Planteamiento del problema

En la actualidad, la población mundial no tiene una dieta rica en prebióticos y probióticos teniendo
una alteración en la microbiota intestinal, bajando los niveles de adsorción de nutrientes que son
indispensables para un buen funcionamiento en el cuerpo humano, lo que genera algunas
enfermedades como gastrointestinales, infecciones respiratorias, obesidad, diabetes y
sedentarismo. Una forma de contrarrestar los efectos de desequilibrio en la microbiota intestinal,
es el consumo de alimentos con altos contenidos de probióticos que son bacterias benéficas y
prebióticos que son fibras vegetales que alimentan a los probióticos, ayudando a disminuir el
riesgo de sufrir alguna enfermedad. El kéfir de agua es una bebida fermentada con un alto
contenido de probióticos pero que actualmente no suele ser muy consumido por su sabor agrio, lo
que genera un desafío.