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Benemérita Universidad Autónoma de Puebla

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

Maestría en Ciencias Políticas

Anteproyecto de Investigación:

“Los gobiernos locales como extensión del cacicazgo


regional.
Las presidencias Municipales de Rafael Ávila
Camacho, Antonio J. Hernández, Eleazar Camarillo y
Amador Hernández
(Los casos de Atlixco, Puebla y Tehuacán)”

Presentada por: José Carlos Pérez Sánchez

Línea de Generación y Aplicación de Conocimiento:


Sistema Político Mexicano

30 de Agosto del año 2022

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Objetivos de la investigación
OBJETIVO GENERAL

Expandir el material disponible sobre la importancia y papel de la familia Ávila


Camacho dentro del desarrollo de la vida política del Estado de Puebla y al mismo
profundizar acerca del conocimiento que posee la ciencia política sobre el desarrollo
de cacicazgos locales y regionales dentro del sistema político mexicano.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

• Debatir sobre la naturaleza de la ciencia política mexicana en cuanto a sus


aportes al entendimiento sobre el sistema político mexicano.
• Indagar las causas del ferviente autoritarismo dentro las ramas de gobierno
y administración pública mexicana.
• Sintetizar por medio de una metodología hermenéutica un proceso de
identificación de los grupos y familias avilacamachistas que siguen en activo
dentro de las instituciones políticas.
• Identificar las vicisitudes y circunstancias pertinentes para la germinación de
un cacicazgo.
• Interpretar de manera más profunda el fenómeno de los cacicazgos en
México.
• Estimular a otros investigadores a llevar a cabo estos objetivos dentro de sus
propios estados o regiones.

Planteamiento del problema

El estudio de la ciencia política siempre ha tenido un tope muy grande a la hora de


analizar el caso mexicano. De acuerdo con investigaciones referentes al análisis de
el comportamiento de las élites políticas no solamente dentro de la estructura
mexicana sino dentro del aparato gubernamental del Estado de Puebla esto resulta
normal dado el carácter occidentalista y eurocentrista de dicha disciplina. Según
Velázquez Caballero (2011) cada país desarrolla una ciencia política diferente. Es
por ello que siempre conviene mantener actualizado el panorama político del
entorno de cada investigador dentro del estudio de esta ciencia y para ello el caso

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del Estado de Puebla es un bien inicio al ejecutarlo como un ejercicio de
autorreflexión no solamente respecto de la naturaleza de su sistema político sino
del ámbito social que tanto lo caracteriza y del cual se nutre.

México ya ha vivido la experiencia de dos alternancias democráticas que le han


permitido trascender a la categoría de países con un sistema multi partidista y de
carácter representativo. A todo esto, muchos han alzado la voz a la hora de evaluar
de manera más concreta estos avances de la democracia mexicana. Tal es el caso
de Campos González (2012) y Moch Arias (2002) quienes apuntan una severa
deficiencia de la democracia mexicana en cuanto a los avances esperados después
de la transición del año 2000, pues paradójicamente no hubo un avance hacia una
sociedad más plural, libre y representativa como se espera de un sistema de
gobierno democrático.

A todo esto, vale la pena rescatar los aportes del politólogo Robert Dahl (2009) para
hacer un eficiente balance de la democracia mexicana de acuerdo con sus
reflexiones sobre la democracia. Según Dahl un gobierno de carácter democrático
se caracteriza fundamentalmente por su continua aptitud para responder a las
preferencias de sus ciudadanos, sin establecer diferencias políticas entre ellos.

Para que un gobierno se precie de ser democrático primero debe cumplir tres
condiciones de igualdad para con sus ciudadanos que son las siguientes:

• Formular sus preferencias.


• Manifestar públicamente dichas preferencias entre sus partidarios y ante el
gobierno, individual y colectivamente.
• Recibir por parte del gobierno igualdad de trato, es decir, el gobierno no debe
hacer discriminación alguna por causa del contenido u origen de las
preferencias de los ciudadanos.

Sin embargo, esto no lo es todo, sino que sólo es el primer paso para dar rienda
suelta a las ocho cláusulas que según este mismo autor las instituciones sociales
de un país democrático en cuestión deben garantizar.

