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1.

Identificar y explicar los aspectos de la economía peruana más resaltantes de este

periodo

2. Evaluar, con sus propias palabras, si se puede afirmar que las empresas

exportadoras se volvieron "menos nacionales"

3. Explicar la situación del mercado laboral durante la República Aristocrática

El segundo civilismo trajo consigo grandes cambios en la economía peruana, debido al

crecimiento de la demanda de materias primas como el caucho, el azúcar, el algodón,

entre otros, por parte de los países europeos. Según Contreras y Zuloaga, estos países

extranjeros habían accedido a la industrialización y a la apertura del canal de Panamá

que facilitaría el acceso de poder trasladar las materias primas del Perú a estos países

europeos (2014, párr.1). Esto quiere decir que, dicho canal se convertiría en la vía

principal para transportar las materias primas frente al aumento de la demanda

extranjera. Por otro lado, este periodo estuvo representado políticamente por el Partido

Civil quienes apoyaron el desarrollo de las exportaciones, la explotación de materias

primas y la adopción de nuevas tecnologías en las industrias en el país. Sin embargo, los

resultados positivos que se obtuvieron de esta transformación en la economía

beneficiaron solo a las personas que conformaron la élite aristócrata y no a todos los

sectores sociales de la época. Por ello, surge la siguiente pregunta: ¿Cómo se

caracterizó económicamente el Perú, durante la República Aristocrática? Desde

nuestro punto de vista, consideramos que la República Aristocrática se caracterizó por

ser un periodo que trajo consigo mejora en la economía del país, pero que no tuvo un

impacto positivo en la sociedad. A continuación, detallaremos cuáles fueron los aspectos

de la economía peruana más resaltantes de este periodo, como las empresas

exportadoras se volvieron en “menos nacionales” y explicaremos la situación del

mercado laboral durante la República Aristocrática.

En primer lugar, la República Aristocrática se caracterizó principalmente por tener un

crecimiento económico que se debió principalmente al incremento de las exportaciones


de materias primas y a la inversión de capitales extranjeros. Por un lado, las

exportaciones nacionales en esta época alcanzaron una importante diversificación e

incremento, debido al desconcierto originado en Europa por la primera guerra mundial.

En este sentido, la guerra generó una gran inestabilidad en Europa y esto fue una

coyuntura aprovechada por el Perú quien empezaba su apogeo con las exportaciones de

algodón, caucho, azúcar, entre otros. Asimismo, la apertura del canal de Panamá en

1914, favoreció al comercio marítimo, pues esta vía de navegación para transportar los

productos permitía acortar el tiempo y la distancia, facilitando el intercambio comercial

con los países extranjeros. Frente a estos hechos, según Contreras y Cueto, el

incremento de la demanda de insumos y servicios locales hacía que la economía

peruana permaneciera estable y generara cierto grado de “desarrollo autónomo” (2013,

p.213). Por otro lado, la inversión extranjera en el país fue un punto clave para el

incremento de la explotación de los recursos más demandados a nivel internacional.

Pues, con esta inversión las empresas en el Perú se modernizaron y lograron acelerar la

industrialización del país. Dicho de otro modo, según Contreras y Cueto, la moderna

tecnología remplazó varios recursos locales como: los animales de carga, veterinarios,

salineros y artesanos. No obstante, esta optimizó el sistema de trabajo y con ello la

producción logró superar a la de Hawái en 1918, que en ese entonces era considerada

una de las más adelantadas de la época (2013, p.219).

En segundo lugar, la República Aristocrática se caracterizó también por depender del

capital extranjero y la incautación de las empresas nacionales. Primero, a medida que

las empresas agro exportadoras iban creciendo en tamaño y modernizándose gracias al

capital extranjero, perdían su nacionalidad. Con ello, Contreras y Cueto, mencionan que

estas empresas se volvieron en “menos nacionales”, debido a la gran inversión

extranjera que caracterizaban a las grandes empresas como la de Cerro de Pasco

Corporation y la Internacional Petroleum Company (2013, p.214). Esto quiere decir que,

estas empresas se volvieron propiedad de empresarios extranjeros, los cuales


implementaron políticas comerciales poco favorables para el país. Segundo, las

transformaciones del sector exportador desnacionalizaron las empresas exportadoras.

En efecto, según Contreras y Zuloaga, la moderna tecnología que los extranjeros habían

implementado en las empresas generaba la pérdida de empleos de muchos recursos

internos. Por ejemplo, las nuevas máquinas transportadoras, que adquirieron los

hacendados, remplazaron el trabajo de los animales de carga que transportaban

minerales u otros productos de un lugar a otro. Así, también se prescindió de la labor de

los veterinarios, salineros, arrieros y artesanos que hasta la fecha eran vitales para el

funcionamiento de las empresas (2014, párr.3-4). De esta manera, se demostraría que

las empresas exportadoras se volvieron en “menos nacionales”.

En tercer lugar, la República Aristocrática se caracterizó por tener un mercado laboral

insostenible. Por un lado, la inestabilidad económica que dejó el siglo XIX no logró

impulsar la formación de un mercado laboral estable, lo cual, ante el aumento de las

exportaciones durante la república aristocrática, este hecho se convirtió en un verdadero

problema. En efecto, el apogeo repentino de la demanda extranjera originó también una

mayor demanda de hombres que estuvieran dispuestos a vender su mano de obra por

un salario. Por ello, según Contreras y Zuloaga, a inicios de la República Aristocrática,

los empresarios extranjeros optaron por comprar máquinas de alta tecnología para que

pueda remplazar la mano de obra que era escasa en ese entonces (2014, párr.5). En

este sentido, las máquinas lograron optimizar el trabajo en las industrias, sin embargo,

no logró proveer las materias primas a tiempo por falta de personal que estuviera a cargo

de desempeñar tareas cotidianas dentro de estas empresas. Por otro lado, los

empresarios recurrieron a los enganchadores que eran personas conocidas por el pueblo

para que pudiesen captar nuevos trabajadores para las grandes empresa y haciendas.

De esta manera, según Contreras y Zuloaga, estos enganchadores persuadían a los

campesinos ofreciéndoles regalos y adelantos de pagos en reiteradas ocasiones para

que de esta forma acepte el empleo (2014, párr.7). En consecuencia, muchos


campesinos ingresaron a trabajar a estas empresas creyendo en las promesas de los

enganchadores, lo cual resultaron ser falsas promesas. Además, en un corto plazo, el

enganche se convirtió en un tema de denuncia social por los innumerables casos de

explotación laboral que surgieron en ese entonces.

En consecuencia, la República Aristocrática se caracterizó por ser un periodo en la que

surgieron diversos cambios en el país, porque incrementaron las exportaciones de

materias primas y a la inversión de capitales extranjeros; dependió del capital extranjero

y también por tener un mercado laboral insostenible. En definitiva, la historia nos muestra

que el país tuvo la oportunidad de establecer una economía sostenible y aprovechar

estos recursos económicos para mejorar el sector rural. Sin embargo, la pobreza

continuó liderando estas zonas y la mano de obra indígena y campesina eran explotados

por los dueños de estas empresas productoras que continuaban excluyendo a este

sector.

BIBLIOGRAFÍA

Contreras, C., y Cueto, M. (2013). Historia del Perú contemporáneo. Desde las luchas

por la independencia hasta el presente (5ta ed.). Lima: IEP.

Contreras, C., y Zuloaga, M. (2014). Historia mínima del Perú. México, D.F.: Turner, El

Colegio de México, pp. 214-217.

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