración por la esperanza y solidaridad que todos necesitamos.
A partir de hoy a cualquier hora del día podemos empezar este ejercicio de fe, cada persona
puede dirigir su petición y agradecimiento como lo dicte su corazón, a solas o mejor aún en
familia. Comparto con ustedes mi plegaria que con seguridad coincide con las oraciones
surgidas algún rincón del mundo.
Ser supremo en quien confío y Madre Tierra de quien recibimos lo esencial para vivir; hoy
quiero pedir perdón por los daños que he causado a la naturaleza y a mis semejantes con actos
inconscientes y faltos de amor. Humildemente pido sabiduría y una actitud de cambio para
remediar en lo posible mis errores.

Deseo fortaleza y fe para todas las personas que tienen un familiar enfermo y el alivio espiritual
para quienes están sufriendo duelo.
Agradezco y pido por el bienestar de todos los trabajadores de la salud y de limpieza; quienes
nos enseñan cada día una lección de entrega y valentía. Así como todos los demás trabajadores
que laboran sin interrupción.
Pido para que todas las naciones tomemos lo positivo de las situaciones difíciles y aprendamos
a ser más responsables de nuestra salud individual y familiar; tratando de evitar el aumento
de enfermedades crónicas y virales.

Agradezco y pido por todas las familias que siguen inculcando los valores necesarios a los
niños y jóvenes para convivir una sociedad más justa, unida y tolerante.
Pido por todas las personas que tienen dificultades económicas para que retomen sus
actividades y siempre haya una mano amiga que pueda compartir lo necesario con ellos.

Pido sabiduría y un trabajo humanitario de quienes desarrollan medicinas y vacunas para la

conservación de nuestra salud.
Oro por toda humanidad para que enfoquemos nuestra actitud en tiempos de mejores
relaciones sociales, salud, prosperidad, y paz. Haciendo a un lado las emociones negativas
que frenan la alegría y la esperanza necesarias para aceptar los cambios que nos tocan vivir.
Pido por todas las naciones para sean bendecidas en sus necesidades físicas, espirituales,
familiares y económicas. Pido por el cuidado de todos y por los actos responsables que nos
ayudarán a salir adelante, con más fuerza, amor a la vida y a nuestros semejantes.