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1. Libertad de asociación
2. Libertad de expresión
3. Libertad de voto (sufragio activo)
4. Elegibilidad para la cosa pública (sufragio pasivo)
5. Libertad para que los líderes políticos compitan por apoyos y votos
6. Diversidad de fuentes de información (pluralismo)
7. Elecciones libres, justas e imparciales
8. Instituciones que garanticen que la política del gobierno depende de los votos

Es así como no solo puede haber real certeza de estar dentro de una nación
democrática. Respecto al caso de México, aún siguen vigente la memoria de la
tortuosa experiencia del sistema de partido hegemónico encabezado por el PRI y
que marcó de por vida la historia política y de la democracia en este país. Sin
embargo, la segunda alternancia del año 2018 al parecer no ha sido suficiente como
para afirmar que México efectivamente puede catalogarse como un país netamente
plural y pleno democráticamente donde las oligarquías competitivas solo sean parte
de los libros de historia. Es por ello que siguiendo la línea del mismo autor existen
dos dimensiones teóricas para el adecuado estudio de la democratización de los
regímenes políticos.

La primera es la escala que se refiere a las ocho garantías anteriormente dichas


permitiendo así comparar los diferentes regímenes de acuerdo con la amplitud que
le otorgan a la oposición el acceso a la lucha por el poder y el debate público.

Y segundo la escala que valora el derecho a la participación del propio debate


público que permita comparar diferentes regímenes con respecto a su capacidad de
representación.

Es por ello que dentro de una nación donde exista por un lado el sufragio universal,
pero por el otro haya un gobierno con tendencias claramente represivas la oposición
tendrá muchas menos oportunidades a diferencia de otro lugar con sufragio
restringido, pero con un gobierno más tolerante. Dahl acuña el término “poligarquía”
no solo como una manera de identificar a un “personal político” existente dentro de
una nación, sino que se refiere al mismo como un sistema de gobierno donde se ha

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alcanzado cierta cúspide democrática en donde las élites compiten de manera más
adecuada por el poder político. Siendo los términos “hegemonía cerrada” y
“hegemonía representativa” los que peor califican dentro de un análisis democrático
y el término “oligarquía competitiva” en donde se acepta que si bien existe cierto
grado de democracia esta no es la más ideal o deseada. El término de poligarquía
es entonces aquel que se sitúa dentro de una democracia sana, representativa y
madura. Todo movimiento de los tres anteriores términos hacia este sistema de
gobierno representa el camino hacia la democratización dentro de un plano
cartesiano que el propio Dahl propone en su metodología.

A todo esto, los análisis coyunturales del México del pasado y del presente no son
para nada alentadores. Sin duda alguna se ha tenido la experiencia de dos
alternancias políticas en donde la última se caracterizó por una férrea lucha por
conquistar el poder político por la vía de la oposición y el Estado de Puebla no ha
sido ajeno a estos cambios vividos no solo a nivel nacional sino a nivel local también.
Es por ello por lo que vale la pena preguntarse ¿en qué posición de este plano
cartesiano propuesto por Robert Dahl se encuentra México y el Estado de Puebla
cada uno? Pero, sobre todo, ¿Cuál es la causa de tales resultados?

Francisco Xavier Guerra citado por Pansters (1998) habla de una ficción que se
encontraba dentro de la Carta Magna mexicana del siglo antepasado y que
posteriormente solo servía para justificar la permanencia de una figura política en la
presidencia que poco a poco se fue desgastando en cuanto a legitimidad debido al
despertar de la sociedad mexicana, misma que por su experiencia histórica solo
parecía tener un esbozo de estabilidad política y progreso económico mediante los
regímenes de mano dura, desembocando así en el porfiriato. Sin embargo, el propio
Pansters señala que el error en que cayó tal régimen fue que toda esta estructura
se enfocó en la figura de Porfirio Díaz y no en la de un partido político legalmente
constituido para lograr mayor eficacia en cuanto a la satisfacción de los objetivos
políticos de dicho régimen dictatorial.

Pansters señala también aspectos como la consanguineidad como mecanismos de


acceso y manejo del poder político, así como el de forjar compromisos con otros

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grupos que perduren en el tiempo para asegurar las alianzas políticas estratégicas
que faciliten no solo la obtención de puestos de poder sino de respeto y sumisión
en los pactos que ello conlleva.

PROBLEMA OBJETO DE INVESTIGACIÓN

Dentro del caso de Puebla esto no ha sido irrelevante, pues tanto la experiencia
histórica como las notas de periódico actuales reflejan el carácter sociológico de la
población que está acostumbrada a regímenes caracterizados por un liderazgo
central fuerte. El avilacamachismo no solo como experiencia histórica sino como
una forma peculiar de ejercer el poder público basado en la lealtad y la
consanguineidad con determinados grupos políticos hasta ahora sigue calando
dentro de la sociedad poblana que, a diferencia del México del ayer, es decir, del
régimen ese partido de hegemonía cerrada ha permanecido permeable a lo largo
de las décadas en diversos aspectos hasta el día de hoy. Pues si bien estos últimos
han respondido a los cambios políticos a nivel nacional, lo cierto es que ciertas
familias y grupos políticos permanecen aferrados a los estatus establecidos por el
cacicazgo del general teziuteco Maximino Ávila Camacho dando como resultado
una democracia más parecida a la de oligarquías competitivas.

