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CLAUDIO SPIGUEL

Pasaría mucho tief11p_Q_de$_Qués deJ955yara q!!.e la_frac�a en el cam­


po popular fuera suturándose en la lucha común, obr�ros y_estudiantes,
peronistas :>.: no v.ei;,on1,st,a§� contr.il.l�s..dictaduras=que vendr,ían. También las
experiencias vividas con el perbnismo y el golpe de 1955 y las posteriores
fueron creando las condiciones para que surgieran propuestas superadoras:
una corriente clasista antiimperialista que planteara la hegemonía obrera y
la unidad popular en la lucha antiimperialista y antioligárquica.

Bibliografia básica
Las luchas de fines de la década de 1960
y principios de la de 1970
Basualdo, V., "Los delegados y las comisiones internas en la historia Argentina: 1943-
2007", en Azpiazu, D., Schorr, M. y Basualdo, V., la industria y el sindicalismo de base en
la Argentina, Buenos Aires, Cara o Ceca, 2010, pp. 81-157. Silvia Nassif y Bren da Rupar
Brega, J., Conversaciones con Otto Vargas, Buenos Aires, Ágora, 1997.
Del Campo, H., Sindicalismo y peronismo. los comienzos de un vínculo perdurable, Bue­
A fines de la década de 1960 y principios de la de 1970 se abrieron
nos Aires, CLACSO, Colección Biblioteca de Ciencias Sociales. Colección Histórica, 1983.
Doyon, L., Perón y los trabajadores. los orígenes del sindicalismo peronista, 1943- nuevos caminos en la Argentina con los levantamientos populares como el
1955, Buenos Aires, Siglo XXI, 2006. Cordobazo, el Rosariazo, el Tucumanazo y todos los otros "azos", prota­
- "La formación del sindicalismo peronista", en Torre, J.C., los años peronistas (1943- gonizados por el movimiento obrero junto a diferentes sectores populares,
1955), Nueva Historia Argentina, Buenos Aires, Sudamericana, 2002, tomo VIII.
como los estudiantes. En la actualidad, el análisis de este período cobra
Rapoport, M. y Spiguel, C., Relaciones tumultuosas: Estados Unidos y el primer pero-
11ismo, Buenos Aires, Emccé, 2009. importancia en función de conocer en profundidad los hechos llevados a
hiavi, M., El poder sindical en la Argentina peronista (1946-1955), Buenos Aires, cabo por el campo popular y retomar ese camino en las condiciones del
lmo o Mundi, 2013. momento. Más aún ya que aquellas luchas quedaron truncas, producto de
la última dictadura militar en nuestro país.
El período que comprende los años de la dictadura autodenominada
"Revoluci� Ar¡;�tina".,J,2.66'-1973, puede ser dividido _en dos mqmen­
tos, enien o como hilo conductor la protesta social: un primer momento,
desde I 966 hasta mayo de 1969, en· el que primó el es a o e confusión y
d;'""d{;ersas expectativas y el repliegue de las fuerzas populares. No obs­
tante, en ese período se llevaron a cabo las huelgas de los azucareros, por-
.,, tuarios y ferroviarios. El año I 968 fue bisagra, de transición, con la lucha
de los petroleros, la co'nformación de la CGT de los Argentinos como un
polo opositor a la dictadura y el llamado a un pa;;-;;acional por parte de la
Federación Universitaria Argentina.
Un segundo momento�roduce a partir _del año I 96�, con los le­
vantamientos populares denominados "azos", como el CQi;rentinazo, el
Rosariazo y el Córdo15azo. Estos hechos significaron un salto en calidad e
inauguraron un período de auge de luchas populares que s� éxtendi9, con
diferentes matices, hasta el año 1973. El añ� 1.2,72 e clave, pues se gene­

ra izaron los levantamientos en diferentes partes de país, teniendo lugar el
Mendozazo, el segundo Tucumanazo..,_ - ....
o Quintazo· y el Rocazo.
,,,_

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Todos estos levantamientos se destacaron por ser rebeliones populares la represión dictatorial se endureció durante el segundo turno de la "Re­
urbanas con un importante componente obrero-estudiantil. En ellas con­ volución Libertadora" -o '·'Fusiladora", como se la llama en alusión a la
fluyeron distintos sectores de asalariados y de la pequeña burguesía. Se masacre del levantamiento del Gral. Valle en 1956-, encabezado por Pedro
desarrollaron significativos enfrentamientos con las fuerzas represivas de Eugenio Aramburu, quien sostuvo una política menos conciliatoria, e in­
tervino la CGT, que pasó a estar en manos de Patrón Laplacette.

-
la dictadura, que en algunos casos desbordaron el accionar policial e im­
plicaron la intervención del Ejército, generando una notable movilización Frente a estos hechos se fue organizando la "Resistencia" del movimien­
de masas y la ocupación de una parte considerable de las ciudades. En to obrero y popular, que excedió al peronismo, aunque este tuvo en ella
distintas ocasiones, estos _"azos" provocaron el debilitamiento del poder un rol fundamental. Esta resistencia recorrió diferentes etapas: del 1955 a ·
polítiéo tanto a escala provincial como a nivel nacional, configurando una 1958, la rebelión popular fue más espontánea y territorial. A partir de 1958,
causa determinante -junt<2, con las contradicciones internas del régimen­ se abrió un nuevo y segundo momento en el que la protesta fue más organi­
de los recambios dictatoriales. Al mismq tiempo,yotenciaron el desarrollo zada, desde las fábricas, con planes de lucha. Se fueron destacando dirigen­
y avance de las organizaciones populares, _sindi_;ales y pC>líticas. tes combativos como Raimundo Ongaro, Amado Olmos y Agustín Tosco.
En 1957 se convocó a un Congreso Normalizador de la CGT, del que
Características generales y recorrido finalmeñteél movimiento obrero salió dividido, con el surgimiento de las
"62 Organizaciones". Este nucleamiento inicialmente incluía a peronistas
del movimiento obrero hasta 1966

y comunistas, pero al poco tiempo los comunistas se retiraron y organi­
A partir del derrocamiento de Juan Domingo Perón en 1955, la Argentina zaron el Movimiento de Unidad y Coordinación Sindical (M_UCS). eoi;
asistió a un proceso de intensificación de la contradicción entre el desarrollo otra parte, se habían conformado los "32 Gremios Democráticos", integra­
de las fuerzas productivas y la estructura de país dependiente, disputado por dos por antiperonistas e independientes. En septiembre de 1957, alrededor
dis tintos imperialismos, en el que perduró el latifundio. Las transfonnacio­ de cuarenta gremios convocaron a un paro general nacional que tuvo un�
ne s durante la posguerra, con un alto grado de industriar1zación y una clase
o breco
ni n un pco s económico considerable y un elevado grado de sindica- \
alto grado_ de acatamiento.
Por su parte, la CGT de Córdoba convocó en 1957 a un Plenario Na-
¿~ fl;... ,.,/
1 "
lizae i6 n, \1nto co n eIde sarro llo del empresariado nacional, encontraron su • cional de Delegaciones Regionales de la CGT y de las 62 Organizaciones,/ ' ',:.J
llmitl} ol no habe r't.<-· JIe vado a fi., ndo un proceso que permitiera al país un realizado en la localidad de a Ealda. Allí se aprobó el "Programa de La , .,_
d
r..? "' :i­
e urso inde ¡rndie nle , tanto e n Io po Htico co mo en Io económico. Falda" que, junto con el de "Huerta rande" de 1962, delinearon una pro- ' ?
akloeó,t.cs
P r n ·n te coco nt xt se manifestó u.na puja entre la política puesta que mostraba la radicalización en el seno del movimiento obrero: o-
d1,· aju..0te que que rlan implementar los sucesivos gobiernos (de facto o se exigía la expropiación de latifundios, la nacionalización del comercio
demo cráticos ) y la resis tencia por parte de los sectores populares. Preo- exterior y el control obrero de la producción.
e upaba a las clases dominantes qué hacer con las masas peronistas y con Bajo el tumo presidencial de Arturo Frondizi (1958-1962), un sector
las conquistas sociales y económicas de la clase obrera obtenidas durante de las clases dominantes intentó integrar al movimiento obrero, con la
el gobierno de Perón. El tema de la "desperonización" se planteó des­ cooptación de una parte de su dirigencia. Al mismo tiempo, practicó una
de el inicio de la autodenominada "Revolución Libertadora" y continuó política de "racionalización económica", que significaba la intensificación
irresuelto durante los 18 años del exilio de Perón, con la alternancia de de los ritmos de producción y la extensión de la jornada de trabajo, política
gobiernos débiles, democracias tuteladas y dictaduras. que entraba en abierta contradicción con los intereses de la clase obrera.
A partir de 1955, las clases dominantes aplicaron distintos métodos Por ello, a principios del año 1959 se,produjo en la Argentina una olea­
para enfrentar a las masas peronistas. En el primer momento, con el gene­ - ....
da de intensas protestas. na de ellas fue la emblemática toma, en enero
ral Eduardo Lonardi se postuló "ni vencedores ni vencidos", buscando una
po litica de integración. En ese marco, a aireccíón de la CGT renunció y'
asumier()n provisoriamente Andrés Framini y Luis Natalini. No obstante,
--
de ese año, del frigorífico nacional Lisandr..o�de la-Torre, por sus 9.000 tra­
bajadores en contra de la privatización. S-29taron con a so 'idaridiid de la
..
p blación del barrio de"Mataéleros, llegando a concentraciones de más de

