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Odisea y triunfo

Esta es una obra hecha por Elaine Egberth, Narra los hechos reales que vivió un joven
llamado Carlos Miller; Su estadía en la Marina de los Estados Unidos, y cómo fue que el
conoció Aquello que tanto buscaba, que lo conllevo a considerarlo como nuevo centro en
su vida; Conocer a Dios y se convirtio en un Adventista del Septimo Dia. Carlos tuvo que
lidiar con distintos tipos de circunstancias que pasaron en su vida la separación de sus
padres, sueños frustrados, la muerte de un ser querido e incluso experimento los síntomas
de la depresión, generando su idea de su propia autodestrucción, por medio de un mortal
trastorno de conducta alimentaria; la anorexia. Entonces, es asi como el comienza a
desarrollar una constante lucha interior Consigo mismo, mientras físicamente esta
luchando para sobrevivir una noche, siente Una fuerza extraña que lo motiva a comer y así
evitar que su débil cuerpo dejara de reaccionar. Él había escuchado la existencia de un
Dios y siente su rara presencia, pero para el, siente que no es ni bondadoso ni justo para
todos además de que sabe muy poco de el . Al momento de seguir adelante, Miller llego a
adentrarse en la Marina mientras simultáneamente estudiaba Electrónica, por lo que
atraviesa dos años de duro y disciplinado entrenamiento para entrar la Marina y se propone
en buscar a Dios . Antes de viajar a Adak, Alaska, va de vacaciones donde su familia, y
aunque sufre un accidente automovilístico, milagrosamente se salva. En la comandancia
conoce a sus compañeros de trabajo, futuros amigos y a uno muy especial; Daniel un muy
buen marino, Adventista, que enfrenta sus problemas laborales debido a sus creencias
religiosas. Consecuentemente, se vuelven mejores amigos, Carlos se entusiasma con la
Biblia y empieza a estudiarla junto con Daniel. A la vez va conociendo mucho más sobre su
nuevo Dios, siente aquella paz que tanto necesitaba en su vida y por agradecimiento
quiere renovar su vida, hacer lo que Dios le agrade aunque eso implicaría difíciles cambios.
Estaba decidido a colocar a Dios en primer lugar ante todo, igual como Daniel, un creyente
sincero que sabía que su padre nunca lo iba a dejar solo pesar de que parezca lo contrario.
Lo denominaban como el hombre milagro, Después de haber sobrevivido a la caída de un
alto farallón. Su agradecimiento sincero sobre la constante protección de su Dios; no duró
mucho, porque le informaron que su indumentaria estaba disponible y debía ejercer su
trabajo como Sargento, eso significaba cambios en su horario, y si, tenía que trabajar los
sábados. Renació aquella lucha interna y a pesar de que pensaba que no afectaría Cumplir
aquel sábado con su obligación, lla culpa le obligó a que enfrentara a sus superiores en
busca de una solución, porque él nunca mas trabajará los sábados. Aún cuando a veces
lograba encontrar un compañero que pudiera suplantarlo, Con su fe Fortalecida, llegó ante
los varios Enfrentamientos en el tribunal disciplinario siempre siguiendo sus principios y
nunca cambiando de opinión, claro que sufría las consecuencias respectivas que se
creaban por desafiar a la marina. Como todo tiene un límite, Cómo el No asistió a un
sábado de trabajo, le dieron de baja y lo asignaron a las barracas de los desterrados;
aquel lugar donde estaban todos los “fracasados” de la marina esperando a que le den de
baja con su respectiva licencia no muy honrosa. . Aún con las burlas y discriminación
debido al “tonto motivo” de la que este Carlos en aquel lugar, gracias a sus Conocimientos
aprendidos Logro hacer que Gerardo, un muchacho mas joven, vuelva su fe en el señor.
Finalmente Carlos pudo presenciar de que Dios nunca nos deja solos, Salió de las
barracas con una licencia de limpia. El comprobó La gracia y bondad que Dios tiene para
cada uno de nosotros cuando le somos fieles. Para terminar, nos cuenta que Carlos Mauro
bautizarse y encontrar un trabajo y les era feliz sirviendo a Dios en la iglesia y Qué juntos
Gracias a su testimonio en Adak logran que mas personas se conviertan en Aquel lugar. En
sí, esta obra nos deja como enseñanza qué al igual que Carlos, cada uno de nosotros a lo
largo de nuestra vida es como una Odisea. Estamos en un camino largo extenso, donde
atravesaremos distintos tipos de circunstancias; tanto buenas, favorables como malas y
desfavorables que nos desmotivan en la búsqueda de nuestro objetivo qué cada uno
anhela. Por ejemplo, para un cristiano su objetivo es llegar al cielo, prepararse para cuándo
ese momento llegue, Cada uno Tiene sus propios objetivos o metas para su vida, y si, no
es fácil Salir de aquellas adversidades donde parece que no lo vamos a lograr. Entonces
es ahí cuando hay que recordar que no estamos solos, hay alguien que Nos va a apoyar y
ayudar incondicionalmente a salir de las dificultades; ese es Jesus. Porque solo él es
capaz de hacernos TRIUNFAR en medio de la ODISEA.

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