Respecto al sistema de repartición y conservación de cuotas de poder, las


presidencias municipales engloban un rol sumamente importante, pues desde el
proceso de selección de candidatos hasta los comicios por medio de los cuales se
accede a una alcaldía y posteriormente en el nombramiento de los integrantes de
un cabildo es como puede llegar a manifestarse el grado de organización de las
élites que compiten por el poder público respetando y a su vez creando en el camino
los mencionados acuerdos políticos que enarbolan las propias oligarquías
organizadas y competitivas.

Los ayuntamientos son la muestra más próxima, pero sobre todo la muestra primera
que atomiza los acuerdos y alianzas políticas, que, entre otras cosas, materializa no
solamente dichos acuerdos, sino que también se utilizan como receptores de
recursos que bien podrían ayudar al sostenimiento de la permanencia de los
liderazgos fuertes a nivel regional, así como la efectividad y perdurabilidad de sus

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acuerdos anteriormente creados. Haciendo así efectivo el control central que se
ejerce desde la capital de un Estado hacia las diversas regiones que lo componen,
teniendo como principal resultado la estabilidad política de dicho estado, así como
el reconocimiento y legitimación de la figura central por parte de las propias
regiones. Y dicho sea de paso la obtención de recursos que bien podrían financiar
el proyecto político en turno.

JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN

El personalismo del poder y la marcada exigencia de lealtad ciega dentro de un


sistema político parecen paradójicos, pero al mismo tiempo inconcebibles en un
sistema democrático moderno aceptable. Pero a pesar de ello parece necesario
averiguar acerca de los motivos de estos fenómenos que hasta el día de hoy
aquejan a la población y así lograr identificar la raíz del problema del nulo avance
que tanto anhela nuestra democracia.

El artículo 115 constitucional establece que la figura del municipio libre y al mismo
tiempo le otorga la base tanto administrativa como de división territorial y
organizativa a nivel político. Por si fuera poco, es el propio municipio el que elabora
su propia ley orgánica muy a pesar de que la Carta Magna no hable directamente
sobre ello. La figura pública de un municipio es por tanto no sólo la más próxima
para el estudio de la repartición de recursos y cuotas de poder sino que también es
la más importante para la búsqueda de una repetitividad y transparencia dentro de
una sociedad pues dentro de su figura jurídica enarbolan valores como la libertad
en diversos aspectos, la fortaleza institucional y en un todo, la totalidad de las
condiciones y requisitos que señala Robert Dahl acerca del nivel de solidez y
efectividad de la democracia. En suma, es por la vía del municipio por medio de la
cual un ciudadano de a pie ve reflejada su satisfacción en cuanto al trabajo de su
gobierno, pues dentro de la figura municipal es donde vive su vida cotidiana
primeramente y como remanente viene después la vida pública a nivel estatal y
posteriormente nacional.

Por la vía del municipio libre es precisamente que los ciudadanos no solamente
pueden expresar sus inquietudes y problemas comunitarios a través de la figura de

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las regidurías, sino que se hace efectivo el derecho a la rendición de cuentas. El
municipio lo es todo según el opinión y análisis de muchos juristas o consultores en
derecho constitucional, pues es la base de la pirámide de la administración pública
y por medio de la cual se distribuyen las responsabilidades y funciones de gobierno,
sin el municipio no se tiene nada.

Dentro del hito de la historia del avilacamachismo en Puebla, no es Teziutlán (cuna


de la familia Ávila Camacho) sino Atlixco y Tehuacán el segundo y tercer municipio
con mayor relevancia a nivel local después de Puebla, lugares en donde se
concentró el mayor quehacer político estatal.

Estos tres ayuntamientos (en especial Puebla y Tehuacán) reflejaban y aún hoy en
día reflejan una relevancia dentro del ámbito económico en la vida pública ya que
en ellos se concentra gran parte del capital privado que se cristaliza en el nivel de
su desarrollo (Calvillo Barrios, 2010).