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0.000 ¡ crsonas. A partir de esa toma, la oposición del movimiento obrero elecciones, el candidato apoyado por Perón obtuvo más voto que el alenta-
al presidente Frondizi se intensificó: los paros metalúrgicos, las hus:lgas do por "el Lobo". Previamente, el líder exiliado había enviado a su esposa
azucarera y ferroviaria en contra de la implantación del Plan Larkin y tam- María Estela Martínez con el propósito de reorganizar el partido. En el
bién conflictos en las industrias Kaiser son una muestra de ello. plano sindical, Perón incentivó la división de las 62 Organizaciones: una
A su vez, Frondizi profundizó la represión con la implementación del parte quedó con Alonso, la denominada "62 Organizaciones de pie junto a
Plan Conmoción Interna del Estado (CO ), por el que se procesa- Perón", que acataban las directivas emitidas desde Madrid, y la otra fue los
ron a más de 3.500 personas. Todos estos hechos implicaron el resquebra- "62 leales a Perón" que eran, en realidad, leales a Vandor.
jamiento del pacto entre Perón y Frondizi, que había posibilitado que este
último ganase las elecciones con parte del electorado peronista. Situación internacional
A pesar de las políticas llevadas a cabo por la dictadura de 1955 y el
Lo que sucedía en nuestro país estaba en sintonía con lo que ocurría en
gobiemoc onstitucional de Frondizi, en 1962 la CGT continuaba siendo
el resto del mundo. En el marco de la Guerra Fría, signada por el enfren-

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una orgañ 1zación poderosa. En una población económicamente activa de
tamiento entre el bloque encabezado por los Estados Unidos y el bloque
7 .833.000 personas, el 71 % eran asalariados y la Central de los Trabajado- ,,
político, económico, social e ideo lógico dirigido por la Unión Soviética,
res agrupaba a 2.600.000 trabajadores sindicalizados. se desarrollaron grandes revueltas y distintos movimientos de liberación
En enero de 1963 se realizó un nuevo Congreso Normalizador de la
nacional y social en Asia, África y Latinoamérica.
CGT Y. :Tosé Alons9 asumió la secretaría general. La CGT pasó a tener un
De estas rebeliones destacaremos dos por los debates que generaron
papel más combativo y estableció en abril un "plan de lucha", con un alto
( en el campo popular. Por un lado, el triunfo de la Revolución China en
grado de combatividad por parte de las bases obreras.
1949-en un país semi colonial y semi feudal- , aportó elementos al campo
En el interior de la Central, se desarrollaba una sórdida disputa entre
socialista para comprender cómo es el desarrollo de las revoluciones en
diferentes grupos de jerarcas sindicales, al tiempo que se multiplicaban las
los países oprimidos. Con ello se profundizó en la diferenciación de los
lu has breras en diferentes lugares del país. Bajo el gobierno de Arturo
distintos tipos de países y el carácter de las revoluciones, los frentes revo-
TIii a 1 - 1 6), la T, presionada por las bases, convocó al segundo
lucionarios a través de los cuales pueden triunfar y el camino para hacerlo,
lu ha , 1 1 gu p rti iparon más de 4.000.000 de trabajadores con
ya que la Revo lución China fue la primera triunfante d,:l campo a la c~udad
l 1.0 t 1 1m1 nt fa bril s tomados. Para la organización de
y no por la vía insurrecciona!.
st pl an u imp rlan t. 1 r I gu t.uvi r n I s cuerpos de delegados.
Algunas de estas polémicas se reeditaron con la Revolución Cubana, •)
-n 111 iL stab l i I de rcl Nº 9 9 para reglamentar
primera revolución socialista triunfante en América Latina, conmovien-
la L y I As ia i n Pr fe i nales. on él se intentaba descentralizar
do al imperialismo yanqui . La misma abrió un nuevo panorama en el
la nego iación sindi ca l, incentivando que los convenios se establecieran
Conti nente, con debates acerca de la vía para la revolución: ¿a través de
directamente entre las fá bricas y la patronal. También se incluía la diversi-
un foco guerrill ero o de modo insurrecciona!? Ante el temor del "conta-
ficación de los recursos que tenían los sindicatos y que éstos estuviesen en
gi o comuni sta", los Esta dos Unidos desarrollaron la " Doctrina 'Cle Segu-
manos de las filiales dd,ip_t.erior.
ri dad Nacion ",.orientando a las F uerzas Am1adas aq uí a tra aJarso15re
Co~ e los diferentes gobiernos iban dándose estrategias para coop-
hipótésis de conflictos en que el "enemigo" se encontraba en el interior
tar a una parte del movimiento sindical, se fortalecían dirigentes como
de los países .
Augusto "el Lobo" Vandor. Este planteó una suerte de "neoperonismo" o
A mediados de los años 60, al mismo tiempo que se desarrollaban la
peronismo sin Perón, llegando a dividir a los peronistas. La disputa entre
Revolución China, la Revolución Cubana y los movimientos de liberación
Perón y Vandor se fue intensificando. Esto se manifestó en el plano polí-
nacional y soc ial de Asia y África, se manifestó en los Estados Unidos una
tico y también en el sindical. El conflicto en el plano político se dirimió
debilidad relativa. Sin dejar de ser un imperialismo sumamente ofensivo,
n las elecciones de Mendoza, en la que se presentaron dos fórmulas, una
la guerra de Vietnam le generó múltiples cuestionamientos internos, que
ap yé!da por Vandor y la otra por Perón. Aunque ninguna llegó a ganar las

