Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Prologo
Se nos plantea que leer este libro es entrar a un mundo de ensueño real, donde se
combinan las experiencias personales del autor, con la descripción e interpretación de
los fenómenos naturales cuyas manifestaciones vemos a diario y las interpretaciones
van mucho más allá del campo geológico ya que se concatenan en la interacción con
otras ciencias. También se nos adjunta información sobre el autor:
Prefacio
La idea del libro es reunir una serie de ensayos sueltos, viejos y nuevos, adaptados
alguno y mejorados otros, escritos por el autor en diferentes épocas y lugares. Todos
contienen información útil y didáctica para comprender la geología. Esta información
esta desarrollada en 25 capítulos del libro, el cual es una continuidad de otras obras
del autor.
El titulo del libro se debe a que este pretende crear o producir algo nuevo en cuanto a
la geología y a las ciencias de la tierra, y también sigue la tradición de los viejos libros
de divulgación de la serie recreativa que publicaba la editorial Mir.
Introducción a la geología
La geología es precisamente la ciencia que se ocupa de estudiar el origen y desarrollo
de nuestro planeta y es el geólogo, quien a través de sus observaciones logra obtener
información sobre dicho tema.
A la geología le interesa el estudio de nuestro planeta y por extensión los demás
planetas del sistema solar (planetologia). Le importa saber de qué están formados los
planetas y para ello recurre a técnicas directas e indirectas. Del análisis de meteoritos
que caen a diario en la Tierra, se obtiene valiosa información sobre la composición
química del material original que pudo acrecionarse para dar nuestro planeta y los
demás planetas vecinos.
El geólogo tiene que manejar mentalmente extraordinarios periodos de tiempo. Por
ello la unidad en geología es el millón de años (Ma). Aunque también trabaja con miles
de millones de años (Ga) para los tiempos Hadico, Arcaico y Proterozoico; o bien miles
de años (ka) para los tiempos cuaternarios (Pleistoceno, Holoceno, Antropoceno).
El geólogo se ocupa fundamentalmente de todo lo que concerniente a esa delgada piel
que recubre el planeta; la corteza terrestre. Pero quiere saber que hay debajo de esa
corteza. Para ello necesita recurrir a técnicas indirectas.
La corteza terrestre esta formada por rocas, La roca mas abundante de los continentes
es el granito y en los océanos es el basalto. Quienes se encargan de estudiar los
distintos tipos de rocas son los petrólogos y quienes las describen al microscopio son
los petografos. Las rocas están formadas de minerales, y vetas y capas de minerales, y
a estos minerales los estudian los mineralogistas.
Cuando las concentraciones de minerales que tiene interés económico para el hombre
son importantes, interviene el geólogo especialista en yacimientos.
Cuando las depresiones de la superficie se rellenan co los materiales que arrastran los
ríos y que provienen de la paulatina pero inexorable destrucción de las montañas, se
forman capas de sedimentos que van siendo enterradas unas por encima de las otras.
Junto con las capas de arena y fango, se van enterrando también los restos muertos de
plantas y animales.
Algunos animales y plantas quedan enterrados y eventualmente se convierten en
fósiles. Los animales extinguidos son una herramienta valiosa para conocer la edad de
las rocas que los contienen.
Cuando las rocas, en función de las fuerzas que operan en el interior del planeta son
elevadas, hundidas y fracturadas, forman una serie de estructuras tectónicas que
comprenden el campo de estudio de los geólogos estructurales. Son muchos los
campos en los que participa el geólogo.
La edad de la tierra
Desde los 4004 años que postulo el obispo de Ussher en el siglo XVII hasta la datación
del meteorito Allende -el objeto más viejo del sistema solar- que le atribuye a la tierra
una edad de 4566 millones de años.
En 1654 James Ussher llego a la conclusión de que la “creación” había ocurrido en el
año 4004 antes de Cristo, un 25 de octubre a las nueve de la mañana. Ussher baso sus
cálculos partiendo de la base de que la existencia del hombre era coetánea con la
existencia de la Tierra.
Posteriormente, el conde G. L. de Buffon, que atribuyo a la Tierra una edad de 75.000
años basado en la disipación de calor a partir de una bola de fuego primigenia. A
mediados del siglo XIX aparece el físico escoses William Thomson quien en base a sus
estudios sobre el calor del Sol concluye que la Tierra debía tener 100 millones de años.
Darwin no se convenció de esa edad y se basó en las ideas de Lyell y Hutton sobre el
tiempo profundo para determinar que la Tierra tenia una edad de 300 millones de
años.
Entonces, teniendo en cuenta todos esos resultados se podría decir que, comparado
con los 13.700 millones de años del universo, la Tierra solo tiene un tercio de esa edad.
Geología Curiosa
El planeta está lleno de fenómenos geológicos que resultan raros, extraños o
singulares. Entre ellos están:
Música Terráquea
La Tierra es un planeta dinámico, vivo, que se mueve y mucho. Los continentes se
desplazan con velocidad variables, se rompen, se alejan y cada tanto chocan entre
ellos. Las tensiones a que está sometida la corteza, producen roturas y
desgarramientos que originan liberación de energía. A veces la cantidad de energía
liberada es tal que da lugar a terrenos destructivos de naturaleza catastrófica.
La gran zona sísmica a escala planetaria es el “Cinturón de Fuego” del Pacifico. En esa
zona tiene lugar la mitad de todos los sismos que se registran en el ámbito global. Mas
de un millón de sismos se producen por año en todo el mundo, aunque en su mayoría
son imperceptibles. El servicio Geológico de los estados Unidos registro unos 12.000
sismos en 1992 de los cuales 70 fueron significativos.
Si pudiéramos acerca nuestro oído al suelo y escuchar con un poderoso amplificador,
nos deleitaríamos con una música sumamente rara y curiosa.
Los científicos ya hicieron este trabajo y obtuvieron una rara música de la tierra. El
geólogo ingles J.Elder lo describe así: “El sonido parece al que se oye en un bosque un
día de viento, a veces se oyen tonos bajos breves, y otros tonos ,as largos y muy
melódicos, que recuerdan a una orquesta que afina sus instrumentos. De vez en cuando
aparecen ruidos agudos semejantes a los de las ramas al romperse. Muy de vez en
cuando surgen sonidos como si hubiera un a estampida de animales por un bosque,
que chocaran con las ramas y las rompieran al pisotearlas”
La expresión más drástica de esa música terráquea son los terremotos que a veces son
muy violentos y desastrosos.