Las presidencias de Rafael Ávila Camacho, Antonio J. Hernández y Eleazar


Camarillo han sido reconocidas como unas de las administraciones adeptas al
cacicazgo que construyó el general Maximino Ávila Camacho. Sin embargo, mucho
se ha hablado de este personaje y de su gestión al frente de la gubernatura de la
entidad poblana, pero poco o nulo material existe respecto a sus remanentes
municipales más importantes, como lo es el caso de estos tres personajes
mencionados anteriormente, así como del caso de Tehuacán con Amador
Hernández.

Si bien Teziutlán con el caso de Fausto M. Ortega representó el máximo caso de


diciplina a la figura caciquil de la familia Ávila Camacho, pues este personaje no
solo fue promovido como alcalde de éste municipio, sino que también lo fue para
ser diputado y con el tiempo llegar a ocupar la máxima magistratura local, lo cierto
es que el caso de J. Hernández y Camarillo guardan cierta particularidad debido a
que ninguno de los dos llegó a la gubernatura, pero en cambio mantuvieron un
férreo control de sus regiones por medio de los organismos corporativistas y demás
mecanismos clientelares.

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Hasta el día de hoy siguen vigentes muchas de estas estructuras sólo que, con
diferentes nombres y colores, tal y como lo señala Torres Salmerón (2019) en un
interesante artículo, efectúan ecos del pasado en diversos aspectos de la vida
pública local.

Tanto los apellidos Camarillo como Hernández dentro de Tehuacán y Atlixco siguen
siendo frecuentes dentro de la clase política de aquellas regiones. Así como el de
las diversas familias que fueron aliadas de los Ávila Camacho en la capital poblana,
como lo son los casos de los libaneses y españoles que se dedican a la industria
textil.

El estudio del desarrollo de estos ayuntamientos, así como el de su forma de ejercer


el poder público son el pilar de esta investigación para que por medio de un estudio
histórico y politológico puedan reconocerse muchos de los aspectos que dominan
la vida política de estos municipios explicando el presente por medio de los hechos
del pasado, ampliando así el margen de conocimiento sobre la literatura disponible
acerca del cacicazgo ávilacamachista y dicho sea de paso encontrar una respuesta
al bajo nivel de eficacia de la democracia mexicana dentro de su figura más básica
como lo es el municipio.

PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN

¿Cuáles son las figuras políticas emanadas del cacicazgo ávilacamachista que
siguen vigentes dentro de los municipios de Puebla, Atlixco y Tehuacán?

¿Qué fines se propone obtener un liderazgo central fuerte dentro del sistema político
mexicano a través de la relación entre gobiernos estatales y municipales?

¿Cuáles son las condiciones que permiten la germinación de regímenes políticos


represivos en un sistema democrático como lo es el caso mexicano?

¿En qué condiciones se encuentra el grado de representatividad y pluralidad el


sistema político poblano según la escala de nivel democrático propuesta por Robert
Dahl?

Hipótesis

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Se plantea la siguiente hipótesis de trabajo, el sistema político mexicano es un
contexto escasamente institucionalizado y agresivo, faccionalista y con escasa
división económica. El nivel de influencia de cada actor depende de la fuerza,
astucia, redes clientelares y autoritarismo que sea capaz de ejercer el personaje, o
camarilla, pretendiente del poder político.

La investigación se enfoca a observar el modo en que el Estado mexicano se nutre


del caciquismo para, por una parte, legitimar el Gobierno (principalmente del partido
oficial en turno) y, por otro lado, controlar, cooptar y reprimir cualquier disidencia de
grupos políticos adversos.

En síntesis: La administración municipal funge como elemento financiero y


clientelista del cacicazgo ávilacamachista cuyos remanentes siguen vigentes.

Justificación del aporte a las Ciencias Políticas

El autoritarismo subnacional o “Feuderalismo” como lo denomina Andrew Paxman


(2018) es una constante del sistema político mexicano y tiene una profunda raíz
histórica que los estudios regionales pueden aportar a las ciencias políticas.

La profundización del fenómeno de las autocracias personalistas da pie a incentivar


a otros investigadores a reflexionar sobre el mismo tema no sólo entorno a sus
respectivas regiones sino en torno a la ciencia política mexicana también. El estudio
de un sistema político local a través de un estudio regional fortalece por una parte
el conocimiento del fenómeno del cacicazgo y por la otra da un primer paso para
poder superar los obstáculos de la disciplina a la hora de analizar casos como lo es
el mexicano estimulando así la búsqueda de un método que si bien no subsane por
completo este hueco si ayude a hacerlo al menos en buena parte.