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e conjugaron con una crisis económica y política, en parte producto del preludio del golpe de Estado por parte de la autodenominada "Revolución
desenlace desfavorable de la contienda. Arge ntiru?' contra Arturo ñli;,- en el marco de~1a Doctrina de Seguridad
Hacia 1968 el Mayo Francés marcó un salto en las luchas obreras y po- Na~ionaC.tle ntada p0r: los Estados Unidos. · ·-
pulares. Allí, obreros y estudiantes se apropiaron de las calles parisinas y de El derrocamiento de Illia volvió a plantear la necesidad de las clases
otras ciudades francesas, con reivindicaciones que fueron profundizándose dominantes de dar fin a la crisis abierta a partir del derrocamiento del
hasta poner en cuestionamiento al propio sistema capitalista. En ese sentido, gobierno de Perón. Para ello, presentaron al gobierno radical como débil
la unidad obrero-estudiantil fue parte de un contexto mundial de radicaliza- e ineficiente, satirizando al Presidente a través de los medios de comuni-
ción. Otro elemento de la época -no menor para el estudio de la clase obrera cación con la figura de una tortuga. Sin embargo, s verdaderas causas
y popular y las fuerzas de izquierda-, lo constituyó la división del movi- del gol e fueron sus medidas de tinte nacionalista, como el no envío de
miento comunista internacional a partir de la ruptura de relaciones en 1963 tropas argentinas a la República Dominicana; la ley de medicamentos que
entre los Partidos Comunistas de la Unión Soviética (PCUS) y de China favorecía a las pequeñas y medianas empresas nacionales, perjudicando
(PCCh). Ya desde 1956 Mao Tsetung denuncia que se había abandonado la a los grandes monopolios fa~acéuticos; y la anulación de los contratos
vía revolucionaria en la \IB,.SS, se habían sentado las bases par~ el "tránsito petroleros quy-había firmado Frondizi, principalmente en beneficio. del im-
pac ífico al socialismo", la coexistencia pacífica entre EE.UU. y la URSS y perialismo estadounidense.
la división internacional del trabajo socialista. ·Dicfias afirmaciones fueron En la realización del golpe coincidieron diferentes corrientes de los
sistematizadas, tras lo que se 9enunció la restauración del capitalismo en sectores de las clases dominantes. No obstante, rápidamente comenzaron a
la URSS y se teorizó sobre la continuidad de la lucha de clases aún bajo e} manifestarse los desacuerdos existentes entre ellos. E n parte, esto explica
socialismo, dando una lucha activa en el interior de la República Popular la sucesión de diferentes tumos durante la dictadura: Juan Carlos Onganía
China para evitar que sucediera lo mismo ue en la URSS . Esa lucha cris- (1966-1970), Roberto Levingston (1970-1 971 ) y Alejandro A. Lanusse
talizó en el impulso de la Revolución Cultural Proletaria a partir de 1966. (1 971-1973).
E l "Estatuto de la Revolución Argentina" establecía la eliminación de
la división de poderes: los poderes Ejecutivo y Legislativo se concentra-
La radi alización en los años 60
rían en la persona designada como Presidente, y los nuevos jueces desig-
h s y mom ento de l apartado anterior nos alumbra nados para la Corte Suprema de Justicía oeoían'jürar priotjzando sm¡~dis-
xpr a una agudizac ión de la lucha de clases en el posiciones por sobre las de la Constitución. ,Otras medidas tomadas por la
11 , tduníi d arr ll s y derrotas) aportan dicfadúra fúeron la prohibición de los partidos políticos y la intervención
i n i ates, y abren nu v interroga ntes; y e) muestran los de las universidades nacionales.
n I interior del m vimiento comunista internacional entre refÓr- A diferencia de los golpes de Estado anteriores, Onganía no fijó plazos
ma r v lución . para el llamado a elecciones. Por el contrario, el dictador sostuvo que iba
- n Argentina estos debates se articularon con la "cuestión del pero- a es ar en e poder el tiempo que hiciera falta, estableciendo tres etapas. La
nismo". Producto de esto, en las organizaciones revolucionarias se pro- primera, el tiempo económico, consistía en modernizar y volver eficien- j
duj eron d istintas rupturas y cambios en las tácticas de cómo entender al te la economía acorde a sus parámetros: productividad y competitividad.
peronism o y a las masas peronistas: por ejemplo, la ruptura del Partido Después, empezaría eÍ tiem2.o sociª1, en el que se distribuirían las riq_11; zas
Socialista y el surgimiento primero del Partido Socialista de Vanguardia obtenidas:Ilecién iiÍÍy resuelto el problema del peronismo, se darían lo:i
y luego, de Vanguardia Comunista. También las múltiples fracturas en el plazos para el tiempo .político a través del llamado a elecciones.
Partido Comunista Argentino ; una de las más importantes desembocará en Para lograr esos objetivos, se profundizó en la política de "raciona-
1 nacim iento del Partido Comunista Revolucionario . li zación e_so_nómica" . Los ministros de Economía, primero . ·so ali-
1 go lpe de Estado en Brasil en 1964 y la posterior invas ión de los 111ci y luego Krieger Vasena, promovieron la entrada masiva de capitales
11 ari n s tadounidenses a Santo Domingo fueron en América Latina el · xtranjeros al país, favoreciendo a los oligopolios internacionales, a los

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LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960YPRINCIPIOS DE LADE 1970

