En este punto podemos encontramos los elementos que ayudan al profesional terapéutico al

poder evaluar a la familia para brindarle un adecuado soporte. Los elementos con los que se
cuenta es el análisis de la demanda permitiendo al terapeuta identificar qué problema desea
la familia solucionar para ello el terapeuta debe identificar bien el problema real el cual
debe tratar, porque va a depender el tipo de abordaje que se tiene que emplear. Es por ello
que en la demanda de la consulta se consideran algunos aspectos que, aunque
indirectamente ya están transmitiendo un mensaje en este primer punto encontramos el
lugar de consulta en la que el individuo deja a relucir sobre las áreas que no deben ser
tocadas, el segundo punto es el síntoma donde se puede realizar una hipótesis de los
aconteciendo en el entorno familiar, el tercer punto son los miembros presentes o ausentes,
ya que se logra evidenciar si hay vínculos cercanos o de lo contrario no existe ningún tipo
de interés, en este último punto del remitente nos quiere decir que todos los miembros de la
familia deben trabajar para poder llegar a una solución y poder tener una mejor calidad
dentro del hogar, pero si uno de los miembros es forzado les va a llevar más tiempo afianza
los lazos afectivos. Por otro lado, lo que impide que el profesional avance en su trabajo es
la resistencia del sistema familiar, ya que como mencionamos líneas arriba si las personas
no están predispuestas al cambio les va a costar poder enlazar en la dinámica familiar, es
por ello que el profesional debe saber identificar en el momento adecuado la situación
debido a que su objetivo es mejorar la comunicación entre los familiares.