Marco teórico

La sociedad es una realidad en la cual se desenvuelve el ser humano y realiza sus


actividades, es el resultado de la relación entre individuo y comunidad, dice
Aristóteles que “el hombre es un ser naturalmente sociable, y el que vive fuera de
la sociedad por organización y no por efecto de azar, ciertamente es, o un ser
degradado, o un ser superior a la especie humana” (Andrade, 2013). Aristóteles da
9
a entender que el hombre nace dentro de una sociedad, obligándolo a tener
contacto con ella, es decir con los grupos sociales. La interacción que el hombre
tiene con los grupos sociales condiciona y define la conducta de los individuos, al
mismo tiempo que este tiene que adaptarse a una forma de vida e integrarse a una
cultura. Se entiende a la sociedad como una estructura jerarquizada en la que los
individuos son colocados en diferentes niveles. La estratificación social se define
como el resultado de la desigualdad social, mostrando a los individuos en niveles
superiores e inferiores, unos debajo de otros. La desigualdad social de los individuos
dice la teoría del conflicto, es resultado del abuso de unos hombres sobre otros. Los
factores que determinan las razones de la estratificación social tienen que ver con
los bienes materiales que los individuos poseen, la actividad económico-social que
realicen, la educación que se vincula con los dos puntos anteriores y, tal vez, el más
importante de todos, la posición política que se tenga dentro de las estructuras de
gobierno. La política y el poder se encuentran fuertemente vinculados, afectan
profundamente a la sociedad y a las personas.

Siendo el poder una relación humana, es también una clase de posesión y una
relación (Andrade, 2013), de alguna manera resulta ser un medio para determinar,
considerar, dirigir o inducir la conducta de otros, estableciendo una relación de
mando-obediencia, manifestando diferentes formas de poder, entre ellas, el
poderío, el mando, la influencia y la autoridad.

Otra forma de influir en los individuos es mediante la dominación, según Max Weber
(Andrade, 2013), la explica como la probabilidad de encontrar obediencia dentro de
un grupo determinado para mandatos específicos (o para toda clase de mandatos).
La dominación puede descansar en los más diversos motivos de sumisión: desde
la habituación inconsciente hasta lo que son consideraciones puramente racionales
con arreglo a fines. Un determinado mínimo de voluntad de obediencia, o sea de
interés (externo o interno) en obedecer, es esencial en toda relación auténtica de
autoridad. Específicamente la autoridad es una forma de poder que se encuentra
en el último nivel de una escala de valores La política es el quehacer de todos los
días, de todas las horas. Se hace política a favor o en contra del gobierno, a favor

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o en contra de cualquier partido, entendiéndose como confrontación de adversarios
y, en la mayoría de las ocasiones, entre enemigos. En un contexto autoritario, tales
conceptos reflejan una actitud de arbitrariedad, prepotencia, patrimonialismo,
dominación.

La ciencia política contemporánea tiene el interés de analizar, entender y explicar el


ejercicio del poder, categorizando como una relación de dominio que existe entre
los sujetos. El poder es un concepto demasiado amplio y debatido, en su significado
más general se puede entender como la capacidad o posibilidad de obrar, de
producir efectos, y puede ser referido tanto a individuos o grupos humanos como
objetos o fenómenos de la naturaleza. En sentido estrictamente social, esto es en
relación con la vida del hombre en sociedad, el poder se concentra en la fuerza,
energía, autoridad y riqueza que distingue a unos cuantos individuos (Bobbio, 1986).

Es por ello que dentro de esta investigación se trata de explicar algunas de las
principales características teóricas respecto del cacicazgo y autoritarismo
mexicano. Las circunstancias políticas, económicas y sociales de cada cultura,
marcan rasgos peculiares para comprender el modo en que la modernidad,
progreso, crecimiento económico y democracia son implementadas. El caciquismo
genera que México sea víctima de lo que algunos llaman: “…la italianización de la
República donde constituye no un territorio concreto, sino una zona, un estrato de
la realidad mexicana en la que conviven los políticos, los narcotraficantes y los
dueños de casas de bolsa: la santísima trinidad que verdaderamente ha saqueado
el país (la pérdida del espíritu público, el gobernar para favorecer intereses
particulares)” Campbell (2003:161-162).

En México se le denomina caciquismo a una forma de dominación rural con base


en dominios de poder territorialmente limitados, convirtiéndose en un sistema
político en el que la voluntad de una persona, o grupo de personas, se impone sobre
los intereses de una región.