terrateni entes y a la burguesía intermediaria. Estos planes significaron para


decretó la intervención de siete ingenios azucareros y la reducción del
la clase obrera, la extensión de la jornada de trabajo y la intensificación de
cupo de azúcar de la provincia, dejando sin su fuente de trabajo a miles
los ritmos de producción.
de obreros. A partir de allí, se desarrollaron en Tucumán distintas luchas
E l peronismo continuaba siendo a nivel nacional la fuerza predomi-
( protagonizadas por la clase obrera azucarera y sectores populares.
nante en el movimiento obrero, aunque éste no constituía un todo homo-
Asimismo, en octubre del 1966 se produjo una importante huelga lle-
géneo: hubo jerarcas sindicales participacionistas o colaboracionistas con
vada a cabo por los obreros del puerto de Buenos Aires, en oposición a la
la dictadura. 1
política de la dictadura de racionalización económica, que implicaba el
También existían, en el seno del movimiento obrero, otras tendencias
control directo sobre ese sector por parte de las autoridades militares. El
del tipo reformista, socialista, independiente, radical y de la izqui erda mar-
régimen intervino el sindicato. No obstante, la medida de lucha continuó
xista que se fu e radicalizando hasta la conformación y resurgimiento de
por varios meses. Otro conflicto de importancia fue el protagonizado por
corrientes clasistas.
los obreros ferroviarios.
_, Perón desde el exilio había llamado a "desensillar hasta que aclare".
En ese contexto se reunió el Congreso de la CGT, con la finalidad
Esto generó en la población un clima de diferentes expectativas y de con-
de elegir nuevas autoridades. Allí, la discusión principal giró en tomo a
fusió n. A su vez, una parte de la jerarquía sindical como Vandor y Alonso,
cómo debía ser la relación entre el régimen militar y la dirigencia sin-
participó directamente de la ceremonia de asunción de Onganía.
dical. Mientras un sector sostenía que el movimiento obrero no debía
Desde 1966 la CGT se encontraba en manos de una alianza entre van-
participar de las iniciativas de la dictadura y que debía tomar el ejemplo
doristas e independientes. Dos fracciones se disputaban la dirección del
de la huelga portuaria y enfrentarla, otro sector insistía en dialogar con
mov im iento a nivel nacional. Una de esas tendencias era conoc ida como
el gobierno.
"pa rticipacionista" por su estrecha relación de colaboración con el gob ier-
Hacia fines del año 1966, Onganía explicitó finalmente el plaI! econó-
n de Onga'nía. Estaba liderada por Rogelio Coria del gremio de la cons-
mico para la Argentina. Presionada por los obreros azucareros, portuarios
trn i n y Juan José Taccone, de Luz y Fuerza. Los participacionistas pro-
y ferroviarios, la dirección de la CGT debió dejar de lado su pasividad e
V nf an d las 62 Organizaciones. La otra posición estuvo encabezada por
impulsar planes de lucha. El 14 de diciembre la Central,llevó a cabq la pri-
" Vand r. ·sta co rri ente se componía del grneso de las 62 Orga-
mera huelga nacional. Ante esta medida el gobierno respondió con mayor
C, y tun bi n d cmi o independientes. En relación al gobierno
represión, con el encarcelamiento de susd irigeñtes y con la .int_~rvención
, 1 t, ti u mp l ada p r 1 vandori tas fue la de "golpear para
de la CGT y numerosos sindiéatos, entre ellos lá Federación Obrera Tucu-
run lll , •n p rtunidad s di h a ci nar quedó limitado
mana de la Industria Azucarera (FOTIA).' -~ - ·
d bid I ur d I li d .
Recién en marzo de 1968 ·se realizó el Congreso de normalización de
n un¡ rin ipi , 1 gob i rno ele Onganía practicó una política de acer-
la CGT, bautizado "Amado Olmos", en homenaje al dirigente de sanidad ~
cami ento hacia el movimiento obrero, devolviéndoles la personería jurí- \_,
recientemente fallecido. No asistió el sector de los participacionistas. En )/
dica a algunos ele los sind icatos intervenidos durante el gobierno radical
el Congreso, la princip~l discusión giró en tomo a si podían formar parte (
y además anul ó el decreto Nº 969, anterionnente mencionado, que regla-
del mismo los delegados de los sindicatos que habían sido intervenidos por
mentaba la Ley de Asociaciones Profesionales. Sin embargo, rápidamente
la dictadura entre ellos muchos sectores combativos . El sector liderado
mostró sus verdaderas intenciones: el 22 de agosto de 1966, en Tucumán,
por Vandor ~e~opuso, ya que sabía que si se los dejaba participar, perdería
seguramente la dirección de la Central. ,Los vandoristas se retiraron de_la
1. "La esencia de la ideología peronista era la conciliac ión entre las clases sociales, con- v tación, generando una ruptura; por un lado, la CGT de Azopard_o, bajo
cepción que tiende a la subord inaci ón de la clase obrera al proyecto reformista de expansión
del cmpresariado nacional. En este marco se desarrollaron sus com entes s111d1 cales, que baJo
~1ala de Vandor, y por otro lado, la CGT de los Argentinos, cuyo principal
el peroni smo actuaban al servicio del Estado y del gobierno, apoyá nd o e en la s1gmficat1va diri ente fue Raimundo Ongaro, de los gráfiS2.s. Esta última se convirtió
capacid ad de movili zación y en la adhesión peronista de las gra ndes masas, pero a la vez n l. s hechos en un polo oposítor a la dictadura. En ella convergieron
co nt rol. ndolas." Sil via Nass if, Tucumanazos ... , p. 71. li, tint s sectores, desde jerarcas sindicales hasta corrientes más comba-
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tivas, que fueron las que le imprimieron su carácter. De todas maneras, el versidades del interior albergaban estudiantes de otras regiones (Tucumán
gobierno no reconoció a ninguna de las dos centrales. recibía población de Salta, Jujuy, Santiago del ~stero; Córdoba, norteños
También en el año 1968 se realizó una importante huelga de los petro- y ctiyanos;-C~~ es y C haco, a la poblaci ó~ del NEA). Los comedores
leros en La Plata y Ensenada, que duró más de 50 días, siendo ferozmente universitarios-eran imprescindibles para garañtizar la permanencia de es9 s
reprimida por la dictadura. estudiantes. Además, servían como espa.cio de socialización, un caldo po-
El 29 de mayo de 1969 se produciría el Cordobazo, y la dictadura que- lítico de discusión permanente.
daría debilitada políticamente. Quizás por ello Onganía decretó entonces En la provincia de Corrientes se inició el repudio a estas medidas y la
una nueva Ley de obras sociales, en un intento de recuperar la iniciativa dictadura reprimió a los estudiantes, con el saldo de un estudiante asesi-
política y con el objetivo de fortalecer su relación con los jerarcas sindica- nado por las fuerzas policiales:~Juan José CabraJ, el _l? de mayo..J!_e J..9~
les. No fue suficiente para frenar la pronta caída de su gobierno, después Esto repercutió a nivel nacional y desató la ira del conjunto de los estu-
de la ejecución de Pedro Aramburu por un comando montoneros a media- di antes y la solidaridad de vastos sectores popul ares a lo largo y ancho del
dos de 1970. 1 1 país. En Rosario se realizaron manifestaciones que culminaron con dos
Onganía fue reemplazado por Roberto Le_yingstd'n . En julio de 1970, asesinatos más por parte de las fuerzas represivas de la dictadura: Adolfo
la CGT convocó a un nuevo Congreso normalizadór llamado "Augusto Bello, el 17 de mayo y Norberto Blanco, el 18 de mayo.
Vandor", en homenaje al "Lobo" que había sido asesinado un mes des- En ese hervidero en el que se había convertido la Argentina, mayo de
pués del Cordobazo. Del ongreso participaron las 62 Organizaciones, los 1969 fue er mes de evañtáiñiento~ ;¡ares de los que aquí se analizarán
participacion1staseindependientes, quedando excluidos los sectores más el Cordobazo y los Tucumanazos.
combativos del peronismo y de la izquierda. Allí resultó electo José Rucci
como secretario general, quien garantizó una relación estrecha con Perón. El caso cordobés:
Durante los ~ños 1971 y 1972, la CGT realizó diferentes planes de lucha,
crecimiento industrial y obreros mejores pagos
n un ontexto teñido por la lucha de grandes sectores del pueblo por la
v u It a d P r n a la Argentin a y la convocatoria a elecciones libres. La provincia de Córdoba había sido beneficiada por las políticas de
incentivos para la instalación de distintas fábricas, principalmente auto-
11 vo caminos en la Argentina motrices y mecánicas, estas últimas establecidas desde la década de 1930.
Posteriormente, con el gobernador Amadeo Sabattini, el 2° Plan Quinque-
ndensan muchas de las tenden- nal del peronismo y las políticas desarrollistas de Arturo Frondizi se san-
vi a111e nte. in l~gar a dudas, ese cionaron leyes de "apertura" que favorecieron la penetración de empresas
111 111 nto urri a ni ve l nac i na! on I Cordobazo, en el que la lucha extranjeras. De esta manera se fue conformando un polo industrial con una
obrera y popul ar dio un salto cualitativo. Ello ~ ui"~o vinculado al proceso enorme concentración de la población activa en el sector automotriz, que
de luchas en las que distintos sectores populares se opusieron a las medi- "en 1963 representa el 47 JJº! ciento dd personal efectivamente ocu¡:,ago
das de "racionalización económica" del Onganiato. en la industria, porcentaje que resulta mayor si se consideran las indus-
La política dictatorial también se sintió en las Universidades Naciona- trias subsidiarias d; l automotor dedicadas a la Tabricacióñ de repuesto~ y
les. El movj miento estudiantil, a través de la FUA, fue unas de las pocas autopartes". 2 Tal era el grado de concentración que en ese entonces en la
fuerzas que enfrentó el golpe de Estado en 1966. No es casualidad enton- provincia se realizaba el 60% de la producción automotriz nacional. Estas
ces que una de las primeras medidas de Onganía fuera la intervención de ir unstancias eran las que permitieron al movimiento obrero un gran poder
las Universidades, con la Policía Federal dentro de los establecimientos <l negociación a la hora de discutir los salarios y las condiciones laborales.
y la prohibición de las organizac;iones estudiantiles. Hacia 1969, como
parte de la política de recortes presupuestarios, se buscó privatizar o di- 2. Mónica Go rdillo, "Los prolegómenos del Cordobazo: los sindicatos líderes de Cór-
r ctam ente cerrar los comedores universitarios. En ese entonces las uni- 1loh11 de ntro de la estructura sindical", en Revista Desarrollo Económico, vol. 31, Nº 122,
111 1111 s ·pti ernbrc 199 1, p. 167.

