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DSHER

HISTORIA DE LA ECONOMÍA ENTERRIANA

Profesor: Juan Pablo Enríquez

Alumnos: Sergio A. Vegas, Marcelo Peccín, Ximena Estapé

ACTIVIDAD N° 2: MODELO AGROEXPORTADOR (1880 - 1930)

Fecha: 14/09/2022

ACTIVIDAD:

Luego de la lectura de la bibliografía (sugerida) y la visualización de la segunda

clase. Elabora un escrito que no exceda las 500 palabras, dónde dé cuenta de las

características limitantes del Modelo Económico abordado, el Modelo Agroexportador.

Realiza una conclusión teniendo en cuenta la Estructura Productiva Desequilibrada.

Formato:

- Tipografía: Times New Roman 12.

- Alineación: Justificado.

- Interlineado: Doble.

- Hoja: A4

- Tener en cuenta para las citas: Normas APA (7ma edición - 2019).

- Enviar archivo PDF por el campus virtual con nombre y apellido del/los

estudiante/s. Nombrado de la siguiente manera: Apellidos.

El modelo agroexportador argentino creado y propuesto por la naciente oligarquía

argentina de fines del siglo XIX tendrá durante cincuenta años la supremacía en la

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estructura económica de nuestro país. Este modelo económico, con sus rupturas y sus

continuidades, aún prevalece como predominante en nuestras tierras. No es casual utilizar

la palabra tierra para desarrollar brevemente en este trabajo dicho modelo: la tierra es la

matriz indispensable para el desarrollo del modelo agroexportador que, básicamente, se

trata de la producción de materias primas agrícolas para su venta al exterior. Primero cabe

decir que para que este modelo triunfe fue necesario erradicar y aniquilar cualquier

modelo contrario al mismo que afecte sus intereses; así nuestros “héroes patrióticos” (los

Roca, Avellaneda, Mitre, Sarmiento, Alsina, etc.) pergeñaron una serie de genocidios y

exterminios en post de la avaricia y las ganancias que obtendría la clase dominante de

aquel entonces. Primero, con la guerra genocida al pueblo paraguayo (aniquilando la

economía del país vecino); luego, con la incorporación de tierras indígenas de la zona del

norte santafecino y el gran Chaco con sus algodonales y maderas de algarrobo, materia

prima demandada por Inglaterra. Más adelante, otro genocidio: el de las comunidades

indígenas que vivían en nuestro territorio, donde se anexó casi el 50% actual del territorio

(Patagonia y centro del país). El ejército argentino, al mando del general Julio A. Roca y

financiado por la naciente sociedad rural, asesinó, esclavizó y erradicó a todas las

comunidades de su territorio para luego repartir el mismo entre los aportantes de aquella

campaña militar. Vale el dato de Martínez de Hoz (antepasado directo del ministro de

economía de la última dictadura cívico-militar) que obtuvo 22 millones de hectáreas por

su aporte a la campaña. Por último, se persiguió y aniquiló también a las ultimas

montoneras federales que alzaban la voz frente a este modelo centralizado en Buenos

Aires (asesinato del Chacho Peñaloza) y con sus socios del interior que no fue otra cosa

que una escandalosa concentración de tierras en pocas manos, consecuencias que aún los

argentinos pagamos con un difícil acceso a la tierra y vivienda propia. Este modelo genera

una renta extraordinaria para dicho sector, que se quedó con las tierras y utilizó de manera

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servil la mano de obra recién llegada de Europa como inmigrantes, generando así un

modelo de Estructura Productiva Desequilibrada que, básicamente, genera ganancias al

sector minoritario relacionado al sector económico exportador y dueño de los latifundios,

pero para la mayoría de la población asalariada no hay una remuneración de aquellas

ganancias exponenciales, que al mismo tiempo nos establece como una economía

dependiente de las grandes potencias que compran dicha materia primas, generando así

un desequilibrio interno ya que dicho modelo económico no se interesa en abastecer un

mercado interno que permita mejorar la calidad de vida de la mayoría. También, al ser

una economía que centra su producción en una sola matriz productiva, se corre el riesgo

de que si ella “no funciona” en dichos períodos históricos se genere un descalabro

económico hacia el interior del país.

Concluyendo, sin generar un economía soberana e independiente y con un fuerte

mercado interno, seguiremos en esta estructura económica que es dependiente del

mercado mundial y que beneficia únicamente al sector vinculado a la exportación.

BIBLIOGRAFIA

▪ GALASSO, N. (2011). Capítulos XIV a XXI. En: “Historia de la Argentina.

Desde los Pueblos Originarios hasta el Tiempo de los Kirchner”. Ed. Colihue (1ra ed.,

Tomo I).

▪ GALASSO, N. (2011). Capítulos XXII a XXVIII. En: “Historia de la Argentina.

Desde los Pueblos Originarios hasta el Tiempo de los Kirchner”. Ed. Colihue (1ra ed.,

Tomo II).

▪ REULA, Filiberto (1971). Capítulo XLV. En: “Historia de Entre Ríos. Política,

Étnica, Económica, Social, Cultural y Moral”. Ed. Castellvi (1ra ed., Tomo II).

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▪ REULA, Filiberto (1971). Capítulo LVIII. En: “Historia de Entre Ríos. Política,

Étnica, Económica, Social, Cultural y Moral”. Ed. Castellvi (1ra ed., Tomo III).

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