Dentro de todo este espectro resalta el caso de Puebla al haber cierta relevancia y
disponibilidad literaria acerca del cacicazgo del hermano mayor de quien fuera el
último presidente de corte militar en la historia contemporánea de México: Manuel

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Ávila Camacho. Si bien es cierto que dicho cacicazgo no ha sido el único ni mucho
menos el último que cobre notoriedad a nivel local y nacional es de reconocer dos
aspectos fundamentales acerca de este fenómeno de la historia política poblana
que lo diferencia de otros de su mismo tipo:

Primero, el cacicazgo ávilacamachista a pesar de ser delimitado temporalmente


dentro del periodo que comprende de los años de 1937 a 1987, lo cierto es que
muchas instituciones y personajes miembros de las familias que emergieron de
aquel periodo histórico como la nueva élite política, económica y social producto del
reacomodo de fuerzas políticas derivadas de la revolución mexicana siguen en
activo dentro de las instituciones políticas locales y nacionales.1

Y segundo, como muestra de la veracidad de lo anterior, el cacicazgo


ávilacamachista a diferencia de otros conocidos tanto a nivel local como nacional,
así como el grupo o camarilla política que lo conformó, trascendió y no solo mostró
una durabilidad más prolongada a diferencia de otros casos contemporáneos de
aquella época como los de San Luis Potosí con Gonzalo N. Santos y Yucatán con
Felipe Carrillo Puerto. De hecho, quien fuera quizá el miembro menos prominente
de tal grupo llegó a ocupar la presidencia de la república; Gustavo Díaz Ordaz.

Ciertamente llama la atención la perdurabilidad del cacicazgo ávilacamachista a


través del tiempo, evolucionando a la par de los cambios políticos mostrando una
aptitud de adaptabilidad verdaderamente envidiable para otras regiones y casos
similares. Todo esto es explicable pues “el general teziuteco estableció vínculos
estrechos con los capitalistas poblanos, los caciques regionales y la jerarquía
católica; asimismo, sometió el movimiento campesino a su potestad política y
debilitó al máximo al sindicalismo…Todo esto le permitió convertirse en el “hombre

1
Sánchez, F. (2019, 23 enero). El avilacamachismo, la bendición de la ultraderecha poblana. Intolerancia
Diario. Disponible en: https://intoleranciadiario.com/articles/politica/2019/01/14/945336-el-
avilacamachismo-la-bendicion-de-la-ultraderecha-
poblana.html#:%7E:text=El%20avilacamachismo%2C%20la%20bendici%C3%B3n%20de%20la%20ultraderec
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%20%28Morena%29.

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fuerte” de la política poblana, instaurando un cacicazgo que perduraría hasta
después de su muerte.” (Valencia Castrejón, 2020).

El compadrazgo, la consanguinidad, así como las amistades compromisos y


lealtades que aglutinó la familia Ávila Camacho sin dejar de lado aspectos como el
no descuidar el fortalecimiento del poder gubernamental, así como la centralización
de las decisiones políticas en la figura del general Maximino Ávila Camacho le
otorgaron a este último una hegemonía que pudiera hacer más efectiva su manera
de gobernar y consolidar un control sumamente eficaz de las distintas regiones del
Estado de Puebla.

Por poner un ejemplo de todo lo mencionado anteriormente, es de resaltar el propio


caso del municipio de Atlixco, mismo que fue el epicentro de las duras
confrontaciones sindicales tan características del siglo pasado, en donde las
guardias blancas, los “perros de oreja” y la mano dura de los representantes de
gobierno eran los signos de la vida cotidiana dentro de la región (Velázquez
Caballero, 2011) producto de la actividad política tan agitada y tortuosa como fruto
de los conflictos históricos de la mixteca poblana. Es en este ayuntamiento donde
hasta la fecha perdura la memoria de quien fuera el abuelo del último cacique
poblano con verdadera relevancia a nivel nacional de mismos apelativos; Rafael
Moreno Valle. Por muchos años la familia de este médico y militar ha permanecido
vigente dentro de la élite poblana, al ser considerados como parte de la vieja guardia
política que protagonizó diversos hechos históricos de la vida pública del Estado.

El caso del cacicazgo moernovallista es un tema que da para otra investigación a


parte, pero se hace mención de él como muestra de la permeabilidad de los actores
políticos emanados del ávilacamachismo que por ahora continúan protagonizando
el quehacer político local. Actualmente, tanto en Atlixco de las Flores continúan
siendo frecuentes las combinaciones con el apellido Camarillo y Hernández, así
como en Tehuacán también. Así como en Puebla de Zaragoza siguen apareciendo
dentro de la élite social y política los apellidos de Rivero Quijano, Artasánchez y
Aguilar Chedraui como remanentes de los grupos políticos ávilacamachistas con los
que los distintos gobiernos han tenido que pactar. Ya que miembros de éstas y otras

13
familias emanadas de tal experiencia histórica se encuentran presentes en todos
los partidos y grupos políticos.