98 99
SILVIA NASSIF Y BRENDA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960 Y PRINCIPIOS DE LA DE 1970

A mediados de los años 60 en el Sindicato de Mecánicos y Afines del Además existía en Córdoba un gran contingente de los gremios deno-
Transporte Automotor (SMATA) de Córdoba estaban afiliados los trabaja- minados "independientes", nucleados principalmente en el sindicato de
dores de distintas empresas de automotores, que a su vez tenían distintas Luz y Fuerza, que dirigía Agustín Tosco, y el gremio de Gráficos.
plantas. FIAT se había instalado en el país a fines de los años 50, atraída A_JlartiL de 1969, aunque con más fuerza en los 70, se comenzó a
por las leyes antes mencionadas y e decreto 969 del presidente Arturo vislumbrar el resurgimiento de una nueva corriente, con distintas ver-
Illia, y acordó sindicatos por fábrica (y no por rama como se estilaba e~ tientes, llamadas "clasistas". Estas nuevas agrupaciones sindicales, que
ese entonces) con el objetivo de atomizar la organización obrera. De allí se proyectaron desde Córdoba al resto del país, retomaban una tradición
surgieron SITRACs SIIRAM, sindicatos correspondientes a sus plantas previa al peronismo de un sindicalismo partidario de la lucha de clases
~oncord y Materfer resE_ectivamente (ver gráfico 1). que en la década del '30 ya se había desarrollado, junto con los sindicatos
por ramas, a impulso de las agrupaciones orientadas por el Partido Comu-
nista. Después había predominado el masivo sindicalismo peronista y su
.Gráfico 1
La configuración de los sindicatos mecánicos cordobeses en 1969 ideología de conciliación de clases así como la dilución o invisibilización
de los planteos clasistas dentro de la izquierda sindical. En el eríodo
que aquí estamos tratando, la articulación de agrupaciones clasistas, ,es
dec,ir.,vartidarias de la defensa irrestricta de los objetivos inmediatos y
mediatos de la clase obrera a través de la lucha de clases para eliminar
la ezÜ?l~tación Y. la división e11 clases d~ la soqiedad1 adguiría contenidos
particulares. En es12~ci~l, en la jerarguización de la democracia obrera, a
través _d~ ..!WPel de los cuemos de delegados de fábrica, 2ara garantizar
el protagonismo masivo de las bases. Este protagonismo se concibe y se
practica tanto en la lucha reivindicativa como en la toma de decisiones y
THOMSON la lucha política; tanto en la organización sindical como en las acciones
RANCO
de masas, incluyendo la autodefensa y el ejercicio de la violencia popular
contra el Estado. Estas concepciones metodológicas se veían favorecidas
por las características del auge de lucha en desarrollo y, a la.vez, se arti-
Roforoncl , : OTRAS MÁS culaban con los objetivos revolucionarios que se planteaban estos nuclea-
CHICAS
mientos frente a la dictadura.

C:=J SINDICATO
Tucumán: crisis económica y social
Fuente: Pablo Volkind, Brenda Rupar et al, El clasismo cordobés: el caso del SMATA Córdoba Tucumán es, desde fines del siglo XIX, una de las provincias agro-azu-
1972-1974, ponencia presentada en las IV Jornadas de Trabajo de Historia Reciente, Rosario,
2008.
areras más importante de la Argentina. Una de las características de la
producción allí, a diferencia de los ingenios denominados del "Norte", de
Con respecto a las corrientes sindicales, en Córdoba se manifestaba alta y Jujuy, fue el grado de diversificación relativo: mientras que hasta el
una escisión dentro del peronismo entre "ortodoxos" y "legalistas". Los ño 1966 existían 27 ingenios en Tucumán, en Salta y Jujuy tenían sólo 5.
primeros se referenciaban en la figura de Perón, estaban entre ellos los tra diferencia estuvo relacionada con la producción de caña: en ~ án
sindicatos de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), de la Madera, entre ¡ o ti ipaban los cañeros medianos, chicos y grandes; por el contrario, en
otros. Entre los "legalistas" se encontraban Atilio López, de la Unión de .' Ita Jujuy la mate; ia prima provenía principalmente de las tierras de los
Tra nsportistas Argentinos (UTA) y Elpidio Torres, del SMATA. ingeJ!,!9S.

100 101
1 VIA NA S IF'Y BR ENDA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960 Y PRINCIPJOS DE LA DE 1970

/ As imi mo , desde sus inicios el proletariado tucumano presentó un alto lucha y el posicionamiento político combativo contra la dictadura abona-
grado de combatividad y, posteriormente, un elevado nivel de sindicali- ban el terreno para el surgimiento de una corriente sindical clasista en las
za ci ón. E n 1904 se desarrolló una de las primeras huelgas en Cruz Alta, condiciones particulares de la provincia de Tucumán.
en contra de que se les pagara con vales, que servían solamente para usar En este contexto, en Tucumán la lucha arrancó tempranamente contra
en las proveedurías de los dueños de las fábricas. En 1944 se conformó la el cierre de los mgemos en 1966. Las protestas se llevaron a cabo a través
FOTIA y en 1963 contaba con 38.000 afiliados. En la década del 60 era de distintas iniciativas que iban desde ollas populares, enfrentamientos en-
la cuarta federación a nivel nacional , después de la UOM, los gremios del tre el campo popular y el Ejército, cortes de rutas, hasta tomas de fábricas.
vestido y la came. 3 Una de las particularidades de esta federación fue que Un punto de inflexión de esta etapa tuvo lugar en enero de 1967, cuando
abarcaba tanto a los obreros del surco como a los de fábrica. en una concentración obrera y popular en la localidad de Bella Vista, las
A partir del año 1966, con el decreto del ministro de Economía de On- fuerzas represivas de la dictadura asesinaron a Hilda Guerrero de Molina,
ganía, Néstor Salimei, comenzó la destrucción de una parte consid~raple miembro de la rama femeni_na del peronismo, esposa de un ex obrero azu-
del aparato productivo de la provincia. El cierre de ingenios dejó un saldo carero desocupado del ingenio Santa Lucía. Este hecho fue el detonante
de ~ qµe
OJJ _n1cm11anos sin trab aj o,_ ue tuvieró'i'.í en2igr--ªU!!J>ús_gueda que dio lugar a una nueva modalidad de protesta: la "pueblada"; sectores
de nuevos horizontes. Cabe destacar que esta situación afectaba al conjunto obreros y populares llegaron a adueñarse por unas horas de una parte de
de la J)Oblación, y 11.9 sóloJtl movimiento obrero. Por esta razón_, h.acia 1969, Bella Vista, con el asedio a la comisaría del lugar.
i.entras.Jos .nü.,,.eles..d.e de.s.QCJ.lpJ!ciÓJl,.Jlil.Cala_mit¼O 'a._dd.p_filS_llil_pasaban A partir del año 69 se manifestó un salto cualitativo en la lucha. En
~ un _1igito, Tucumán c2,!l!aba con- el Í,!,ldicejpás elevado de desempleo. abril de ese año hubo una pueblada en la localidad de Villa Quinteros. Un
Respecto a las corrientes sindicales, dentro del movimiento obrero grupo de obreros y sus familiares se acercó a la vera de la ruta 38 para
azucarero se manifestaban las mismas que existían a nivel nacional. Entre manifestarle al interventor-gobernador, Roberto Avellaneda, su oposición
los co laboracionistas se destacó Ángel Basualdo, del Ingenio Sa~ al desmantelamiento del ingenio San Ramón, que había sido cerrado en
q ue fue el ecretario general de la FOTIA en 1969, luego del cese de su 1967. El desanne de la fábrica implicaba el cierre definitivo.
intervención. En ese momento, la canti dad de a filiados se había reducido Según las crónicas del diario La Gaceta, los pobladores fueron brutal-
c.l • O a .000. Ba ualdo centraba su política más en la negociación mente reprimidos por la Gendarmería mientras se manifestaban en actitud
n la n r nta i n. A la par, y en opos ic ión a esta corriente, estuvo pacífica. Los manifestantes de Villa Quinteros se defendieron y enfren-
la n ob zada p I p r ni sta Atili o antill án, que había sido secretario taron por alrededor de 7 horas a las fuerzas dictatoriales. La represión
n r 1d I TIA 1. l d I i r r d I in genios. Además hubo un generó un amplio repudio en la capital, San Miguel de Tucurnán. De esta
adi ali za nd , pr du t de la situación de crisis que manera, esas puebladas que existían en el interior de la provincia se inter-
trav sa ba la pr vin ia, entre us adb rentes se encontraba el dirigente del conectaron con las manifestaciones en la capital, generando un importante
ex in en io Esperanza, Benito Romano. impulso en los alcances de las protestas.
La co rriente liderada por Romano se fue acercando a corrientes clasis- E n mayo de 1969, ante los asesinatos de los jóvenes en Corrient~~
tas de izquierda como, por ejemplo, la encabezada por Leandro Fote, diri- Rosario en Tucumán se roduj eE,2l1 im ortant~s ma_!:1f~ taciones de soli-
gente del ex ingenio San José, que tenía estrecha vinculación con el Parti- dar· dad Y...ISmudio a la dictadura ¡¡rotagonizadas por estudi~~ y obrer9s.
do Revo lucionario de los Trabajadores (PRT). Las corrientes de opinión y El 28 de mayo se realizó un acto obrero-estudiantil en la FOTIA. Resulta
militancia en la masa obrera que expresaban Fote y Romano interactuaban necesario destacar que en los sucesos de abril y mayo se fueron desarro-
estrechamente en las luchas. Ambos dirigentes debieron compartir la cár- 1hndo de manera embrionaria los levantamientos denominados "azos",
cel en di stintas oportunidades. Es posible pensar que aquellas prácticas de ·urnc terizados por el enfrentamiento de los sectores populares con las
fu ' rzas represivas, y la toma de una parte de la ciudad, considerada por
los ma nifestantes como "zona liberada". Así, mientras se manifestaba un
3. Roberto Pucc i, Historia de la destn1cción de una provincia. Tucumán 1966, Buenos
d •l ilitarni ento de las fuerzas de la dictadura se exteriorizaba el fortalecí-
Aires, •cli ciones del Pago Chico , 2007, p. 198.

