A un gran éxito, le corresponde un gran ilustre de la literatura y por supuesto

estamos hablando de Rómulo Gallegos con su magnífica historia Doña Bárbara; es

en 1929 cuando nace esta admirable novela y es en ella donde se representa a
aquella Venezuela cruel e insensible por la corrupción.

Por consiguiente, temas como la traición, el despotismo, la falta de libertad, el

latifundismo e injusticia son los fundamentos y anti valores que son característicos y
muy propios de la narración de este escrito, los cuales se ven reflejados en cada
uno de los personajes, protagonistas, de la obra. Ambientada en los llanos
venezolanos Galleos explica que obtuvo su inspiración en un hato de Juan Vicente
Gómez, comenta: Fue en el hato La Candelaria. Allí asimile ese olor a vacadas y a
boñiga del que mi novela está llena. También sentí a través del cuadro campesino,
el habito de la barbar que afligía a mi patria. Instintivamente, perseguí el símbolo, y
apareció con toda su fuerza la protagonista. No era aquello intencional, pero si
intuitivo.

Noventa y dos años han pasado desde el lanzamiento de esta joya de la

literatura latinoamericana e hispanoamericana, narrando la historia de, como es
evidente, Doña Bárbara. Una chica terrateniente que acumulo grandes tierras y
extensas manadas de ganado usando como provecho personal nada más y nada
menos que a los hombres, de igual modo usaba el soborno y amedrentamiento a los
funcionarios locales como víctimas propiciatorias para lograr su cometido. Cabe
destacar que la autoría de esta novela fue en el siglo XX, entre la dictadura de Juan
Vicente Gómez, por lo cual, el marco en el que se desarrolla la misma es en una
Venezuela donde predomina el medio rural y cuando muchas de las labores
campestres que se desenvolvían en la época eran todas muy similares.

Marcando el inicio de o que en unos años se vería en el éxito y

reconocimiento a nivel mundial de esta novela, Doña Bárbara abarco gran renombre
entre escritores y ensayistas, dejando en claro y en alto la idea de que SI podía
existir una novela latinoamericana. La denotación del folklor venezolano,
demostración del léxico del país y destacables coplas, son evidentes muestras de
las raíces del escritor. Desde el comienzo de la historia, se presenta una batalla
desigual, siendo la belleza y la barbarie conjuntas al miedo. El temor y el recelo es
una de las principales armas de nuestra fémina protagonista; su actitud y carácter
han sido precedidos por acciones violentas dando pie al comentario: ha tenido un
turbio pasado. Los negocios corruptos con el sistema judicial, brujerías y la violencia
son amigos y tácticas de esta implacable mujer. Contra todo pronóstico existe un
hombre justo en el relato, cuya vista siempre se encuentra en lo correcto, es la otra
cara del conflicto inminente; la justicia, el sentido común y la sociedad sobre el
individualismo son los principios de Santo Luzardo.

En la trama de esta dadivosa obra, podemos ver claramente dos perspectivas

de la vida, Santo Luzardo y Doña Bárbara son esas partes que se encuentra
divididas por los mundos que cursan, claro ejemplo de esto es el cómo llegan a ser
los propietarios de los hatos más importantes, cada uno por sus diferentes medios
dejando en claro la evidente contra posición entre cavilación y barbarie. Entrando un
poco más allá en la narración, sondeando entre las páginas de la historia, más que
conocer y describir como son los personajes de esta novela, lo que representa y
ejemplifica para la sociedad es increíble. Primero que nada se divisa el
individualismo por y para el éxito, por el nombre y poseer riquezas, es absorbente el
cierto hecho que el escritor prevalece respetando al personaje sintiéndose obligado
a darle un contexto extraordinario.

Se dice que no hay mejor obra que la que se vive, y vaya que Gallegos logro
darle en el punto a esta frase con su novela; por los parajes de la vida de cada uno
de los protagonistas se puede ver como son las realidades de cada una de sus
vidas las decisiones que pueden y deben tomar son ejemplificaciones del
determinismo, moldeando sus vidas en una bella demostración de lo que es el llano
venezolano. Coplas y creencias llaneras no van a faltar jamás en esta detallada
entrega literaria, constituida por una serie de elementos que consienten el
entendimiento para y hacia toda la cultura y subcultura llanera. Sin duda alguna
Doña Bárbara es un clásico sobre la diferencia y el debate acerca de los métodos
violentos pero rápidos, los mas civilizados pero tardíos.
 El impacto y reconocimiento de esta obra, ha llegado a trascender en torno al
personaje de femenino, ¿Por qué se dice esto? En torno a ella se ha creado un
arquetipo: el arquetipo de la mujer luchadora, guerrera, que no se somete al
capricho del hombre y termina por imponerse. Es la realidad del libro y toda su
historia que ha logrado ser un personaje arquetípico (y en otros países de
Latinoamérica), por el hecho especial: es mujer. Pero, aun así, es una novela
realista en la que se puede apreciar una observación profunda del mundo a través
de una descripción marcada de la realidad, su intención va más allá de lo literario.

Doña Bárbara, es una historia de mucha audacia, civilización, progreso, caprichos y

violencia; son apenas una gota del mar de desenlace de esta maravilla literaria, en
la novela, el progreso se materializa en Santos Luzardo y, por otro lado, el retraso
que se encuentra influenciado por el determinismo del entorno geográfico, se
evidencia en el resto de los personajes, especialmente en Doña Bárbara.

Las últimas líneas de la novela permiten revelar la naturaleza venezolana y

las criaturas más íntimas de si, los llaneros, con perfecto dominio.