La Doctora Lidia Aguilar Balderas (2010) nos revela en su investigación doctoral los
resortes del sistema político poblano que se encuentra salpicado con los residuos
del cacicazgo ávilacamachista, mismo que poco a poco fueron dando paso al
surgimiento de una nueva forma de entender la política poblana que permaneció
inerme ante la llegada de otros fenómenos como el Barttlismo pero al mismo tiempo
resistente a este y otros cambios que afectaron de sobremanera al ecosistema
político ya establecido en el Estado y que además fue evolucionando hasta la
alternancia partidista del año 2010 con la llegada al poder del famoso Rafael Moreno
Valle Rosas, el nieto del exgobernador Ávilacamachista. Según Aguilar Balderas
(pág. 147) “ La configuración teórica de los caciques, marcan que se trata de 1) un
poder personalizado; 2) cuya influencia puede originarse entre otros aspectos por
factores económicos, políticos, sociales, religiosos o familiares; 3) el control ejercido
está delimitado regionalmente; 4) cumplen una función de intermediación entre el
gobierno y la población; 5) cuentan con mecanismos coercitivos variados que
ejercen sin restricción y; 6) posee la capacidad de designar a los candidatos a los
diferentes cargos de elección, e incluso el mismo cacique puede desempeñar
reiteradamente varios cargos de representación política.”

Es así como mediante dicha configuración se puede lograr comprender a cabalidad


este fenómeno tan recurrente dentro del sistema político mexicano y que se hace
presente de forma variada pero concisa en la región subcontinental de
Latinoamérica.

Para concluir, la pregunta que debería caracterizar a todo lector de esta


investigación con capacidad de emisión de voto debiera ser en todo caso ¿Qué
ávilacamachista te gusta más para gobernante? Pues muy a pesar de los cambios
políticos y la aparición de nuevos partidos con distintos colores, pareciera que el
caso de la política y el poder en México sigue supeditado a caracteres
semimodernos o poco modernos, pues la relación de dominio de una parte de la
sociedad a otra queda expresamente develada como una de carácter autoritario en

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la que se concentra gran parte del poder público en la figura de una sola persona
que por cierto lleva más de medio siglo muerta.

Una de las falsas promesas de la democracia, según el texto de Norberto Bobbio2


es el fin de las oligarquías, por definición respecto de las élites que los grupos
políticos buscan mantener su control político, cosa que pareciera contrario al ideal
de la democracia. Afirma el autor italiano: “…no son los individuos sino los grupos
los protagonistas de la vida política en una sociedad democrática, en la que ya no
hay un soberano, ni el pueblo o la nación, compuesto por individuos que adquirieron
el derecho de participar directa o indirectamente en el gobierno, el pueblo como
unidad ideal (o mística), sino el pueblo dividido objetivamente en grupos
contrapuestos, en competencia entre ellos, con su autonomía relativa respecto al
gobierno central (autonomía que los individuos específicos perdieron y que jamás
han recuperado más que en el modelo ideal de gobierno democrático que siempre
ha sido refutado por los hechos)” Bobbio (1986:18). El cacicazgo contemporáneo
representa los residuos del anterior sistema de gobierno.

Estructura de la Investigación (Índice tentativo)

Introducción

Capítulo 1 Descripción del sistema político mexicano

1.1 El sistema político dentro del estudio de la Ciencia Política

1.2 El sistema político emanado de la revolución

1.2.1 El sistema político mexicano

1.2.2 El sistema político del Estado de Puebla

1.3 Un repaso histórico del liderazgo político mexicano

1.4 Dimensiones del poder político en México

2
Según Norberto Bobbio, en su libro el Futuro de la Democracia, existen ciertas promesas incumplidas por la
democracia, la que se refiere a la sociedad pluralista; el segundo, lograr una representación a los intereses; el
tercero, la eliminación de las oligarquías; el cuarto, la democracia debe ocupar todos los espacios donde se
ejerce el poder; el quinto, el poder invisible y la sexta se refiere a la educación.