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SILVIA NASSIF Y BRENDA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE I 960 Y PRINCIPIOS DE LA DE I 970

miento de los sectores populares, que en los hechos fueron conformando Después del Quintazo no se produjeron nuevos estallidos populares en
un frente popular antidictatorial. Tucumán. De todas maneras continuaron desarrollándose conflictos obre-
1?e este le~antamiento _participaron diferentes sectores sociales: la pe- ros y luchas callejeras, como las manifestaciones en repudio a la masacre
quena burguesia, los estudiantes, las capas medias y el movimiento obrero. de Trelew en agosto y durante el breve regreso de Perón a la Argentina, en
Con la particularidad de que en Tucumán, en 1969, este último se encon- noviembre de 1972.
traba debilitado por el cierre de ingenios. De esta manera, sería incorrecto
reducir estas manifestaciones a meras estudiantinas. El proceso de radicalización de los obreros cordobeses
La :1;:á.c_tica de hJfaha :t..,el Rosicionamiento combativo contra la dic-
tadura abonaban el terreno para el surgimiento de una corriente sindical En Córdoba, en 1969, el repudio al asesinato de los jóvenes Cabra!
clasis!a en las condiciones. ~a:1icJ!l2,:es J!s Tucumá~ .•,Í; ·ese~qtido s<;: (Corrientes) y Blanco (Rosario) tomó una forma particular, ya que se pudo
e~ resaban algunos de los dmgentes del .Comité Inter-sindical de Inge- articular con la pelea que venían llevando a cabo los obreros de la pro-
mos Cerrados como eandro ote _PRT-EI Com atiente, emto omano vincia en contra de las quitas zonales. Como parte del programa raciona-
(peronista combativo)s de los Talleres Ferroviarios de Tafi Viejo_, como lizador, el 13 de mayo se había anunciado la anulación del sábado inglés,
-~..!lgeJ Mci!,nfr~dt (PCR), entre otros. una conquista obtenida por algunas zonas del país, por la que los obreros
1
Un año más tarde, el O d~· n~viembre de 1970, se produjo un nuevo trabajaban 44 horas semanales y cobraban por 48.
sa!to cualitativo en la protesta cuando los estudiantes fueron reprimidos Al día siguiente, el SMATA ~ órdoba convocó a una asamblea en el
mientras estaban realizando una olla popular en defensa de los comedores Córdoba Sport, a la qüe asistieron entre 4.000 y 6.000 obreros. Fue vio-
universitarios. Como ya vimos, los comedores no prestaban solamente un lentamente reprimida y en ese contexto, el SMATA, con la adhesión de la
servicio económico, sino que también eran un ámbito de politización. Eran UOM, la UTA la CGT y el movimiento ~ !, llamó a un paro de 48
un punto de encuentro: allí iban los dirigentes estudiantiles secundarios horas desde el 29 de mayo, que confluiría el día 30 con uno lanzado por las
universitarios y también los obreros, a discutir. Por lo tanto su cierre no fu~ dos CGT frente a la escalada represiva.
s 1am nt un tema presupuestario. En Córdoba, muchas fábricas, a través de los cuerpos de delegados y
Ant la int nsidad de la represión, la población salió a la calle en so- las comisiones internas, prepararon cómo asistir, qué elementos de defensa
lidaridad. nstmyer n barrí ada . Estas manifestaciones empalmaron llevar y cómo encolumnarse. Al mismo tiempo hubo mucha adhesión a la
1 día·· d spu u, 1 .l y J de novi embre, con una huelga convocada por marcha de ese paro activo de sectores que repudiaban las políticas antipo-
la d s T. sta nfluencia de ectores obreros con los estudiantiles pulares que se estaban llevando adelante. Hacia el mediodía, mientras se
pa 6 a la historia m el l'ucumanazo, que contó con la toma de alrededor movilizaban, se conoció la noticia del asesinato del obrero Máximo Mena,
de 90 manza nas y con la participación de más de 20.000 personas. a partir de lo cual la protesta superó las expectativas iniciales, llegand~ a
ente e ·uoio de 1972 se produjo el último tucumanazo, lla- ontrolar 120 manzanas en el centro de la ciudad y convirtiéndose en una
mado " · azo" or ue comenzó en las instalaciones universitarias de situación pre-insurrecciona!. Si bien la jornada había sido ulanificada, na-
la Quinta Agronó ·c1;1 ubicada ep 1 ciudad d~ an 11iguel de ucumáñ. die pudo predecir, intervenir o dirigir ';;1conjunto que se había manifestado
Cuando se armaron las barricadas, participaron los pobladores de las villas de pronto. ~ .... ~

de emergencia de los alrededores en solidaridad con los estudiantes. En En este episodio se expresaron también contradicciones en el seno de
~ e leva~tamien!,9 fue más aestacacla l~_p!rt.:5ipac~ n esfudiantil que la la dases dominantes: por ejemplo, el Ejército no acató inmediatamente
obr~ a. Sm embargo, la novedad fue la intervención en los inicios de este l a orden de reprimir que había dado Onganía. Si bien el Cordobazo no
conflicto de los asalan'idos ~ do·s al Estado. En los enfrentamientos l rm inó inmediatamente con su presidencia de facto, la dictadura resultó
se registró un ma o( grado de violenc ia IJ,O_r arte de las fuerzas re resivas lll herida de muerte.
q~1 hicieron un fuerte despn;gved el Ejército. ~esuM asesi~ado un estu~ no de los fenómenos ~ h : , s pru;ti deLCgrdo.hazo.€ el resurgí
d1 ant sa lteño, Víctor Alberto Villalba. mi ·nl de una corriente que, ª~ª1:!,ir de n üvindicaciones inmediatas de los,.

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ILVIA NASS IF Y BREN DA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960 Y PRINCIPIOS DE LA DE 1970

obreros de las fábricas 1 encabezó la lucha por mejorar sus condiciones con- era "cortar la cabeza a la víbora que anidaba en Córdoba", en referencia a
cretas, sobrepasando incluso a los jerarcas que estaban en las direcciones. los cuerpos de del~gados y Comisiones Internas que se propagaban por la

_
Esa corriente clasista también impulsa formas de participación más demo- ' provincia. Esta insurrección consistió en la toma de fábricas y de barrios
cráticas. Se conformaba en tomo a un programa "antiburocrático anti dic- enteros, con el enfrentamiento de la policía. Allí se expresó el avance de
tatorial y antipatronal" y estaba disputada por distintas corriente/políticas. estas nuevas direcciones sindicales.
Pero lo distintivo va a ser que empieza a señalar el rol de la clase obrera .....
En mayo de 1971 se llevó a cabo el.1° Plenario Nacional de Sindicatos
como motor de los cambios y, .en tanto era dirigida por fuerzas de izquier- Com a 1vos, e cual participaron alrededor de 115 cuerpos de delegados.
da, también la necesidad de que la clase obrera se coloque a la cabeza de Resulta int; resante el programa que p(opuso SITRAC-SITRAM (aproba-
los procesos revolucÍonarios. Esos procesos fundamentalmente los vamos do por la votación en asamoleaJ-;-'"que incluíaÜ na caracterización del tipo ' l
5
a encontrar en la década del 70 en dos casos: por un lado, los sindicatos de de pa ís , y una sa iüa, aestacando el rol de la~ !ase obrera en ese camino.
__SITRAC y SIIBA_M y por otro lado, el sindicato de .s 4 En este contexto, en octubre, el SITRAC fue intervenido militarmente
En las plantas de FIAT, los ritmos de producción aumentaron al 125% y a pesar de ·1os intentos _o r defe1:i_der a su 5>rganismo organizativo, los
y tam13ien ex1sba1 a política de ''acople": caaa trabajador tenía 2 o 3 tareas, tra ajadores fueron derrotados, con un saldo de 400 obreros desp.edíaos
entonces se veía mtens1ficado su trabajo. En 1970, el SITRAC convocó a y e1siñfücato incorporado a la Unión Obrera Metalúrgica _(por resolución
u~a a~ lea para retr'eñclar un acuerdÜreaÍizad; po~ ~~ cato. Deceii- gubernamental y en contra de la voluntad de los afiliados, que querían
c1onados por lo obtenido por su_dirigencia, los trabajadores resolvieron allí hacerlo al SMATA).
mismo nombrar a nuevo~ representantes. Esta nueva dirección sólo fue re- El otro proceso que queremos abordar es el del SMATA.. En realidad,
conocida tras una toma de fábrica que incluyó rehenes. Esta modalidad, ya comenzó más tempranamente, cuando en 1968 fueron elegidos delega-
practicada en Perdriel, fue generalizada en otros conflictos, desplazándose dos combativos en la planta de Perdriel, conformándose la A paci_ón 1°
también a viejos dirigentes, como por ejemplo en SITRAM. de Mayo. Allí comenzó un proceso de democracia sindical que desnudó
n todo este proceso el sindicato se fue organizando al calor de la lucha la política de acuerdo que había estado llevando adelante Elpidio Torres
p r la ndi i nes alari ales y de trabajo, que incluía trabajo a desgano y como secretario general del SMATA Córdoba desde 1958.
uit l lab r i n. 1 m vi mi ento estudiantil se vinculó estrechamente En este recorrido se fue confonnando el Movimiento de Recuperación
n la p ri n ia-d I J - ITRAM. La e~resa comenzó na ofen- Sindica , impulsado por las Agrupad~_s 1º de Mayo_ y por el Partido,
iva imp I t,1.11t • para d armar ta r anizaci6n, que 111cluyó despidos, Comunista Revolucionario junto con obreros independientes, que se pro-
t::1"\i' li n I s nu va t ma s para I rar la rcin rporación, con el apoyo y ponían a través de los cuerpos de delegados y Comisiones Iñte rnas, la
lid aridad d J MJ\T . recuperación del gremio. También estos obreros tendrán un rol destacado
1 s¡ u s d · que hubi era n sucedido estos acontecimientos, en el Viborazo. 4

en marzo de 197 1, e dio un nuevo pico de auge, en lo que se denominó En 1972, obreros de diversas identidades políticas confluyeron en una
el "Se LII mdoba;w", también conocida como '':\Cbo ~ alusión lista antidictatorial para las elecciones del si ndicato, encabezada por René
a las declaraciones del Interventor Uriburu, que señalaba que su misión Sala manca, miembro del PCR. La lista Marrón (color que tomó el reagru-

4. La medjda de armar sindicatos por fábrica, que fue concebida como un instrumento 5. " .. . Sólo los trabajadores, acaudillando a las masas populares oprimidas, se muestran
pa ra atomizar al movimiento obrero y colocar direcciones afines a la patronal, posibilitó a l cupaccs de en frentar al sistema de entrega, hambre y represión de los monopolios, librando
mi smo tiempo, una mejor organización para conquistarlas. Como señala Victoria Basualdo, victoriosas batallas reivindicativas como los "Cordobazos" de mayo de 1969 y marzo de
p. 120: "Paradójicamente, las reformas legales que habían quedado vigentes a partir de la l 'J7 1, que liquidaron a la llamada "Revolución Argentina", originando la caída de los agentes
cri sis de la rel ac ión de la dictadura con la cúpula sindical, que promovían la descentralización ,h¡l Pentágono, Onganía y Levingston; Que la clase obrera, frente a la imposibilidad de una
de la acc ió n si ndical con el objeto de debilitar estos liderazgos establ ec idos (habilitando, en 11 lidn b 1rgucsa, constituy¡; en la Argentina, el agente principal e insustituible del cambio
a lgunos casos, incluso el sindicato por empresa), parecen haber favorecido el crecimiento de udu l y lu liberac ión nacional. .. ". Extracto de SITRAC y SITRAM, " A los trabajadores y al
las 0 1-ricntes disidentes". 1111,•hlo urgentino", marzo de 1971 .

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SILVIA NASSIF Y BRENDA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960 Y PRINCIPIOS DE LA DE I 970

pamiento) ganó por un ajustado margen de votos6, pero con un avanzado conflictos de estos primeros años de la década de 1970, desde la recupe-
progra~a~ que proponía la reduccii_rule !~ ~ 2.s . ~i,n~i~1:1les_¡:¡agQ~, la ración de las comisiones internas y los cuerpos de delegados hasta las
revocab1 hdad de todos los cargos, la rotación de todos los miembros elec- experiencias más avanzadas con el resurgimiento de corrientes clasistas
to~ de la-·co~i; ió;"Di;e~ti~a ;n los puestos de trabajo y definía que la en el seno del movimiento obrero. Este fenómeno está más documentado
Asamblea General era el órgano máximo de decisión. Además, continuaría para el caso cordobés, mientras que en Tucumán las experiencias clasistas
la pelea por el sábado inglés y la defensa de las condiciones de tr:abajo y para este período están comenzando a ser estudiadas.
.
salaña le's"'.'";"""""- - -~- . -
-
~-~-~- -~--- . -
En las luchas que se llevaron a cabo durante todo el período de la au,to-.. .
Este proceso, que permitió avanzar en reivindicaciones concretas, tuvo den.omi~~-;-;-f ~volucibñ-Argeñ"tina,'._'' .f["~ l~~s,1!1j:g,n ~~in1a1.,1ep_g~11Si<1~
un nuevo triunfo con la reelección, en 1974, en la dirección del sindicato políticas y p ropuestasestratégícas frente ·a la dictadura. _En grandes s_ect<?~
(periodo que excede al desarrollo de este trabajo ). 7 res anidaba la esperanza de la vuelta de Peró'n'.'"üna parte de la pobíi~ió~ .
aspiraba a la salida electora l; o tros pu gn'ib'artpor@ derrocamiento revo:_
Algunas reflexiones lucionario de la dictadura. · ··
A través del recorrido propuesto, podemos esbozar algunos elemen- Finalmente, ~p artir cter:iño 1973, con el llamado a elecciones (condi-
tos para la comparación. La primera diferencia que salta a la vista es que cionadas, entre otras cosas porque no se podía presentar Perón) se abrió
mientras el Cordobazo ·estuvo enmarcado en un contex.to .de 'cr~cimiento una nueva etapa en la Argentina, en la que continuó el período de auge de
económico, con los obreros mejores pagos, del país-como prntagonistas, luchas obreras, aunque en nuevas condiciones. El peronismo en el gobierno
sería jaqueado a lo largo de 1974 y 1975, y la represión iría aumentando
en Tucumán el auge de protest~ ~~~~gip~.fi9.,Jl1; ,912,,m_en10 de aguda crísis
económica, en una de las provincias que más sufrió los plane s r acionali- hasta dar un salto cualitativo con el golpe de Estado y la dictadura del 1976,
zadores de la "Revolución Argei'í'tina". -ne esta
íóriña y por fu~~za de las que justamente se propuso cerrar con el terror fascista estos caminos abier-
medidas, la agudización dé lÓs conflictos comenzó tres años antes, prota- tos a partir del 69 con los levantamientos populares denominados "azos".
n izada I r los obreros industriales de la agro-industria azucarera en los
pu I l I int rior d la provincia.
nsen o en afi nnar que en el país a partir del Cor-
los d más I vantarni ento pop ul ares, como los T~cumanazos,
ya nada iba a v lv r a r c mo antes. Por un lado, estos levantamientos
mar ar n lll amin para l.a clase brera que encabezó la lucha frente a
la p rdidas y al avasall.amiento de us anteri ores conquistas, que pudo
dirigir al conjunto de los sectores populares y que logró hacer tambalear
dictaduras y gobiernos.
Pero al mismo tiempo dejaron una cuenta pendiente, ya que la clase
obrera no logró la conquista del poder político. Esa preocupación por en-
contrar las fonnas que lo hicieran posible fue la que recorrió los múltiples