15
Capítulo 2 El fenómeno del cacicazgo dentro del estudio de la ciencia política

2.1 Condiciones metodológicas para el estudio de los cacicazgos

2.2 Arquetipo del cacique mexicano

2.3 El caso del Ávilacamachismo en Puebla

2.3.1 Estructura de repartición de poder político en Puebla emanada del


ávilacamachismo

2.3.2 Los órganos corporativistas y campesinos

2.3.3 El sector urbano y el sector rural

2. 3.4 La burguesía y el proletariado

2.4 La relación de la figura municipal con la figura estatal

2.5 Gobiernos autoritarios y represivos dentro del caso del Estado de Puebla

Capitulo 3 Los casos de Atlixco, Puebla y Tehuacán

3.1 El caso de Atlixco

Descripción geográfica y económica del municipio

Antecedentes históricos

La formación de los cacicazgos de Antonio J. Hernández y de Eleazar Camarillo

Breve biografía y semblanza de ambos personajes

Contexto histórico

Fuentes de legitimidad y estructuras clientelares

Pasivos y Activos dentro de sus administraciones

3.2 El caso de Puebla capital

Descripción geográfica y económica del municipio

Antecedentes históricos

16
La formación del cacicazgo de Rafael Ávila Camacho

Breve biografía y semblanza del personaje

Contexto Histórico

Fuentes de legitimidad, estructuras clientelares y figuras de apoyo

Pasivos y Activos dentro de su administración

3.3 El caso de Tehuacán

Descripción geográfica del municipio

Antecedentes históricos

La formación del cacicazgo de Amador Hernández

Breve biografía y semblanza del personaje

Fuentes de legitimidad y estructuras clientelares

Pasivos y Activos dentro de su administración

3.4 La diferencia del contexto y experiencia histórica entre los tres casos

Capítulo 4 El análisis del discurso caciquil y repercusiones históricas

4.1 El discurso político

4.2 El discurso social

4.3 El discurso económico

4.5 Remanentes actuales de los cacicazgos analizados

Conclusiones

Metodología de la investigación

MÉTODOS DE ESTUDIO

Los métodos empleados en la primera parte de la tesis serán el Histórico y Analítico;


mientras, en la segunda parte, con el fin de hacer un estudio detallado de la

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información obtenida, se explicarán las características del liderazgo político en
Puebla entendido como caciquismo por la vía de semántica mediante el análisis del
discurso político de los caciques.

TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN

Dentro del marco teórico de el estudio de la historia es importante resaltar los datos
e información recolectada por medio de entrevistas que detonan en el estudio de lo
que se denomina historia oral. Dicha técnica de estudio se basa en la obtención de
información directamente de testigos presenciales que vivieron diversos sucesos
históricos y que a su vez se transcriben e interpretan por medio de una lectura
minuciosa.

De entre todas las entrevistas aquí recabadas ninguna guarda mayor importancia
que la hecha hacia el sobrino directo de los generales Maximino y Gabriel Ávila
Camacho; Gabriel Ávila García, hijo de Gabriel Ávila Camacho quien fuera el
penúltimo hijo menor de la familia de mismos apellidos. Dicha entrevista guarda un
notable valor histórico pues revela datos inéditos de los diversos sucesos políticos
que son insignia de la historia política del Estado de Puebla como lo es el caso de
los distintos cacicazgos regionales.

Ante todo, esto cabe hacer una advertencia. Estudiar el cacicazgo implica conocer
académica y políticamente a lo que los politólogos van a enfrentar. El texto busca
constituirse como un auxiliar que les permita no solo desenvolverse mejor en este
fino y severo arte de lo político, sino también lograr una mejor toma de decisiones
en diversos rubros al no estar pensada la tesis solo con fines electorales, si se quiere
poner un ejemplo, sino acorde a las reales vicisitudes por las que atraviesa el
entorno mexicano y poblano. Es por ello que nuestra tesis será en manos del buen
lector una herramienta de identificación de la línea política de la que proviene aquel
o aquellos actores políticos que tenga enfrente, sino también una guía para saber
cuáles son los caminos a seguir para visualizar sus objetivos y móviles.

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Cronograma de la investigación

Meses Enero – Marzo Mayo Agosto Noviembre Febrero Marzo Agosto Noviembre-
Febrero – Abril – – 2023 – 2024 – – - Diciembre
2023 2023 Julio Octubre Enero Abril Julio Octubre 2024
2023 2023 2024 2024 2024 2024
Actividad
Investigación
bibliográfica y
hemerográfica
Realización de
entrevistas
Redacción del
Cap. 1
Redacción del
Cap. 2
Investigación
dentro del
municipio de
Puebla
Viajes a los
municipios de
Atlixco y
Tehuacán
Redacción del
Cap. 3
Redacción del
Cap. 4
Entrega de
resultados

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