6. La lista Marrón ganó con 3.089 votos a la lista impulsada por E. Torres (que estaba ya
fuera del país), que sacó 2.804. Ganó con el apoyo de la masa peronista que votó ese programa.
7. En 1974 la lista Marrón volvió a ganar en el sindicato, refrendó su conducción, pero
el sindicato cordobés fue intervenido y la Comisión Directiva no llegó a asumir. Empezó
ento nces una pelea por las condiciones laborales, contra el congelamiento salarial, y por el
reconoc imi ento de la Comisión Directiva electa.

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SILVIA NASSIF Y BRENDA RUPAR LAS LUCHAS DE FINES DE LA DÉCADA DE 1960 Y PRINCIPIOS DE LA DE 1970

Apéndice 2) Expropiación de todos los monopolios industriales estratégicos, servicios


públicos, y grandes empresas nacionales y extranjeras de distribución (. ..)
3) Apropiación estatal de las fu entes naturales de energía (. ..)
A modo ilustrativo, se incluyen fragmentos del Programa de SITRAC 4) E.x propiación sin compensación de la oligarquía terrateniente y utilización
y SITRAM y de la Declaración de Principios de las Agrupaciones Clasis- de las tierras fiscales para una profunda reforma agraria (. ..)
tas 1° de Mayo, referenciados en el cuerpo del texto. 5) Planificación integral de la economía, abolición del secreto comercial, pro-
tección de la industria nacional (. ..)
"SITRAC y SITRAM a los trabajadores y al pueblo argentino" 6) Desconocimiento de la deuda externa
(. . .) En el orden social, cultural y sindical
Mayo de 1971 8
El Estado popular asegurará la defensa de los sindicatos como organismos
El Sindicato de Trabajadores Concord (SITRA C) y el Sindicato de Trabajado- naturales de expresión de los intereses obreros.
res de Materfer, (SITRAM), gremios que agrupan a los trabajadores del complejo Las organizaciones sindicales serán clasistas mientras subsistan vestigios de
industrial Fiat de Ferreyra, en oportunidad de este Congreso de Gremios Com- explotación del hombre p or el hombre (. .. .)
bativos de todo el país, reunidos en Córdoba los días 22 y 23 de mayo de 1971, Ni golpe ni elección, revolución.
f ormulan el presente programa que constituye su ponencia en el citado Plenario
Na cional convocando a la clase obrera y demás sectores oprimidos del pueblo Declaración de principios de las Agrupaciones clasistas 1° de Mayo
argentino a continuar y profimdizar la lucha de liberación social y nacional. Diciembre de 1970 9
Visto:
El incesante deterioro de las condiciones de vida y trabajo de las grandes Las Agrupaciones Clasistas Primero de May o,
may orías populares y el proceso de entrega nacional al imperialismo norteameri- (. . .) Partiendo de la comprensión acerca de la misión histórica que debe cum-
cano, consecuencia inevitable de la concentración monopolista determinada por p lir el proletariado: liberar a la humanidad de la explotación del hombre por
el desarrollo y organización actual del sistema de producción capitalista; el hombre; explotación que se expresa en nuestro país en un sistema capitalista
Que la política económica de los monopolios y de la dictadura, aplicada a un país dependiente, representado en los momentos actuales por la dictadura de los mono-
copilalisla d ¡. ndiente como el nuestro, exige una agobiante explotación del proleta- polios imperialistas y la oligarquía burguesa terrateniente de Levingston-Lanusse,
ria Jo w1 ¡. ro r sivo y rápido empobrecimiento de las capas medias de la población; que arr~só y arrasa viejas conquistas del movimiento obrero, congela salarios,
11 onsid ron lo: impone en las empresas nuevas formas de superexplotación, arroja a la calle a mi-
11 s lo los lrabnj od r s, a audillando a las masas populares oprimidas, llares de trabajqdores, liquida las conquistas democráticas de la escuela pública
s 111¡¡ stran ap , · s d ,nji· 11tor al sis! 1110 de entrega, hambre y represión de los y la universidad, desaloja a miles de campesinos pobres arrendatarios, expropia a
mono¡ olios, lib,w ,do vi t riosos bat .illas r ivin licati vas corno los "Cordobazos" pequeiios comerciantes y artesanos (. ..) todo ello para cumplir los dictados de sus
,/ 111 0 o t J969 marzo d I 7! , qu liquidaron a la llamada "Revolución Ar- amos, los monopolios y la oligarquía (. ..)
g ntino ", riginand la oída de los agentes del Pentágono, Onganía y Levingston; Consideran que:
Que la clase obrera, frente a la imposibilidad de una salida burguesa, cons- Estas han sido y son las causas del descontento popular existente, y las con-
tituye en la Argentina el agente principal e insustituible del cambio social y la tradicciones que (. ..) [se van manifestando en] la elevada combatividad y el cre-
liberación nacional, y en esta hora del proletariado es necesario actualizar y radi- imiento de la conciencia de las grandes masas obreras y populares (. ..) [que}
calizar los programas fundamentales que en su momento dieron los trabajadores, choca crecientemente con el papel de "bomberos " de la lucha, jugado por los
tales como el de La Falda, Huerta Grande, y el del I º de Mayo de la CGT de los ¡ rareas sindicales al servicio incondicional del régimen, que han transformado a
Argentinos; los sindicatos en cómplices del mismo (. .).
Resuelven: (. ..) En el orden económico Que para romper dicha estn1ctura sindical (. ..) no. sirven posturas reformistas,
1) Estatización del comercio exterior, sistema bancario, financi ero y de se- ni electoralistas, ni los pseudo independientes que pretenden colocar a la clase
guros (. ..) o/ r ra como furgón de cola de la burguesía.

8. Consultado el 12 de dici embre de 2013 en http://www.workerscontrol.net/es/authors/ ~- 1 cproducción completa en Documentos aprobados por el PCR, Publicaciones 35º
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110 111
SILVIA NASSIF Y BRENDA RUPAR

Que el único camino válido para liquidar y reemplazar al aparato sindical de


las clases dominantes, tal como lo demuestran las luchas de la clase obrera en
1969 y 1970, es construir desde abajo la organización independiente de los obre-
ros, expresada a través de poderosas agrupaciones clasistas y revolucionarias,
(. ..) capaces de derribar a la dictadura e imponer a través del levantamiento in-
surrecciona! armado victorioso del pueblo, un gobierno revolucionario del pueblo
dirigido por la clase obrera".

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